La chica asintió sin comentar nada más. Lo bueno que tenía Haruka es que su timidez le había enseñado a no molestar a los demás con preguntas incómodas y ya había hecho suficientes. En ese momento Momoshiro hizo un llamamiento a todos:
Momoshiro:- ¡¡NE!! ¡¡NE!! ¡Foto grupal y nos vamos a casa! ¡Acercaos todos!
La cámara ya estaba en el trípode preparada y la mayoría se arremolinaron para salir en la foto. Renji y Momoshiro sonriendo ampliamente, Hayane con un pulgar hacia arriba, las chicas del teatro juntas cada una con una pierna levantada levemente, Mei en el centro, de rodillas para salir, sonriendo muy levemente, Tachibana estaba a un extremo, de brazos cruzados, Otoya tenía un hueco esperando a Yukino y se preparaba el pelo para tenerlo como le gustaba.
Había llegado el momento de la foto; ya estaba todo recogido y todos estaban bastante cansados pero satisfechos. Aún no sabían quién era el ganador pero estaba claro que ellos habrían acabado en buen lugar, con total seguridad. Yukino se acercó a Otoya, que le guardaba sitio, y le dio un suave codazo en las costillas como gesto amistoso antes de sonreír para la foto, aún vestida de maid.
- ¡Decid "amo"!
TODOS: - ¡AMO!
El flash les cegó momentáneamente y todos quedaron congelados con la boca en forma de "O" hasta que la foto se hubo hecho. Después todos aplaudieron. Había sido un día genial y todavía no había acabado. Una vez se cambiaron de ropa quedaron para ir a la bolera como despedida de un gran día del festival en el colegio.
Cuando Yukino se reencontró con sus compañeros vio que no estaba toda la clase sino los que mejor se llevaban. Otoya, Hayane, Mei, Haruka, Momoshiro y Renji. Se dividieron en equipos de tres y de dos. A Yukino le tocó con Haruka y Momoshiro como equipo.
Otoya era el rey de los bolos al parecer aunque Momoshiro no se quedaba atrás. Iban muy empatados. Justo cuando terminaba Otoya, le tocaba a Yukino:
Otoya:- ¡Supera esa!
Motivo: O, H, M, MO, R, HA, Y
Tirada: 1d10
Resultado: 9
Motivo: O, H, M, MO, R, HA, Y
Tirada: 1d10
Resultado: 8
Motivo: O, H, M, MO, R, HA, Y
Tirada: 1d10
Resultado: 9
Motivo: O, H, M, MO, R, HA, Y
Tirada: 1d10
Resultado: 8
Motivo: O, H, M, MO, R, HA, Y
Tirada: 1d10
Resultado: 1
Motivo: otoya
Tirada: 1d10
Resultado: 4
Motivo: otoya
Tirada: 1d10
Resultado: 6
Ignora las tiradas XDD
Tira 1d10 y será el número de bolos que tires. Como son dos lanzamientos, tira otro d10 si no haces pleno.
Otoya ha conseguido 4 en la primera y otros 6 en la segunda por lo que ha terminado de hacer el pleno ^^
Tras la foto habían decidido acabar el día en la bolera, algo a lo que Yukino era realmente mala. De algún modo no tenía fuerza y la bola acostumbraba a rodar por la pista con total lentitud hasta que se iba hacia los lados. Las pocas veces que iba a jugar con su hermano Kotaro este siempre se reía de ella poniéndole las barreras para niños de modo que no se le fuera. Por eso, aunque los bolos no le gustaran mucho, siempre se lo pasaba muy bien riéndose de su propia patosidad.
- Estás hablando con la reina de los bolos, Otoya-kun, prepárate - entrecerró los ojos, divertida, antes de lanzar. La bola se deslizó lentamente por la pista, más despacio imposible, hasta que, milagrosamente, tiró nueve bolos. Se dio un hartón de reír -. No me lo puedo creer. ¿A que tiro el que queda?
Motivo: no pifia
Tirada: 1d10
Resultado: 9
Motivo: no pifia2
Tirada: 1d10
Resultado: 2
Los compañeros de equipo soltaron exclamaciones ante la gran tirada de la chica, llegando incluso a aplaudir mientras Otoya no podía más que cruzarse de brazos, incrédulo por completo:
- Venga, ya. No me lo puedo creer. ¡Pero si eso no era ni un tiro!- bromeaba siempre sonriendo.- Adelante. Intenta tirar el que queda. Si lo consigues... ¡hasta eliges tú el premio!
Ahora los amigos decían "¡uuuh...! ¡Un premio! ¡Aprovecha!" y después se echaban a reír, divertidos.
1d2 XD. 1 lo tiras. 2 no Xd.
- Ne, Otoya-kun, qué mal te queda la envidia... -estaba de demasiado buen humor y no podía dejar de gastar bromas, riéndose. Alzó la bola y puso cara de concentración hasta que finalmente se puso en cuclillas y le dio un suave toque diciendo un "¡corre!". La bola empezó a rodar con suma lentitud mientras Yukino hacía gestos como si pretendiera orientarla. Y entonces...¡el bolo cayó! -. ¡Sí! - dio un salto en el aire antes de ir a chocar las manos con Haruka y Momoshiro -. ¿De qué premio estamos hablando?
Motivo: un unoooooo
Tirada: 1d2
Resultado: 1
Esa fue la cara que se le quedó después de observar la lentitud aquella bola que incluso sería adelantada por una tortuga y que finalmente se estrelló contra el bolo, tirándolo. Los compañeros de Yukino se reían y le chocaban la mano super contentos porque con ese último lanzamiento se habían puesto en cabeza. Mientras, el otro equipo suspiraba por la pérdida de puntos.
Otoya terminó por inclinarse ante Yukino como había estado haciendo toda aquella tarde como mayordomo:
- De lo que quiera mi ama.
¡No seas mala Yukino-san!
A Yukino no se le daba demasiado bien eso de dar ordenes así que cuando se puso pensativa no era un gesto pretendido, era cierto. No tenía ni idea de qué ordenarle, no quería hacerle nada humillante ni malo así que no tenía ni idea de lo que podía pedirle. Estuvo tentada de decirle que sacara a pasear a Kiri-chan aquella noche, que ella estaba cansada, pero eso sería muy desconsiderado pues Otoya estaba aún más agotado que ella.
- Mmmmm....creo que me conformaré con que vayas a pedir a la barra un gofre de chocolate para mí.
-¡Oh! ¡Qué buena idea! Yo quiero otro, Ittoki-kun.
Hayane:- ¡Yo también!
Mei:- No estaría mal...
Renji:- ¡El equipo de los gofres!
Haruka:- ...
Casi llorando por tener que hacer de camarero y posiblemente teniendo que gastarse algo de dinero, aceptó la orden y con un "Hai, ama" se marchó. Justo en ese momento el móvil de Yukino empezó a sonar. Al momento Hayane se colocó detrás de su hombro:
Hayane:- ¡¿Quién es?!
Mei:- Oi, ¡Hayane!
En el móvil aparecía el número de Fukiyose.
Levantó una mano en señal de disculpa, pues no esperaba que todo el mundo se apuntara a aquella petición aunque debía suponer que el chocolate bien calentito y algo de comer era algo que les apetecía a todos. En aquel momento el móvil la sorprendió con una llamada, haciendo que se sonrojara un poco al pensar que sería Tezuka.
Pero cuál fue su sorpresa cuando vio el nombre de Fukiyose en la pantalla del identificador de llamada. Supo que debería sentirse aliviada pues no se sentía demasiado dispuesta a explicarle confidencias con Tezuka a Hayane.
- Oi, ¿la capitana? - musitó para sí con extrañeza antes de descolgar y llevarse el móvil a la oreja -. ¿Moshi, moshi? ¿Fukiyose-sempai?
Momoshiro fue el que más atento estuvo a la conversación al saber que era la capitana quien llamaba a Yukino. Mientras, Haruka intentaba cargar con la bola porque era su turno.
Fukiyose:- ¡Kazehaya-san! ¿Qué tal? Oye, ¿te apetece venir este sábado a mi casa? Sakura también vendrá.
Mientras, Hayane miraba su móvil, al parecer también tenía una llamada y por su comentario se podía saber quien era:
Hayane:- ¿Oni-chan?
Lo de hablar por teléfono con público no acababa de convencerle pero tampoco podía hacer mucho. Por otra banda, la invitación de Fukiyose le hacía ilusión, así conocería más a Sakura.
- Pues... - en aquel momento las palabras de Hayane la distrajeron. Estaba hablando con Tezuka... no pudo evitar sonreír al pensarlo, como si de alguna manera estuvieran cerca -... claro, me parece genial, le preguntaré a mi padre pero no creo que me diga nada. ¿Quieres que traiga algo? ¿Cuál es el plan?
La pausa de Fukiyose se debió a que había sonreído satisfecha por la aceptación de Yukino. Momentos después respondería con lo primero que se le ocurriría:
- No sé. Tomar algo, charlar. Tengo piscina y últimamente hace bueno... Si quieres puedes invitar a alguien más.
De fondo Hayane discutía con su hermano:
Hayane:- ¿Que por qué quieres que te la pase? Pues si no me lo dices no lo haré y... ¡Hola! ¡Has colgado!- aunque había colgado, Hayane seguía gritándole al móvil.- ¡Eres odioso oni-chan! Me llamas solo para cosas que no quieres contarme y encima ya...
Mei:- ¿Tezuka-nii?- ahora era Mei la que cogía el teléfono.
- ¿Sí? No sé, lo pensaré - la verdad es que el nombre que tenía en su cabeza era obvio pero no estaba segura de que fuera muy apropiado invitar a Tezuka a un día de chicas. Entonces Hayane se puso prácticamente a gritar, haciendo que se llevara una mano a la oreja libre en un gesto de dolor -. Ne, Fukiyose-sempai, hablamos en otro momento que Hayane-chan está gritando y no te escucho nada...Hasta el sábado - cerró la tapa del teléfono para encontrarse que ahora era Mei la que hablaba con su hermano. Miró a Hayane con perplejidad -. ¿Qué pasa?
La capitana aceptó la despedida, contenta por la respuesta de su amiga y colgaron. Entonces Mei se apartó un momento el teléfono de la oreja para mirar a Yukino y dirigirse a ella con la misma actitud de siempre:
- Tezuka-nii me llamaba para ver si nos venía a buscar de parte de mis padres, pero... me ha preguntado de paso que si quieres ponerte un rato.
Otoya ya llegaba con los gofres. Seguía llorando por el dinero que se había tenido que gastar, pero él ya se había comido uno de los dos suyos por el camino.
No sabía que esperaba que quisiera Tezuka de sus hermanas pero lo que estaba claro es que no entraba en sus expectativas el que preguntara por ella. Se sonrojó un poco, pensando en que cuando le había dicho que la llamaría no había esperado que fuera a través de sus hermanas. Aquello generaría un montón de preguntas, sería muy incómodo, mucho, muchísimo. Sólo pensarlo sentía como las mejillas le ardían con más fuerza.
Aún así, lo cierto es que tenía ganas de hablar con él así que asintió enérgicamente y cogió el teléfono que le tenía Mei con las dos manos, llevándoselo a la oreja.
- ¿Kunimitsu-sempai?
Lo cierto es que aunque le pasó el teléfono no hizo amago ninguno de moverse del sitio para dejarle más intimidad. Aunque Hayane fuera más ruidosa y directa, Mei también tenía sus intrigas y preguntas. Sea como fuere en cuanto Yukino se puso al teléfono, Tezuka respondió:
- ¿Vas a ir sola a casa? ¿Necesitas que te acompañe?
Se sentía demasiado observada. Las manos le sudaban por los nervios y tuvo que limpiarse una de ellas con discreción en la falda, incómoda ante tanta mirada y expectativa. Casi todos se habían quedado callados a su alrededor y aquello era mucho peor pues habían abandonado todo disimulo.
- No, me iré con Otoya-kun - le dirigió una mirada interrogativa a Otoya con el fin de confirmarlo, que acababa de llegar con los gofres -. Vivimos cerca el uno del otro. Pe-pero...gracias - esto último lo dijo en un susurro mientras su sonrojo iba en aumento y su rostro empezaba a mostrar agobio. ¿Por qué no dejaban de mirarla? Aquello era incómodo.
Otoya asintió vehementemente ante su nombramiento. Haruka, de solo imaginarse en la posición de Yukino, se empezó a poner colorada y bajó la cabeza para mirarse las uñas de las manos.
Tezuka:- Vale. Luego te llamo y...
Pero la mano rápida de Hayane robó el teléfono y se puso a discutir de nuevo con su hermano por haberle colgado hacía unos momentos. Mientras esto ocurría, Momoshiro tragaba su gofre con ansia mientras que Mei simplemente tenía el suyo en la mano:
Mei:- ¿Qué quería Tezuka-nii?
Hayane:- ¡OH, NII-SAN! ¡Eres un #¬€~@#%|@##~##@#****!
Se quedó con las ganas de saber qué iba a añadir Tezuka porque de repente el teléfono voló de entre sus manos al cogerlo Hayane, disgustada, que enseguida empezó a reñir nuevamente a su hermano. Podía ver que la relación entre ellos dos era cuando menos acalorada, así que se calló la réplica que iba a hacer y se limitó a decir un "adiós" al aire, un tanto aliviada.
Pero no debería haberse relajado tan rápido porque la mayoría de las miradas seguían clavadas en ella y Mei, aunque parecía discreta, quería una respuesta. Comprendía su curiosidad, incluso sus sospechas, pero eso no lo hacía más llevadero.
- Ah...saber si hacía falta que me acompañara a casa a mí también, pero le he dicho que me iba con Otoya-kun - le dirigió una sonrisa un tanto azorada a éste.