Partida Rol por web

Me separo de Robb. No de golpe ni precipitadamente, sería absurdo. Pero lo hago...si no me voy ahora volveré a besarlo y no sé si eso le molestaría, delante de Nieve.

Sin embargo mi mano tarda algo más en separarse de su rostro.

-Adios...hasta pronto, mi señor.-

Saludo a Jon Nieve con un gesto de la cabeza antes de salir. añado unas ultimas palabras.

-Si necesitan de algo antes de partir, no duden en buscarme.-

Te sigue con la mirada al salir y termina entrando y cerrando a sus espaldas. 

Posiblemente sin terminar de tener claro que ha interrumpido. 

Regreso con mi madre. Ahora...quiero estar con ella. Necesito a mi madre. Quiero volver a ser una niña por un rato.

Sin embargo por el camino...acabo deteniendome. No quiero ver a Robert, ni a Sigrir...Pero quiero estar con alguien ahora...acabo yendome a la torre de Daemon. allí no me buscaran. Busco al Maestre.

Cuando llegas lo ves soltando un cuervo, se percata de tu presencia en cuanto abres, esa puerta nunca fue la más discreta de la fortaleza. 

- Lady Shana, ¿en que puedo serviros?

-Mi padre ha muerto. En circunstancias...extrañas, al menos. Al mismo tiempo creo que me estoy...enamorando, Daemon. y todo pasa al mismo tiempo que descubro que soy bastarda. lo cual seben muy pocos...aunque eso, estoy segura, te incluye. Y espero que eso no tenga relacion con mi padre y su...muerte. O con vosotros...no quiero saberlo...os odiaria y no quiero.-

-Pero estoy confusa...quiero acurrucarme con mi madre...pero no quiero ver a nadie más. La casa se está derrumbando, Daemon, y no sé que hacer.-

Se te acerca

- Lady Shana, sois hija de vuestra madre y eso es cuanto importa. Haría cuanto estuviera en mi mano por protegeros - ¿como debías interpretar eso? - y por confortaros, bien lo sabéis. 

Desvía por un momento la mirada hacia los cuervos

- Debéis ser fuertes, los Kendrik se acercan y algunos de los hombres que acompañaban al rey se estan adentrando en tierras Howlingwolf. No tardarán más de una semana en llegar y vuestro padre debe estar enterrado para entonces, las muestras de debilidad no serán buenas. 

-¿Qué quieren los Kendrik? ¿Y los hombres que acompañan al rey? ¿Por qué vienen ahora?-

Le pregunto, deseosa de distraer mi mente.

- Me temo que tendremos que esperar a su llegada para averiguarlo

-¿Vienen sin anunciar su motivo? ¿Eso no es inusual?-

Lo miro intrigada.

Asiente

- Quizá se deba a algun problema con los cuervos, son pocos hombres, no son una amenaza.

-Bueno....hablemos de otras cosas.-

-Sobre el torneo. Ahora tiene un motivo más, aunciar que Robert es Lord Howlingwolf. Habrá que montar gradas para los espectadores. ¿Hay alguna estructura que se pueda desmontar? Por ejemplo un almacén que no se use, pero en buen estado, o algo parecido, así no habrá que comprar ni cortar madera.-

- Me temo que al pueblo le disgustaría la idea de que tiraramos abajo un almacén... mi señora. Si se celebra un torneo no deberíamos escatimar en gastos, si se diera la presencia de algun caballero adinerado se podría ofrecer quizá su entrada a la casa tras el pago adecuado para amortizarlo ganando además así una espada más a nuestro servicio. 

-No entiendo del todo lo que me quieres decir ¿Un caballero debe pagar para entrar a nuestro servicio?-

Lo miro confusa, siempre he pensado que eso era un honor que se concedía.