Partida Rol por web

Karak Azgal [Finalizada]

En casa de un carnicero

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02/06/2012, 09:56
Director

Soy carnicero de oficio, pero ser aventurero no es muy distinto. Lo único es que la carne que ahora corto con mi hacha se retuerce un poco más.

 

Herman Frank, menestral de Nuln.

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04/06/2012, 10:14
Otto Vohwinkel

No le he visto desde esta mañana. Ha estado limpiando el piso de arriba y ha comida algo de cerdo asado. Después ha ido a unos recados, pero no le he vuelto a ver.

Era la respuesta que Ambrosio había obtenido del carnicero al preguntarle por su criado halfling. No le había encontrado en el piso de arriba, aproximadamente un tercio de la habitación estaba impecable, pero lo demás seguía sucio, imposible trabajar en aquellas condiciones por el momento.

El carnicero no le había reconocido al verlo, no sin su pelo. Lo encontró cortando costillas de ternero con una hacha corta, separando los mejores trozos. Había uno de aquellos paticortos barbudos comprando carne cuando llegó. No había quitado el ojo a Ambrosio durante toda la conversación.

¿Dónde ha estado todo el día? Les he hablado a algunos de mis clientes sobre su negocio.

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04/06/2012, 14:42
Ambrosio

- ¡Oh, es usted muy amable! - Comentó con fingido entusiasmo el cirujano lampiño, al tener noticia de la temprana difusión que estaban teniendo los servicios ofrecidos en su muy precario y mugriento consultorio.

- He estado en las ruinas dirigiendo a una panda de necios como médico de viaje. Sobreviví a una caída de más de 10 metros y logré vencer las fauces de una bestia sanguinaria, un roedor deforme y gigante. Los tesoros han sido esquivos, y apenas he sobrevivido para arrastrarme de regreso hasta aquí...

La apariencia de Ambrosio era lamentable sin lugar a dudas: Piel teñida por la tierra y la sangre, ropas que acusaban nuevos agujeros y otros desgastes, pantorrillas envueltas en vendas algo manchadas ya de rojo carmesí. Todo aquello rematado por un andar renqueando digno de un lisiado o un muerto viviente. Una figura penosa.

- Por lo demás, me encuentro PERFECTO. Que tenga un buen día...

Y dicho eso se dispuso a subir trabajosamente  las escalares, maldiciendo cada tanto por lo alto y por lo bajo, hasta que finalmente logró encerrarse en su habitáculo y descargar el cargamento de setas. Luego buscó un lugar donde recostarse lo más cómodamente posible, quedando a la espera de que su criado se dignara a aparecer.

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04/06/2012, 17:00
Director

Tardó mucho en dignarse a aparecer, tanto que la luz de la mañana dio paso a la del mediodía, y a la de la tarde. Ambrosio estaba agotado, y durmió todo aquel tiempo. Las pisadas en la escalera le despertaron. Su criado halfling entró en la estancia llevaba un gran colchón con él, tamaño humano.

¡Oh, ha vuelto señor! Creí que le habíamos perdido. Como ve, he estado limpiando. Le traigo un colchón para los pacientes, porque no teníamos. -Lo dejó sobre una tabla limpia, junto a las setas- Se lo he encargado a una prima mía, que tiene un telar aquí en la fortaleza. Le he prometido que iría a pagarle en persona o, si estaba muy ocupado, que lo haría yo en su lugar.

El halfling se secó el sudor de la frente con la manga de su camisa y cogió una de las setas.

¿Sabe? Hay un gran revuelo en la ciudad, un gran grupo de enanos ha acabado con unos mutantes y han traído sus tesoros, dicen que el señor del clan Norgunson ha ido con ellos, están en el Pozo de Zambor, cuidando sus heridos, tal vez debería ir. Qué raras son estas setas, ¿dónde las ha comprado?

Notas de juego

Ambrosio: ¿Se llamaba Ludo? No le hice ficha al PNJ.

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04/06/2012, 21:19
Ambrosio

- ¿Heridos dices, Alfredo? Puede que haga un paseo por aquél sitio entonces. Aunque primero he de lavarme un poco y remendar mi ropa.

La muy tardía llegada de aquél infeliz de generosa barriga al menos traía consigo promesas de trabajo. El hombre de Nuln no se entusiasmaba a pesar de todo. Los enanos eran criaturas tribales y sectarias, y era sumamente probable que no confiaran en las sofisticadas técnicas de un cirujano tan talentoso como él.

- Lo del colchón ha sido prudente. ¿Pero dónde estan las mercancías que te envié a comprar? Por cierto, ni se te ocurra ingerir esos hongos, son experimentales. Si comes alguno a escondidas, lo sabré. Entonces quizás tenga que extirparte la lengua o algo peor. Son plantas muy peligrosas... - Advirtió severamente mientras repasaba su magro cuerpo semidesnudo con un trapo húmedo que escurría cada tanto en un balde de agua turbia. Terminado el aseo personal, se dedicó a remendar con lujosa técnica los agujeros de su túnica. Una vez finalizado el proceso, el médico imperial se sintió presentable y preparado para volver a las calles de la infame ciudad.

- Mañana a primera hora los pondras al Sol para disercarlos, vigilándolos bien de cerca. Por ahora termina de limpiar la mugrey. Marchate cuando hayas concluído con todo...

Impartidas aquellas últimas instrucciones, Ambrosio salió de su lúgubre consultorio con sus herramientas quirúrgicas a cuestas, andando a un paso firme aunque algo torcido de camino al Pozo de Zambor.

Notas de juego

Alfredo Limpiabotas, aunque Ambrosio lo confunde con Lustrabotas.

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06/06/2012, 14:36
Alfredo Limpiabotas

Yo puedo remendar su ropa. Aunque no he visto otras mudas, señor. ¿Quiere que vaya al sastre a encargarle ropa? Conozco una prima mía que hace maravillas con el lino.

Las mercancías dicen que no me las pueden vender a mí. Necesito una licencia de galeno para que me la vendan. Han sido muy bruscos, pero los enanos son así.

Si son hongos peligrosos, ¿para que los necesita, señor? ¿Es un antídoto?

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06/06/2012, 14:57
Ambrosio

El fracaso de su criado a la hora de adquirir los objetos deseados para el consultorio pareció enfurecer repentinamente al profesional, quién ya se disponía a salir cuando escuchó las malas noticias de boca del mediano.

- ¿QUE NO HAS CONSEGUIDO NADA? Dedícate a limpiar entonces. De ahora en adelante me encargaré personalmente de los asuntos demasiados intrincados para tu intelecto.

Dicho eso abrió con premura la puerta y salió de la tienda igual de apurado, dando un tremendo portazo en el acto. Apenas unos segundos más tarde apareció de nuevo en la escena, abriendo a medias la puerta para asomar su despoblada sien y reiterar una última vez su advertencia hacia su curioso y barrigón sirviente.

- ¡Y no pongas tus manos sobre esas setas medicinales sin mi consentimiento!

La puerta volvió a ser golpeada estrepitosamente cuando Ambrosio se retiró finalmente, entre sentidas maldiciones y calumnias dirigidas a los ridículos enanos y sus no menos absurdos primos de insignificante estatura.

Notas de juego

Me movilizo hacia el Pozo de Zambor, es buena idea intentar conseguir algo de renombre sanando a algún que otro enano. 

Edit: ¿Seguimos?

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21/06/2012, 20:55
Alfredo Limpiabotas
Sólo para el director

Lo siento señor, pero no es fácil encontrar esos productos que pide. Los enanos se muestran muy reacios a vender a las demás razas, incluso a nosotros los halfling. He de ir a ver a un herborista amigo mío, Teo Hierbabuena; quizá le pueda conseguir productos naturales. Tiene mucho éxito entre los sacerdotes enanos.

Se excusó, y siguió limpiando. Refunfuñando. Prometió no tocar las setas. En la carnicería su casero le preguntó acerca de los gritos, Ambrosio le restó importancia al asunto y salió a ejercer su oficio.

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21/06/2012, 20:58
Director

Pozo de Zambor
Fortaleza de Skalf, Karak Azgal.

Victoria! Regresaron victoriosos a la Fortaleza Norgunson, apenas habían llegado los primeros grupos de guerreros ya estaban sirviendo los primeros cuernos de cerveza. Los vendedores habían olido el negocio y se acercaron a la fortaleza ofreciendo dulces, refrigerios, licores, pasteles, pociones curativas, bálsamos milagrosos, joyas protectoras, botas, jubones, camisas, piezas de caza y todo tipo de parafernalia religiosa. Incluso libros, papeñ y pergaminos. Algunos se ofrecían a redactar las hazañas de los enanos. Los halfling eran los más alborotadores, ofreciendo sus obras artesanas; pues es sabido la habilidad de esa raza para los pequeños trabajos de manufactura.

Una vez más en las ruinas, sólo que en esta ocasión en el lado correcto y saludable. El lado del beneficio inmediato, no del potencial. Había heridos, sí, al menos una docena de ellos, Ambrosio rezaba porque estuvieran muy graves. Había una pareja de sacerdotes enanos, varón y hembra, del culto de Valaya atendiendo a los heridos. Pero iban a necesitar ayuda, desde luego.

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24/06/2012, 16:00
Ambrosio

Un lugar atiborrado de heridos victoriosos era un sitio más que interesante para cualquier cirujano que supiera emplear bien sus habilidades por un buen precio. En aquellas ruinas, los encargados de la sanación parecían ser un dúo de clérigos enanos que mezclaban curiosamente lo práctico con lo místico de sus investiduras. A pesar del poco respeto que Ambrosio profesaba hacia los religiosos en general, creyó que lo más conveniente sería presentar sus servicios ante ellos con el fin de evitar malos entendidos una vez comenzada la faena de curar heridas.

- Saludos, acólitos de la Fe. Pueden llamarme Ambrosio, cirujano de la Universidad de Nuln. Vengo a ofrecer mis servicios a los convalecientes victoriosos, pues veo que el trabajo aquí los sobrepasa.

El calvo y espigado hombre de ciencia parecía ya listo para poner manos a la obra. Llevaba consigo lo que parecía más una caja de herramientas que un maletín para instrumentos quirúrgicos, y su ropa había visto mejores épocas claramente. Aún así no dejaba de parecer un profesional bastante serio, de aquellos que escaseaban en el mundo.

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25/06/2012, 13:49
Director

La pareja de enanos se veía realmente desbordada, estaban tratando una flecha clavada en el costado de un enano que se ponía blanco por momentos mientras su sangre empezaba llenar el suelo.

¿Sabe atender heridas de guerra un cirujano humano?

Notas de juego

Ambrosio: Tirada de Carisma muy fácil (+30).

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25/06/2012, 13:52
Ambrosio

Ambrosio sumaba su gran orgullo a una intolerancia difícil de disimular por la cultura enana. Había llegado a esa inmunda ciudad de barbiluengos tras promesas de oro y otras grandes recompensas. Hasta el momento, lo único que abundaba en ese miserable lugar era el racismo descarado de una raza claramente inferior a la humana.

- ¿Me explicarían ustedes, eminencias de la medicina, en qué difiere una herida de espada provocada en plena batalla de otra  producto de una vil jugarreta por la espalda en plena ciudad imperial?

El enfado del hombre de Nuln era más que evidente. La veracidad de su pericia en el campo de la cirugía no era discutible ni negociable a su entender. Aquellos dos infelices de extremidades cortas habían pecado de ignorantes.

- En efecto, no existe diferencia alguna. Bueno, tal vez sí. Temería más a la segunda.

- Tiradas (2)

Notas de juego

Mala forma de gastar suerte desde bien temprano :S

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25/06/2012, 16:34
Director

¡Largo de aquí, humano!

Los enanos no eran gente sociable, eran muy irritables, y cuando estaban heridos. Mucho más. Sin embargo había muchos heridos, y Ambrosio estaba seguro de que nadie le acusaría de un crimen por haber ayudado a los guerreros enanos. Uno de los enanos más próximos tenía su mirada fija en él, carente de reproche. Le faltaba la oreja derecha, pues un objeto contundente le había destrozado el lado derecho del cráneo. Tenía una tosca venda en ese lugar, sin duda hecha por él mismo.

Señaló su herida y con la mano le indicó que se aproximara.

Notas de juego

Ambrosio: Haz varias (6) tiradas de Sanar. Roleamos un largo tiempo, veamos si hay alguna consecuencia..

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25/06/2012, 18:21
Ambrosio

El cirujano se acercó intrigado al convaleciente, un enano que presentaba una horrenda fractura de cráneo y que parecía abandonado a su suerte por parte de sus camaradas. Le pareció curioso al hombre del Imperio que aún en aquél estado tan deplorable, el enano hubiera podido vencer su orgullo y recurrir a un matasanos de otra especie.

- Hmm, veamos... Si desea sobrevivir  tendrá que someterse a una operación compleja. Los costos serán altos, casi tanto como el dolor. Usted dirá si prefiere eso o una salida más limpia...

Ambrosio fue directo al grano sin dejar hablar primero al paciente. La complejidad del cuadro lo obligaba a estar seguro de que iban a pagarle como era debido, ya que casi con seguridad su prestigio dependería del éxito o fracaso de aquella intervención. Y si iba a ser repudiado, prefería serlo con algunas monedas en los bolsillos como consuelo.

Notas de juego

Rotura de cráneo requiere cirugía, así que habría que ver si el herido está dispuesto a encarar tal procedimiento y pagarlo antes de hacer las tiradas.

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25/06/2012, 19:40
Director

Es el Clan Norgunson el que paga, no yo. Habla con ellos de dinero.

El enano frunció el ceño, como todos los enanos hacen, y añadió:

Sólo un cobarde toma lo que tu llamas una salida limpia. Tu raza aún tiene mucho que aprender.

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26/06/2012, 13:28
Ambrosio

- Perfecto, me agrada ese entusiasmo. Déjame inspeccionar un poco la herida...

Ambrosio quitó la venda de la cabeza del enano para contemplar lo que claramente era un caso de rotura múltiple de cráneo. La correspondiente oreja ya era cosa del pasado, un detalle menor a esas alturas.

- Hmm... Tendré que removerte prácticamente la mitad desquebrajada del cráneo para que tu cerebro no termine reventado por la que presión que ejerce el hueso contra los tejidos.

La operación en verdad era más larga que complicada, pero tenía sus riesgos. Además, el cirujano de Nuln había aprendido que siempre era mejor teñir de dramatismo cualquier caso. Eso le permitía coronarse como un héroe salvador en caso de salir airoso de la cirugía, o de excusarse sobradamente si sucedía lo contrario.

- Necesitarás de un herrero de trabajo fino que se encargue de fabricar una placa de metal que se amolde al hueco que dejará la intervención. Pero dejemos ese tema para después, necesito llevarte a mi consultorio ahora. ¿O prefieres las estancias de los Norgunson?

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26/06/2012, 15:12
Director

No negarán la hospitalidad a un enano herido. Vayamos a la fortaleza Norgunson, ¿debería caminar?

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26/06/2012, 15:26
Ambrosio

- Por supuesto que no. Intentaré conseguir una litera o carro para tu transporte. Espera aquí...

Cumpliendo con sus palabras, el médico imperial se apresuró a  buscar algún vehículo para movilizar a su nuevo paciente. Un carro donde poder recostarlo le pareció lo más adecuado y práctico, así que empezó a recorrer el lugar en busca del tal servicio. Solicitó a gritos voluntarios para la tarea, sin olvidarse de mencionar que todo aquello era para salvar la vida de un enano y que la paga corría a cuenta del afamado clan Norgunson.

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26/06/2012, 16:20
Director

Un carro no, pero no le faltaron voluntarios para trasladar a aquel enano hasta la fortaleza Norgunson. Voluntarios que esperaban recibir una compensación a cambio, en esta ciudad la cultura era materialista hasta el extremo. Dos robustos enanos, un humano y un halfling se ofrecieron a llevar al herido. Ninguno de ellos aparentaba ser lo que se diría un ciudadano respetable. A Ambrosio le pareció un milagro que no hubieran contagiado una enfermedad aún.

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27/06/2012, 13:31
Ambrosio

Ambrosio reclutó finalmente a un par de enanos que se ofrecieron a hacer el trabajo de transportistas para el herido. De regreso con su paciente, ordenó que este fuera cargado como mejor pudieran hacerlo los voluntarios e indicó la fortaleza del Clan Norgunson como destino. El cirujano de Nuln los siguió a la par con sus herramientas en mano y muy pendiente del estado del convaleciente guerrero. Un sujeto doblemente afortunado, sin ninguna duda.