Partida Rol por web

— Espera... ¿qué? ¿¡Ya está!? —exclamo visiblemente decepcionado. — ¿Nada de nada? ¿Ningún superpoder? ¿No hay visiones horribles de gente siendo torturada haciendo exámenes?

Camino molesto, con las manos en los bolsillos y haciendo pucheros, murmurando algo sobre las 7 Estafas. Pero se me enciende una bombillita y vuelvo rápidamente, otra vez quitándole el papel de las manos a Nishiguchi-san de un tirón.

— Hmm... ¿qué os parece los "ojos del segundo piso"? Podemos pedirles que espíen a los profesores y nos digan las preguntas de los exámenes...

En lo que habían tardado decidiendo si entrar o no, Nagisa ya había salido. Una parte de Mitsuri se sentía mal por haberla dejado ir sola pero otra estaba tremendamente aliviada por no haber estado allí y que nada hubiera ocurrido. Su reacción fue mucho menos vistosa que la de Ito y sólo suspiró. Sólo quería terminar con todo aquello cuanto antes- Pues vamos al segundo piso -Por qué Yuuma creía que unos ojos iban a querer espiar a los profesores para darle las preguntas del exámen era algo que jamás descubriría.

os dirigis todos al segundo piso algo desilusionados, mientras subis las escaleras Nishiguchi os lee en que consiste esa leyenda:

-cerca del laboratorio de ciencias hay una grieta en el techo, dicen que por la noche aparecen unos ojos rojos y si los miras fijamente; te absorben el alma!

Al llegar veis que mas que una grieta, parece un agujero en el techo del tamaño de una mano.

Aliviado por ver que Nasiga está bien y no le ha ocurrido nada mal se dirige junto al resto de compañeros a la segunda planta. Mientras, mira de vez en cuando a sus espaldas, reticente aun. 

-Ahí caben más que unos ojos... ¿Seguro que es aquí? - mira hacia arriba, examinando el techo. 

Subimos al segundo piso todos juntitos, por lo que ni siquiera pienso en el miedo que dan los tétricos pasillos. Subo los escalones dando saltitos y tarareando una canción, feliz como un cachorro que va de paseo. Sí, la posesión infernal ha sido un timo, pero estoy seguro que con los ojos malditos pasará algo.

«Les pediré que me ayuden con los exámenes de Japonés, Matemáticas e Historia»

Al llegar a destino (menos mal que ellos guían, yo estoy perdidísimo), levanto la cabeza para ver la grieta del techo. Guardo silencio con la pregunta de Yoshimura-kun. Ciertamente, el agujero es grande y no veo ningún ojo. Pero es que está tan lejos... Le pediría a Nishiguchi-san que me aupara en sus hombros, ya que es el más alto, pero me da vergüenza. Así que voy a llamar a los ojos para que aparezcan pero, ¿cómo?

...

...

Tengo una idea.

— ♫ ¡Veo, veo! ♫

Mitsuri pasa el camino en silencio pensando en lo mucho que cambia la escuela por la noche. Normalmente no puedes fijarte ni en el color de las paredes y es raro porque estás allí cinco días a la semana y... Oh, que ya habían llegado- Es enorme... ¿Saben los profesores que eso está ahí? Tiene pinta de ser peligroso. Podría ser un fallo de la estructur... -Se quedó callado porque le pareció ver algo. Ya no sabía si lo había imaginado o...

Mientras comentais las caracteristicas del agujero, veis como algo cambia en el agujero. Parece que hay algo de movimiento dentro y tras unos sgundos todo se calma; el silencio inunda el pasillo y de repente, dos ojos rojos parecen en el agujero del techo, no son muy grandes pero son penetrantes y rasgados, se podria decir que parecen diabolicos.

— ¡¡AAH!! —chillo fuerte al ver los ojos, sorprendido pero definitivamente NO asustado, aunque me voy rápidamente a esconder detrás de Yoshimura-kun, usándolo de escudo humano. ¡Satán! ¡Son los ojos de Satán!

Observe aquella escena con particular interés esperando algún suceso llamativo y con la atención puesta en aquel extraño agujero hasta que de repente aparecieron dos ojos. Dí un respingo ante el grito y el bote de mi compañero antes de sacar un trozo de chocolate del bolso y ofrecérselo a aquella extraña criatura a través del agujero preguntándome que sería.

los ojos se posaron en Ito cuando vio que se asustaba; era como si aquella criatura oliera el miedo; los ojos inyectados en sangre parecian que iban a maldecir al chico hasta que la chica del grupo le ofrecio comida.

Oisteis un ligero chirrido y una sombra salio del agujero y se avalanzó contra la joven, posandose en su mano y comenzando a lamer el dulce chocolate.

Una cria de murcielago estaba deleitandose con la cena que le proporcionaba la joven. Visto de cerca hasta parecia un animal adorable.

al ver a aquel murcielago notas que puedes percibir su presencia. Cuando te concentras un poco notas que en el agujero del techo se esconde algo mas grande y peligroso.