Partida Rol por web

Apocalipsis

Un nuevo hogar

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10/09/2010, 20:54
Alex Silverstone

Entre a la casa una vez lo hicieron Erika y la " abuela ", tranquilamente ya sin ningún rastro de mi anterior enfado y dispuesta a ponerme manos a la obra, aunque sin duda, primero necesitaría lavarme mínimo las manos, ya que tanto sujetar el volante pensaba que incluso las debía de llevar negras.

No me paré mucho a cotillear, quizás estaba pecando de confiada o quizás era que jamás había sido demasiado curiosa en cuanto a la vida de la gente, pero simplemente no me parecía correcto hacerlo.

- Su nieta también ha fallecido.. - Pensé con tristeza. - pero todos hemos perdido a las personas que nos importan, aunque al menos ella saber qué ha sido de su familia, yo de la mía no sé absolutamente nada y si murieron lo hicieron sin saber nada de mí, seguramente pensando que me habría pasado algo..

Ser la única hija de una familia numerosa de granjeros no era sencillo, así que apenas solía faltar un par de horas en mis tareas, ya fuera por retrasarme en el trabajo por cualquier urgencia o porque me había entretenido con algo, suponía en numerosas ocasiones que me anduvieran buscando como si me hubiera perdido. Iban de casa en casa molestando a mis hermanos, cuñadas e incluso a mis sobrinos..

- Demasiada gente que llorar para pocar lágrimas..

Una vez en la cocina, un poco sumida en mis pensamientos me quité la chaqueta y me remangué aquella camiseta que sin duda necesitaba un buen lavado, como yo entera, que ya había optado por recogerme el pelo porque me daba un poco de grima hasta a mí. Me lavé las manos y una vez allí, de pie delante de la cocina me hiré hacia la mujer.

- ¿ Qué tiene pensado hacer para cenar Abygail?

Era una forma sutil de decirle que aquella era su cocina y lo que comeríamos sería su comida, así que lo suyo sería seguir sus indicaciones.

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11/09/2010, 01:06
Erika Stevens

Erika acompañó a Abigayl con cuidado al interior de la casa, y se permitió unos segundos para echarle un ojo al lugar. La casa parecía muy acogedora, y esperaba que no se quedara pequeña para nueve personas. Habría que organizarse, y si no habian camas suficientes, los visitantes probablemente deberían dormir por turnos, o compartir camas. Enseguida se puso con Alex, sonriendo.

Eso, eso... que vayan los chicos a cortar la leña y a vaciar los quads, que están más fuertes. Rió un poquito mirándoles, y sacando la lengua a su hermano. Ya nos encargamos del rancho nosotras. Le dio un codacito cómplice a Alex y esperó a que Abigayl dijera algo.

No sé porque, me temo que vamos a hartarnos de maíz...
Se sonrió un poco.

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11/09/2010, 22:05
Debbie Scott

No pude frenar mi curiosidad al verle acariciarse la cabeza; supuse por sus comentarios que habría tenido algún accidente… -¿Estas herida? Las comisuras de mis labios insinuaron una pequeña sonrisa al intentar imaginarme su incidente. -Si quieres puedo curarte...

De alguna forma hizo que recordara mis primeros pasos al volante, intenté restar importancia:

-Créeme, yo odio conducir. Sonrío afable – Pero es la única forma de moverse con todo esto – señalo el maletero, donde podían verse gran cantidad de garrafas, comida, medicamentos y demás objetos ocultos tras ellos... –y llegar a nuestro destino en un tiempo razonable.

Luego me intereso por sus intenciones y comparto con ella  las nuestras -¿Te diriges a algún lugar concreto? Nosotros pretendemos llegar a un pequeño pueblo de Nebraska…

 

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11/09/2010, 22:16
Vanessa Evans

- No, gracias... - sonreí con timidez - Fue solo un arañazo y ya está mejor. - asentí ante su comentario acerca de llevar un coche - Comprendo la necesidad si, además las noches son frías sin un sitio en el que resguardarse... - suspiré entrecruzando los dedos índices de mis manos - Nebraska... La verdad es que pensaba ir a Canadá. - dudé un instante, mirando al Norte con los ojos entrecerrados - Había pensado que como es más frío, a lo mejor la enfermedad o lo que haya hecho esto, no sobrevivió allí. - expliqué siguiendo los pasos de la mujer.

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12/09/2010, 13:32
Ian Mason

 

-De acuerdo, pero ten cuidado – responde Ian – Y tranquilo, que estaré atento.
 
En cuanto el rockero sale del coche, el periodista abre el maletero, saca uno de los fusiles de asalto y se escucha el BIP BIP característico que indica que las puertas han sido bloqueadas. Se mantiene parapetado tras el coche, apuntando hacia el otro para, caso de ser necesario – lo que en el fondo, espera que no haga falta -, cubrir a su compañero.
 
No parece que suceda nada por el momento, quizá están siendo un poco paranoicos, pero teniendo en cuenta la situación, nunca está demás. El lugar está bastante apartado, ya sería raro que se encontraran a alguien – vivo – por aquí, y de haberlo, su llegada no habrá pasado inadvertida.
 
-Si quisieran matarnos ya lo habrían hecho. O no tienen armas para hacerlo. O es algún desgraciado como nosotros, acojonado y escondido, rezando para que no le descubramos, por si somos saqueadores... como poco.
 
Demasiado silencio – el silencio de los muertos, naturalmente – pero tanta calma empieza a enervarle un tanto.
 
-¿Y bien? – pregunta, todavía sin abandonar su posición ni dejar de apuntar, no es cosa de bajar la guardia - ¿Qué hay por ahí?.
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12/09/2010, 16:34
"Death" Johnson

Death examinó con un rápido vistazo el interior del vehículo, parecía estar vacío. Con alivio, dejó escapar un sonoro suspiro. Se había alarmado por nada, cosa que le alegraba. Relajó la posición del arma, y moviendo la cabeza, con su media sonrisa, ya habitual, se acercó de nuevo a la posición de Ian.

- Nada amigo, parece que el coche está vacío. Esperemos tener la misma suerte con el resto del motel. Mientras volvía a colocar el seguro del fusil, y lo dejaba reposar en su hombro. - Creo que me estoy volviendo algo paranoico. JAJAJAJA Se pasó la manga de la camisa por la frente, secándose las gotas de sudor, que habían aparecido tras el tenso momento anterior.

- ¿Que te parece si registramos las habitaciones? Desvió su mirada hacia el edificio. - No me gustaría encontrarme ninguna sorpresa mientras descansamos. Y a lo mejor tenemos suerte, y encontramos una maquina expendedora de tabaco, o hasta un par de hamburguesas en el congelador. JAJAJAJAJA. Detuvo su carcajada unos momentos, dedicando una mirada escrutadora a Ian. - ¿No serás vegetariano? El tono de la pregunta fue serio, como el gesto que adoptó la cara del músico. - JAJAJAJAJA. Volvió a explotar en una divertida carcajada. Sin duda, estaba bromeando. Tal vez fuera la forma de relajar la tensión que tenía el viejo rockero.

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12/09/2010, 21:14
Debbie Scott

Reanudamos el viaje, mientras pensaba en sus palabras:

-No falta lógica en tu razonamiento – me refería inequívocamente a su intención de ir al frío norte canadiense. -El nuestro se mueve por algo más espiritual – lancé una mirada a los hombres que nos acompañaban. -Quizá los físicos deseen contarte los detalles – dejé claro que no estaba capacitada para exponer sus teorías.

-En cualquier caso, seguro que James encuentra una ruta que nos favorezca a todos -Ladeo ligeramente la cabeza hacia el lugar del copiloto. – Si dices conocer la situación de las cercanías, tal vez sería conveniente que nos pusieras al tanto, para evitar incidentes – La miré por el retrovisor y aclaré: -Sería muy desagradable encontrarse con los esclavistas... luegoescruté el horizonte buscando cualquier indicio sospechoso.

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12/09/2010, 21:38
Vanessa Evans

Tomé asiento en la parte derecha de atrás, aunque procuré mantener la distancia con el hombre que tenía a mi lado, miraba de reojo a este mientras miraba al frente, apartándome el pelo de la cara cuando este caía sobre mi mejilla izquierda.

- Ha pasado más de una semana, - me excusé cuando la chica me preguntó sobre el estado de las ciudades - pero fué en Chicago, donde encontré un grupo numeroso de hombres armados y con coches como este. - señalé el todo-terreno apoyando mi mano izquierda en el asiento - Capturaban a los supervivientes que se cruzaban en su camino y los cargaban en un camión militar... - suspiré al tiempo que un escalofrío recorría mi espalda - Me dí la vuelta sin dudar un solo segundo. - expliqué dedicando una mirada al hombre de al lado - Así que físicos ¿eh? - pregunté con una mueca, yo estudiaba humanidades y la única ciencia que se me daba bien era la política - Y tú, ¿a que te dedicabas antes? - determiné inclinándome ligeramente hacia adelante y apoyando mi mano en el respaldo del copiloto.

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13/09/2010, 00:30
Ian Mason

El periodista no las tiene todas consigo y solo cuando Death se acerca a él, deja de apuntar y se incorpora, aunque todavía se le nota un poco tenso.

-No me hables a mi de paranoias, que de eso sé un rato largo, amigo – medio gruñe mientras baja el M-16 y suspira de algún modo. Luego mira hacia el edificio y asiente.
 
-Si, porque desde luego yo no pienso cerrar un ojo hasta que no hayamos registrado este lugar – echa andar hacia lo que debe ser la “recepción”, por llamarle de algún modo, del motel – No te diré que de cabo a rabo porque, ya sin luz, la cosa está jodida. Pero si lo mejor que podamos. Eso si, el coche se queda cerrado. ¿Llevas una linterna encima? Porque en nada vamos a ir más ciegos que Steve Wonder.
 
-¿Eh? ¿Qué si soy vegetariano? – pregunta, deteniéndose un instante y echándose a reir - ¿Pero que dices? Donde esté un buen filete, que se quite lo demás. O un buen asado, joder, o unas costillas a la brasa. Con su salsa barbacoa – sacude la cabeza y tuerce el gesto – Pero que mierda, hasta una de esas hamburguesas que dices me comería, si no fuera porque estarán podridas. Y que nos hayamos librado de la gripe no creo que nos libre de una gastroenteritis.
 
En la recepción no hay nadie, hasta que dan la vuelta y se topan, tras el mostrador, el cadaver de una recepcionista.
 
-Eso si que es morirse trabajando – comenta con un toque de humor negro – Cojamos las llaves y vamos mirando a ver que hay por ahí. Igual el coche era suyo. Pues mucho trabajo no tenía, no.
 
-O vivía aquí, en plan Norman Bates, como un travelo.
 
Explorar esta parte solo les lleva unos minutos. Al menos hay una pequeña despensa, y aunque los alimentos perecederos no se hallan en muy buenas condiciones, hay bastante comida, latas y demás. Las habitaciones que van encontrando están vacías. Incluso bastante limpias, aunque con un poco de polvo y ese típico olor a cerrado. Son sencillas, decoradas con ese toque hortera que caracteriza a tales lugares. Pero comparadas con algunos lugares donde Ian ha tenido que hacer noche, son el paraíso.
 
-Supongo que tu estarás acostumbrado a esos hoteles de lujo de Las Vegas – le comenta a Death mientras abren la última puerta – pero chico, hay que ir haciéndose a la idea y... Joder.
 
Frente a ellos, en la cama, hay una pareja – muerta – en posición inequívoca de haber estado dándole al tema hasta el último momento.
 
-Me parece que esto es llevar el Carpe Diem un poco lejos, je, o a uno de los dos le ponía montárselo con cadáveres.

Notas de juego

No es que me lo monte, que también, pero le pregunté a Targul que había por dentro XD

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13/09/2010, 16:57
James Periwinkle

Se dió la vuelta cuando la chica entró en el coche, mirándola con una sonrisa, le tendió la mano. Parecía joven, aunque las mujeres solían aparentar más edad cuando son adolescentes. Creía haber visto a las suficientes para reconocer a una.

-James Perinwinkle, doctor en física -dijo- Es un placer, Vanessa. Este es Amanullah, también doctor en física. Ambos somos premios nobel, del acelerador de partículas de Suiza. Aunque supongo que eso importa ahora más bien nada.

Parpadeó, mirando a su compañero.

-No se mucho de medicina, pero si los estados del norte del país han sido diezmados, al igual que los del sur, no parece que el patrón vírico de la supergripe sea menos contagioso con el frío. Te va a sonar a tontería, pero si es una gripe, la gripe de toda la vida ha dado en invierno, cuando hace más frío. Todavía estamos en enero, así que cuanto más se vaya al norte, más frío hará. Frio gélido, y todo eso. Entre mis planes no están el morir de un resfriado común. Ten en cuenta que debido a la infección, es dificil conseguir medicamentos comunes. Lo primero que se saqueó fueron las farmacias.

Parpadeó, reflexionando un momento.

-Esos esclavistas, creo que se quienes son. Verás, tuve un sueño, antes de todo esto. En ese sueño, una vieja de Nebraska me dijo que fuera a verla, y me previno de que no debía acercarme al hombre oscuro. Creo que se refería a un hombre poderoso, o algo así. Posiblemente, esos "esclavistas" trabajen para él.

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13/09/2010, 17:05
Amanullah

El indio se había mantenido callado, mirando de reojo a la chica, que parecía miedosa, algo cohibida por su presencia. En realidad, entre sus prioridades no estaba el violar a nadie. Había visto demasiada muerte, y todavía andaba pensando si la infección habría o no llegado a su país natal, y que habría sido de su vieja madre.

-Jamessh, amigo. No he querido deshir nada por sheguir tus shuenos, pero me pareshe una idea eshtúpida. Shin embargo, como bien dishes, no hay a donde ir, ashi que cualquier plan me parece mejor que no asher nada.

Parpadeó, mirando a la joven. Le ofreció la mano.

-Amanullah Jashid. Para shervirte. Conshiderame como Apú, ya sabesh. No shoy un indio que vive en América, shino no un indio americano.

Sonrió por su propia coña.

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13/09/2010, 19:25
Vanessa Evans

Me limité a sonreír y asentir ante el diluvio de información que aquel hombre me estaba lanzando. Estreché la mano de ambos y luego me recosté en el asiento, acongojada por todo lo dicho, una supergripe, esclavistas que trabajan para un hombre oscuro, una anciana que se aparece en sueños y te dice que viajes a Nebraska.

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13/09/2010, 20:01
Stanley Westen

 

El lugar parece calmarse rápidamente tras la partida de Price, único que parecía compartir la inquietud de Stanley respecto a aquella situación y a aquel lugar, pese a que el militar no se expresara de manera muy diplomática. Se pregunta si no tendría que haber seguido a aquel sujeto, pues esta mas de acuerdo con él que con lo que parecen pensar los demás respecto a todo aquello, demasiado dóciles antes tal situación. Es entonces cuando Stanley cae en la cuenta de que él tampoco esta haciendo nada, de que aun no estando de acuerdo, sin entender del todo lo que sucede, tampoco a dicho nada ni se a expresado al respecto. Tal vez los demás estén en la misma situación, aunque algunos se vean realmente cómodos y felices, como Alex y Erika, puede que el resto este tan confundido como él, y puede que no digan nada, que no expresen sus incomodidades, para evitar que suceda lo que acaban de ver entre Price y Alex. Puede que sea eso, o puede que sea por el hecho de no ver ninguna alternativa, y al menos en lo delirante que es todo aquello es bueno ver a alguien con un plan, aunque vago e irreal, que funcione como punto de guía. Por estar de acuerdo, por diplomacia, o por resignación, esas parecen ser las únicas explicaciones.

Stanley se sienta en los escalones del pórtico y se lleva las manos detrás de la nuca, mirando el suelo, tomando algo de aire, mientras lentamente cierra los ojos. Por el momento tan solo cree posible seguir con todo eso, aunque sea un poco mas. No le importa ver a donde lleva, no es eso lo que le motiva a seguir. Realmente, no sabe que es lo que le hace decidirse por seguir a ese grupo un poco mas, a diferencia de Price. Puede que se sienta en obligación de no abandonar a nadie mas, o puede que no ve alternativa. O tal vez sea posible que tan solo este prolongando el final, la opción mas clara y que había estado fuerte y latente en su cabeza desde hacia mucho tiempo. Su familia necesita un entierro digno, no puede seguir por ahí sin ver a sus hijas por ultima vez, sea cual sea su estado, ni puede soportar la idea de haber dejado a su mujer tendida en el jardín de su casa. La idea de dar una despedida en condiciones a sus seres amados, para luego poner fin a todo aquello de una buena vez, es la que mas fuerte ronda por su cabeza, y a la cual esta tratando de retrasar, aunque cada vez la vea mas inevitable.

Tras pensar unos minutos en silencio, Stanley finalmente se pone de pie, mientras los escalones de madera del pórtico rechinan debajo de él.

- Voy al pueblo – Dice a los demás. Solo los hombres están ahí, y Tom, que es mas como un niño – si nos vamos a mover a algún sitio vamos a necesitar un transporte mejor – comenta mientras revisa el quad, los únicos medios de transporte que les quedan, buscando sus cosas – cualquier ayuda es bienvenida – agrega mientras termina de tomar sus cosas, escondiendo muy bien el arma que llevaba con el desde hacía tiempo. Se lamente no tener el fusil, pero lo había dejado en el Humvee, y Price se había ido de manera muy apresurada. Se lo ve un poco mas animado que antes, al menos para quienes habían viajado con el desde hace tanto tiempo, tal vez por el hecho de saber que hacer a continuación, aunque aun dista mucho de ser el viejo Stanley.

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13/09/2010, 22:42
Debbie Scott

Se me escapa una pequeña carcajada ante la reacción de la joven, por otra parte totalmente comprensible... después de todo, pocas veces se tiene la oportunidad de codearse con unos tipos tan peculiares. Para mi también fue difícil asimilar tal surrealista información. Quizá ahora entendiese porque no me atreví a contárselo yo misma.

Luego contesté a su pregunta:-Defiendo los derechos de los ciudadanos. Hablaba en presente –Es una forma de ser, está por encima de una mera cuestión profesional, no distingue entre un antes y un después… Sonreí – Pero si te refieres a lo que ponía en mi currículum, trabajaba para el gobierno, en la división contra terrorista del FBI. - Era algo a lo que no podía renunciar, o acaso lo hacía cuando colgaba la placa los días libres o durante las vacaciones...

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13/09/2010, 22:49
Vanessa Evans

- Oh. - miré a la rubia con ligera sorpresa - Una agente federal, dos físicos premiados con el Nobel y... - suspiré un instante y sonreí de manera casi cómica - Yo. - me acaricié la cabeza echándome el pelo hacia atrás para rehacer mi coleta - Una estudiante de humanidades que aspiraba a estudiar ciencias políticas en la Universidad de Pennsylvania... - negué con la cabeza tras terminar de colocar mi coletero - Todo esto es tan surrealista... - murmuré mirando por la ventanilla del vehículo militar.

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14/09/2010, 17:31
Howard Keenan

La parsimonia de Howard se disipó como si no hubiera existido ante el sobresalto de Price. Los militares le daban mala espina, un prejuicio común entre alguien cobarde y borracho como él mismo. La verdad es que ya podía verlo echándose encima de la vieja y disparando a todos los presentes, con tal de saciar su sadismo innato. Pero nada sucedió, más que algunos gritos y el humvee derrapando y levantando una polvareda, para luego abandonar la escena toda velocidad. Esperaba no encontrarse con ese tipo nunca más, aunque si quería sobrevivir en la ciudad, probablemente terminaría junto a Flag.

Aún se le veía algo nervioso, pero se calmó cuando todos comenzaron a ignorar el pequeño episodio. Abygail comenzó a subir las escaleras, y todos la siguieron cual procesión en busca de un ángel. Howard observaba el espectáculo, impasible. Ahora que estaba allí, n o tenía muy en claro cual era el próximo paso. ¿Armarse? ¿Matar al "malo"? ¿Organizar una comuna y sobrevivir como hippies, esperando que Flag no se interesase por Nebraska? Si es que Flag no era el único, algo que dudaba seriamente.

Anonadado por la incertidumbre, se quedó en la retaguardia, al igual que Stanley. Ambos habían perdido mucho, pero la diferencia entre los dos es que Howard comenzaba a apreciar lo que ya no tenía en ese momento, precisamente cuando estaba sólo. El alcohol, el abandono, el hedonismo... Todo parecía intrascendente a pesar de que vivía para esas cosas.

Stanley se agarró la cabeza, y una vez más, el escritor no sabía muy bien como proceder. Si ignorarlo y ocuparse de sus penas, o intentar consolarlo. Después de todo, iba a necesitar a aquellas personar por mucho que la idea le incomodase. No obstante, el hombre de familia se levantó con fuerzas renovadas y una mirada decidida, y de algo de ese ánimo Howard se contagió.

-Descarguemos primero, y luego te acompañaré al pueblo- sugirió, aunque sin esperar consenso. No había muchos bártulos en los quads, pues la mayoría había quedado en el humvee, pero lo que había quedado, Howard se dedicó a meterlo a la casa. Le pidió direcciones a Abygail, y estuvo listo para partir.

Si el tal Dios existe, habrá una puta licorería en ese pueblucho

Notas de juego

 

Cita:

Los americanos no usan bidet. Lo creáis o no xD.

Hey, hey, ¡que yo también soy americano y estoy orgulloso de mi bidet!

 

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14/09/2010, 20:36
"Death" Johnson

- Joder... Que retorcido sentido del humor. Death sonreía ante la ocurrencia de Ian, pero salió de la habitación algo asqueado por la escena. Aun no se había acostumbrado del todo a ver, y a oler cadáveres.

- Mejor te quedas tu con esa habitación... jejejeje. Yo prefiero instalarme en una en la que no  hayan sudado "recientemente"... Intentaba no pensar demasiado en los cadáveres haciendo chistes malos.

Death había cogido todos los alimentos aun comestibles, y los había metido en una bolsa de basura. Había colocado, con especial mimo, una botella medio llena de ron. Como le apetecía ahora echar un trago. 

Aun desde el pasillo, y con la bolas a cuestas, esperó a que Ian saliera de aquella habitación. - Caballero, ya puede elegir su suite... Haciendo un teatral gesto con el brazo, y acompañándolo de una alegre sonrisa. - Espero que pase una agradable noche.

Dirigió sus pasos hacia una de las habitaciones vacías, y esperó que Ian lo siguiera. - Dormimos juntos, ¿no? Joder, continua sonando mal. JAJAJAJAJA.

 

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14/09/2010, 21:16
David Green

No hace tanto tiempo, cuando era médico y tenía una vida, solía tener una frase que me encantaba para señalar lo obvio. "Si es blanco y va en botella...."

Y ahora mismo, escuchando a Andy por radio anunciar lo que estaba viendo, era evidente que teniamos delante la botella de leche. Vehículos 4x4, una docena de hombres armados. No venían a tomar el té. Y esa operación contaba con recursos, pues no tenía duda alguna de que aquella avioneta estudió la zona y permitió organizar el asalto. Y aunque nosostros también teníamos armas, los supervivientes de este emplazamiento no eran guerreros. Eran buena gente que habían logrado salvar el cuello de un apocalipsis que había diezmado la Tierra. Pero tras ese logro, si se enfrentaban a salteadores o lo que Dios sabe qué eran esos hombres, morirían todos....

"-Veréis... - dije a los presentes - Esos hombres no parecen venir aquí con buenas intenciones. Nadie hace una visita de cortesía con un grupo de hombres armados con fusiles de asalto. Aunque me duele en el alma sacrificar este lugar, si nos quedamos, nos matarán. Un enfrentamiento con ellos ya podéis imaginar como acabará..."

Miré nuevamente hacia nuestras casas, observando con tristeza el que hasta ahora había sido un lugar de paz.

"-Creo que lo mejor es que huyamos y salvemos la vida. Sé que la idea de vagar por un mundo muerto, no conseguir echar raíces en ninguna parte, puede preocuparos. Pero este es una tierra hostil, en la que siguen existiendo hombres malvados. Tenemos que elegir.... y yo elijo seguir vivo..."

Hice una mueca, guardando silencio, esperando otras opiniones. El tiempo iba en nuestra contra, así que debíamos decidir...

 

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15/09/2010, 23:58
Brick Hayes

Hayes no fue capaz de responder a la sonrisa que el alcalde del pueblo les brindó, sabía que su esposa si lo haría, pues, de los dos, era la que más necesitaba la compañía de otras personas. A esto se añadía el hecho de que Brick nunca fue un hombre especialmente dado a sonreír, en las calles te hacía más débil hacerlo.

Los sucesos de la primera noche lo habían vuelto aún más desconfiado sobre la naturaleza de las personas, pero de momento, aquel tipo les estaba brindando la oportunidad de recuperar algo de la que, parecía, una lejana vida, por eso se había mostrado más amable y locuaz de lo habitual. Recorrió con la mirada la fortificación tras las palabras de Green, no era nada del otro mundo, pero, no sabía si por suerte o por desgracia, dudaba mucho de que fueran atacados por una gran multitud.

Gracias señor Green por su amabilidad sabía que, dentro de la tragedia, habían sido afortunados, que a ni a Vivian ni a él les había afectado el puto virus, se preguntaba cuantos matrimonios podían decir lo mismo, incluso se preguntaba cuantas personas que se conocían de antes habían sobrevivido. Pensó el anciano y la niña de Philadelphia, seguramente estarían muertos, pero no podía culparse, de momento mantenía la promesa que le hizo a su esposa, y eso para él era lo más importante.

¿Son mucha gente por aquí?

Preguntó sin dirigirse a nadie en particular mientras sacaba del bolsillo de su chaquetón de color blanco un paquete de chicles, tomando uno y ofreciendo a continuación a los presentes.

Se preguntó, mientras acompañaba a Andy, porque demonios había un alcalde y quien lo había puesto en el cargo, y eso que Brick era de los que nunca se preocupó de quien mandaba,  ya que las cosas no cambiaban para la gente como él hubiera quien hubiera en el gobierno.

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16/09/2010, 19:38
David Green

Notas de juego

Me temo que el post de Brick prosigue con el punto en el se quedó su primera participación, allá por el mes de julio, cuando se supone que llegaba a nuestra bucólica comunidad. Algo me dice que no sabe que vamos a ser atacados de forma inminente por un grupo bien armado y que estamos a puntito de evacuar el lugar....