Partida Rol por web

No puedo evitar sonreir por las palabras de Ataulfo -no te falta razón, es un buen momento para atacarlos, si son un número que podamos manejar. ¿tenemos algún modo de saber cuantos son? igual tras esa puerta hay un gran salon con cuarenta orcos y solo iremos a ser abrumados por su número, si en esa habitación en silencio esta Alaric podra decirnos con cuantos orcos nos las tenemos que ver, y entonces decidiremos que hacer. Sin duda acabar con ellos nos reportaria una gran recompensa-

-Si yo fuera el secuestrador..-Dice Duncan atusándose la perilla,- no tendría al prisionero en la habitación más cercana a la salida, sino que lo ocultaría dentro donde hay más vigilancia y sus gritos no se pudieran oir desde el exterior. Sin embargo..-Continúa,-puesto que la puerta esta de camino, creo que los orcos no nos echarán de menos si tardamos cinco minutos más. Vamos, la diversion está garantizada guerrero, con la juerga que se tienen montada estarán horas.-Dice mirando a Ataulfo con una sonrisa.-

Algo entredientes, Ataulfo respondió - Está bien, si coge de camino, miremos antes esa habitación - viendo que sus compañeros estaban más por ésta opción...

Entonces está decidido,-Dice el ladrón alegre mientras guiña un ojo a Raangar.-

Me coloco delante de la puerta y la examino bien, buscando algún falso pestillo, un hilo, o cualquier cosa que signifique una trampa.

Tras las explicaciones de Duncan comprendeis que los sonidos extraños que escuchabais, parecidos a los gritos que daría un cerdo degollado durante la epoca de la matanza, eran los orcos cantando. Realmente es un sonido que podria llegar a haceros perder los nervios.

A continuación seguis a Duncan hasta la puerta que os ha indicado, donde se pone a examinar la cerradura detalladamente y a continuación abre la puerta de una pequeña y oscura habitacion llena de cajas, barriles, sacos y otros utensilios.

Cuando Duncan abre la puerta levanto mi linterna para iluminar la habitación por encima suyo

-solo un almacén, no creo que sea buena idea pararnos a registrar ahora, mejor cuando hayamos acabado con los orcos-

Intento distinguir por las voces cuantos orcos pueden haber de fiesta, pero es una tarea casi imposible

-tal vez haya llegado el momento de hacer lo que decía Ataulfo y atacar cuando están distraidos. Pero si lo hacemos hemos de ser todos, ha de ser una carga, no podemos quedarnos fuera a emboscarlos según salgan porque podría haber otra salida y alguno podría escapar por refuerzos-

En un tono algo sarcástico, el guerrero preguntó - ¿estáis decididos ya?.

Luego salió al pasillo y dijo - ¿alguno tenéis algún conjuro por el que sea mejor que actuéis antes? - una de las cosas que le habían enseñado era a protegerse de los efectos de los conjuros aliados. Era conocida la fama de algún que otro mago de haber aprovechado la situación para eliminar algún 'compañero' molesto - tras esto, entraré cargando y no atenderé a explicaciones posteriores - avisó.

Echando un vistazo a lo que puede ver, Duncan se da la vuelta.-Vamos a colarnos en una fiesta.-Dice con una sonrisa algo maquiavélica.

Rasgo uno de los sacos y cogo un trozo de tela poniéndolsela al frasco de aceite a modo de mecha.

Os acercais a la puerta del fondo del pasillo de la que surgen los sonidos de "juerga" de los orcos, aunque para vosotros bien podria ser una batalla campal. Es muy dificil intentar discernir cuantos orcos podria haber dentro de la sala, desde cuatro hasta una docena. Quizas alguien con el oido entrenado podria intentarlo, o alguien que conozca el lenguaje de los orcos.

Ataulfo avanzaba pacientemente por el pasillo, mostrando su educación marcial y su templanza ante el combate - ¿Cuantos eran, Duncan? - preguntó a su compañero.

Cierro los ojos y me concentro intentando discernir las voces de los orcos en medio del escandalo sin embargo lo dejo al cabo de un rato exasperado

-bueno, ¿alguno entiende algo de esa jerga insufrible?-

Mmm...espera un momento guerrero. Pongo la oreja contra la puerta.

Tras intentar diferenciar las voces de los orcos puedes calcular que habra media docena de ellos dentro de la sala, y quizas un par esten dormidos ya a pesar del barullo logras escuchar unos sonoros ronquidos.

yo escucho atento para saberlo que dicen..

Por los gritos y voces debe de haber unos seis o siete y un par durmiendo la mona.-Duncan se separa de la puerta.-Que crees que dicen elfo?.-

Por lo que Druen puede entender los orcos estan jugando a algun tipo de juego de dados, ademas de vanagloriarse de la destruccion del templo del pueblo, mientras gritan, cantan, se insultan y se dan golpes.

-¿seis o siete hacen todo ese ruido?, estúpidas bestias- me coloco detrás de todos preparandome para nuestra entrada

-bien, yo digo que entremos, primero Duncan lanza su.. curiosa invención y luego entramos los demás, mi magia es bastante precisa, aunque no se si merecera la pena gastarla contra estos descerebrados, aun no puedo usarla muy a menudo-

- ¿A qué esperamos? - dijo el guerrero mirando al elfo - Si vas a hacer algo, hazlo ya mientras cargo contra esos monstruos - dijo mientras abría la puerta de golpe y entraba como un aexhalación.

Entrais de golpe en una amplia habitacion llena de humo y malos olores. Delante de vosotros veis a dos orcos abrazados que os dan la espalda y cantan de unaforma espeluznante, un poco mas a la izquierda y alredededor de una mesa otros tres orcos intentan acabar una bota de vino, y un poco mas alla al lado de un brasero otro orco mas duerme placidamente. Estan tan sumamente borrachos que ni notan que se ha abierto la puerta.