Partida Rol por web

Bueno, señor, la verdad no hay mucho para ver, le mostraré lo más interesante comienza a caminar para mostrar el barco.
Aquí en la proa tenemos un pequeño centro de entrenamientos para los soldados, sería un honor que impartiera entrenamientos aquí, los soldados estarían agradecidos.
De este lado, en la popa, hay un pequeño comedor, se comerá por turnos, los que tengan mayor rango comerán primero, por supuesto. Siguen caminando por el barco.
Y bueno, estos son los camarotes dice al ingresar el centro del barco por una puerta que conduce a unas escaleras. Mientras más arriba más alto el rango de las personas a las que pertenecen los camarotes.
Varios soldados pasan por el pasillo sumergidos en sus tareas y saludan al verlos pasar.

La lucha terminó en cuestión de segundos, el corte que le produjo Neizh fue preciso, limpio y sobre todo con gran profundidad, por un momento creyó que podría seguir pero finalmente sus piernas ya no soportaban el peso del cuerpo y cayó de rodillas en el suelo luego murmuró algo:

- Gracias - pudo pronunciar en un leve susurro y con la cabeza bajada - Ha sido un honor - concretó.

Pero la sangre seguía brotando a través de la herida con abundancia y fuerza, empapando la manga de su traje en un tono rojo muy acusado, se sujeto el brazo intentando reducir la hemorragia, además de apaciguar su dolor que en el fondo era más mental que físico, Tal vez debería haberle mostrado el poder del fuego... dijo para sí cuando intentó levantarse, pero su cuerpo seguía pesando demasiado y su vista se nublaba por momentos, esta vez cayó hacia delante apoyándose en el brazo que le quedaba sano, ¿Dónde te queda la dignidad? Vamos levántate pensó irritada, se alzó sacando las últimas fuerzas que le quedaban, y respirando entrecortadamente, se acercó al chico haciendo de nuevo una reverencia y tendiéndole la mano:

- Tengo que admitir que eres un rival muy fuerte, mi enhorabuena, y... - hizo una leve pausa - He de agradecerte el que me hayas demostrado que me queda mucho por aprender - la sonrisa se acentuó durante un momento.

Pero su sangre había llegado ya hasta el tatami y notó un pequeño mareo que trato de impedir conservando el equilibrio que en ese momento apenas tenía.

Neizh al ver desfallecer a la joven guardó rápidamente las espadas y se arrancó una manga de su traje. Rápidamente trató de atar la herida de la joven. Su intención no era dañarla y por ello se sentía mal. Una vez atada la herida la tomó por un brazo y le preguntó. ¿Hay por aquí algún curandero cerca?

-Bien... Bien... Vale, muchas gracias. Ahora iré a mi camarote. Si no le importa. me dirijo al capitán en tono de respeto, aunque, pienso, podría perfectamente tratarle como a sus soldados sin que nadie le dijese nada.

La chica respiraba seguía respirando con dificultad, ver tanta sangre en su brazo la ponía nerviosa, pues casi nunca había sido herida de aquella forma, aún era joven y no había tenido tiempo de practicar en un verdadero combate, sino que siempre se limitaba a practicar movimientos y técnicas.

Pudo ver un tanto borroso como el chico se acercaba, y con su manga trataba de tapar la herida, agradeció el gesto:

- No conozco la ciudad, es la primera vez que la visito, pero no será necesario un curandero, tan solo descansaré junto a aquel árbol, debería ser suficiente - Debe ser suficiente, fui yo la que le ofrecí luchar pensó avergonzada - Ya estoy acostumbrada a estos cortes - mintió, pues se sentía muy débil al lado de Neizh - Gracias por tu atención - sonrió un tanto fría - Además, supongo que no faltará mucho para que la princesa nos llame - le dijo para excusarse.

No es esa presencia para que la princesa os reciba. Ven conmigo, busquemos donde te puedas limpiar la herida. No ha sido mi intencion causarte daño y lo lamento. Permiteme ayudarte. Se dirije hacia uno de los guardias que se hayan cerca. Por favor hacia donde puedo encontrar un curandero, o alguine que sepa de heridas.

Los soldados se acercan y ayudan a Akai a acostarse en una colchoneta.
Todo buen soldado sabe de primero auxilios comenta el soldado que anteriormente venció a Neizh en duelo con una sonrisa.
El soldado tira un líquido en la herida de la jóven provocándole un profundo ardor.
Estarás bien, no afectó ninguna zona importante parece.
El soldado retira la benda improvisada de Neizh, luego cubre la herida con una tela blanca y posteriormente usa la benda de Neizh para reforzar el bendaje.
Eres una pequeña muy fuerte, ese golpe debería haberte matado, ahora veo porque la princesa está interesada en ustedes.

Te diriges a tu camarote, en el camino varios soldados hacen reverencias al verte pasar.
Cuando llegas a tu camarote todo está ordenado. Hay una cama preparada con sábanas rojas donde se puede distinguir claramente el símbolo del fuego en el centro. Un cuadro del señor del fuego Ozai cuelga de la pared enfrentada con la pared, dos velas están encendidas en una mesita bajo el cuadro, en el centro de la mesita hay papel y pluma. Un halcón mensajero está parado en un pide a tu izquierda, evidentemente está todo listo por si quieres mandar una carta.

Bien, llega a mi altura... Es digna de mí.Me giro hacia la puerta y la empujo suavemente
Veamo ahora el centro de entrenamiento. farfullo mientras subo a cubierta

Te diriges hacia la proa, y nuevamente los soldados que te ven pasar te dedican reverencias,tus pasos suenan fuertes en el metal del barco.
A paso firme llegas a la proa conde hay un improvisado tatami con varias velas ubicadas alrededor. El clima tropical de estas aguas no exige más, pasar frío no es una opción aquí donde el clima es cálido, el sol está comenzando a bajar, hace tiempo que pasó el mediodía. Desde la proa se ven los otros dos barcos y se ven los respectivos centros de entrenamiento de los otros barcos.

El joven se dirige al soldado y con sincero agradecimiento. Gracias, amigo, por tu ayuda. Aún hay mucho que aprender, y todo persona sensata debe comprenderlo.

Una vez remendada la joven con la venta y la sustancia para la herida, le llama la atención de la hora.

Vayamos, pues a buscar a la princesa. Quizás ya sea hora de que nos reciba.

Finalmente se resignó, dando su brazo a torcer y aceptando la ayuda que el chico le ofrecía, solo asintió pues no hizo falta nada más, cuando se disponían a buscar alguien que la curase Akai se le quedó mirando, Sus ojos son tan fríos... pero sé que solo es en apariencia, intenta simular ser una persona insensible, aunque en el fondo se esconde un buen corazón, estoy segura de ello, al fin y al cabo todos somos personas incapaces de actuar sin tener en cuenta nuestros sentimientos, aunque no sé si al igual que yo tiende más al mal o por el contario al bien, parece del lado oscuro, sin embargo esa preocupación y atención no son propias del bando... La voz del soldado interrumpió sus pensamientos, éstos la tumbaron en la colchoneta y el líquido que le vertieron le provocó una sensación similar a la de una quemadura, mostró una mueca de dolor, pues éste se intensificó durante algunos segundos, luego notó la presión de las vendas atadas fuertemente a su brazo, la alivió notablemente y se levantó, mostrando sus agradecimientos a los que habían echo las veces de curanderos, luego siguió al chico:

- Neizh... ¿eres capaz de controlar el fuego? - dijo al joven, pues llevaba un rato preguntándoselo - Y esas espadas... ¿cómo has aprendido a luchar así? Te deshiciste de mi ataque con mucha soltura y el corte en mi brazo fue muy preciso. Eres joven pero tu experiencia es bien notoria – una media sonrisa se dibujó en su cara mientras caminaban hacia el interior del palacio.

Neizh se detuvo a observar con detalle a la joven. Su tez era pálida y fina y su rostro regio. Sin embargo era sólo una niña. Una niña, pero con coraje. Pequeño "Copo de Nieve". pensó y esta idea le arrancó una pequeña sonrisa.

¿Cómo? la pregunta de la joven lo saca de sus pensamientos. Oh, no. Yo no soy un maestro del fuego. Tan sólo sigo los caminos de la espada. Pareceré un bruto guerrero. Piensa acerca de sus palabras y explicarse no es tan sencillo.

Digamos que las armas tienen un sendero especial, que no siguen exactamente los intereses de una nación ni de un grupo individual. No es lo mismo que ser un soldado o guerrero. Mi entrenamiento fue con un Maestro de Armas. Pero para lograr llegar a su altura nececito "años de mundo".

"Años de mundo."Eso fue lo que dijo el maestro a quien le había tomado cierto cariño. "Las armas tienen un espíritu propio." explicaba Las hachas siguen el camino de la fuerza bruta, las dagas el camino de la agilidad traicionera, ... y así ejemplificaba con cada pieza de guerra. "Pero la espada es la más noble de todas. Busca la libertad por sobre todas las cosas, y sigue un espíritu de justicia del que sin darte cuenta te hará partidario." y finalmente aconsejaba. "Vive a su altura".

Así que no sigue los intereses de ninguna nación.
Una bella joven aparece para interrumpirlos lleva puesto un kimono rojo de seda, el símbolo del fuego figura en su pecho y de la parte inferior del kímono salen grandes "llamas" alrededor, algunas llegan hasta la cintura, está cruzada de brazos y los observa con una sonrisa llamativa, su mirada es muy extraña, es entre fría y a la vez quema el corazón por dentro.
Bueno, esperemos que siga mis intereses señor Neizh, si no me equivoco.
Los soldados que están cerca aún, se arrodillan, Princesa Azula los escuchan decir mientras ponen sus rodilla derecha en el piso.

Akai notó la mirada de Neizh clavada en ella:

- ¿Y esa sonrisa? ¿No te estarás riendo de mí no? - bromeó pues sus labios siguieron el mismo gesto que los del joven - Vamos suéltalo...

Escuchó con atención las palabras del chico, tenía cierta curiosidad sobre el tema en cuestión, y cualquier conocimiento que este le proporcionase le interesaba, Así que un maestro en armas... había nostalgia en las palabras del joven, pero la chica también se emergió en el recuerdo:

- A mí siempre me han considerado una cría, incapaz de ser maestra del fuego ni poder controlar el elemento, Demasiado pequeña para asimilar su fuerza... me decían constantemente, pero sin duda he tenido una vida difícil. He recibido múltiples golpes, tanto mentales como físicos - la última imagen que divisó en su anterior casa, en el reino del aire ahora se apoderaba de su mente – Y lo crean… lo creáis o no me ha hecho madurar, y así me he dado cuenta de lo dura que es la realidad - su mirada estaba perdida – Me he entrenado con dureza y he aprendido mucho, no me considero una experta ni mucho menos, pero mi madre me adiestró bien, aunque ella también pensase que soy tan solo una niña y que no debía venir hasta aquí... Pero no quiero aburrirte - dice un tanto burlona, luego se queda mirando a Neizh fijamente, Tiene algo que...

Pero alguien los interrumpen, sin duda es la princesa, pues todos se arrodillan a su paso y su ropa es muy elaborada, Akai muestra una reverencia a la joven:

- Es un honor princesa Azula, tal y como solicitó aquí estamos para servirle, aunque al menos por mi parte no sepa de que se trata, sino le importa ¿podría aclararme porque me solicitó? O mejor dicho, ¿para qué nos encontramos aquí? - esperó ansiosa la respuesta, ya que desde que le envió la carta aquella duda rondaba su mente

Más barcos... Me dirijo a un seoldado y le pregunto:
Son amigos o enemigos, camarada?

La joven akai le sorprende sonriendo y le pregunta la causa. Se siente atrapado y se ruboriza idiotamente. Oh, no... no es nada. Me recordaís a mi hermana. Miente.

Luego aguanta un pequeño discurso de lo que ha soportado por ser joven e incomprendida. Es una cría con tarea de mayores. Tendrá que crecer rápidamente. He podido ver que eres buena en el combate, y si queréis te podría enseñar algunos trucos.

En eso aparece Azula quien aparentemente ha escuchado la conversación.

Aún no soy un Maestro de Armas Aunque eso espero Mis interes están donde se pague bien. Me disculpo si soy demasiado sincero.

Jajajaja la princesa ríe a carcajadas ante los dicho de Neizh, se aproxima a los dos lentamente.
Mira a Akai, Yo no te he dirigido la palabra campesina, se ve que no estás educada en la etiqueta de la realeza lanza una mirada de desprecio a Akai, luego vuelve a mirar a Neizh inspeccionándolo de arriba a abajo, seguidamente voltea para ver a Akai a los ojos ...aunque eso no es necesario para lo que debes hacer
Les de la espalda y se aleja dos pasos de ambos. Luego da media vuelta y observa a los soldados que están dispersos por el dojo.
Fuera, déjennos solos ordena con una voz fría.
Los soldados inmediatamente se marchan sin hacer preguntas. La princesa los sigue con la mirada cuando finalmente no queda nadie, hace un momento de silencio observándolos.
Muy bien, seguramente saben que estamos en guerra con las demás naciones. También seguramente saben que hace más de 100 años que no se sabe nada del ávatar. Durante años nuestra nación ha atacado estratégicamente a los templos del aire y hemos acabado con 3 de ellos, hay rumores de que hay otro templo aire al norte del continente en las montañas ubicadas al sur de la tribu del agua del norte. Hemos enviado un grupo de soldados a investigar pero no hemos recibido noticias de ellos aún. No podemos seguir gastando recursos militares en cazar a alguien que posiblemente ya no exista, es así que hemos decidido reclutar civiles con destreza suficiente como para estar a la altura de las circunstancias, ustedes son jóvenes y jamás despertarán sospecha, son lo suficientemente jóvenes como para pasar desapercibidos y lo suficientemente fuertes como para enfrentarse a contrincantes tan poderosos como los maestros aire.
Es así que les hemos asignado una misión... Su misión será buscar y cazar al ávatar, de ser posible vivo ya que no queremos que el ciclo se renueve una vez que lo encontremos. Lo mejor será que vayan a las montañas del norte del continente, ahí tendrán más chances de encontrar pistas sobre los últimos maestros aire, seguramente el ávatar debe estar entre ellos, si es que aún existe. Tráiganlo y si no lo encuentran, no vuelvan hasta que estén seguros de que el ciclo se ha roto y que pasó con el último ávatar.
La princesa sonríe y saca dos bolsas de entre su ropa aquí está su primer paga, es para los gastos del viaje les arroja las bolsas y ustedes las atrapan sin problema al ver adentro ven 500 mf en cada bolsa.
Ahora si no hay preguntas, tengo cosas que hacer la princesa muestra intenciones de despedirse y retirarse pero no se mueve, se queda cruzada de brazos frente a ustedes.