Partida Rol por web

El Verdugo de Cerepovec

Escena 2: El viaje en tren

Cargando editor
22/12/2010, 14:17
Richard Turner

Suspiro levemente antes de contestar. Pues cierto curso de acción, podría implicar la perdida de la discreción. Y en una partida como la que estamos jugando, saber esconder los triunfos el máximo de tiempo posible, puede ser decisivo.

Foster. Digamos que, a plena capacidad, no me supondría problema alguno salir al exterior y ocuparme del asunto. Ahora es cuando vendría bien un equipo de comunicacion interna. ¿Disponemos de algún tipo de transmisor encriptado?.  En caso contrario, me temo que coordinar nos sera un problema.

Hago ademán de salir del vagón comedor mientras añado.

En ese caso, recomiendo precaución. Propongo equiparme a plena capacidad en el menor tiempo posible y salir al exterior por un acceso adecuadamente cubierto por vosotros, para evitar ser sorprendido en el curso de mi salida.

Con cierto gesto irónico, miro a mis compañeros antes de añadir.

Me temo que a plena potencia, puedo resultar llamativo en exceso. Y no nos podemos permitir olvidar las palabras de nuestros contratistas. Hemos de mantener nuestra tapadera oficial siempre que podamos.

Cargando editor
22/12/2010, 15:04
Rafael Tierno

Quiero acompañar a estos decididos, pero rechazo el arma. Estoy intrigado por descubrir el equipo de Turner.

-Si se refiere a que si tenemos walkie-talkies… -le respondo.- No, me parece que no.

Antes de abandonar el vagón, apunto con el mentón a la doctora.

-¿Y ella?

Cargando editor
23/12/2010, 09:24
Director

La doctora sigue quieta, sentada con los informes sobre la mesa con el vagón-comedor. El resto parecéis dispuestos a entrar en acción.

Cargando editor
23/12/2010, 10:20
Juddith Brennan

- Suponiendo que realmente vayamos a 250 kilómetros por hora, cosa que dudo porque este tren no dispone de la infraestructura necesaria (aunque realmente no so física para determinar cual es la velocidad real que llevamos), el viento impediría a una persona normal caminar por el tejado de un tren, por no hablar de que carece de toda lógica que alguien pueda caminar sobre el tren sin golpearse contra el cableado eléctrico, pues no es un tren de vapor de la revolución industrial que solo llegaba a los 90 kilómetros por hora - dijo la mujer sin levantar la cabeza de las fotografías. La multitarea se le daba bien, estaba escuchando la conversación mientras estudiaba los documentos. - Pero adelante, si desean simular una operación especial de asalto y demostrar que son buenos soldados para la empresa para la que han sido contratados, yo seguiré aquí haciendo lo importante...

Notas de juego

Tres veces he empezado este post y las tres veces lo he perdido. Ya paso de escribir xD

Cargando editor
23/12/2010, 10:42
Rafael Tierno

La joven me hace ruborizar; como poco nos tilda de niños grandes. Balbuceando una justificación, me pongo en marcha, sintiéndome desmañado. Porque su sensatez, ya le provenga del género o de su coeficiente, no puede suprimir estas evidencias: que algo trata de acceder al tren, que seguro que está loco y es peligroso y que no puede ser otra cosa que un… metahumano, como yo lo soy.

Cargando editor
23/12/2010, 10:53
Capitán Foster

Debido al comentario de la doctora, Alan miró a Rafael y sonrió. Dando un par de pasos se acercó a la mesa donde estaba sentada, apoyo las palmas de las manos en ella y comentó en tono jocoso -Señorita Brennan ... ¿Es usted siempre así de simpática o se pone algo más tierna cuando está con su novio?-

Cargando editor
23/12/2010, 11:10
Juddith Brennan

Juddith miró a soldado con extrañeza, ni un ápice de rubor apareció en su rostro.

- No entiendo su pregunta, señor Foster, ni la relación que tiene su frase con lo que acabo de decir. Si le sirve, mi simpatía no tiene nada que ver con mis relaciones sexuales. Tal vez para usted sea importante, pero no soy psicóloga, en eso no le puedo ayudar...

Lo había dicho completamente en serio, parecía confusa por el comentario del capitán. Juddith nunca había entendido el sarcasmo.

Cargando editor
23/12/2010, 11:53
Capitán Foster

La contrarreplica de la doctora Brennan sorprendió algo al militar, que no borró la sonrisa de su cara.

-Eso es porque que es usted bastante guapa, si no lo fuera estoy seguro de que relacionaría perfectamente una cosa y otra* ... y creo que a pesar de no ser psicologa, si podría ayudarme en ese tema ...-

Notas de juego

* simpatía y relaciones sexuales ;)

Cargando editor
23/12/2010, 12:06
Juddith Brennan

Juddith seguía sin entender al militar, ellos dos no hablaban el mismo idioma, cada uno tenía una conversación diferente.

- Agradezco su cumplido, señor Foster. Si lo que quiere es tener relaciones sexuales conmigo debo decirle que estoy comprometida, y aunque culturalmente la monogamía está muy extendida soy de las que piensan que la poligamia es a nivel antropológico una práctica muy útil para la evolución humana. Sin embargo, por respeto a mi compañero, de momento solo puedo tener una pareja sexual...

Notas de juego

;D

Cargando editor
23/12/2010, 12:11
Director

Los sonidos del techo se alejan lo suficiente para que no podáis escucharlos. El sujeto estará sobre los vagones de los dormitorios. Podría intentar entrar a través de una ventana de alguno de ellos o seguir avanzando hacia el último vagón del tren. Vais tener que daros prisa so queréis saber qué es lo que está pasando exactamente.

Pegado en la pared hay un plano del tren (como en todos los vagones donde indican las salidas de emergencia que se pueden abrir en caso de averías, etc...). Hay 3 vagones dormitorio, y luego 3 más de mercancías. En total seis vagones hacia atrás. hacia delante está el vagón cocina, un par de vagones para pasajeros que estarán bastante vacíos ya que es un tren dormitorio y luego la locomotora. Es posible que añadieran algún vagón más ya que el plano es del 83, año en que se inauguró este tren Talgo.

Cargando editor
23/12/2010, 12:35
Capitán Foster

La respuesta final de la mujer le había gustado, muy acorde con lo que hasta el momento había visto de ella, aunque lo cierto era que no le importaría ver más. Cuando empezó la extraña conversación no había creído que iría por esos derroteros, pero había dado pie a una situación bastante graciosa, y demostraba que la doctora también tenía su particular sentido del humor -Si cambia de opinión, ya sabe donde me tiene-. Hizo un ademán con la cabeza en señal de aprobación a la doctora Brennan y se giró hacía sus compañeros -Bien, ¿nos vamos?- Acto seguido cogió el pasillo y se dirigió a su compartimento, que quedaba en la misma dirección en la que el extraño se había ido. Cuando llegó a la puerta, abrió y cogió el fino chaleco antibalas de su equipo, la funda con el fusil de asalto y el pasamontañas. No tardó nada, una vez lo tuvo en sus manos se dirigió a Rafael.

-Con esto voy a dar un poco de miedo por aquí, me lo pondré luego ... en marcha-

Cargando editor
23/12/2010, 13:09
Rafael Tierno

-Vamos, vamos, va a escaparse –apremio al americano, todavía aturdido por el fortuito encuentro de lección y requiebro.

Cargando editor
23/12/2010, 13:20
Richard Turner

Tras la previsible perdida de tiempo que ha supuesto tratar de involucrar a la, en teoría, cuarto miembro del equipo, me limito a escuchar de nuevo.

El ruido se ha alejado y ya no capto nada. Y tan solo espero que esta absurda demora, no nos haga llegar demasiado tarde.

Sin mas dilación, abandono el vagón comedor y me dirijo, rápidamente, a mi compartimento. Ya ante su puerta, me limito a girarme y a decir.

Ustedes dos adelantense. Yo, cuando este preparado, saldré por la ventana. Una vez fuera, reconocere la zona y me encargare del posible hostil. En el caso de que resulte necesario, claro esta.

Cargando editor
23/12/2010, 13:27
Director

Notas de juego

Empiezas a cambiarte en el siguiente turno: 4 turnos en total (3 + este). Empieza la cuenta atrás.  

Cargando editor
23/12/2010, 13:36
Rafael Tierno

 

-Tenga cuidado, señor Turner –le prevengo, antes de salir disparado a la recuperación de la pista sonora.

 

Cargando editor
23/12/2010, 13:37
Director

El grupo se separa. La doctora se queda en el vagón-comedor; el británico Turner va a su compartimento a cambiarse. En cambio el americano y el español van corriendo hacia el vagón de mercancías. 

Notas de juego

Nota: Cuidado con los destinatarios. Rafael y Alan van juntos, el resto sólo para el director. 

Cargando editor
23/12/2010, 13:39
Director

Te quedas solo en tu compartimento, ahora tienes que darte prisa y cambiarte para poder ayudar a tus compañeros. El problema es que tendrás que intentar pasar desapercibido y no llamar mucho la atención. Tu armadura hace ruido al desplazarse ya que su peso es mucho mayor al de un ser humano, fuera el sonido del aire y el ruido de la locomotora puede amortiguar tus andanzas pero tendrás que tener cuidado de que no te vea demasiada gente. Miras por la ventana y ves que es todo sierra y no se ven muchas casas. Puede que tengas suerte con lo de que no te vean, así que deberás no llamar la atención de los viajeros del tren.

Cargando editor
23/12/2010, 13:47
Director

Los dos caminan hacia los vagones de mercancías a la mayor velocidad que pueden, es una suerte que los pasillos estén vacíos y nadie más los vea ya que el capitán Foster acaba de colocarse su equipamiento de combate.

El americano se pone una máscara extraña y un chaleco antibalas, parece que va siempre preparado para entrar en una situación crítica. Se pone su arma a la espalda y avanza rápidamente. 

Cargando editor
23/12/2010, 13:51
Director

Con tu equipamiento especial escuchas los pasos sobre el techo de manera más nítida. Escuchas el sonido de una especia de ventosas colocándose sobre el techo, es con eso que puede moverse a pesar del movimiento y de la velocidad del aire. En un momento escuchas que se detiene, está sobre los vagones de mercancías pero no puedes precisar cuál de ellos es exactamente. Seguramente está accediendo al vagón a través de una ventana porque no escuchas levantarse ninguna trampilla. El individuo está dentro...

Cargando editor
23/12/2010, 13:46
Richard Turner
Sólo para el director

Tras cerrar la puerta detrás de mi, me giro en dirección a la taquilla y no tardo en abrirla. Saco mi maleta, y tras dejarla en el suelo, la abro.

Una vez abierta, esta expone su contenido. En sendos compartimentos, pues ha sido diseñada de forma modular para facilitar su transporte, se halla el trabajo de Nicolai Guverich, un genio a lo largo de su vida indudablemente.

Sin perder ni un instante de tiempo, me quito la cazadora y las botas. Me coloco el espaldar y el pectoral, hombreras, quijotes, siguen a continuación. Después, con cuidado, las botas y los guanteletes y finalmente, el casco. La mascara protectora baja automaticamente cubriéndome el rostro.

Y ante mi, se enciende la pantalla de cristal liquido en donde se expone toda la información necesaria.

Iniciando encendido del reactor.

Una luz parpadea en amarillo por unos instantes ante mi vista, antes de volverse verde. Un sordo zumbido llega hasta mis oídos procedente de la fuente de energía que da vida al traje.

Activación de sistemas de control e información.

La pantalla de cristal liquido se ilumina ahora mostrándome el nivel de energía, sub sistemas de control, propulsión y armamento.

Desvío de energía a láser.

Otras dos luces verdes se encienden abajo a la derecha de la pantalla.

Desvío de energía a jets de las botas.

Una vez mas, la secuencia de ordenes es aceptada sin ningún contratiempo.

Desvío de energía a musculatura de miomero.

Y la ultima secuencia de luces, no tarda en encenderse.

Me giro entonces con cuidado, con mucho cuidado y me aproximo a la ventana. La abro sin que suponga problema alguno pues los sensores de tacto de los guanteletes, funcionan en óptimas condiciones y, tras asomar la cabeza, conecto el I.L.E.

Todo ante mi aparece ahora en distintos tonos de color verde. Me giro entonces y, agarrándome al exterior de la ventanilla y procurando no dejar marcas, salgo del compartimento.

Es una posición precaria sin duda. Pero mi agarre es bueno. Mano sobre mano, subo hasta el techo del vagón sin activar los jets de las botas pues no es necesario. Y ya sobre el vagón, me alzo y escaneo la zona en busca del causante de aquellos extraños ruidos.

Notas de juego

Unos 280 kg con la armadura puesta. Te lo digo por si necesitaras el dato. Hombre, kilo arriba, kilo abajo. Je,je,je