Partida Rol por web

He estado mirando el mensaje que me mandaste y he pensado en lo siguiente:

Mi idea principal para la aventura es que una maga (ainos20) intenta formar una compañia bajo las órdenes de Gandalf, su maestro, y espera en Bree a que aquellos que han sido enviados o han llegado hasta allí se les unan.

Primer problema que encuentro. Aunque por algún motivo todos estén encantados de ir a la taberna, ¿crees que todos estarán dispuestos a participar en una idea tan peligrosa? Es que implica que el poder de Sauron y sus seguidores caerá sobre ellos, lo cual imagino que es algo que no querrán. A lo mejor ellos mas o menos están conformes con sus vidas y no quieren tener una prematura muerte. Incluso aunque quisieran, debe haber un fuerte motivo para que quieran unirse entre sí.

El fin de la compañía es distraer a las fuerzas de Sauron haciendo que no sepa cual de las dos (la original y esta) lleva el anillo verdadero.

Buena idea...hasta que Frodo se ponga el Anillo, lo detecte Sauron y sepa en que dirección debe enfocar sus esfuerzos, lo que deja a esta Compañía como algo inútil. Este problema, aunque más fácil de solucionar, también tiene que arreglarse, los jugadores deben sentir que hacen algo útil de verdad.

El resto de la historia me convence bastante, está bien pensada aunque no es ideal para mi gusto xDDD. Lo que veo que falta y me parece mas que importante es la casi total ausencia de diplomacia. Algún encuentro con un rey o con algun personaje misterioso (estilo Tom Bombadil o alguno de los Istari) estarían de maravilla y le darían mas toque de Tierra Media.

 Lo que veo que falta y me parece mas que importante es la casi total ausencia de diplomacia. Algún encuentro con un rey o con algun personaje misterioso (estilo Tom Bombadil o alguno de los Istari) estarían de maravilla y le darían mas toque de Tierra Media.

Claro, yo te he dado el boceto, ahora hay que darle retoques. 

Primer problema que encuentro. Aunque por algún motivo todos estén encantados de ir a la taberna, ¿crees que todos estarán dispuestos a participar en una idea tan peligrosa? Es que implica que el poder de Sauron y sus seguidores caerá sobre ellos, lo cual imagino que es algo que no querrán. A lo mejor ellos mas o menos están conformes con sus vidas y no quieren tener una prematura muerte. Incluso aunque quisieran, debe haber un fuerte motivo para que quieran unirse entre sí.

Hay muchos personajes los cuales han dicho ''me mando mi rey'' o ''pertenezco a los montaraces de aragorn'' por lo que es fácil meterlos

 Buena idea...hasta que Frodo se ponga el Anillo, lo detecte Sauron y sepa en que dirección debe enfocar sus esfuerzos, lo que deja a esta Compañía como algo inútil. Este problema, aunque más fácil de solucionar, también tiene que arreglarse, los jugadores deben sentir que hacen algo útil de verdad.

Por eso te he dicho lo de que en Helm se encuentran, haré que radagast, que es el istari mas cercano en ese momento'' o un hechizo de presencia de gandalf, le informe de todo lo que ocurre, y tengan que ir apresuradamente a Helm. Porque, si mal no me acuerdo, la primera vez que se pone el anillo habiendo partido de Rivendel es cuando Boromir se lo intenta quitar, no?

Claro, yo te he dado el boceto, ahora hay que darle retoques. 

Vale, es que el boceto hablaba más sobre las batallas que sobre cualquier otra cosa, de ahí me lo he supuesto. Pues nada, iremos haciendo retoques jeje.

Hay muchos personajes los cuales han dicho ''me mando mi rey'' o ''pertenezco a los montaraces de aragorn'' por lo que es fácil meterlos

Si tu lo dices me lo creo, pero asegúrate de que sean motivos convincentes. En ese caso no hay más que hablar.

Por eso te he dicho lo de que en Helm se encuentran, haré que radagast, que es el istari mas cercano en ese momento'' o un hechizo de presencia de gandalf, le informe de todo lo que ocurre, y tengan que ir apresuradamente a Helm. Porque, si mal no me acuerdo, la primera vez que se pone el anillo habiendo partido de Rivendel es cuando Boromir se lo intenta quitar, no?

Sí, justo en ese momento es cuando se lo pone. Vale, gracias por aclararme eso, es que lo veía un fallo muy gordo que les quitaba todo el protagonismo a los jugadores.

Por otra parte, me gustaría que me mandases las historias de los jugadores, por echarles un vistazo que siempre es entretenido.

De acuerdo, las iré poniendo aquí e iremos poniendo en notas de juego si lo vemos apto para la partida o si no. 

Hay algunos que me han dicho que pueden cambiarla en algo, por lo que en caso de que no nos cuadre algo siempre podemos variarlo un puco (u optar por otro pj mejor)

Jugador: Botxo
Nombre: Baladriel

Raza: Elfa

Descripción física:

Estilizada y elegante, movimientos casi felinos. Ojos azules claros, pelo largo formando una bella melena donde alguna pequeña trenza la decora. Sonrisa bella pero no deja mostrarla a menudo.

Descripción psicológica:

Como los suyos se suele mostrar distante con miembros de otras razas, pero no tanto como suele ser normal, no puede evitar la curiosidad sobre el resto de razas, no tiene nada personal contra los enanos, pero mantiene la distancia con ellos, sabedora del problema que ambas razas tienen desde siempre. P

A veces algo inquieta se encuentra cómoda en lugares abiertos como grandes bosques como los que ella se crio, pero sabe mantener la compostura en cualquier lado, educada y elegante como son todos los elfos.

Historia:

Nacida en los bosques del oeste, fue criada por su padre ya que su madre falleció al poco de nacer, esto hizo que su padre la criara como a un varón, no fue algo que molestase a Baladriel, ella al contrario disfrutaba esa manera de educación, mientras otras se criaban jugando entre ellas riendo o cuchicheando. Ella marchaba con su padre al bosque a seguir rastros, cazar y aprender a usar las armas.

Pasaron años muchos años, su padre aunque al principio algo reacio ahora estaba feliz viendo como su joven hija, mostraba aptitudes innatas para el combate, hábil con la espada, temible con el arco. En ciertas situaciones superando hasta a su progenitor. Pronto llego el tiempo en que ambos debido a la profesión del padre de Baladriel, que era la de montaraz, comenzaron a explorar más allá del bosque que sirvió de casa a Baladriel.

Al principio la chica se mostró reticente, pero la compañía de su padre era suficiente para vencer las dudas, esto y que en su interior deseaba ver La Tierra Media, ir a lugares de parajes increíbles, conocer otras culturas por raras o extrañas que pudieran ser. Asi que padre e hija se pusieron en marcha, vivían con lo que cazaban y aprovechaban las pieles para hacerse ropas o utensilios y lo que sobraba lo vendían, para tener algo de dinero, aprendió que en el mundo se necesita cierta cantidad de monedas. Sobre todo para comprar aquello que no podían conseguir en los bosques o el campo.

En este tiempo conoció a enanos, medianos y como no a los humanos, estos últimos fueron los que más le impactaron. Capaces de cosas increíblemente heroicas, como las más viles, no comprendía como podían ser tan distintos. Su padre le explico que eran una raza joven, que seguramente en el futuro cambiarían ya que al parecer eran el futuro de la Tierra Media, eso la sorprendía, pensar en ellos como el futuro de todo. Esperaba que su padre estuviera en lo cierto. Pese a esto no pudo evitar cierto cariño hacia los medianos o hobbits, pequeños pero grandes de corazón, bondadosos amables y graciosos, al menos así eran todos con los que se cruzó. Los enanos simplemente eran enanos, pero lo cierto que con alguno pudo charlar y disfruto conversando hasta rio alguna de sus bromas, pero lo cierto era que a su manera les tenia respeto por ser una raza tan orgullosa, aunque otras veces los atravesaría con su espada por eso mismo.

Tras años de viaje con su padre, este decidió volver al hogar del bosque, pero Baladriel pido seguir viajando, su joven corazón ardía por conocer más cosas, y aún quedaba mucha Tierra Media que visitar. Su padre lógicamente se mostraba reticente a aceptar aquello, pero no podía detener a la chica y lo sabía era como el un alma libre. Así que accedió y la pidió que tuviera cuidado, así que tras darle un fuerte abrazo le dio un regalo para que siempre le tuviera presente, una espada Élfica que llevaba el cazador ahora era de la joven guerrera.

Así comenzó su viaje Baladriel en busca de La Comarca, ese bello lugar que comentaron los medianos.

Jugador: germano

Nombre: Moinar

Raza: Enano (de las colinas)

Ocupación: Soldado

Descripción física: Larga barba negra adornada con trenzas, posee una cicatriz que le recorre parte del lateral de la frente. Ojos marrones claros, de piel blanca. Complexión fuerte, en estatura sigue lo normal, no destaca ni por alto ni por bajo.

Descripción psicológica: Es testarudo donde los haya, y desconfiado, pero leal con sus amigos y no dudará en apoyarles ante cualquier infortunio.

Un Saludo

Jugador: Horadrim

Nombre: Yaeldrik Sunrider

Raza: elfo (Avari)

Ocupación: Sanador

Descripción fisica: Cuerpo joven de aspecto delgada pero agil con una suave piel. Con pelo largo casi blanco su color, con unos ojos penetrantes color almendra

Descripción psicológica: Alegre y respetuoso, con grandes deseos de aprender todo aquello que ah leído en libros y escuchado de lo que los guerreros de la arboleda cuentan. 

Historia: Hijo de Kaeldrik Sunrider, rey de una pequeña arboleda pegada al mar de Rhun. Yaeldrik fue criado y enseñado para ser un futuro gobernante. Demostrando gran capacidad para el dialogo y los rituales de curación, sin dejar atrás las clases de combate. La vida confinada a los libros, expectativas impuestas y el deseo por aquello que solamente se podía aprender con la vivencia hacían de Yaeldrik.

Jugador: Lonik83

Nombre: Bron

Raza: Humano

Ocupación: Mercenario

Descripción física: Bron es, por encima de todo, un tío bastante fuerte. Se nota que su cuerpo se ha castigado en las labores del campo. Puede cargar con los fardos de hierba más grandes y esgrime armas pesadas con bastante facilidad. Sin embargo, es más bajo de lo que cabría pensar para un hombre espaldas tan anchas. Piel tostada por el sol, velludo y cabello corto y oscuro. Por eso resaltan más sus ojos claros.

Descripción psicológica: A Bron le queda bien su estatura: no le gusta llamar la atención. Cree que pasar desapercibido tiene más ventajas que inconvenientes. Siempre ha procurado no meterse en líos, pero ya está un poco cansado de morderse la lengua. A veces cree que le gusta más el ganado que la gente. Bueno, en realidad le gusta conversar pero se siente más cómodo en el tú a tú que en grupos grandes. Curioso, impulsivo y poco inteligente.

Historia: Bron ha vivido toda la vida en el campo. Pero siente que no quiere pasar toda su juventud labrando tierras y cuidando de las vacas. Quiere ver mundo y ganarse un dinero. ¿Mercenario? Bueno, suena bien para empezar.

Jugador: Shax74

Nombre: DHALFRYN “Yunque guerrero”

Raza: ENANO DE LAS CAVERNAS

Profesión: GUERRERO

Descripción física: De buena estatura, fortachón, y duro como una roca. Luce una larga trenza y una enorme barba poblada negras como el azabache, en contraste con sus ojos verdes, pequeños y siempre escondidos en su ceño fruncido.

Amante de abalorios y adornos metálicos. Viste con ropas guerreras de colores terrosos, enfundado en su estridente capa color púrpura con la que pretende aparentar una alcurnia que no posee, y que sus andares rudos y modales taberneros delatan a cada instante.

Descripción psicológica: Parco en palabras, trabajador incansable, gruñón, bebedor, y jugador…  como su padre.

Habilidoso, leal, generoso, orgulloso y soñador…  como su madre.

Terco, irracional y vengativo…  como una mula.

Nunca falta a su palabra y jamás perdona una promesa.

Aprecia la compañía de los demás, pero siempre se mantiene en un segundo plano.

Poco hablador pero buen entendedor.

Incapaz de negarse a un desafío o de admitir una derrota.

Historia: Nacido en una pequeña aldea de las montañas azules, trabaja desde siempre en la pequeña forja de sus padres. Detesta desde niño la idea de convertirse en un simple artesano. Sueña con hacer fortuna y que su nombre sea recordado en canciones y leyendas.  Siempre que puede se escapa de la forja para practicar con las armas, lo que le ha ocasionado más de una reprimenda de su padre, que se obstina en quitarle los pájaros de la cabeza y enseñarle el oficio que debe heredar el día de mañana.

Pasan los años y aunque cada día pasa menos tiempo trabajando y más practicando con armas y armaduras, su sueño de aventuras sigue lejos, mientras pasa los días y casi se ve abocado a permanecer para siempre en el negocio familiar.

Un golpe del destino cambia de la noche a la mañana toda la vida del joven Dhalfryn. Su padre, mal bebedor y peor jugador, pierde la forja en una apuesta (que no fue tan segura como parecía) con un pequeño señor que le obliga a trabajar, a partir de entonces, para él por un mísero jornal.

Dhalfryn se niega a soportar tal humillación y decide abandonar la aldea y a su familia, jurando y perjurando que algún día regresará, colmado de riquezas y fama, para recuperar lo que les ha sido injustamente arrebatado…  y para saldar cuentas.

Jugador: Tsabrak

Nombre: Imracar, hijo de Aegon

Raza: Edain

Ocupación: Montaraz

Descripción física: Imracar es un joven humano apuesto, además de alto, de constitución atlética, con la piel clara, aunque curtida por la intemperie, de raza caucásica, con unos intensos y penetrantes ojos castaños y el pelo castaño oscuro.

Descripción psicológica: Imracar es una persona cayada, considerada y inteligente. Cree en que toda las personas merecen una segunda oportunidad y que un hombre, si se le da la oportunidad, puede cambiar el mundo. Es leal a su gente y a los pueblos libres.

Historia: Imracar ser un joven y inexperto Montaraz del Norte, hijo de Aegon, un legendario Montaraz, muy conocido entre los suyos, uno de los pocos Dúnedain que siguen al capitán Aragorn, el heredero de Isildur, en su lucha contra los siervos de Sauron. Él es el menor de tres hermanos y ha crecido a la sombra de sus dos hermanos mayores, ambos reputados y respetados Montaraces. Imracar espera aspira lograr, al menos, una hazaña que lo haga destacar, y demostrar que es digno hijo de su padre, pero hasta ahora sus únicas tareas a sido ejercer de mensajero entre los diferentes Montaraces, aunque sabe que algún día llegará su hora...

Jugador: Orre77

Nombre: Roin, hijo de Rodán

Raza: Enano de las colinas

Ocupación: Combatiente, Soldado.

Descripción física: Mide 143 centímetros y lleva 106 años en la Tierra Media. De contextura fornida, su tez es cobriza debido a mañanas y tardes enteras caminando al sol. Su nariz aguileña destaca su mirada gris y conflictiva. Su cabello rojizo, áspero y descuidado cae en intentos de trenzas sobre su espalda y hombros. Su barba, cubierta de migas y canas deja entrever unos labios finos y apretados. Lejos de ser bello, su mera imagen causa rechazo ante quienes conocen su historia.

Descripción psicológica: Alegre en su juventud, penitente y prudente en su adultez, Roin es un enano que lleva una carga personal al hombro. La tragedia atravesó su vida y se enamoró de ella. No dejará ir el dolor que siente,  ya que es su mejor escudo, ni aceptará que nadie pase sobre él. Bruto en sus movimientos pero sensato con sus modales y su lengua, años de recorrer caminos lo instruyó en las costumbres más variadas de la Tierra Media. Guerrero solitario, busca ser castigado. Su intolerancia hacia la raza élfica puede traer conflictos en los momentos menos oportunos.

   Prefiere la retirada antes que el sacrificio, y la paciencia ante la pasión. El objetivo de su espada está en cualquiera que ponga primero su lado animal.

Historia: Roin nació en las Colinas de Hierro, en el seno de una familia burguesa por parte materna y militar por parte paterna.

   Una vez finalizado su entrenamiento militar a manos de su padre, Rodán, un aclamado comandante querido tanto por el pueblo como por Dáin pie de hierro, decidió que era hora de entrar por primera vez en batalla y a la edad de 29 años marchó junto a su padre y a su rey ante la llamada de Thorin.

   -La montaña solitaria ha sido recuperada, pero esos sucios orejudos quieren masacrar a los héroes en lugar de coronarlos. -decían entre las filas del ejército.

    Si los rumores eran ciertos, Érebor estaba en manos enanas una vez más, como siempre debió haber sido. No permitiría que ni los traidores élficos ni los desagradecidos hombres del valle les quitaran a un rey olvidado y a un grupo anónimo de héroes su más reciente conquista. Convencido de su causa y más temerario que nunca, Roin cayó ante la confusión cuando el objetivo de su espada dejaron de ser los elfos y hombres.

    Todo había cambiado, y allí estaba en la confusión de la batalla. Los trasgos parecían salir de las entrañas de la tierra y podía escuchar a Dáin profiriendo gritos y órdenes, más no podía vislumbrarlo. El miedo o la insensatez terminó por invadirlo y ante su propia sorpresa se volvió el guerrero que nunca creyó ser.

    La batalla estaba ganada y a un gran costo. Las águilas oscurecían los pocos rayos de luz que las nubes permitían pasar, clavándose para rematar con sus fuertes picos y garras algún trasgo moribundo. Rodeado de llantos, gemidos y gritos de pánico, buscó a su padre por el campo de batalla.

    Esperaba su aprobación, pero en su lugar, lo encontró con la garganta destrozada y un estandarte ensangrentado en la mano. Sus cuerdas vocales estaban rotas, más ninguna palabra pudo nacer de sus labios, aunque su mirada se lo dijo todo.

    Un elfo de armadura bronceada intentó separarlo del desfallecido enano, y se necesitó uno más para cumplir el cometido. Un tercer elfo atravesó de forma certera el corazón del caído con una lanza.

    -Es por piedad, ningún ser viviente debería sufrir un desenlace tan cruel. -intentaron explicarle sus captores, pero estaba cegado. Ante el más mínimo descuido se las arregló para enterrar un hacha en el cráneo de un elfo y herir de gravedad el vientre del segundo.

    Nunca pudo recordar lo ocurrido a continuación; gritos, insultos y juramentos de venganza pasaron a formar parte de las tantas historias opacadas por aquella gran victoria.

    Tras 36 años confinado en una incómoda celda en las profundidades del bosque negro, la tristeza avanzó tanto sobre el bosque como sobre su alma. En un descuido, o tal vez un gesto de misericordia por parte de su guardia cárcel, logró escapar de su celda y se dedicó a recorrer el mundo.

   Lejos de ser un mercenario y aún mucho más lejos de ser un soldado, interiorizó su dolor como parte de su ser. Por 24 años vagó de pueblo en pueblo, con profunda repugnancia hacia los elfos y un trato indiferente hacia los humanos. Pero su deseo era su némesis; volver a Érebor, a la montaña por la cual su padre entregó su vida, y a la cual deshonró manchando su tierra infértil con la sangre de sus aliados.

   A la edad de 89 años, un cansado pero lúcido Roin intentó en vano retomar su antigua vida bajo el abrazo de la montaña solitaria, pero si bien Dáin lo recibió con los brazos abiertos, nunca pudo quitarse la marca que ahora llevaba en su frente.

   A los 104 años se dio cuenta que aquel pueblo trabajador y empecinado, no podía perdonarlo. No por falta de voluntad, sino por falta de memoria. Callado, ermitaño y marcado por la tragedia, cargó su vieja espada de hierro y se echó al camino una vez más. 

Jugador: DeLeagant

PJ - Ettelëa (cuyo nombre real es Tauleyon [hijo del gran árbol])

Raza - Elfo avari moriquendi, del Bosque Negro

Edad - 40 años (un elfo muy joven, recién terminada la adolescencia e iniciada la edad adulta)

Profesión - Soldado (guardia fronterizo del Bosque Negro)

Aspecto - A los ojos de cualquier no quendi, se trata de un ejemplo más de la raza eldar, no muy alto (1,75m), hermoso (de piel pálida y ojos claros) y esbelto, de brazos y piernas delgados y ágiles.

Psique - Un eldar vería algo más allá dentro del muchacho. Sus gestos, aunque gráciles, son hoscos, el carácter distante, es lento en confiar y en hacer amigos, aún dentro de los límites del Bosque Negro, quizás se trate de su inexperiencia (ninguna fuera del Reino del Bosque) o un rasgo de su carácter. Una vez ganada su confianza es un amigo firme y muy leal, con una obediencia ciega hacia aquellos que considera sus superiores. Quizás por todo ello Thranduil haya decidido enviarle fuera del Bosque.

Historia - Tauleyon estaba predestinado desde su nacimiento ha servir como protector del gran bosque, sus padres, ambos guardianes del bosque le habían precedido y serían, tanto sus superiores como sus progenitores. Su instrucción siempre estuvo clara: luchar, explorar, disparar con el arco, tan rápido como cualquier hijo del bosque, más rápido, más silencioso. Tal es su dedicación a su tarea que a menudo olvida disfrutar de la vida en el bosque, las vistas desde los árboles, los claros luminosos, los sombríos riachuelos.

Quizás por la constante amenaza que rodea el Reino, quizás por el miedo a desaparecer, puede que por el hecho de no haber cruzado palabras con nadie que no sea un miembro del Reino que no quisiera acabar con él, hacen que el elfo tema y desprecie todo lo que le es ajeno. Ojala la misión de Thranduil obren un cambio en él.

Jugador: Nizuko

Nombre: Natarion 

Raza: Elfo de Noldor. (No sabía si indicar el apellido de la familia)

Descripción física: Es un elfo maduro, incluso para un elfo. Ha vivido durante 300 años y ha visto muchas cosas. Tiene un semblante tranquilo y confiado. A pesar de ser un elfo, tiene una robustez alta para los de su raza. Convirtiéndolo en un guerrero formidable. Tiene 3 anillos en su orejas y un pelo largo rubio ceniza. Mide alrededor de 1,90. 

Descripción psicológica: Natarion es un elfo de carácter tranquilo y amistoso, pero con unos toques de narcisismo que hacen de el, una persona difícil de tolerar. . Siente cierto deseo por el combate contra la lacra del mundo como los orcos. Hacia el resto de razas que el considera "levemente inferiores" le produce cierto interés curioso, e incluso se ofrece a ayudarlos pensando que son incapaces ellos mismos. Aunque nunca suele decir estas cosas a la cara. 

Historia: Como el resto de los noldor, Natarion ha dado su vida hacia la llamada de los Valar. Despues de años de adiestramiento por parte de sus padres. Se volvió un fuerte guerrero y un estratega muy capaz. Su padre venía de un linaje muy fiel al rey Finwë. Por lo que sus responsabilidades abarcaban muchos campos, desde la organización interna al liderazgo de ciertas contiendas. Estos aun siguen vivos, y el elfo Natarion quiere seguir los pasos de su padre, viendo, en las demas razas, un potencial aliado poderoso si se les enseña con paciencia y cuidado. 

* Profesion: Soldado

Jugador: Daegon

Nombre: Alumine

Raza: Humano

Ocupación: Soldado reconvertido en Guerrero. Guerrero.

 
Descripción física:
Hombre de mediana edad, 90 kg y 1,80 de altura
Pelo oscuro hasta los hombros.  Facciones de hombre del norte
Equilibrio entre musculatura y agilidad
Tiene una cicatriz en el hombro derecho, borrando lo que parece ser un simbolo
 

Descripción psicológica:
Antiguo capitan de los numereanos negros, fue un miembro muy descatado llegando a ser capitan a penas 1 año despues de su reclutamiento, durante su estancia aqui realizo misiones extremadamente complicadas y despiadadas.  

Su mente siempre ha estado en una lucha constante por conocer su verdadera ser.  Por un lado su naturaleza de numereano negro, salvaje y despiadado un combatiente feroz.  Por otro lado su lado más humano (su madre era una humana de rohan) siempre en continuo enfrentamiento en el fondo de su ser cuestionando las ordenes, cuestionando el bien o el mal de sus acciones.  Finalmente un día fue enviado con su comando a asaltar una aldea, aquel lugar le resultaba familiar aunque no sabia porque, durante la refriega sus hombres acabaron con los pocos habitantes que se ponian en su camino, hasta que una mujer mientras caia al suelo herida de muerte cruzo su mirada con él.   Algo cambio en el fondo de su ser y al instante supo que aquella mujer era su madre, la cual murio no sin antes avivar el fuego de humanidad que Alumine siempre habia llevado dentro.  Aquel día todo cambio empezo a negarse a cumplir las malvadas ordenes que se le encomendaban hasta que tuvo que huir cuando su propio comando fue enviado en su persecución...

Borro el signo de ejercito de su hombro y se oculto en las montañas, vagando de pueblo en pueblo con su lucha interna entre el bien y el mal.

Jugador: Garoom Kar

Nombre: Rosdil (Ammephôr)

Raza: Humano (Edain), Numenoreano Negro

Ocupación: Mercenario

Descripción física: Mido 1,95 metros, peso sobre 90 kilos (soy más bien esbelto, dentro de lo que cabe), tengo el pelo negro, relativamente corto y fosco, los ojos gris claro, cejas muy marcadas, labios finos y nariz aguileña. Sin cicatrices reseñables en zonas visibles, pero sí cinco latigazos cruzándome la espalda. Tengo actualmente barba sin arreglar, (menos poblada de lo que quisiera). Llevo ropa sencilla y bastante gastada pero de buena calidad: camisa, chaleco, chaqueta, calzas (especialmente buenas y gastadas, fueron fabricadas en mi tierra y llevan conmigo desde entonces), botas de media caña.

Descripción psicológica: Mi madre procedía de la estirpe de Pharadûr, uno de los primeros gobernadores de Umbar, y hemos conseguido mantener nuestra sangre en unos altos estándares de pureza. Por eso no aguanto a los corsarios, esa escoria advenediza. Y por eso me cuesta tolerar las impertinencias de aquellos que, pavoneándose como numenoreanos puros, todos sabemos que por sus venas corre la sangre de los pastores y las prostitutas haradrim. Son todos un hatajo de imbéciles decadentes, ciegos en su autosificiencia, y tarde o temprano lo pagarán. Los odio a todos. Pero tampoco me cae mejor esta gente del norte. Prefiero la soledad a compadrear con esta gente rústica y sin educación. ¿Si soy demasiado orgulloso? Es arrogante quien puede serlo; por capacidad y por herencia estoy destinado a ser su señor, no su igual. Pero algún día, igual que borraré la mácula que me recuerdan las cicatrices de mi espalda, conseguiré dejar atrás esta vida de penurias y humillaciones.

Historia: Nací en torno al 2989 T.E. en Umbar, la Perla de Sur. Mi madre era una de las concubinas de Ar-Sathôr, uno de los oligarcas de la ciudad, que sería rechazada debido a su embarazo, así que mi nacimiento no le trajo muy buena fortuna. Aún así, las rígidas leyes umbarianas me situaban como un bastardo de segunda que, aunque sin derecho alguno a cualquier heredad, debía ser educado y tratado con ciertos miramientos. Así que, si bien pude disfrutar de una vida bastante holgada en mi infancia y adolescencia, nunca sentí por mi tierra y mis congéneres más que un odio ciego y despechado. Cuando mi madre murió algunos se cansaron de mis arrebatos de prepotencia e insubordinación (injustificados, sin duda, dado que no había nada de lo que “prepotenciarse”) y me dieron un vergonzoso escarmiento en forma de azotes públicos (públicos dentro de lo que cabe; como bastardo de noble, sólo la aristocracia pudo ver el castigo, el máximo para mi rango, cinco latigazos). En cuanto me repuse, no tardé ni una semana en vender mis pocas posesiones para largarme. Me enrolé en un barco corsario que atacaba las costas de Anfalas; una tormenta nos hizo naufragar en Rast Vorn, donde conseguí ganar la costa. Desde entonces me gano la vida entre Eriador y Minas Tirith como contrabandista, soldado de fortuna, salteador ocasional… Aquí digo que me llamo Rosdil y que soy de Linhir, en el sur de Gondor.

He estado mirando el grupo y veo que le faltan sanadores, pícaros...ese tipo de cosas, solo veo guerreros y más guerreros (en sus diversas variantes) una lástima. Tenlo en cuenta para la creación de la historia.

Respecto a la última historia, podrías llevarlo si crees que estás preparado para jugar a dos bandas. El bien podría entrar porque quiere el Anillo Unico para obtener sus objetivos y estando en esta Compañía es la manera más fácil de acercarse al Portador. O bien puede estar a las órdenes de Sauron como espía. No se, puede ser interesante, aunque muy complicado de llevar sin cargarse la historia.

No me gustaría jugar a dos bandas, la última historia no me gusta. Prefiero algo clásico y más normalito

En esa caso no hay mas que hablar, eres el director principal y tu palabra es ley jeje. Por cierto, hasta el día 13 estaré ausente por exámenes, de modo que si quieres comentarme algo que no sea totalmente urgente espera hasta ese día.

Jugador: Avelino

Nombre: Narsed Blaquiazul
Raza: Hobbit
Ocupación: Explorador 
Descripción física: Una cara pícara que aparenta bondad pero tras la que se observa astucia y picaresca en su interior. Un tamaño normal-alto para Hobbit, complexión no tan robusta. 1'10cm. (La apariencia física aún no la he definido, sabes donde puedo encontrar una buena web para buscar imágenes?)

Historia: La vida de Nasred Blaquiazul se divide en dos partes completamente diferenciadas y que tienen un importante punto de inflexión.
Nasred es un joven Hobbit de una familia muy humilde, tan humilde que prácticamente malviven.
Su padre es un hombre demasiado despreocupado y holgazán, ya que recibió una gran herencia de su padre, el cual fue un gran comerciante con los enanos, humanos y hasta elfos. Pero desgraciadamente tras uno de sus viajes no volvió más (decían en las aldeas humanas que murió asaltado por orcos, otros dicen que fue traicionado y asesinado en Bree, otros dicen que abandonó a su malcriada familia para vivir con los elfos) La cuestión es que su hijo único, el padre de Nasred, heredó esa inmensa fortuna forjada por su padre y vivió siempre en la inmensidad y jamás tuvo que preocuparse como sus vecinos por labrar el campo o aprender a comerciar. Pronto conoció a una mujer que quiso aprovecharse de él y con la que tuvo bastantes hijos. Y más hijos aún de madres desconocidas que se acababan criando allí.
La mujer una vez vio que la fortuna se acababa, se marchó. La fortuna se marchó, pero los hijos no. Y el padre de Nasred, siendo un hombre completamente inútil, demasiado conseguía con mantener sus propias necesidades básicas y jamás se preocupó por sus hijos.
Lo único que recuerda Nasred de su infancia es de pasar mucha hambre y tener que buscarse la vida. No sabe exactamente cuantos hermanos/hermanastros tiene. Lo único que sabe es que él es el más pequeño, y que en su casa normalmente hay 7-10 Hobbits que podrían ser sus hermanos pero que tampoco se preocupan mucho por él. Todo el mundo en la región conoce a la familia Blaquiazul y los odia por su maldad y fechorías. Pero el paliar el hambre es más importante que caerle bien a tus vecinos, así que Nasred pronto aprendió a buscarse la vida como  sus hermanos mayores y la forma no era otra que ofrecer su servicio de guía a transeúntes de la zona que no conocían la región, pero para perderlos por el bosque y poder robarles a escondidas durante la noche (si eran demasiado peligrosos), asaltarles en alguna cueva (junto con sus hermanos, si no eran muy fuertes), o exigir un pago más grande por el rescate (si sus hermanos no acudían y ellos no eran muy peligrosos).
Evidentemente como simple Hobbit y para nada curtido en batallas, muy pocas veces tenía éxito y normalmente tenía que huir y simplemente sonsacaba una daga, una bolsa de dinero o siquiera un par de zapatillas. Multiples historias tiene este joven Nasred, probablemente para escribir un buen libro. Pero centrémonos en su punto de inflexión.
Uno de esos días, Nasred en su piedra preferida junto al famoso camino que atraviesa lugares tan conocidos como El Puente del Brandivino, El Último Puente o la famosa aldea de Bree, esperaba a posibles despistados transeúntes.
Ese día estaba sólo, pues sus hermanos mayores habían hecho un buen saqueo la semana anterior y aún se lo estaban gastando sin contar con él evidentemente. Pues a lo lejos observó a un solo hombre (le encantaba que fuera solo uno, ya que aunque el botín fuera menor, sabía por su experiencia que sus posibilidades de éxito siempre eran mayores). Se acercó a su víctima con su simpatía y amabilidad ya perfeccionadas, y ofreció sus servicios.
El hombre era una persona muy muy mayor, de pelo largo y blanco y rostro imberbe y sus ropas y pertenencias, parecían ser también muy antiguas pero que antaño fueron bastante valiosas, como su apariencia. El hombre aceptó de agrado su ofrecimiento y contrató sus servicios.
Nasred no sintió en ningún momento lástima o remordimiento por su alta edad, él ya había engañado a madres embarazadas, padres con niños muy jóvenes, incluso algúna persona ciega o sorda y sólo valoraba que así tendría menos problemas.
El hombre mostraba ser muy amable y atento, interesandose por la vida de Nasred, el cual, evidentemente tenía siempre 3-4 historias en la manga dependiendo de la víctima para formar un bonito y dulce personaje.
Pero en una de esas conversaciones, Nasred consiguió vislumbrar debajo de la ropa del anciano, en el cuello, un collar brutalmente bonito, que el hombre parecía ocultar. Eso hizo a Nasred volverse aún más minucioso en su ruta. Ese collar tenía que acabar en su poder como fuera, aunque tuviese que viajar 2 días por el bosque y ese hombre tuviera que morir por inanición. Empezó a desviarse de la ruta, y ante las costantes preguntas del anciano sobre los motivos de esos atajos, Nasred siempre tenía una excusa y un motivo preparado, pero le sorprendía que ese hombre se diese cuenta en todos sus falsos caminos.
El camino continuó hasta que fue de noche, pasaron la noche juntos en las que el hombre le contó muchas historias antiguas que solo se escuchaban en las canciones, pero aunque a Nasred poco le interesaban, se había acostumbrado a escuchar a sus víctimas para que bajaran la guardia, aunque lo que sobre todo le embelesaba era cuanto valdría ese collar.
Empezaron pronto en la mañana y Nasred continuó deslizandose por el bosque, hasta que algo le perturbó. Observó que en el suelo había huellas, y sabía de quien eran. Eran de sus hermanos, y debían estar cerca. Le entró el temor, si sus hermanos aparecían, no solo debería dividir el botín entre una decena sino que probablemente ni recibiera su parte. Así que apresuró la marcha y decidió improvisar un camino, el camino que nunca tomaba, ni tan siquiera sus hermanos, entrar al Bosque Viejo (sus hermanos lo hicieron una vez y 2 nunca más volvieron, los otros consiguieron salir con vida y nunca hablan de aquello, solo dicen "Nasred, nunca deberías entrar ahí, ni por cien monedas de oro")
Pero Nasred tenía demasiada necesidad. El hombre, antes de entrar se detuvo y le comentó que aquello podría ser peligroso, pero Nasred consiguió convencerle.
Tras varias horas allí dentro, deambulando sin saber a donde pero aparentando seguridad, Nasred solo deseaba que se hiciese de noche para asaltar al hombre y huir de ese sitio que tan mala energía transmitía.
Y la pesadilla comenzó! Al principio parecía como si los árboles susurraran, hasta que el hombre se paró y dijo "Jovencito, no se que le habrás hecho a este bosque, pero no parece desearte mucho, estate bien atento". Nasred palideció, y acto seguido empezaron a oirse los aullidos. Los lobos, el temor principal de Nasred, tantas veces había tenido que huir de ellos, pero por suerte nunca le habían conseguido dar caza. Y en medio de toda esa espesura y semioscuridad, el hombre sacó su espada, algo que sorprendió a Nasred porque la había tenido oculta todo este tiempo. Los lobos aparecieron al momento, eran 5, quizás 10. Nasred intentó subir a un árbol como bien sabía, pero rápidamente cayó, parecía como si el árbol le empujara al suelo. Y los lobos se avalanzaron sobre él, pero los aullidos cambiaron a gemidos, y las pisadas al golpe del metal. El anciano parecía un joven guerrero ante la perplejidad de Nasred que intentaba volver a subirse a otro árbol. Los lobos cambiaron de objetivo y fueron a atacar al anciano que se movía a una muy buena velocidad para su edad, su cara brillaba orgullosa y afrentaba a los lobos, 3 cadáveres había ya, y eso parecía no hacerles retroceder sino vengar a sus camaradas. Nasred volvió a caerse y volvió a ser objetivo de los animales, pero el hombre volvió a interponerse recibiendo dos grandes dentadas en la pierna como en la mano. Su grito fue aterrador, tan aterrador que hizo retroceder a varios lobos y conseguir que el hombre acabase con 2 de ellos de una tacada. "Maldita sea jovencito, subete a un árbol o acabaran comiéndote" gritaba el hombre mientras atravesó a otro lobo destrozandole toda su columna vertebral, pero con su arma inutilizada momentaneamente, recibió otro mordisco más en el brazo y un lobo más se unió al festín mordiéndole la pierna herida. Sacando fuerzas de la nada, el hombre pateó a ese último lobo escuchandose el crujir de su cráneo, y con una rama del suelo atravesó los ojos del lobo que mordía su brazo. Ambos cayeron y consiguió recuperar su espada. Los lobos retrocedieron mientras Nasred se escondía tras una gran roca y estaba armado con un palo y su pequeña daga.
De la oscuridad apareció un nuevo lobo que atacó por la espalda al hombre, directo al cuello.
A pesar de que Nasred nunca había pasado tanto miedo en su vida, y probablemente más por supervivencia propia que por compañerismo, salió de su roca y saltó junto al lobo rasgándole todos los músculos del cuello y patas traseras. El animal cayó al suelo y huyó arrastrándose.
Los lobos se habían marchado, y el hombre cayó al suelo.
Nasred estaba pálido y temblando, el cuerpo de ese hombre estaba completamente destrozado. Una pierna bastante destrozada, una mano sangraba tanto que no se podía apreciar si estaban todos sus dedos, otro brazo estaba en carne viva, y por el cuello emanaba bastante sangre.
"Maldita sea jovencito, porqué te he hecho caso. Maldita sea" Susurraba el hombre, ya que la voz no le salía. El hombre intentó levantarse y Nasred vio su oportunidad. El hombre estaba desarmado y herido de muerte, y él estaba intacto, mejor de lo que había planeado. Sin embargo, observó el rostro de ese hombre y descubrió la grandeza de esa raza. Ese hombre no era un humano, ese hombre era un elfo. Y se maravilló por un momento al verlo descubierto de todas apariencias. Nasred decidió que primero sacaría a ese hombre de allí, y ya luego le robaría. Así que le ayudó como pudo, con la capacidad que tiene un ser de 1'10cm de ayudar a un elfo que ha perdido la movilididad de una pierna y cuyo cuello sangra. Hasta que volvieron a escucharse más lobos.
Nasred se detuvo completamente, ya parecía reconocer el camino. Y el elfo, con un temple y aura sobrenatural, se levantó agarrando su espada mientras dijo "chico, veo que ya sabes el camino, marchate" Nasred titubeó, necesitaba ya ese collar, si se marchaba, lo perdería, si se quedaba, perdería su vida, si se marchaba, tendría su vida... así que mejor marcharse. Empezó a huir cuando volvió a escuchar los aullidos, y el elfo pareció recobrar sus fuerzas. Nasred tuvo que observar la escena. Nuevamente una horda de lobos apareció, él solo observaba sombras de cuadrúpedos volando, un bípedo que parecían tres, golpeando sin cesar, cree haber visto hasta un haz de luz, e incluso que algún árbol golpeó a algún lobo. Lo que si que no se cree es como pudo volver a recobrar valor y entrar allí, con su pequeña daga y su miedo inmenso. Entró a combatir junto al elfo. Los rugidos eran bestiales, los golpes eran atronadores. Todo acabó. 6 lobos descuartizados de un tamaño sorprendentemente grande logró contar al final de la batalla, y su daga no tenía ni rasgo de sangre, aunque si recuerda haber atizado un puñetazo a uno.
Sin embargo se observó a sí mismo con orgullo. Hasta que escuchó al elfo desplomarse al suelo.
Las heridas eran más grandes aún. El Hobbit sintió pena, el elfo parecía no estar triste ni sufrir. Agradeció el gran gesto del Hobbit de haberse mantenido con él y le pidió que le dejase solo, que huyese antes de que viniesen nuevamente más lobos, porque volverían. Nasred se sentía completamente culpable, así que intentó cargar con él, ante la sonrisa del elfo. Evidentemente no pudo avanzar más de un metro, pero no cesó en su empeño de sacar al anciano de ese lugar. Intentó empujarle, servirle de bastón, arrastrarle, pero era imposible. El elfo solo sonreía y le pedía que le dejase morir en paz.
El Hobbit lloró, y observando a los profundos ojos de ese elfo, tuvo que reconocerle sus verdaderos motivos, porqué lo había hecho, cual era su verdadero objetivo. El elfo solamente sonrió sin alterarse. "Joven, esas lágrimas demuestran tu arrepentimiento, que tu arrepentimiento sea tu camino, y tu camino sea glorioso. Coge pues aquello por lo que tanto luchaste y que te sirva para no olvidar tu pasado y para que no salgas de tu nuevo camino" Dijo el elfo mientras se quitaba el collar con la única mano que tenía y se lo entregaba al Hobbit  El Hobbit, cogió el collar ensangrentado con pena y casi con asco hacia sí mismo y se lo guardó en el bolsillo. Largo rato hablaron más hasta que nuevamente se oyeron los aullidos. "Y ahora chico hazme un único favor, y acaba con mi vida, no me gustaría morir mientras veo como me deboran esos animales" Nasred cogió la espada del elfo y sin saber muy bien que hacer, cerró sus ojos llenos de lágrimas y junto con la ayuda del elfo, acabó con su vida. Rápidamente se levantó y huyó de allí, dejando la espada, mientras le pareció escuchar que los árboles se movían tras él, e incluso la voz de una mujer.
Ese día fue su punto de inflexión.
A partir de ese día todo cambió. Abandonó esas rutas y se especializó en otras, para evitar enfrentarse a sus hermanos, los cuales le repudiaban. Y dejó de ser un ladrón, para ser un verdadero guía, arriesgando su vida hasta en dos ocasiones para ayudar de salteadores e incluso de un orco a varios hombres perdidos. Pronto fue reconocido por los hombres como un buen guía y tuvo clientes adinerados frecuentes, que se alegraban con su compañia y se dio cuenta que de esa manera podía hacer bastante más dinero, y pronto también intentó volver a su antigua ruta para enfrentarse a sus hermanos o por lo menos advertir a los peregrinos de las fechorías de esa banda. Eso le mantiene siempre en peligro, pero le hace sentirse mejor consigo mismo.

El pj de ainos va a ser un Valar.

Aprendiz de Gandalf.

Se fue a las Tierras Imperecederas y volvió hace poco y contacto con Gandalf que le pidió que llevase un grupo a hacer esta arriesgada pero importante misión