Partida Rol por web

A Partir de Ahora.

Capítulo V

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29/04/2010, 10:17
Jean Antoine Lésdiguièrs

Guardé mi sonrisa, con alguna dificultad, pero era lo tocaba ahora, lo bueno de codearse con la alta sociedad, era, sin duda, las altas posibilidades que tenías en realizar cualquier predicción con éxito. Su comportamiento así lo exigía, y no era algo que yo les fuera a reprochar, incluso admiraba en cierta manera, pero semejante discilplina social, solo era posible si se tenían cubiertas la necesidades básicas.

Ruego que disculpe a las señoritas Lady Hancock, ¿acaso no hemos sido todos jóvenes e inocentes alguna vez?  Quizás todos era incluir a demasiada gente, seguramente la propia señora Hancock se encuentre dentro de estas frecuentes excepciones, sonrío a las chicas de manera condescendiente seguro que su impetuosidad y fogosidad será templada desvié mis ojos hacia la madastra, cómplice, siempre es mejor estar de buenas con el bando ganador.

Querida Mary Ann, yo sé perfectamente cual es mi lugar, cortejarlas sólo me ocasionaría problemas, el romanticismo, me encogí de hombros es una bonita cosa sobre la que escribir volví a centrarme en las dos hermanas, allí juntas, dándose mutuo e hipócrita apoyo, ya me gustaría ver que pasaría si ambas mujeres estuvieran peleando por el mismo hombre y ciertamente, debo expresar mi disgusto por el desprecio que hace de mi sinceridad, obviaré sus pocos apropiados insultos contra mi persona, porque hay otra cuestión que considero mucho más importante...

Dejé unos instantes de pausa, los suficientes para que se dieran cuenta de que me había sentido ofendido, pero que la perdonaba, demostrando indulgencia.

¿Acaso os interesa mi experiencia en el amor Claire? Ahora sonreía, calmado, anticipando momentos, tal vez, como dice vuestra hermana, no sepa nada sobre él, y puede que fuera una buena idea ser aleccionado en tales asuntos, quizás vos, que tan de cerca paréceis conocerlo, y disfrutarlo, os prestaraís a ofrecerme una pequeña clase sobre, el tan valorado, sentimiento.

Dejé escapar una ligera risa, girándome de nuevo hacia Lady Hancock Siempre hablamos, por supuesto, de teoría, ya que, supongo que no habrán tenido ningún profesor de práctica.

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29/04/2010, 16:08
Patrick Collins

Dos señoritas sentadas en el prado. ¿Serían ellas? Era de suponer, en realidad. Sea como fuere, pronto lo averiguarían. Su señor le habló, y él le miró, escuchando. Lo que le dijo parecía razonable. Él seguía siendo el señor de la casa, y de aquellas tierras. De cualquier modo, eran las propias señoritas las que debían decidir. Ellos tenían morada "propia" tanto en un sitio como en otro.

-Bien, milord -respondió.

Picó espuelas para definir un trote corto y elegante, más rápido, y siguió a Francis con su corcel.

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02/05/2010, 19:41
Hypatia

El relinchar de un caballo seguido del sonido de cascos, interrumpió la conversación. La primera en voltear fue Liz quien encontró la excusa perfecta para desembarazarse de las preguntas que le hacía su hermana y así eludir, una vez más, el tema.

Sue también volteó a ver y sonrió al ver de quiénes se trataba. Liz también los había reconocido y recogía sus cosas algo presurosa, tal parece que con la intención de retirarse, pero Sue posó la mano con delicadeza sobre el brazo de su hermana y la instó a quedarse.

Los caballeros también las habían reconocido, sabían por razones obvias que se trataba de las hermanas pero al divisarlas desde la distancia no habían podido distinguir de cuál de ellas se trataba, sin embargo a la distancia en que ahora se encontraban sabían con certeza que se trataba de las dos menores y ambos, a su modo, sonrieron.

Pronto llegaron hasta el lugar en el que estaban las señoritas. Susanne terminaba de sacudirse la falda quitando los restos de hierba que se habían adherido a ella. Liz la observaba, y miraba de reojo a los caballeros, abrazada a los materiales que había sacado para hacer sus dibujos.

-¡Por fin llegan! -exclamó Sue en un tono de reproche que estaba muy lejos de parecerlo-... La señora Spooner pronto iba a comenzar a resongar porque no llegaban a tiempo para comer -esbozó una sonrisa-, ya saben cómo es ella.

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02/05/2010, 22:25
Francis P. Spencer

Francis saludó antes de desmontar con una educada inclinación de cabeza y la sonrisa más convincente que fue capaz de mostrar.

-Celebro verlas de nuevo, señoritas.

Bajó del caballo. Mantener su pose caballerosa le parecía cada vez más difícil precisamente por el absurdo de tal propósito. Especialmente tras fallar tantas veces al intentar ganarse la simpatía de sus invitadas. Lanzó una fugaz sonrisa a Liz y se sintió aún más torpe.

-Lamento profundamente nuestra demora. Por nada del mundo hubieramos querido hacerlas esperar. Pero... la reunión con el sastre se prolongó. Para ciertas cosas parece ser que mi buen amigo Patrick no es tan decidido como acostumbra.

Aprovechó para dedicar una mirada cómplice a Patrick, tanto por la broma como para pedirle, en silencio, que por el momento no sacara el tema. Mejor esperar a que estuvieran todos reunidos.

Aunque Francis no tenía ni idea de cómo sacar el tema.

 

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02/05/2010, 23:27
Elizabeth Cornwell

Elizabeth se preguntaba cómo intentar desviar la atención de su hermana hacia otra cosa, puesto que le era difícil hablar de ella, y sobre todo de un tema tan... "crucial"...

Lo cierto era que ni quería pensar en ello...
Estaba segura de que Sue se equivocaba, y que en realidad "él" no estaba interesado en ella...

Apunto estaba de abrir la boca cuando sintió un carruaje acercarse...

-¡Oh! ¡Mira, hermana! Quizás la conversación haya de esperar...-sonríe pícara, satisfecha con haberse salido con la suya gracias al Destino...

Recoge sus carboncillos, grafitos y hojas de de dibujo, para, presurosa evitar estar allí cuando los caballeros llegasen...
Pero su hermana no se daba por vencida tampoco, y la hizo quedarse allí...

Liz bajó la mirada, para ocultar el nerviosismo que la invadía por momentos...
Se aferró a sus queridos dibujos que eran su "vía de escape", y los que mantenían su "paz interior" cuando así lo necesitaba.

Pronto, Lord Heddington y Patrick llegaron a su altura.
La pequeña de las Cornwell se mordió el labio inferior, y, evitando un suspiro, alzó la vista.

Allí estaba él, y parecía intentar sonreírle...
Eso la volvió a poner nerviosa y hacerla soltar frases sin sentido:

-Claro... La.. Indecisión es la perdición de todo humano que se precie...-señala mirando fijamente al Lord...

Pero, pese a que aparta la mirada tras algunos breves segundos, en la mente de Liz una frase se pasea libremente:

"¿Por qué te empeñas en demostrarle que le "odias" cuando no es así... del todo...? Se acabará por cansar... ¡Eres una pequeña tonta, Elizabeth Cornwell!"

Turbada, Liz aprovecha un descuido de Sue, señalando levemente:

-Con su... Permiso... Yo... Yo... Me... Me he olvidado de algo en... En el otro jardín...
-miente apresurada, mientras se escabulle.

Se sentía realmente estúpida y con mucho calor en las mejillas...
En el fondo sólo quería hablar con él tranquilamente, y conocer sus sentimientos al respecto... Pero... Su orgullo le impedía pensar con claridad...
Y temía ser ella misma ante él, si había otras personas delante...

Apresura el paso mientras camina, mientras busca desesperada un sitio donde tranquilizarse.

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03/05/2010, 00:12
Francis P. Spencer

Viendo cómo la apresurada retirada de la joven ponía de manifiesto su falta de pericia, el orgulloso Lord Heddington, dueño de aquellas tierras, se quedó por unos instantes sin saber qué hacer, en una situación incómoda entre dos prometidos.

-Eh... será mejor que me marche. Tengo cosas importantes que hacer... y seguramente tendréis mucho de qué hablar...

Miró a su alrededor. ¿Qué era eso tan importante que tenía que hacer?

-Por cierto, si veis a los demás, decidles que me gustaría convocar una breve reunión.

Imaginaba que Patrick informaría a su prometida. Era algo natural. No era de los que ocultaban cosas. Francis supuso que su amigo entendería que, si bien le había pedido que le dejara hablar con todos, esto no se aplicaba a la mujer con la que iba a casarse. En aquel momento tomó conciencia del inevitable hecho de que Patrick no estaría siempre ahí para él.

De modo que echó a andar en la dirección en que se había marchado Liz. Al fin y al cabo, era posible que no tuviera muchas más ocasiones de hablar con ella en el futuro.

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03/05/2010, 17:45
Claire Windsor-Hancock

Las palabras de mi hermana, mesuradas pero al mismo tiempo llenas de una rabia que yo desconocía en ella, me hicieron tranquilizarme porque después de todo, no podía permitir que alguien como Jean obrara de esa manera sobre mis impulsos y mis sentimientos. Esbocé una sonrisa, una que no duró mucho pues enseguida, Darla, entrometiéndose como sólo ella sabía hacerlo, volvió a conseguir que me sintiera furiosa y que el señor francés, quedara en un segundo termino; finalmente con él yo no iba a vivir y a ella, parecía quedarle mucha vida por delante. Bajé la mirada para no cruzarla con la de Darla, no sabía qué le había visto mi padre a una mujer como ella que evidentemente estaba con él por mero interés. Me hacía sentir asqueada, se tomaba el papel de nuestra madre o eso creía ella. Escondí una sonrisa poniendo el rostro casi detrás de mi hermana.

-Descuida, madre, no voy a ir a ningún lado. Odiaría que me castigaran en este momento y si es necesario-di un paso adelante de Mary Ann y luego de ella hasta posicionarme delante del profesor de francés,-ofreceré una disculpa al señor.

Hice una reverencia, levantándome ligeramente el faldón de mi vestido y aunque no debía hacerlo, lo miraba fijamente a los ojos. Ya una vez me había tratado mal pero aquello era el colmo; evidentemente Jean disfrutaba con algunas cosas o yo le caía mal, lo que terminaría siendo recíproco si continuaba así. Le sonreí, con los ojos brillosos y el corazón latiendo, pensando en las palabras que había dicho él, en lo sutil de sus provocaciones o lo que yo sentía eran provocaciones y en las amenazas de la amargada de mi madrastra.

-Lo lamento, Jean... Ni mi hermana ni yo, queríamos ofenderlo-dije su nombre con toda la intención, sin mirar a nadie más que a él.-Yo..., no sé nada sobre el amor. Mucho menos, creo, saber más que usted pero si quiere que le enseñe lo que sé, será un placer. Después de todo, habría que ver qué tal le va por una vez en el papel de alumno. Incluso, será divertido. ¿No cree, Jean? No creo que haya inconveniente, dado que madre parece tenerle mucha confianza y yo haré gala de mis artes en el amor...

Solté la falda de mi vestido y no aparté mi mirada de la suya, ignorando por completo a Darla, si seguía hostigándome, tenía claramente decidido lo que iba a hacer.

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03/05/2010, 22:07
Elizabeth Cornwell

Liz en su apresurada "huida", no había pensado exactamente hacia dónde ir...

Así que, nada más encontró un buen árbol con sombra, bajo el cual sentarse y lo suficientemente lejos del grupo que acababa de dejar, se recostó en el mismo, cerrando los ojos, y notando el corazón muy acelerado...

"Realmente eres una niña tonta, Elizabeth..."

Notaba sus mejillas arder, y se pasó las manos sobre las mismas, como si así pudiese apaciguar el ardor...
Se deslizó tronco abajo, y acabó sentada, mirando hacia ningún sitio en concreto...

Miró sus dibujos, todos ellos bastante buenos, aunque ella nunca lo reconocería, esparcidos en la hierba junto a ella...

Quería dibujar y calmarse...
Pero...

Le resultaba imposible tranquilizarse ahora...

Sin más, pegó a la hierba con ambos puños cerrados, emitiendo un gritito suave, pero lo suficientemente bueno como "para liberar tensión", pensando que nadie cercano podría oírla...

-¡¡¡¡¡¡Iaiiiiiihhhhh!!!!!!!


Tal como esperaba, luego del mismo, se sintió un poquito mejor...

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03/05/2010, 22:17
Francis P. Spencer

El grito cogió por sorpresa al buen barón. Por lo visto, con esa joven bastaba apartar la vista por un segundo para que todo se descontrolara.

-¡Elizabeth!

Preocupado, echó a correr en la dirección de la que provenía el grito.

La encontró no muy lejos, a la sombra de un árbol, aparentemente a salvo. Aparentemente. Nunca se sabe.

Al llegar no supo muy bien qué decir y se quedó mirando unos instantes con gesto de incredulidad.

-Eh... ¿Ocurre algo?

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03/05/2010, 23:41
Elizabeth Cornwell

Lo primero fue mirarle con asombro...

Lo segundo con gesto de incomprensión...

Y lo tercero... Saltar como un resorte de la hierba, mientras sus mejillas eran similares a un par de tomates...

-Eh... No... Yo... Yo... Estaba... ¡Bostezando!... Eso es... Bostezaba...!-Le mira con los ojos muy abiertos, nerviosa por su presencia... Apresurada, recoge sus dibujos, dispuesta a salir huyendo una vez más...

Pero entonces...

"¿Vas a dejar otra vez que piense que le odias...?"

Se detiene, dejando los dibujos apilados. Junta ambas manos al frente, y mira a Francis:

-Quisiera... Conocerle más...-decidida.-Me han comentado que quizás usted esté interesado en mí... Y a mí... Me gustaría confirmarlo... Espero que entienda que... No busco ser pretenciosa con esto... Si no... Conocer sus verdaderos sentimientos... Y... Aclarar los míos...-Señala bajando un poco la voz en la última frase, pero sin dejar de mirarle...

Por fin parecía haber vuelto la rebelde Liz, y no el animalillo asustado en el que se había transformado hasta la fecha. Había decido enfrentarse a sus sentimientos, y si para ello debía de hablar claramente, así lo haría...

¿Que quizás aquéllo no era propio de una dama...?
Posiblemente...

Pero Liz nunca se había dejado amedrentar por la "etiqueta", y el Lord ya era consciente de ello...

Tan sólo esperaba, que su frescura y sinceridad no molestasen de más a Francis...

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03/05/2010, 23:56
Francis P. Spencer

Lord Heddington no pudo seguir fingiendo que tenía la situación bajo control. Ni siquiera pudo mantener la mirada. Se sintió como golpeado, bajó la cabeza y tosió sonoramente.

-Vaya, señorita Elizabeth... sinceramente, no sé qué decirle...

¿Por qué no sabía qué decir? Siempre había sido diestro con las mujeres. Aunque la mayoría nunca le habían importado mucho.

Pasaron unos segundos de silencio, un silencio tenso y casi tangible. Finalmente, Francis se relajó. Supuso que si ella había decidido sincerarse, no hacer lo mismo sería una falta de respeto.

-¿Le gustaría dar un paseo? Podríamos hablar por el camino. Temo que no haya demasiadas ocasiones en el futuro.

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04/05/2010, 00:10
Elizabeth Cornwell

El ver así al orgulloso Lord, hizo que Liz esbozara una leve sonrisa, no de burla, sino de complicidad... Por sentirse más o menos igual...

-Me gustaría dar un paseo con usted, claro...-Se agacha a recoger sus dibujos, mientras escucha a Francis, cuya última frase le hace perder la sonrisa..:-¿Por qué teméis eso...? Acaso... ¿Pensáis iros...?-señala, algo nerviosa de repente, pero intentando aparentar una tranquilidad irreal.

Acaba de recoger sus dibujos y le mira, aguardando a que le diga por dónde desea ir...

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04/05/2010, 00:15
Francis P. Spencer

-¿Irme...? Oh, no. No, es sólo... algo que nos han dicho a Patrick y a mí. No se preocupe. Más tarde reuniré a todos y se hablará. No es nada grave, no tiene de qué preocuparse. Es más, quizá debería alegrarse... En fin, acompáñeme, por favor.

Lord Heddington guió a Liz por los jardines, sin rumbo concreto, caminando de forma relajada, lenta. Se sentía cómodo.

-¿Sabe? Cuando era niño solía pasarme el día jugando por estos jardines. Recuerdo que había lugares en los que me sentía invisible. Olvidé todo aquello demasiado pronto...

Empezaba a divagar y no deseaba aburrir a su acompañante. Lo que realmente deseaba era abandonar las apariencias, las formalidades.

-No he tenido ocasión de preguntarle cómo se siente aquí, y cómo se siente ante la perspectiva de la boda de su hermana.

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04/05/2010, 00:47
Elizabeth Cornwell

Liz mira a Francis con una ceja alzada:

-¿Alegrarme...? ¿Entonces es... Algo bueno...?
-pregunta interesada... Sabe que acaba de decirle que lo dirá en una reunión pero... Ella es joven y curiosa...-Uhm... ¿Y no podría usted adelantarme nada, milord...?-señala con la mejor de sus sonrisas.

Mira a su alrededor, al jardín, y añade, cuando él le cuenta más cosas:

-Lo cierto es que es un jardín bellísimo... Cualquier niño sería feliz aquí... Debe de ser algo mágico perderse aquí..-sonríe, casi con añoranza, recordando su propia infancia que, todo cabe decir, no distaba mucho de entonces hasta el momento...

Mira a Francis, pensativa. Era extraño, pero se sentía a gusto, así, siempre se habían visto en ocasiones en las que la gente les rodeaba, y había que guardar las apariencias... Pero ahora, era diferente...

-Me alegra de que mi hermana se case... Pero... Sinceramente... Me apena el hecho de que... Nos abandone... Porque... Seguramente querrá irse con Patrick... Y... No se lo reprocho... Es... Lo normal, supongo... Aunque no lo entienda... Aún...-añade, con un tono suave, y pausado. Alza la mirada, hacia el frente..-Por otra parte.. Mi hermana Anabel... Creo que también está interesada en establecer una familia... Por decirlo de alguna manera... Y... Tampoco quiero quejarme... Es más... Soy feliz si ellas lo son... Pero... Me... Aterra... Quedarme sola...-Confiesa en tono muy bajo, mordiéndose el labio inferior. Por un momento permanece en silencio, y con la mirada casi triste, pero, al segundo después, sus ojos brillan un poco (aunque no del todo sinceros), y señala, animada:-Pero... ¡Confío que esto sea un secreto entre usted y yo, milord! De lo contrario, me atreveré a decir que no es un caballero en toda regla...!-añade, divertida.

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04/05/2010, 01:03
Francis P. Spencer

Francis sonrió con complicidad, contento de que al fin la comunicación resultara sencilla y natural.

-No se preocupe por su secreto. Sé exactamente a qué se refiere. Puede que no me crea, al fin y al cabo, ¿cómo podría sentirse solo un hombre rico rodeado de empleados? Pero lo cierto es que no deseo perder a Patrick. No sólo es mi mejor amigo, sino que de hecho ha sido mi único amigo desde hace muchos años. No sabría qué hacer sin él. Es éste sin duda un lugar bello, pero la soledad puede hacer que pierda toda su magia.

Finalizando en tono apesadumbrado, decidió sincerarse del todo. Bajó la mirada y el tono de voz. Iba a resultar más difícil de lo que esperaba.

-Usted... es sin duda una doncella hermosa. Tan llena de vida... me hace recordar esa magia. La había olvidado hace tanto... Mire, yo no soy tan impetuoso como Patrick, y no se me da tan bien como a él hablar de ciertas cosas... o hacerlas. Y sé que a usted no podría comprarla con riquezas. El oro no sirve para las cosas que realmente importan. Siempre he sido consciente de ello, pero dejé de actuar en consecuencia hace años... Sólo espero que no me vea simplemente como un hombre rico y de sangre noble.

 

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04/05/2010, 01:24
Elizabeth Cornwell

Elizabeth camina despacio aferrada a sus dibujos, pero no tensa, mientras disfruta del paisaje...

Francis habla, y ella le escucha con atención... Cuando alaba su "belleza", no puede evitar sentirse algo acalorada, pero lo disimula bien...

Se muerde el labio inferior...
Aquéllo... ¿Era una especie de confesión...? Quizás fuera lo más parecido a una que escuchase de sus labios... Pero, la conmovía... Y eso era lo que importaba...

-Sinceramente...
-sonríe de lado, algo pícara, quizás...-Agradezco sus palabras... Y he de decir que... En un primer momento, me pareció usted una persona horrible, Sr. Spencer.-Ensancha su sonrisa.-Pero... Creo que... Le juzgué mal...-le mira, sincera.-Ha hecho usted bastante por la felicidad de mi hermana, dejándonos estar aquí... Y eso, le convierte en un completo caballero... Haciendo así honor a su título, "milord"...-Le hace una graciosa reverencia.-Aunque al principio pareciese algo estirado, la verdad... Si me permite decírselo, claro...-Ríe un poco, y se adelanta a él, para luego girarse, y caminar de espaldas, mientras le mira:-A decir verdad... Me da igual su título, su linaje, o sus riquezas... Creo que como hombre, ha usted alcanzado de las mejores notas... Aunque no sea perfecto... Porque nadie lo es...-vuelve a sonreír, y a girarse, volviendo a caminar mirando hacia el frente.-Me alegra haberle conocido... Y poder decir que...-se detiene de repente, y se gira sin previo aviso, mirándole a la cara:-Quiero confiar en usted...

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04/05/2010, 01:44
Francis P. Spencer

Francis se detuvo a su vez, vista fija a los ojos de la joven, aún nervioso. A ella parecía resultarle todo tan fácil...

-En tal caso debo hacer honor a dicha confianza. El motivo de la reunión que pensaba convocar, aunque probablemente ya lo sepan todos, es que, según noticias que nos llegaron a mi buen amigo Patrick y a mí en nuestra salida, usted y sus hermanas no tienen por qué permanecer aquí. Al parecer la cuarentena era falsa... ya explicaremos los pormenores más adelante. Pero, sinceramente, yo no deseo que se marchen... no deseo que usted se marche.

Aún alzando la mirada, se acercó un poco más a ella.

-No es sólo su confianza lo que deseo.

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04/05/2010, 10:55
Elizabeth Cornwell

Él también se detiene, y le habla...

-¡Oh! ¿Es en serio...? ¡A buenas horas!
-exclamó, de repente, sin pensar mucho en que igual podía resultar como si estuviese aliviada por irse de ahí...-Lo cierto es que la manera en la que nos trataron fue degradante... Ni siquiera fueron capaces de respetar el entierro de una buena mujer, como mi madre...-Bajó la mirada, como recordando todo eso, algo malhumorada, al parecer... Pero la sombra que cruza su cara, sólo dura unos segundos, para sonrojarse nuevamente cuando escucha el resto de palabras de Francis...

-Yo... Amo mi casa... Y... Todo lo que en ella hay... Pero... He de confesar que... Volver a ella... Después de todo esto... Sería... solitario... Pero aún así, es mi casa, y me gustaría volver a ella...-Aún sonrojada, devuelve la mirada al Lord, decidida.-Si no desea que me marche... Deme un motivo para quedarme... Si no es sólo mi confianza lo que desea... ¿Qué es lo que espera de mí...?-Pregunta cerca de él, en un tono audible sólo para los dos, aunque no haya nadie cerca...-Sé que igual mis palabras igual no son apropiadas para una señorita... Y le pido disculpas por ello... Nunca estaré a su nivel... Pero, creo que por desgracia o fortuna, soy así... No puedo evitar querer saber... Saber qué nos espera... Saber qué siente... Quiero estar segura... Necesito estarlo...

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04/05/2010, 14:49
Francis P. Spencer

-Señorita...

Francis se puso muy serio de repente y apartó la mirada unos instantes, para después volver a ella en tono más bajo, como si costara hacer salir las palabras, como si fueran demasiado grandes para salir por su garganta.

-Lo que intento decirle es que me gustaría que se quedara aquí. Conmigo. Lo que intento decirle es que... creo que la amo.

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04/05/2010, 15:04
Elizabeth Cornwell

Elizabeth le mira, sintiendo cómo una especie de calor empieza a subir por su pecho hacia sus mejillas...

Aquéllo era lo que había deseado oír, aunque lo negase y renegase una y otra vez...
Aquéllo era...

Grandioso...

Liz abre mucho los ojos, mirándole, y se muerde el labio inferior...

-De... ¿De verdad...? Yo... Yo no sé si podría estar a la altura de vos... Pero... Pero si me elegís de entre todas las damas que hay a vuestro alcance, todas ellas mucho mejores que yo en educación y comportamiento... No dudo de lo que decís sea... Verdad...-Sonríe, sincera y cálidamente.

-A mí... También me gustaría quedarme aquí... Contigo...-Da un paso más hacia adelante, decidida.