Partida Rol por web

Una vez repuesto de la horrible visión provocada por Victus, os pegáis a una de la paredes y avanzáis para evitar el fuego y el humo negro que está desprendiendo; desde luego las máscaras os están haciendo un gran servicio esta misión. Tras un rato de búsqueda e investigación descubría que hay una zona de oquedades y cavernas pequeñas en la pared de la sala.

-¡¡¡Mierda!!!, esto me recuerda a una colmena. Me gustaría tener un lanzallamas ahora mismo jajaja, -digo mientras el tic del ojo mueve otra vez mi párpado.- A ver quien mete la mano y saca el premio, jajajaja

Tantos puntos de locura no podían ser bueno...

Bueno, lo cierto es que no veo nada raro. Estos agujeros pueden ser los típicos que se realizan para debilitar una pared antes de echarla abajo con explosivos. Perforaciones y todo eso. Me coloco al lado de Victus y dándole una palmada en el hombro le pregunto. ¿Detectas algo compañero? ¿Algún rastro del mal o alguna otra forma de vida? Puede que estuviéramos cerca del final de nuestra misión, pues ahí abajo no parecía haber nada.

Zachariah echa mano de su escáner y comienza a utilizarlo para ver qué se pueden encontrar en este lugar.

El nivel de podredumbre es mayor en algunos de los agujeros, es probable que sin las máscaras os pusierais a vomitar

Hay un alto nivel de putrefacción en alguna de las oquedades. Es posible que haya cuerpos en descomposición o alguna que otra sustancia más hedionda.... -comenta el tecnosacerdote mientras mira los datos del escáner.

Un momento, veré que encuentro...

Victus se concentró para mirar en la disformidad

Cuando Victus se concentra empiezan a materializarse apariciones fantasmales alrededor vuestra, hasta a unos veinte metros del psíquico. Las apariciones aúllan de dolor, lloran y se quejan lastimeramente. La visión es escalofriante y os inquieta.

Este sitio se está poniendo cada vez más raro... Creo que debemos largarnos cuanto antes... Les comento a los compañeros al ver las apariciones.

Zachariah levanta los ojos al notar las extrañas presencias conjuradas por el psíquico. Ciertamente la visión resulta inquietante pero el tecnosacerdote la contempla como si no fuera con él la cosa.

Veia los espíritu a mi alrededor, y el tic del ojo, cada vez iba mas rápido.

-Veis, ya os dije que necesitaba un lanzallamas.

Mientras apuntaba a los fantasmas con mi arma, un hilo de baba caía por mi boca...

¡Noooo, otra vez nooooo! maldito seas Victus...

El arbites se lleva las manos a la cabeza y grita horrorizado mientras contempla las paariciones fantasmales.

Yuri gruñe ruidosamente ante las apariciones,las odiaba,algo del pasado se revolvía en él,algo en su mente.-HAZLO PARAR¡.-Gritó fuera de si el asesino,agarrándose la sien con una mano y apuntando al psíquico con la otra.-PARA¡.

Algo me estaba pasanto, y no lo acababa de comprender...

El rifle del arbites cae repiqueteando en el suelo cuando Octus junta las manos haciendo la señal del águila imperial y se pone de rodillas. Todas aquellas pesadillas se arremolinaban a su alrededor y el hombre hacía lo único que le habían enseñado para combatirlas. Rezar.

Oh, Emperador! Dios Eterno que sin ayuda prlongaste los cielos y ahora gobiernas sobre la fuira de la disformidad; tú que has extendido el vacío con vínculos hasta que el día y la noche lleguen a su fin.
Complácete en recibir bajo tu omnipotente y graciosa protección las almas de tus siervos y presérvanos de los peligros del vacío y de la violencia del enemigo.
Que todos los habitantes de nuestro Imperio te sirvan, nuestro Salvador, y que podamos volver triunfantes con el fruto de nuestra labor.
Y con un recuerdo agradecido de tu misericordia para alabar y glorificar tu Nombre Sagrado.
A través de tu regla eterna.
Amen

Octus cerraba de forma compulsiva el ojo sano mientras repetía las palabras atropelladas, con los labios fruncidos y la determinación en la mente. Tal vez si seguía repitiendo la oración las pesadillas se irían, asi que la repitió una y otra vez, sin hacer nada más.