Partida Rol por web

Audaces fortuna jubat

Primer Acto: El viaje

Cargando editor
14/05/2010, 15:25
Director

Es noche cerrada cuando tomáis el camino a Estella a apenas una jornada de distancia.
Donde haréis noche.

Cargando editor
14/05/2010, 15:38
Director

Jornada 1 ( Pamplona- Puente la Reina )

Camináis a paso ligero, las casas de Pamplona empiezan a quedarse atrás y cada vez os cruzáis con menos gente. ç

Permanecéis callados , sólo se oyen los cascos de los animales y las ruedas de madera del carro que de cuando en cuando tropiezan con una piedra y emiten un crack.

Debéis caminar toda la noche y casi todo el días siguiente si queréis estar en Puente la Reina para la hora de cenar.

Afortunadamente, las horas ayudan a que el camino de salida de Pamplona esté despejado y no encontréis otros carruajes ni gentes por los caminos. Así es mucho más rápido.

Refresca un poco y de vez en cuando a alguno le da un escalofrío por aquello de la situación: caminando de noche en estos tiempos.

El camino puede ser traicionero y nunca sabéis con lo que os podéis encontrar, el peligro acecha en cada saliente, en cada cuesta o en cada llano.

Cargando editor
14/05/2010, 16:24
Inés de Toledo

Nunca me ha gustado el silencio, he crecido en una casa llena de gente gracias a que somos 5 hermanos... Alfonso, mi padre, cuando aún estaba bien ea muy alegre y nos cantaba a todas horas y nos contaba chistes antes de dormir. Es una pena que tras la muerte de Madre no volviera a ser el mismo. Ninguno lo hemos sido pero su cambio fue el más notable sin duda.

A pesar de que el caminar de noche implica prestar una mayor atención a todas partes por si acaso hubiera asaltantes de caminos no puedo evitar ir canturreando en voz baja algunas canciones que recuerdo de mi infancia y no tan infancia... canciones que cantaba a mi hermana Elena. La pequeña Elena... ¿qué será de ella? ¿seguirá en Toledo? Si es así quizá vuelva a verla y pueda quedarme a vivir en la ciudad que me vio crecer.

Ha sido una grata sorpresa la propuesta de viaje de este comerciante, sí señor... pienso dándome cuenta de repente tras tantas horas andando de hacia dónde nos llevan nuestros pasos: vuelvo al lugar del que partí buscando una mejor vida, vuelvo practicamente igual que como cuando me fuí pero puedo estar contenta de seguir viva. Sonrío para mí y sigo canturreando de mejor humor.

Cargando editor
15/05/2010, 00:50
Hernán de León

Que agradable es andar de noche, siempre me gustó la oscuridad y el silencio. Lo único que me preocupa es el frio que esta empezando a levantarse.

Veo en las cara del criado el miedo que le producen los maleantes que se esconden en los caminos y que buscan el menor despiste para abrirnos en canal. Rio. A diferencia de la mayoría de las personas, estas situaciones me dan vida, mientras otros corren yo disfruto atravesandolos con mi espada.

Pongo una mano en la empuñadura de la espada mientras ando, era una costumbre que adquirí del maldito de mi jefe. El cansancio comenzaba a notarse, el ambiente cada vez más oscuro, el frio más intenso.... Me siento agusto.....

Cargando editor
15/05/2010, 03:49
Alejandro Zanjón

Alejandro sabía que no estaban siendo muy sigilosos. Por mucho menos se a tenido que topar con fieras salvajes en distintos lugares. Sin embargo mucho no se preocupa, quizas inconcientemente sepa que son  numerosos y  que eso los resguarda.  El simplemente se dedicaba a escuchar. cada tanto la brisa golpeaba en los arboles cercanos generando un sonido similar al de un suspiro sostenido en el tiempo. Cada tanto escuchaba a Ines.

Si no tuviese ese aire gitano ya hubiese domesticado a esa hembra.

Por alguna razón particular Alejandro asociaba a los gitanos con practicas oscuras poco naturales. Algo que consideraba muy real y a la vez algo terrorifico. Como con la muerte, uno siente temor por lo que no conoce.

Cargando editor
15/05/2010, 11:06
Ramona Trescantos

Ramona caminaba tranquila al lado de sus compañeros de viaje, el camino podía ser peligroso, pero eso era algo que a ella no le preocupaba demasiado. No era amante del arte de la guerra, tampoco tenía aptitudes para ello. De su padre había aprendido a manejar un poco el arco, pero tampoco era demasiado diestra en ello.

Cuando pasó un buen rato, se acercó a don Malaquías. Siempre era interesante conocer a la gente y más si eran los que pagaban..

Cargando editor
15/05/2010, 11:10
Ramona Trescantos

Disculpe don Malaquías, no me gustaría que pensara que soy una mujer impertinente ni chafardera, pero... ¿le molestaría que le preguntara por los asuntos que le traen a Toledo? Parece usted un hombre importante, quizás un respetado meracader y me he estado preguntando por ello... -dice con gesto inocente sin parecer que busque nada más que simple curiosidad-.

Notas de juego

He puesto el mensaje como sólo para el director porque no sé a qué distancia va Malaquías del grupo y no sé si como máster quieres que los demás oigan la conversación por estar a más distancia o por alguna otra razón... 

EDITADO: vais tan cerca y al ser de noche y no oirse prácticamente nada , todo el grupo puede oirlo.

Cargando editor
15/05/2010, 21:30
Roberto Alvarez

Camino solitario en silencio en último lugar, cerrando la comitiva. Desde aquí puedo observar a Malaquias y a su perro faldero.

A pesar del frio de la madrugada, la caminata me mantiene en calor mientras cruzamos la sierra del perdón. A pesar del nombre, por la presencia de una hermita, podía ser un buen sitio para una embosacada, por estar alejada de la civilización. El camino de los peregrinos, desierto a estas horas, nos permite avanzar con rapidez, pero miro con desconfianza alrededor para detectar una posible amenaza.

Cargando editor
16/05/2010, 21:21
Malaquías de Tolosa

Malaquías observa con extrañeza a la mujer que se le acerca a importunarle con sus preguntas, pero una vez acaba de hablar, su rostro muestra una expresión amable y responde sin problema alguno:

-¡En absoluto!, la razón por la que viajo a Toledo se haya en forma de las más exquisitas telas que van en el carro. Se me han hecho pequeñas las ciudades del norte y cada vez hay que viajar más lejos si uno quiere colocar todo el material. Ya sabéis, hombre de mercado hoy aquí y mañana en algún otro lado.

Su contestación finaliza con una sonrisa algo desganada por lo avanzado de la noche, para continuar con el camino a lomos de su preciosa montura.

Cargando editor
16/05/2010, 21:21
Tobías

Tras la pequeña (y única) conversación con la que se ha amenizado un poco la jornada desde que partieron, Tobías habla desde el carro a su amo, que cabalga al mismo ritmo a su vera.

-Mi señor, creo que habéis contratado gentes de intriga en lugar de gentes de armas.

A lo que responde el de Tolosa con severa mirada de reproche en lugar de gastar en palabras.

Cargando editor
17/05/2010, 00:02
Director

Jornada 2 ( Puente la reina - Estella )

Habéis caminado todo el día, es prácticamente de noche cuando llegáis a Puente la reina. Pernoctáis en casa de un judío de la ciudad , que os sirve una cena copiosa y al día siguiente os da muy bien de desayunar.

Al despertar os sentís como nuevos.

El sol está ya casi arriba cuando partís de Puente la reina rumbo a Estella. Hace un sol radiante y camináis a muy buen paso . Como siempre, las mujeres a los lados de la carreta , Malaquías abriendo paso con su fiel Tobías tirando del carro y Hernando y Alejandro a retaguardia.

Notas de juego

Podéis seguir roleando.

Cargando editor
17/05/2010, 00:39
Ramona Trescantos

Ramona parecía estar radiante por la mañana. Habían comido y dormido como no hacían desde... tanto tiempo que su memoria no llegaba a acordarse, quizás nunca en su vida habían probado bocado más exquisito. Parecía que habían hecho un buen trato.

La mujer caminaba delante, con su arco corto colgado de la espalda y canturreando una típica canción de viaje. No destacaba precisamente por su voz pero su belleza, a pesar de ser una campesina, compensaba lo demás.

Había guardado alguna fruta para el camino, para refrescar la boca y alejar el hambre durante el camino. En ese momento se encontraba cerca de Tobías, al que ofreció gentilmente una manzana.

¿Os apetece una manzana? Las he guardado para el viaje, aún falta un buen rato para comer y he pensado que quizás os apetecería una.

Cargando editor
17/05/2010, 11:58
Inés de Toledo

Miraba de tanto en tanto de soslayo al tal Tobías. No parecía un hombre para nada amigable, lo cual no decía mucho a su favor dado que su belleza no era precisamente... visible. Ni guapo por fuera... ni guapo por dentro, pensé riéndome divertida yo sola. No entendía del todo a Ramona, insistente a su manera intentando sacarle una buena palabra a aquel hombre que no parecía dispuesto a hacer tal cosa ni tan siquiera por una hermosa mujer como la campesina.
Me sentía bien, muy agusto, tras la agradable noche y mejor comida. El copioso desayuno aún lo sentía en mi estómago y me hacía estar de buen humor, aunque el que el sol nos regalase sus mejores rayos también ayudaba.

- Si el caballero no acepta la fruta, lo haré yo por él encantada. - dije con una sonrisa resplandeciente y una mirada pícara mirando a través de los huecos que dejaba el carruaje a Ramona.

Cargando editor
17/05/2010, 19:19
Roberto Alvarez

Después de la primera dura jornada de trayecto no me apetece meterme en la casa de un judio pero mis prejuicios desaparecen al ver servirse las generosas raciones de nuestro anfitrión. Como con bastante apetito, y bastante poca educación, y agradezco la buena bienvenida que nos han dado. Después de dormir a pierna suelta, debido al cansancio y a la comilona, me despierto renovado y con mejor humor que de costumbre.

Además al bajar a desayunar veo a Ramona con otros ojos. Parece más guapa esta mañana, no la recordaba así. Como con alegría el desayuno y parto con el resto del grupo a empezar nuestra siguiente etapa.

De nuevo cerrando el grupo a poca distancia, me permito observar a los demás sin que ellos puedan hacer lo propio a cada momento. No puedo evitar fruncir el ceño al observar a Ramona ofrecerle la manzana a la cucaracha impertinente.

Notas de juego

Vaia cambio de look Ramona! (justo aier vi la película de la tipa esa)...por cierto se molvido decir ke no pasa nada por lo de la presentación... me vino bien para interpretar el caracter del tiparrako este :)

Cargando editor
18/05/2010, 11:41
Tobías

Tobías, que a pesar de haberse tirado toda la noche roncando como un cerdo, se levantó del mismo humor que ayer, observa desde el carruaje, con desprecio, la fruta que se le ofrece. No parece tener intención de aceptarla, más tras la intervención de Inés, alarga la zarpa y agarra la manzana, arrebatándosela de las manos con brusquedad a la moza y llevándosela a la boca de inmediato.

Le hinca los deformes dientes que le quedan y arranca un pedazo que escupe casi al instante, arrojando el resto de la manzana intacta al suelo, donde las pezuñas de la mula hacen pedazos tras su paso.

-Estaba podrida.

Y dedicándole una sonrisa a Trescantos, continúa agitando las riendas para que la bestia de tiro no se duerma.

Cargando editor
18/05/2010, 11:41
Malaquías de Tolosa

Malaquías, que no se ha percatado de lo ocurrido entre su criado y las mujeres, continúa en cabeza a lomos de su yegua, fresco tras no haber dado un solo paso en toda la jornada, pero con las posaderas inquietas a buen seguro.

-Apresurad el paso, tenemos que llegar a Estella antes de que la noche nos impida ver el camino. Allí pernoctaremos en casa de un viejo conocido mío.

Semblante sereno y serio, sin perder el tiempo charlando con la soldadesca, centrado en el viaje más que en ofrecer rica conversación.

Cargando editor
18/05/2010, 12:56
Ramona Trescantos

Lo siento, era la última que me quedaba...-dice un poco preocupada la mujer- Lo siento de veras -dice mientras aprieta el paso a instancias de don Malaquías, con un semblante más serio y ya sin canturrear...

Notas de juego

Es que la foto no le hacía justícia xD xD xD De hecho yo también vi la película justo antes de subir la nueva foto ;)

Cargando editor
18/05/2010, 13:17
Director

Jornada 3 (Estella-Viana)

De atardecida llegáis a la villa de Estella. Todo permanece bastante tranquilo, véis los primeros humos de las chimeneas que empiezan a guisar las cenas.

Pernoctáis en casa de el mayor usurero de la ciudad y muy buen amigo de Malaquías, Isaac Leví. Esta vez el judío de turno, os trata poco mejor que a perros. Menos al propio Malaquías que le aloja en una habitación individual.

Los demás tenéis que dormir en un mísero pesebre, encima de un montón de paja y la cena es una especie de caldo sin ninguna substancia, a base de huesos de algún animal y un mísero trozo de pan.

La noche se os hace eterna y al amanecer, doloridos y de mal humor, estáis preparados en el exterior con todas vuestras cosas listos para partir cuanto antes y perder de vista a ese perro judío.

El día amanece lluvioso y camináis hacia Viana , según la ruta de Malaquías, tapándoos como podéis y así resguardaros de la lluvia.

Hasta la mula y el caballo de Malaquías parecen estar malhumorados y no hacen más que resoplar cada poco tiempo.

Cargando editor
18/05/2010, 21:39
Hernán de León

No me voy a quejar, desde que salí de León he dormido en sitios peores que preferiría no recordar. Aun así, este judio no me hace mucha gracia, esa prepotencia. Pero en el fondo me da igual, mientras nos pague bien y tenga la oportunidad de chafar algunas cabezas me parece que vamos por buen camino.

Me acomodo entre la paja. El viaje había sido fatigoso, y la cena no iba a ayudar a recomponerse. Mañana iba a ser un día duro.

El día amanece lluvioso y el carácter le cambia al grupo de caminantes. Mi humor tampoco es el mejor del mundo, pero no es necesario para hacer bien mi trabajo.

Cargando editor
18/05/2010, 22:17
Roberto Alvarez

Después de la falta de hospitalidad de este tal Isaac decido tomar nota mental de la casa por si a la vuelta decido hacerle una “visitilla” para comprobar lo que ahorra con tanta tacañería. Pero la mala noche y comida no me saca de mi alegría de estos últimos días. Cada vez que me alejo más de Pamplona me siento más libre, más desconocido. Me alegra conocer otras tierras y otras gentes que no me conocen.

Antes de salir del pueblo procuro robar un sombrero que tape bien mi rostro. No me es difícil hacerlo sin que se enteren mis compañeros por mi costumbre de quedarme el último. Me paro un poco en frente de una tienda que tiene gran variedad de artículos, incluyendo un vistoso sombrero verde con una pluma expuesto fuera. Lo examino como con intención de comprarlo y después de comprobar que nadie me mira, me lo guardo bajo la capa con disimulo y parto siguiendo a mis compañeros. Cuando ya nos hemos alejado de Estella lo saco de entre los ropajes y le ato una cuerda para llevarlo colgado del cuello.

Notas de juego

no se que tirada sería la apropiada si tengo que tirar algo