Partida Rol por web

La puerta de tu dormitorio se abre de golpe, como usualmente hacía, el maestro entra apoyado en su bastón vistiendo su bermudas favoritas y su camisa hawaiana de la suerte. Lleva sus gafas de sol puestas y parece mas ágil de lo que es. Se acerca a tu cama sentandose a los pies de la misma, tras quitarse las gafas de sol, te mira con aire de ternura.

Kim, mi pequeña muñeca de jade- Dice con voz paternal mientras te hace cosquillas en los pies con suavidad -¿Porque estas triste Kim?

- Abuelo.... abuelo!!! pero yo te vi... te vi.... te habian matado abuelo!! pero estas bien!! que ha pasado?? por qué llevas esa ropa?? - Kim está aterrorizada, pero una ola de alegría la estaba invadiendo. El abuelo estaba bien, con ella, puede que todo fuese un mal sueño.

El anciano reia animadamente mientras miraba su habitual camisa. Se aliso las bermudas y acarició la cabeza de la joven con cariño, despeinandola a la vez.

-¿Muerto? Si, tal vez Dijo con tranquilidad, luego se quedo mirando hacía la pared, como si fuese dificil lo que quería decir.- Pero eso no es tan malo, no para mi...¿parezco triste acaso?

Sin darle tiempo a responder, como era su costumbre cuando hablaba con alguien, empezó a pasearse por la habitación

-No Kim, no es motivo de tristeza dijo mientras miraba con detenimiento una foto de los padres de Kim- Yo cumplí con mi cometido, soy feliz...y he visto crecera una muchacha maravillosa, aunque un poco presumida.

Tras añadir la última frase rompió en una alegre carcajada, luego volvió a sentarse con tranquilidad mientras se acariciaba sus rodillas

-No, ya no me preocupo por mi...eres tú lo que me preocupa- dijo mirandole a los ojos fijamente- Tienes un sendero a tus pies y no se si seras lo suficientemente fuerte como para recorrerlo.

- Abuelo, de verdad, te lo estas imaginando, no estas muerto, estas aquí.

Me acerco e intento tocarlo, a ver si es "corporeo"

El viejo maestro sonrió a su nieta, se meso la barba de chivo y se acarició la brillante calva antes de responderle.

-Kim, deja de negarlo y tendremos medio camino andado...- dijo seriamente- He muerto, asesinado...si, es duro de decir y de oir...pero debes asumirlo, tengo poco tiempo y mucho que instruirte.

-Escuchame atentamente- dijo con voz profunda- Hay muchas tradiciones de nuestro pueblo que no conoces...no tengo tiempo ahora...pero solo debes saber que no puedes perder el amuleto...el te dará la fuerza que necesites...habeis sido elegidos, no se por quien...pero no hay opción.

Tragó saliva, se giró hacia las fotos que había en el escritorio. En ellas se veían a los padres de Kim.

-Tus padres aceptaron su camino, pero dudaron- dijo en un murmullo- No dudes, es tu camino y necesitaras de mis aprendices...o como quieras llamarlos...pero todos sois necesarios.