Salieron de la posada para encaminarse a la bodega fría, el lugar de salida del carro con frutas. La mañana había sido calurosa, y el mediodía pintaba peor.
El camino, como siempre, estaba lleno de barro y suciedad, pero llegaron sin problemas a la bodega. Alli, un carro y tres jóvenes os estaban esperando. Eran tres humanos de no mas de 16 años.
-¿Ustedes son los guardias?-pregunta uno de los jóvenes.-Porque si lo sois, deberíamos partir ahora.
El carro era de madera, y dentro del mismo podían verse unas cuantas cestas, aunque al poco uno de los tres jóvenes tapo todo con una gruesa manta.
Bueno, ellos son los guardias dice el elfo señalando a los guerreros.
Si esperan que les acompañe esta mas que equivocados, este no era el plan, pero de seguro los guerrero estan ansiosos de pelea, lo que les llevara a una situacion de la cual quisiera estar lejos. Nadie ha sobrevivido al ataque de los ladrones ¿que haria diferente esta vez?... por los antecedentes, son carne de gusanos antes de partir
Bien creo que sera cuestion de empezar el trayecto....
- Adelante, cuanto antes nos pongamos en camino, antes llegaremos...digo mientras cojo el martillo con la mano derecha y con la izquierda el escudo.
Nop. No la compraste, y nunca habias tenido.
Si, vamos.-agrega Garth en voz alta.
En voz baja ahora, agrega luego de unos metros.-Pero cuidado en los dos puntos de emboscada, huyamos si las cosas salen mal, ya que no es el punto ganarles ahora. Salgamos de esta con vida, y saquemos a los muchachos estos tambien.
Las calles de la ciudad se van estrechando de a poco, conforme avanzan las horas a traves de las entregas y receciones de oro. Una bolsa oculta entre las frutas restantes, abultada ya, da cuenta de las ganancias que debe proveerle a vuestro patron sus negocios.
El calor va haciendo mella en aquellos que tienen armadura. Joseus comienza a sudar entre las pieles, mientras Bork y Garth exudan un inconfundible olor a acero caliente, auque de sus bocas no sale ni una queja. Weshent y Ulric estan atentos a todo, ya que estan mas frescos.
Los jóvenes que conducen el carro estan indudablemente nerviosos. Algo de lo sucedido debe de haberles llegado, ya que no parecen cómodos. Pueden darse cuenta que estos, al menos, correran ante la primer señal de problemas.
Los pocos guardias que ven en la zona del mercado, desaparecen ya al llegar a las zonas mas pobres.
En ese lugar, las calles se hacen casi laberínticas, y solo alguien conocido del lugar puede caminar conociendo bien hacia donde va. Eso, o que ya haya recorrido alguna vez el lugar, atento a las pequeñas diferencias que marca un poste caído, un letrero ajado, unas ventanas deterioradas.
Se van acercando al primer lugar en donde previeron una posible emboscada, y los nervios crecen. No pueden impedir que las manos vuelen hacia las armas, aunque, a ultimo momento, se contentan con apretar fuertemente las mismas, en un paroxismo de temor.
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Cita:
No... no... no... Mi elfo no va ni a palos. Se queda por el mercado un rato y vuelve a la posada a esperar que la elfa haga su trabajo y luego ir hacie el escondite, segun era el plan.
Atento como esta a su entorno, Ulric nota que hay varios hombres apostados y ocultos para el observador casual. Hay 3 arqueros, y al menos 5 hombres mas. No logra ver a la elfa, que podria o no estar alli.
los que veo de los nuestros o posibles enemigos?
susurrando dice chicos....hay 3 arqueros y minimo 5 hombres de armas ocultos...seguramente seran hostiles preparados por si acaso y la elfa no la veo por ningun lado...
- Entendido, aferro con mas fuerza mi escudo, preparado para alzarlo sobre mi cabeza cuando aparezcan los arqueros y balanceando suavemente el martillo, para lanzarme sobre los hombres de armas.
Ulric se prepara para cubrirse con el carro.