Partida Rol por web

Misterio en Compostela

Escena 3: Desaparición

Cargando editor
07/05/2010, 14:26
Alvaro

El chico sonrie a Silvia -Bien ... tranquila, lo último que me apetece esta noche es caerme con la moto, te lo aseguro ...- Alvaro pone entonces rumbo a su casa, que no queda demasiado lejos de allí, el paseo con la chica agarrada de la cintura lo tranquiliza bastante, incluso un par veces tiene tentaciones de besarla como lo hizo en el bar pero no se atreve, no sabe como tiene el ánimo y desde luego no quiere presionarla, la noche se había ido al garete con todo lo que había pasado.

Cuando por fin llegan a su destino Alvaro saca las llaves de su casa -Subo a por los cascos, ¿subes?-

Cargando editor
07/05/2010, 14:45
Silvia

El camino hacia casa de Alvaro, le sirve a Silvia para tranquilizarse un poco. La joven se siente a gusto con el muchacho. Pero el silencio se mantiene allí. Después de lo que acaban de vivir, Silvia no sabe de que pueden hablar...

Llegan a la puerta y Alvaro le dice de subir a por los cascos. Le invita a subir con él, cosa que Silvia agradece ya que no se atreve a quedarse sola en la calle.

Cuando éste abre la puerta, ella pasa por su lado, casi rozándole sin querer. Se detiene un momento y le mira. - Gracias Alvaro... Después de lo que ha ocurrido sé que no he sido muy buena compañía... Yo... - Por un momento se detiene, una sonrisa triste asoma a sus labios. - Tengo miedo, temo por lo que le haya podido ocurrir a Silvia.. - Termina diciendo bajando la mirada, una lágrima empieza a correr por su mejilla, resbalando hasta la comisura de sus labios.

Cargando editor
07/05/2010, 14:58
Alvaro

El chico se sorprende un poco por la reacción de Silvia -¿Por qué dices eso Silvia? Te aseguro que he estado muy bien contigo ... todos tenemos miedo y estamos preocupados ... pero lo que le ha pasado a Silvia y a Paula ha sido una putada,  no tienes ninguna culpa ¿Me oyes? la encontraran -sentenció sin estar ni siquiera convencido él -¿Vives con tus padres?- le pregunta intuyendo que por su edad seguramente sería que si - te diria que te quedaras a dormir aquí si quieres, pero te llevo a casa ...- No quería que la chica tuviera problemas con sus padres por él, Alvaro cogió los cascos y las cazadoras y le dió una a Silvia -Vamos- dice camino a la salida.

Cargando editor
07/05/2010, 15:08
Silvia


- Vivo con mi padre. -
Es la respuesta de la joven. Pero al nombrar a su progenitor una mueca de disgusto se dibuja en su rostro. No le soporta, y menos cuando éste va bebido. Silvia espera que al llegar a casa esté durmiendo. Normalmente es lo que ocurre, pero no sería la primera vez que lo pille despierto y recibe sus ostias...

Coge el casco que le tiende y se quita la cazadora que le dejó antes para devolvérsela. - Aquí tienes... - Le comenta con un suspiro. No tiene ganas de llegar a casa, pero tampoco se atreve a pedirle a Alvaro que la deje dormir aquí. ¿Qué pensaría de ella? Así que sin decir más sale junto al muchacho.

Cargando editor
10/05/2010, 09:05
Alvaro

En otras circunsatancias Alvaro habría actuado de manera muy diferente y ni siquiera hubiera preguntado, era el momento para darle un largo beso a la chica y llevarsela a la cama, pero con todo lo que había pasado y la preocupación por Silvia no era la noche y tampoco quería presionarla, ya había hecho todo lo que podía hacer ofreciendole quedarse a dormir, le hubiera gustado apretarse contra ella precisamente esa noche. Al final, Alvaro se decepciona al oir la respuesta a su pregunta, aunque ya la esperaba, con 17 años era muy probable que no pudiera pasar toda la noche fuera de casa, una verdadera faena. Resignado, salen de casa y se dirigen al garaje, donde espera la moto, Alvaro había pedido a uno de los vecinos un rincon que le sobraba, para que no "durmiera" afuera, esa moto era el bien más preciado del chico. Al encender el motor, un estruendo se extiende por todo el subterraneo, Alvaro ayuda a ponerse el casco a Silvia -Si se van a cabrear porque llegas a casa en moto puedo parar un poco antes, esto hace mucho ruido ...- dice elevando la voz por encima del sonido del motor.

Cargando editor
10/05/2010, 10:03
Silvia

El ruido que se extiende al encenderse la moto sobresalta a Silvia. La joven no se esperaba un estruendo tan fuerte, y el mismo bote que da le hace sonreir. Es una sonrisa triste la que asoma a sus labios, pero hacía rato que éstos se mantenían en una línea que endurecían sus facciones. Ahora, su rostro se suaviza.

Piensa la pregunta de Alvaro. Su padre en ese momento seguro que está cao, y da lo mismo que llegue en moto o andando. Así que se encoge de hombros mientras se sube tras el joven.

- No importa, mi padre no se enterará... - Le responde gritando un poco para poder ser oida a través del ruido del motor. - Aunque... ¿Antes de llevarme a casa, podríamos dar una vuelta con la moto? - Pregunta mordiéndose el labio. No tiene ganas de llegar a su casa. Sabe que cuando se quede sola, todo el horror que han vivido esa noche, la acompañará como si de un amante se tratara.

Cargando editor
10/05/2010, 10:38
Alvaro

El chico asiente con la cabeza - Tienes que agarrarte al deposito y desplazarte conmigo en las curvas, sin hacer fuerza, es facil, simplemente no hagas nada ...- le dice poniendole las manos donde las tiene que colocar para empezar a salir despacio del garaje con un rugido traquilo del motor. Solo unos segundos más tarde, al incorporarse a la avenida, Alvaro hace un gesto a Silvia para ver si se encuentra bien y ante la afirmación de la chica acelera bastante haciendo que el ruido motor suba una y otra vez al tiempo que cambia de marchas, hasta que coge una velocidad constante y curvea suavemente por la cuidad de Santiago sintiendo el fresco viento en todo el cuerpo.

Después de una larga vuelta Alvaro le pide a Silvia que le muestre el camino de su casa pues empieza a hacer frío, solo unos minutos más tarde llegan a su destino y el chico frena la moto, apagando el ruidoso motor, Alvaro se quita el casco -Espero que no hayas pasado mucho miedo ...- le dice recordando como en ocasiones ha notado como Silvia se apretaba contra él - Bueno Silvia - había llegado el momento de despedirse -Supongo que volveremos a vernos, mañana a primera hora iré al hospital a ver a Paula y a ver que se sabe de Silvia, ha sido una noche extraña, pero he estado muy bien contigo y me alegro de haberte incado el diente- acaba bromeando con lo que había ocurrido en el bar en el que trabajaba, en el fondo hubiera querido continuar con aquello pero después de lo que había pasado esa noche el chico no sabía como quedaría, probablemente todo hubiera sido un rollo fortuito fruto de la pasión del momento.

Cargando editor
10/05/2010, 11:05
Director

El frío empieza a hacer mella en vosotros. Las noches compostelanas de momento no han sido muy frías pero a partir de estas fechas empieza a hacer más frío (aunque no tanto como en Aragón).

Álvaro está sentado en su moto con el casco en la mano. Un brisa fresca mece su pelo y lo despeina, aunque eso ahora mismo le da igual.

Silvia baja de la moto y mira a Álvaro. Ha sido una noche muy intensa, realmente seguramente la peor noche de vuestras vidas. Nunca os habíais encontrado ante un suceso de esta índole y realmente ver como una amiga desaparece y otra está hospitalizada con pronóstico de momento desconocido. 

Tenéis ganas de que todo lo que sucedió sea parte de una pesadilla muy real pero sabéis que no es cierto. Lo que pasó es real y muy difícil de asimilar. Vuestras vidas puede que cambien a partir de ahora...

Cargando editor
10/05/2010, 11:12
Silvia

Un temblor empieza a recorrer el cuerpo de Silvia. Tiene frío pero agradece el aire cortante en la cara, le hace sentir más viva. Tiene ganas de gritar, de poder quitarse ese agujero que ahora mismo la come por dentro. Aunque el viaje es corto, y enseguida llegan a su barrio.

La joven baja de la moto y quitándose el casco se lo devuelve a su legítimo dueño. Mira hacia arriba, suspira aliviada al ver que la luz de su piso permanece apagada.

- Yo también iré mañana por la mañana al hospital... - Silvia vuelve nuevamente su atención al joven. Su mirada triste, se queda un momento prendida de los ojos verdes de Alvaro, una sonrisa tímida asoma a sus labios al hacer referencia el muchacho a lo ocurrido entre ellos. - Gracias por traerme... Normalmente voy sola, pero después de lo ocurrido... - Dice con la voz entrecortada. Siente el imperioso deseo de que Alvaro la coja en brazos, y le susurre palabras tranquilizadoras. Pero sabe que eso no ocurrirá... Es lo mismo, que había sentido siendo pequeña, cuando su padre la pegaba y su madre se quedaba mirando, en silencio... Nunca la abrazó.

- Bueno, mejor que suba... Hace frío y todavía tienes que llegar a tu casa... - Le dice finalmente bajando la mirada.

Cargando editor
10/05/2010, 11:40
Alvaro

La frase y la actitud de Silvia hacen que el chico reaccione con rápidez, casi por instinto. La pobre Silvia le da pena en esos momentos, su mejor amiga está en paradero desconocido y probablemente muerta, no sabe si tendrá a alguién en quién apoyarse en esos momentos -Quedate el casco, mañana a las 8:00 pasaré a buscarte y vamos juntos al hospital, pasaremos mejor el mal trago- le dice justo antes de darle un pequeño pero tierno beso en los labios -Hasta mañana ...- Alvaro se pone el casco y arranca de nuevo la moto, poniendose en marcha por las oscuras calles de Santiago ...

Cargando editor
10/05/2010, 11:49
Director

Os despedís cariñosamente, a pesar de todo lo sucedido quedaba algo de ternura en vosotros. Seguramente que os hayáis conocido sea lo que os haga superar mejor los terribles hechos de esta noche.

Álvaro enciende la moto y se aleja rápidamente por las calles de Santiago rumbo a su piso en el Ensanche. Silvia se queda con el casco en la mano y sube a su domicilio.

Ha sido una noche demasiado larga y ahora tendréis que recordar esos sucesos con la almohada si es que podéis llegar a cerrar los ojos y dormir un poco.

Notas de juego

¿Hacéis algo más al llegar a casa? Post en vuestra escena particular para proseguir allí.

Cargando editor
10/05/2010, 11:50
Silvia

¿Venirla a buscar? La joven asiente con la cabeza, manteniendo el casco abrazado contra su cuerpo. Alvaro le da un tierno beso y se va.

Silvia se queda de pie, viendo como se aleja la moto. No hace ningún ademán de entrar en casa hasta que deja de escuchar el motor de la moto. Siente su cuerpo completamente agarrotado después de la tensión a la que ha estado sujeto. Da media vuelta y finalmente entra en casa...