Partida Rol por web

Apenas logre dormir durante la noche al no poder parar de pensar en la prueba. Y ahora una cascada otra capilla es todo lo que veo. ¿Qué clase de prueba tendré allí dentro?

- Muy bien, estoy listo. Vamos. – respondo con firmeza al padre Lucio para luego seguir sus pasos al interior de de la capilla esculpida en piedra.
- Regreso enseguida – me despido de Adriana casi bromeando sobre el tema, aunque mi desconcierto es evidente no pienso retroceder.

Eilish, al ver a los dos hermanos, se quedó perpleja y enseguida se la vio algo a la defensiva: "ellos... no lo hubiese imaginado pero... están muertos..." pensó. Sin darse cuenta, relajó la postura y les miró con lástima: - ¿Qué quieren de mi? ¿Por qué es que me visitan desde la ultratumba? No hay ninguna cuenta que ajustar, ya que no es necesario. Si quieren causarme dolor, es innecesaria la molestia: el acabar con sus vidas fue muy doloroso... y lo sigue siendo.

Ella no mentía, en absoluto... el hecho de que todo había acabado así dolía, a pesar de que tanto Deimos como Phobos fuesen un peligro para la Humanidad y... no reconociesen al Señor...

El espectro ve como su brazo queda sujeto... trata de zafarse de ti... pero entonces se oye un crujido que corresponde a su cubito... 

Una vez roto su brazo con una rápida patada, consigue soltarse de tu presa...

- Hahahaha... ves... a la primera ocasión que has tenido para herirme lo has hecho... tus palabras no se sostienen... ya que tus actos demuestran lo contrario... - ves que su brazo se recubre de unas sombras y parece regenerarse... Tu sombra mueve el brazo como regodeandose...

- Tendrás que hacerlo mejor Caín... - tu sombra empieza a expandir su cosmos preparándose para el combate...

- Bueno... siempre puedo forzar el cambio... apoderándome de tu alma por la fuerza... pero la cuestión es... ¿estás preparado para hacerte frente a ti mismo...? - tu sombra sonreía con mezquindad... recordándote en algo a tu hermano...

Tu espectro empieza a elevar su cosmos de forma exponencial... - ¡Vamos Neithan! Demuéstrame esa determinación... si es de verdad tuya o solo sigues los pasos de tu difunto padre como un niño desvalido... - brama con fuerza mientras se dispone para atacar...

Adriana afirma con la cabeza y deja que avances solo hacia la capilla junto al padre Lucio...

Una vez allí el sacerdote te señala una puerta que se encuentra tras el altar...

- A partir de aquí debes avanzar solo... - dice con determinación mientras te ve partir hacia la puerta...

Una vez atraviesas la puerta... te encuentras en lo que parece una gruta... hasta arriba de humedad, debido a la cascada, y que parece serpentear hasta casi donde no alcanza la vista... suerte que el Padre Lucio te prestó una antorcha, ya que había estalactitas y estalagmitas en algunas caidas en las que podrías empalarte...

Según te vas adentrando en la cueva... empiezas a sentir un cosmos sutil...

No te hubiera lastima, si hubieras mantenido una distancia respetuosa. Vos provocaste eso, y lo hiciste solo para jactarte que podes regenerarte.

Incremento mi cosmo, viendo que ya la pelea era inevitable. El otro cosmo ya se sentia agresivo.

Invoco la armadura, esperando sentir su frio tacto. Necesitaria su protección.

- ¿Sí? Demuéstralo entonces... sacríficate por nosotros... si tu mueres aquí a nuestras manos... nuestras almas volverán... ¿No es así como funciona en vuestra Fe? No debería resultarte difícil... - dice con una sonrisa mezquina a la vez que siniestra a la vez que su cosmos empieza a elevarse hasta límites insospechados...

Las ruinas empiezan a temblar con el cosmos concentrado en el lugar...

​- Tu no eres más que una sombra  retorcida de lo que yo soy...No tienes ningún poder sobre mi.
Le  respondo, mientras a mi mente viene el recuerdo de la primer batalla contra mi hermano, donde me  opuse a dejarle definitivamente sin vida. Pense entonces, que esta criatura que estaba frente a mi podia ser lo que me hubiera convertido si acababa con mi hermano aquella ocasión.
​No lo había hecho y mi rumbo me había  guiado hacia la senda del altísimo, donde había aprendido cual era mi verdadero propósito y entendí la importancia de la misericordia.
​Senti su cosmo arder mientras pensaba todo aquello y entendí que el momento de platicar había acabado, no temia enfrentar a aquella aberración. Aunque  temia en lo profundo que mi poder no fuera nada comparado con lo de aquella figura corrompida de mi mismo.
​Comence a elevar mi cosmos y prepare mi técnica para defenderme de su ataque, necesitaba ver exactamente a que me enfrentaba antes de arriesgarme en un ataque el todo por el todo. UNas alas doradas brotan de mi espalda y se extienden abrazandome entonces al alcanzar todo mi esplendor se cierran en torno a mi cubriéndome por completo.
- Escudo del Angel

Agradezco por momentos la antorcha y su beneficio inherente porque de lo contrario podría resultar herido o incluso peor. El sitio es un poco espeluznante por la humedad y la oscuridad, además la sensación a encierro comienza a molestar.

A medida que avanzo, a paso de tortuga por cierto, descubro un tenue cosmos que no consigo ubicar. ¿Quién o qué será? Me pregunto inquieto.

Detengo mis pasos para poder concentrarme y saber más sobre esta energía que llega hasta mí…

Al oir aquella respuesta por parte de Deimos, Eilish no pudo evitar sentir frustración: no entendían nada, solamente querían la venganza... La espada de la chica se alzó señalando a ambos hermanos, y ella dijo con su habitual voz dulce: - Vuestras almas no volverán nunca salvo milagro del Señor, es la Ley. Y ni ustedes ni yo la decidimos. Por favor, no se rebelen más. Se lo ruego por su propio bien... y por el nuestro.

Cuando dijo esto, Eilish pensó en sus compañeros, en su familia, en todas las personas del Vaticano, en Andrónicos y Maëlys... y por último en el confiado Fonseca. Todos ellos merecían la paz y tranquilidad que, entre otros, Deimos y Phobos les habían arrebatado varias veces. Y aun así, Eilish no sentía rencor hacia ellos, sino lástima. Todo aquello era una tragedia. Y tenía que terminar, pues así era necesario. Las perdidas almas de Deimos y Phobos debían volver a su merecido sitio, fuese el que fuese, y alimentarse de los rezos de quienes se apiadasen de ellos.

Tu espectro se lanza a atacarte... pero ves sus movimientos venir y te adelantas a él con suma facilidad. Tu armadura te envuelve a una velocidad vertiginosa al mismo tiempo que lanzas una fuerte patada sobre tu doble oscuro... pero con un ágil movimiento de brazo, para tu patada en medio de su trayectoria... 

- No puedes ganar Caín... represento a todo lo que te da fuerzas para pelear... ¡tendrás que encontrar algo o de lo contrario te consumiré! -  Tu yo oscuro lanza una serie de puñetazos a la velocidad de la luz, pero eres capaz de contenerlos todos sin recibir daños...

Tu retorcida sombra avanza hacia ti riendo a carcajadas... Mientras tu Escudo Del Ángel te envuelve, pero no consigue detener el ataque de tu oscuro yo, que concentra todo su cosmos en su puño para golpear tu pecho... desprendiendo dos haces de luz negra que forman una cruz macabra, hiriéndote...

- Siempre fuiste débil Neithan... por eso no pudiste seguir a tus compañeros en su batalla contra Poseidón... y los cielos necesitaron revivirte... pero en realidad no sirves para el papel que se te ha encomendado... Malekith siempre fue mejor... ríndete y juntos seremos dioses... - el espectro trataba de tentarte mientras hincabas una rodilla en el suelo debido a la herida sufrida...

Te aproximas lentamente al final de la cueva, hasta un punto abierto, en el que parece que las formaciones de cristal, agua y unos pocos rayos de luz que entran a través de una pequeñas grietas se combinan para dar una luz casi mística al lugar...

Una vez allí empiezas a reconocer el cosmos de aquel que te espera...

- Has tardado pequeño... ¿acaso te da miedo la oscuridad?... - la voz femenina que te increpaba era perfectamente reconocible, la de aquella que convirtió a todos tus seres queridos en cerdos...

- Quizás no siga con vida... pero se me ha concedido una segunda oportunidad para cumplir los deseos de mi señor Dionisio...

Su ataque era mucho más poderoso que mi defensa, sorprendido caigo de rodillas sacudido por el dolor y le miro mientras me escupe esas palabras como dardos que intentan socavar mi voluntad. Comienzo a acumular mi cosmo energía para preparar mi ataque máximo mientras le respondo.

- Morí en el templo ofreciéndole la misericordia del perdón a mi hermano. Por eso el Altísimo me ha revivido, mi fortaleza no es la del ególatra que cree tener todo el poder en sus manos para hacer a su antojo, mi fuerza es la del alma humilde que conoce sus fallos y entrega todo para hacer un mundo mejor - Le digo mientras me pongo de pie y lo miro de frente, no temía a aquella sombra de existencia, y si el mismo fuera mi hermano tampoco le temería. Era el momento de ponerle fin al reino de los poderosos, se acabaría la opresión de los dioses sobre loa mortales con sus abusos y caprichos. Quienes se opusieran serian derrotados por el bien de toda la humanidad.

- ¡¡Blasfemias!! no representas nada para mi.

Digo asentando mis pies en el suelo, para generar la máxima tracción y atacar. Este golpe sera demoledor y abrira su defensa para poder acabar con este impostor.

El cosmo se empieza a arremolinar en mi puño, generando un capullo de energia vibrante. Mi postura es clara, era la necesaria para ejecutar el "golpe resontante", pero incluso asi, llegara a detenerme. Mi cosmo aumenta junto con mi confianza.

- ¡Eres una pecadora! ¡Como todos los demás humanos! Habéis cometido el peor de los pecados, alzar vuestra mano contra nosotros... ¡así que seremos nosotros quienes cumplamos la sentencia que mereces! - brama Deimos mientras su cosmos empieza a elevarse... será un fantasma... pero su poder es muy real...

- En los anteriores combates siempre has tenido a tus compañeros o maestros... ¿quién te ayudará ahora Eilish?... - sonreía maliciosamente Phobos mientras su cosmos también se elevaba...

Blasfemisa!! no respresentas nada para mi.