Partida Rol por web

La hacha golpea al brazo derecho del mutante con cara de cerco que se le queda dormido con apenas fuerza para aguantar su arma improvisada.

Ionor miró con sus claros ojos la pequeña batalla que se desarrollaba en el punte. Los humanos huían dejando sólo a uno de ellos y al enano delante de las bestias.

Algo no me cuadra. Las bestias van en grupos mayores que este. ¿Qué intentan?

Sorprendida por ello, las reacciones casi instintivas de batalla tardaron en llegar.

Veo como una bestia se hacerca a mi al trote, ahora veo mi error y esta me intercepta rapidamente, se coloca delante mia y me mira fieramente, no estoy dispuesto ha que me toreen, sin pensarmelo mucho le pego con el escudo y vuelvo a mantenerlo por delante. Previniendo sus ataque.

Por intentar investigar un echo aislado, ahora me veo en medio de un combate cerrado, solo espero que no aparezcan mas demonios por en medio del puente.

Los mutantes continúan atacando con los ojos llenos de rabia a sus oponentes, el mutante con cuernos intenta golpearlo con sus armas propias de la mutación (cuernos) con bastante éxito, por el contrario el mutante con brazos de pulpo continua probando suerte con la presa sin ningún tipo de éxito incluso queda expuesto al enano, cuando el le pisa sujetándole una extremidad con el pie.

El unico mutante con suficiente suerte o destreza es el que tiene cara de cerdo que golpea con su arma al chico de pelo negro.

Ungrim intenta parar el golpe del mutante de los cuernos pero este vuelve a traspasar sus defensas una vez más. Ignorando el dolor vuelve a la carga contra el mutante de los tentáculos el cual acaba de cometer un error y ha bajado sus defensas.

Esta es la mía - piensa el enano haciendo girar su mayal sobre su cabeza

Pero la cornada le vuelve a molestar y su mayal yerra el golpe de nuevo esta vez por muy poco.

Maldita sea, cada vez estoy más cansado, espero que alguien venga a ayudarme cuanto antes, no se cuanto tiempo podré luchar contra dos mutantes.

 La clava del mutante consigue abrirse un hueco por las defensas del joven, pero el impacto no llega siquiera a resultar doloroso para el joven. El anterior golpe de Cahir le resto fuerza y habilidad al brazo que blandía el arma, al parecer. Sin gastar tiempo, hastiado del cara cerdo y queriendo ir a socorrer al enano, que se enfrenta a dos mutantes, el joven da un paso atrás, blandiendo con las dos manos el hacha, para tomar potencia e impulso en un único golpe. Sabe que el golpe deberá surtir el efecto deseado, matar al mutante de una vez. Si no lo consiguiera, Cahir se vería indefenso.

 - Muere de una vez engendro...

 El hacha desciende implacable, hacia el hombro del mutante. Pero en un ultimo momento, Cahir flexiona las rodillas y gira la cintura para que el hacha siga descendiendo y, como si de un tronco se tratase, barra literalmente las piernas del mutante. El filo, cruel, entra por la pierna izquierda del mutante como si ésta fuera un tronco famélico.

El golpe contra el mutante con cara de cerco lo hace derribar cayendo al suelo casi saccionandole la pierna.

Ionor sacó una flecha de la aljaba y la apoyó contra la cuerda del arco. Lo tensó hasta que las plumas de la flecha rozaron su barbilla. Respiró profundamente, preparándose para regalar muerte desde una distancia prudencial.

Hay cuatro mutantes. ¿Debería ayudar al maldito enano o mejor a los otros humanos? El humano joven, que parece más inexperto y guapo, es la mejor opción. Sin embargo, se vale sólo.

La flecha salió del arco dirigida contra la bestia de los tentáculos, directa a abrirle un nuevo agujero en el cuerpo al despreciable ser.

La flecha perfora el brazo para frenar finalmente en el pecho del mutante con tentáculos, parece ser que finalmente a sucumbido a las heridas del combate.

El mutante se retorcia de dolor en el suelo tras el anterior hachazo de Cahir. LA grotesvca transformación del caos miró con ojos acuosos, porcinos, al joven como si pidiera piedad. Cosa que es hartamente antinatural para una criatura de  su calaña. Aunque si fuera un humano, un elfo, o cualquier otra criatura con entendedera... que hubiera atacado una aldea indefensa... no merecería piedad.

Con ello, Cahir puso un pie, pisando con fuerza, en el torso del malherido mutante para evitar que se levantara y descargó el hacha para darle una rápida muerte a la criatura. Al menos le concedería eso, el beneficio de una muerte rápida. Pero Cahir tambie´n estaba cansado, y su brazo le hormigueaba cansado de la tensión mantenida. El mutante debió moverse, pues cuando fue a descargar el golpe, el joven perdió el pie y erró el blanco, golpeando con fuerza el suelo y teniendo que reponerse rápidamente, alejandose un paso del mutante.

El combate continua su desarrollo, los combatientes buscando sin demasiado éxito fisuras en la defensa de su oponente. Hasta que uno de ellos encuentra un espacio contra el joven de pelo oscuro que se precipito en el ataque anterior.

Ungrim se agacha justo en el momento que una flecha pasa cerca de su cabeza y va a parar al pecho del mutante de los tentáculos. Este cae por la acumulación de heridas y finalmente muere.

- Ese era mio! - grita Ungrim mientras se gira hacia el otro mutante que se dispone a cargar de nuevo contra el Enano

En realidad quien haya sido me ha hecho un favor ya que no se cuanto hubiese durado contra dos rivales y estoy bastante herido. Ahora me las vas a pagar engendro traidor.

- Ahora que maldito mutante, tu y yo solos a ver si eres tan valiente como cuando estaba tu amiguito el manos largas!!

El ataque no es lo suficientemente certero debido al despiste del arquero y falla por muy poco.

Ionor de nuevo cargó el arco y apuntó cuidadosamente con la flecha.

Malditos enanos. Encima de que le intento salvar la vida que no merece, se queja. Si no es porque los mutantes son mi prioridad, le disparaba a él.

El mutante que quedaba en liza estaba a tiro. Un sólo disparo y una más de esas malditas criaturas iría a saludar a sus Dioses.
En el momento de disparar, un humano, alterado por la situación y sin ver a la elfa, tropezó con ella, golpeandole el codo.
Soltó sin querer la flecha, que cantó su balada de muerte mientras surcaba el aire. Por desgracia para nosotros y suerte para el Caos, voló perdiéndose en el infinito sin causar más que un susto allí por donde pasaba.

Esos tres ojos que me acorralan, me estaban causando problemas, si no me desacia rapidamente de ese ser, sus ojos me atormentarian el resto de mis dias. Los demas voluntario parece tener sus pequeñas luchas llevadas lo mejor posible. Si no acabamos pronto con esto pronto el puente se vera lleno de criaturas, el caos atrae al caos y si hay victimas de por medio mucho mas rapido.

Lo que sigo sin explicarme es donde esta la guardia por Sigmar, este puente deberia ser un enclave estrategico e importante, no se porque no hay un par de dotaciones de ballesteros preparados para estos queaceres, o almenos algunos alabarderos, que seguro que costaran mucho menos.