Partida Rol por web

La noche ha sido horrible para Adel. Picazón, incomodidad, estornudos... La mitad de los síntomas del resfrío, exceptuando fiebre y mocos. Ha dormido bastante mal realmente, pero al menos ha podido dormir. Le hará bien una siesta por la tarde, quizás...

¡Por la mañana se encuentra con que tiene sarpullido por la piel! Pica, pica... Afortunadamente si va bien abrigada no se debería notar, pero... Sí que molesta.

Tras otra noche relativamente normal, llega el día siguiente. Tras asearse en el baño de cada torre y desayunar en el Comedor, los alumnos que tienen clase con Demian se dirigen hacia la zona exterior del Gimnasio.

Allí hay una serie de círculos de tierra, muñecos de madera y heno para entrenar... Es una zona bastante plana y no parecen haber rocas o grietas en las cuales tropezar. Entre los diversos alumnos resaltan las siguientes caras:

Parece que hay algún que otro alumno que supuestamente es de segundo curso... El chico de pelos celestes, casi blancos, y el pelirrojo. Van directo a hablar con el profesor, quien parece instruirles algunas cosas.

-Ruko, como es tu primera vez haciendo esta asignatura, entrenaras con los demás. A la hora de practicar en combate tan solo podrás luchar con Flay. Procura no utilizar las técnicas que has aprendido en otra asignatura mientras entrenas con los nuevos. Y tu, Flay, ya te iré enseñando nuevas técnicas. ¿Bien?-, ambos alumnos asienten.

-Todos los demás...-, dice, girándose al resto de alumnos. -Comiencen a calentar sus músculos y preparense. En esta clase les enseñaré a luchar con armas cuerpo a cuerpo. En lo personal favorezco las espadas pero tienen la libertad de escoger el arma que deseen... Dentro de un cierto margen: No tengo armas exóticas aquí pero tengo algo de experiencia usándolas, si alguno trae su propia arma puedo ayudarle a mejorar con ella.

Detrás de él hay una mesa de madera sobre la cual hay bastantes armas, la mayoría enfundadas o con su filo envuelto: Muchas espadas de diferentes tipos y formas, algunas hachas y mazas y algunas lanzas incluso.

-En esta primera clase entrenaremos un poco con las armas para tener una buena postura, practicaremos algo de combate con armas sin filo y luego les enseñaré una técnica que les resultará útil.

Y con eso dicho la mayoría comenzaron a calentar los músculos~ Otros le hacen algunas preguntas al profesor, nada muy relevante.

-Aprendiendo técnicas básicas, ¿Eh?-, dice el pelirrojo al Híbrido de Lobo. -¡Te pega! Nunca has sido bueno en nada más que hacer trampas.-

Parece que esos dos tienen algo de historial. Flay mantiene una amplia sonrisa mientras desprestigia a Ruko frente a toda la clase.

-Veremos quién es bueno y quien no cuando llegue la hora de poner a prueba nuestras habilidades.-, responde secamente, no parece que le importe lo que Flay le dijo.

Adel pasó una noche terrible... No paró de quejarse hora tras hora, sintiendo tanta picazón en el cuerpo que no podía evitar estar rascándose en todo momento. Por si fuese poco tampoco dejaba de estornudar, por lo que pensó que quizá había cogido algún tipo de alergia extraña... Estaba incómoda y rabiosa por no poder conciliar bien el sueño, así que cuando despertó y se vio en los brazos y piernas la cantidad de sarpullidos que le habían salido, soltó un alarido de terror tan grande que bien podría haber sido el despertador de la academia entera. Se llevó las manos a la cabeza y se estiró de los pelos al ver cómo se le había arruinado su piel perfecta con eso!
Se puso a llorar de la rabia ahí en medio mientras salía corriendo hacia el baño. ¡Encima justo cuando daba la clase con el buenazo de Demian...! ¡No podía ser...! Menuda mala suerte.
Se pegó la ducha de su vida, intentando borrar los sarpullidos sin éxito. Se sentía agotada también, y le habían salido ojeras...
Ese no iba a ser su día para nada.

Se vistió súper desganada, tapándose más que de costumbre para que no se le viesen los sarpullidos, poniéndose mallas bajo la falda y usando la chaqueta del uniforme. Ese día no llevaba nada de escote para mostrar con orgullo sus pechos... Y se recogió el pelo. Le quedó decente, pero no quedó tan arreglada como de costumbre. Estaba deprimida, incluso pensó la posibilidad de no asistir a clase... Los picores eran horribles. ¿Y si asistía a la enfermería...? Quizá debía ir después de ver a Demian, tampoco quería perderse su primera clase con él... No quería dar una mala impresión al profesor.

Llegó allí con una cara que le llegaba al suelo. Al ver que también estaba Kross, decidió intentar esconderse tras la multitud de compañeros de clase para que no viese que estaba allí... No quería que la viese con ese aspecto.

Cuando el profesor empezó a explicar ella apenas entendía palabra... Ni siquiera estaba de humor para admirarlo. Estaba decaída, se le cerraban los ojos y se encontraba fatal. Vio como los alumnos empezaban a moverse, para hacer lo que el profesor les mandó y ella se sintió perdida, mirando de un lado a otro sin saber qué debía hacer...

Kross entra a la clase, como siempre, con cara de dormido. Hace un facepalm cuando ve a Flay, aunque lo supuso desde un principio, viendo la espada que llevaba siempre con él.

Desde luego no ve a Adel por ninguna parte, ella se estaba escondiendo y él nunca prestó demasiada atención. -Al menos me he salvado de esa loca...- Piensa mientras escucha con la mirada perdida las instrucciones de Demian. Momento en el que descubre al chico-perro ese con quien tuvo problemas en el primer día. -Ah, está este otro... Bueno, mientras no me dirija la palabra creo que no tendré líos.

-Yo he traído la mía, profe. Jeh, ahora sí estoy en mi elemento.- Le dice a Demian, mientras saca de la nada, como si lo fuera desenfundando, un shinai, que en lugar de ser de bambú es de plata. -Pronto.

-Tu.-, dice, mirando a Adel. -Adel, ¿Cierto? Atenta, lavate la cara con agua si lo necesitas.-, se acerca a ofrecerle una pequeña botella de vidrio con una tapa de corcho, su contenido parece ser agua fría. Hay más de pie en el suelo junto a la mesa con las armas.

Tras responder a otros alumnos con dudas simples (la mayoría preocupados por si se hacen daño o por si las armas son muy pesadas o tonterías así), se dirige a Kross. -Perfecto, no pasa nada.-, y parece que se va a girar a otro alumno pero entonces repentinamente mira a Kross.

-¿... Tu eres el discípulo de..?-, frunce un poco el ceño. -... Silverbach, sí.-, se frota el mentón. -... No puedo ponerte a practicar contra los demás alumnos de primero pero tampoco estoy seguro de si debería ponerte con los de segundo... Repasaremos algunas técnicas básicas para ver tu nivel.-

Tras el calentamiento, el profesor les indica que recojan el arma que quieran de la mesa. Los alumnos comienzan a mirarlas y decidir. Ruko y Flay no se acercan a la mesa.

-Ah, entonces sí está Adel...- Piensa con los ojos entrecerrados. -No parece ella, está diferente. Ya no está pavoneándose como siempre...- -Bah, da igual.

-Eh, profesor!- Le llama la atención a Demian cuando éste se va a instruir a otro alumno. -Cuando Flan acabe con el chico-perro, podría practicar con él? No hay problema que sea de segundo.- Pregunta señalando a Flay con el dedo, Poniendo una sonrisa de esas que hace cuando está maquinando algo. -Será solo un sparring amistoso.- Tiene planeado vengarse por todas las veces que lo ha despertado de la siesta en el taller con sus rareces.

Adel hace un facepalm cuando Demian se dirige a ella por su nombre. Suspira... Sabia que tarde o temprano iba a pasar algo así. Toma el agua, sin mirar a la cara a Demian por la vergüenza, y se moja un poco el cuello. No iba a arreglar nada eso. Cuando nota que Kross se percató de su presencia se pone más nerviosa, y extrañamente cohibida. Agarra el primer arma que encuentra que parezca ligera.
Se pregunta si habrá valido la pena apuntarse a esa clase sólo porque el profesor está buenísimo... Ahora sabe que quizá hará el ridículo.

-Profesor, no sé qué debo hacer exactamente... -dice, rascándose con énfasis pero intentando ser disimulada el antebrazo. Parece exhausta y decaída.

Ante la petición de Kross, el profesor se dispone a considerarlo. Tras deliberar sobre el asunto unos segundos asiente y le responde: -Como desees. Flay, no te pases, ¿Entendido?-, le dice al pelirrojo, quien saluda con dos dedos y una amplia sonrisa, aceptando sin problemas las condiciones. -No te preocupes.-, le dice a Adel, -Ya llegaremos a eso.-

Una vez todas las dudas iniciales son resueltas, el profesor se dispone a enseñarles sobre postura. A la mayoría los hace quedarse quietos y atacar el aire una y otra vez, corrigiéndoles la técnica y ayudándoles.

A Flay parece que le enseña técnicas especiales y cosas bastante interesantes. Flay va con un espadón, un arma a dos manos grandotas: Demian le enseña técnicas bastante brutas, barridos, formas de realizar vários ataques seguidos rápidamente... Flay parece bastante fuerte.

A Kross, Ruko y en general a todos los que dicen tener más o menos algún tipo de entrenamiento previo les va ofreciendo ejercicios cortos cada vez más complicados para ver que tanto saben.

-Muy bien. Vamos a practicar una técnica simple: En un grupo de aventureros, los que vamos con armas cuerpo a cuerpo solemos ser los que nos lanzamos a los grupos grandes de enemigos mientras los demás del equipo preparan sus poderes. Eso significa que debemos estar listos para enfrentarnos a más de un enemigo a la vez.

-Esta técnica que les mostraré ahora no es muy complicada: Simplemente utilizaremos la fuerza y dirección de un ataque para encadenarlo con un segundo golpe hacia otro objetivo cercano. Esto es particularmente útil si luchan contra enemigos débiles y fáciles de desestabilizar.

-Todos, excepto Flay, practicaremos esta técnica.

Durante un buen rato se la pasan practicando hasta que todos la tienen más o menos dominada.

Tras un corto descanso, todos empiezan a organizarse para la 3ra hora de la clase, la cual se basará (aparentemente) en practicar contra muñecos (los más nuevos a luchar con armas) o contra otros compañeros (los que ya tienen algo de experiencia).

-Si alguno de los que he puesto con muñecos prefiere luchar contra algún compañero solo tiene que decirlo. Lo mismo los que no quieran luchar contra otros, es todo decisión vuestra.

-Pueden elegir también contra quien luchar, no me meteré en eso.

-Necesito saber qué tan fuerte es. Oye, Flan!- Le grita Kross a Flay, esperando captar su atención. -Te parece bien si combatimos un poco?

Con un movimiento de su mano su shinai se convierte ahora en una espada algo más elaborada, una especie de rapier, pero con el filo redondeado para no llegar a cortar. -No pareces alguien muy rápido, considerando el tamaño de esa cosa. Por eso quiero llevarme sorpresas ahora y no cuando esté en un combate serio.- Hace una mueca. -No estoy confiado ni nada, solo quiero saber hasta dónde puedo llegar, y comprobar que realmente tú eres alguien de segundo; quizás hasta logre respetarte un poquito más.

-¿Hm?-, el pelirrojo ríe un poco mientras se gira hacia él. -Pensaba darle su merecido al lobo, ¡pero vale!

El chico se acerca a lo que podría considerarse un ring. Clava su espadón en el suelo, sosteniendolo con una mano, mantiene una muy amplia sonrisa. -¡Estoy listo! Cuando quieras.-, parece que le deja el primer movimiento. ¿Por algo en particular? A saber, tampoco es que Flay parezca ser el tipo de persona que hace trampas.

El profesor Demian mira como se posicionan, frunciendo un poco el ceño.

-Flay, no quiero que uses ningún ataque Elemental ni Hechizo, ¿Entendido?

El pelirrojo, en respuesta, asiente.

-Ruko, si quieres participar en un duelo, espera a que Flay termine.

El Híbrido lobuno cierra los ojos con el ceño fruncido, cruzándose de brazos.

-Tch. Bien.

Sigue entrenando las técnicas que aprendieron en esta clase, de momento.

-Bueno bueno, me deja empezar. Eso quiere decir que, o es bueno contraatacando, o simplemente me está dando ventaja.- Piensa con los ojos entrecerrados que le dan pinta de tonto. -Me tiro a o primero.- Y se lanza.

Cuando está a punto de llegar hace algo para intentar sorprenderlo: en lugar de arremeter con su espada, se la arroja al pecho para luego saltar unos cuantos metros en el aire. 

Adel se fija en que los tipos esos van a pelearse para entrenar... Aprovecha que la atención no está centrada en ella para sentarse en el suelo o en algún escalón, exhausta, dejando su katana pequeña a un lado. Pronto empieza a cabecear sin poder evitarlo, adormecida. Pero los malditos picores no cesan, es irritante... No puede evitar estar rascándose cada dos por tres. Está rabiosa... ¿Qué habrá cogido...?

-... Oye.-, Adel se encuentra con que tiene al Híbrido cerca de ella, brazos cruzados. Parece que no tiene nada mejor que hacer mientras espera a que esos dos terminen su sesión de entrenamiento.

-Has estado toda la clase distraída.-, aparta la mirada un momento antes de observarle de reojo, -... ¿Te encuentras bien?

Flay no parece que se preparaba para ningún tipo de finta, más bien estaba con la guardia en alta para bloquear el ataque. El arma de Kross es lo suficientemente ligera como para lanzarse con facilidad, vuela por el aire e impacta contra el arma de Flay. Se ve, de todos modos, que se resiente un poco ante el impacto. (238, impacto: 52 daño)

-¡Nada mal!-, dice él, no parece que le haya molestado demasiado el daño recibido. Acto seguido, Flay junta fuerza y da un salto, ¡le logra alcanzar! Parece que le sobra la fuerza para hacer un gran salto y si bien se nota que Kross es más ágil, no es que Flay esté demasiado por detrás... -¡Cúbrete!-, advierte mientras sostiene su arma con el mango en ambas manos durante el salto, disponiéndose a intentar batear a Kross hacia abajo con un golpe vertical, utilizando la parte plana del arma para no realizar ningún corte. Afortunadamente parece que no es un maestro del combate aéreo, Kross consigue maniobrar gracias a su entrenamiento con el gato ese y esquivar el golpe... Aunque por la corriente de viento generada, se nota que ese ataque habría dolido al menos el triple que un arañazo causado por las Sombras esas.

Cuando ambos empiezan a caer, Flay utiliza la fuerza que hizo para atacar hacia abajo y la redirige hacia arriba con un movimiento circular potente antes de intentar darle otro batazo lateral, pero Kross ya había visto ese ataque venir hace siglos y se había apartado. Ambos tocan suelo.

-Aaah, la viste venir, eh? Ya veo que en combate no eres tan idiota.- Kross sonríe de lado mostrando los dientes. -Nos habrías sido de gran ayuda anoche mientras luchábamos con el payaso aquél. Por qué no apareciste? Eras tú entonces el que tenía problemas en el baño?

En el medio del aire Kross se gira para evitar el sablazo. -Que me cubra??! Ni de coña voy a cubrir eso!! Prefiero evadirlo por completo!- Mientras va cayendo al suelo, recordando la clase de Tao estira su mano apuntando a la espada que había lanzado, que había rebotado en el arma de Flay y estaba dando volteretas en el aire a toda velocidad. Cuando Kross extiende la palma de su mano ésta se detiene en seco y regresa a él, para poder tomarla de la empuñadura. -Vaya, me siento como ese Wan que no vi.
-Lo sabía, es lento. Pero si me llega a dar con esa acabaré en dos partes.- Kross toca el suelo con la mano, e impulsándose con todo el cuerpo da una voltereta por el piso para aprovechar el ímpetu de la caída y volver a arremeter antes de que Flay pueda estabilizarse. -Listo, nunca fui muy fan de las espadas gigantes.

Adel alza la mirada entrecerrada para mirar a ese tipo tan feo que se le acaba de acercar. Si tuviese más energías seguro le habría dedicado una mueca de desagrado, pero no estaba de humor.
-Pues no. Quiero irme. ¿Sucedería algo si me voy? Quiero ir a la enfermería, no me encuentro bien. -de hecho se pone en pie, algo tambaleante-. -Dile al profesor que encuentro su clase preciosa, y que me encantaría quedarme para no dejar de admirar esos bíceps... Bueno, ese cuerpazo en general. Pero que debo ir a la enfermería... -se lleva una mano a la frente y se intenta ir de ahí, caminando como un zombie.