-Me intrigan tanto como a ti...por favor tuteame. Y si claro que puedes preguntarme.-
Le dejo abrazarme, hasta me dejo caer levemente hacia él acariciando sus manos.
- ¿Sabes que le pasa con Jon? Creo que es desde lo que ocurrió en Invernalia pero...
¿En Invernalia? ¿Cuando había estado tu hermana allí con Jon?
-¿Mi hermana ha estado en Invernalia? Debió ser cuando me quedé sola en el castillo, con el maestre. Se fueron todos, no recuerdo a qué, yo estaba en cama con fiebres, pero tenian que irse.-
-Podría averiguarlo o intentarlo al menos. ¿Podeis decirme algo de Jon? Quiero decir, si él...siente algo por mi hermana.-
Niega
- No, lo creo... Jon es muy... suyo - resume - tu padre trajo a tu hermana a Invernalia, para proponer nuestra unión...
No dice nada más, quizá esperando tu reacción
-No me extraña. Mi hermana es hermosa...y tú un gran partido. Pero no salió bien ¿no? nunca me lo habían comentado...-
Menos mal que eso fue en el pasado...sino estaría...¿enfadada? si...posiblemente.
Aunque...
-Oh...si Lord Eddard rechazó a la hija mayor de mi padre....-
No sigo, lo dejo en el aire..."jamás aceptará a la menor"
- Lo cierto es que la rechacé yo... aunque... sospecho que culpa a Jon. Nos encontró hablando juntos poco antes de la negativa.
-¿Y tuvo algo que ver Jon?- pregunto curiosa.
-¿Tendré que convencerlo para que me acepte?-
Tras unos momentos añado:
-¿Y por qué la rechazastes? Es muy hermosa.-
Rie
- No, Jon y yo hablamos de otras cosas...
Se toma un momento para contestar
- No era lo que ninguno de los dos queríamos, su mirada decía cosas muy distintas a sus palabras... y, lo cierto es que... tampoco despertó mi interés.
Besa tu cuello
- ¿Que habría sido de mi prometido a la hermana de la mujer a la que amo?
Eso me hace sonreir, y soltar una pequeña risita por las cosquilals del beso.
-Quizá las cosas habrían sido distintas. Pero no lo son, y me alegro.-
Unos momentos de silencio.
-¿Te gusta mi lugar secreto entonces?-
- No se parece a mi idea de lugar favorito pero...
Vuelve a besar tu cuello
- ...tienes un magnifica habilidad para mantenerte en tu lugar en todo momento... - deja caer
-¿Qué quieres decir con eso? ¿debo tomarmelo bien o mal?-
Rio, inclinando el cuello un poco más invitándole a que siga. Es un gesto inconsciente...por que es agradable lo que hace.
- Era solo un comentario... - defiende
Continua con los besos en el cuello, una mano sigue rodeándote a la altura de la cintura y la otra retira ligeramente tu vestido del hombro derecho encaminándose los besos hacia allí
Me muerdo el labio...no quiero pero...
-Robb...deberías parar...no estoy preparada para...para..más.- susurro timidamente sonrrojada.
- Dime que no quieres... dime que no lo deseas... y pararé. Pero... ¿no estar preparada?
Notas su calido aliento regresando hacia tu cuello mientras te susurra
- ¿A que le tienes miedo?
-A quedarme encinta sin estar casada.- mi voz es un hilillo -¿Qué sería del pequeño o la pequeña? No quiero...no quiero la posibilidad de traer al mundo un hijo o una hija en esa situación.-
Me giro y lo miro. Mis mejillas están arreboladas y se ve el...deseo en mis ojos. Sin embargo, le pido que pare.
-Seamos pacientes Robb...por favor...me odiaré a mi misma si eso pasa ahora aunque...aunque lo deseo.-
Lo atraigo a un beso intenso.
- Si lo deseas realmente hay de sobras métodos para que alejar tus temores... - sugiere
Corresponde con pasión el beso, haciéndote retroceder hacia la pared, aunque sin ademán alguno de retirarte la ropa por ahora.
-No hay tantos.- jadeo -y no siempre funcionan- jadeo, sigo besando -y no son fáciles de conseguir.- enrredo mis manos en su pelo.
- Si funcionan, claro que funcionan... cualquier maestre los tendría a su disposición...
Terminas finalmente contra la pared, su cuerpo contra el tuyo. Pasa las manos por tus pechos, aún sin retirarte una sola pieza de ropa.
-Cualquier maestre...si...pero no yo. No es momento de distraer al maestre...no con mi padre así. Robb por favor para...-
Sabe que estoy vencida. Si no para...seguiremos.
-Por favor....no es el momento.-
- Yo podría ocuparme de haceroslo llegar... - ofrece - nadie sabría nada...
Sus besos vuelven a tu cuello y sus caricias buscan tu cintura