Galería Umbriana

Subida por thewalking.miguel

Hora de subida: 15:46

¿No parece gran cosa, verdad? Pues para la familia el juego del virus es muy importante. He jugado a juegos más divertidos, más emocionantes, más de todo, pero si me tuviera que llevar tres juegos a una isla desierta, y en esa estuvieran mis hijos, uno de ellos sería el virus

#Modo_Emotivo_ON

Algunos de vosotros sabéis, aunque no es un secreto, que mis dos hijos tienen un grado leve de TEA (autismo). Correría el 2016, nos había caído el diagnóstico de mi hijo mayor y como todo padre pues te ves un poco superado. Tú le ves que bueno, igual no es todo lo sociable del mundo, o igual cuando intenta sociabilizar no parece que le salga muy bien, pero.... vamos, que no lo aceptas, así que, una vez con el diagnóstico en el hocico nos fuimos a pedir ayuda. Y ahí entra Ana y Educa y Orienta ( y pongo a dios por testigo que no me hace rebaja), donde nos enseñaron el poder terapéutico de los juegos de mesa.

Bajo su enfoque, los juegos de mesa ayudan mucho a fortalecer las zonas de su cerebro que digamos están menos entrenadas: Gestión de la frustración, Fortalecimiento de la capacidad de concentración, guardar turnos, planificación.. (Esta es una de las que más le cuestan). Juegos dinámicos como el virus, el dobble y demás pasaron a ser el pan nuestro de cada día, no solo porque eran buenos para ellos, sino porque nos los exigían....porque había un pique en casa.....

El virus se hizo el juego de cabecera de la familia, así que nos lo llevábamos hasta de viaje. En el que hicimos a Valencia, estando en el barco (son 5 horas) estábamos en nuestra dinámica habitual de contagiarnos los unos a los otros, cuando empezaron a arremolinarse niños a nuestra mesa. Mis hijos eso de buscar jugar con otros, como que no.... así que cuando uno preguntó si podía jugar yo me encogí, esperando el hachazo.... pero no, levantó la mirada, le miró de reojo (no fuera a ser que le mirara a los ojos) y le dijo

- Claro. ¿Sabes jugar?

Fuimos expulsados de la mesa, y mis dos chavales se quedaron jugando con los niños. La verdad es que nunca me había alegado tanto de que me echaran de un sitio..... Se pasaron las tres horas de viaje que quedaba jugando juntos, y sí, uno de ellos decidió que le gustaba tanto que intentó quedarse con el juego, pero no rompamos el climax recordando cosas de esas

#Modo_Emotivo_OFF

Y.....supongo que esto es todo amigos. Aun seguimos jugando, y los piques siguen siendo a muerte....