Partida Rol por web

Al entrar en la posada, mire a los paisanos allí reunidos, siendo consciente de que éramos la principal atracción.

Como siempre, Lodion más que un arma de los dioses era la esponja de los dioses. Últimamente parecía totalmente distraído, pareciendo que la ceguera por la que pasó le afectó a su carácter y mentalidad. Si bien, cuando hablo de la cena mi estómago comenzó a rugir ¿Cuándo era la última vez que habíamos comido? ya ni me acordaba. Quizás fuera una buena idea tomarnos algo para calmar el estómago mientras preguntábamos.

¿No hay por aquí  ningún bardo que amenice las veladas? Había oído hablar de uno muy famoso, un tal Trolan, pero no se si vendrá por aquí ¿Ha oído hablar de él? digo dirigiéndome al posadero, apoyada sobre la barra

¿No será ese fulano que no hace más que marear la perdiz con la Dama? ¿Con todos esos seguidores? -  tras un rato de conversación, uno de los hombres parece reaccionar a las preguntas de Edelwen.

Mirad en el Unicornio. El Unicornio Muerto Viviente. No tienen tan buen aguardiente de enredaderas pero parece que hay más sitio para todos esos patanes...

El clerigo observa a los parroquianos y al ver lo que comentan, trata de quedar bien, ya que estan colaborando de modo desinteresado.

Habra que volver aqui a tomar ese aguardiente entonces, amigo, gracias por la informacion. Cuente con que nos to maremos unos tragos tan pronto hablemos con ese tal Trolan.

Uno de los parroquianos murmura entre dientes... Tiempo tendremos, sí...

Despidiéndome de los parroquianos, nos dirigimos hacia la posada, un tanto nerviosos y alertas, pues no sabemos lo que nos podremos encontrar

Al llegar a la posada, miro al resto deberíamos de intentar mirar por las ventanas a ver si está o cómo está la cosa ahí dentro.

Fred, quizás tú podrías echar un ojo

A medida que os vais acercando a la taberna, veis una muchedumbre en el exterior vestidos con una especie de túnicas blancas y ámbar, están hablando entre ellos y se nota una cierta melancolía en sus miradas.

Varios de ellos miran hacia el interior de la posada y es en ese momento cuando se les ve cierto aire de admiración.

Os resulta curioso pero veis entrando en la taberna a un grupo de cinco humanoides a los que las túnicas no les quedan demasiado bien y hacen poco por ocultar sus armaduras, espadas y el arco y carcaj de uno de ellos, un tiefling.

Doy un codazo a Tirk señalando con la cabeza a los que entran en la taberna

Prepárate que me parece que va a haber problemas. Comento tomando mi símbolo sagrado Si puedes, bendícenos antes de entrar, por si fuera necesario. Yo voy a prepararme también dicho esto, comienzo un rezo para que la diosa me otorgue su fuerza.

Viendo que Lodion estaba como lelo, niego con la cabeza entrecerrando los ojos mira a esos que están entrando, rápido. Ni intentan ocultar sus armaduras y sus armas bajo esas túnicas.

El clerigo, viendo que el territorio es a todas luces hostil e inhospito a su Dios, solicita sus parabienes entonando u rezo en tono bajo y pidiendo la proteccion magica de Corellon. 

Bueno, chicos, intentemos ser discretos, aunque lo veo complejo aqui, esto es un rito de culto o algo similar.Entremos

- Quizá podamos hablar con ellos - comenta Lodion agarrando con más fuerza la cerveza que aún lleva desde la taberna anterior. - Quiero decir, entrar en la taberna y atacar a unos tipos porque llevan las armas a la vista no me acaba de parecer razonable del todo. Eso sin contar que igual tenemos que hacer una masacre con toda esa multitud

Freddon saca su estoque e intenta entrar por una de las ventanas bajas de la posada sin que le vean, para ver que pasa y cubrir a sus amigos si es necesario.

Lanzáis los conjuros preparandoos antes de entrar.

Justo al cruzar el umbral veis la siguiente escena. Un chico de facciones atractivas se encuentra sentado en una mesa, aparentemente apesadumbrado, un par de los hombres con túnicas parecen estar consolándolo mientras otros cuantos están por ahí comiendo con cara de circunstancias.

Los que acaban de entrar se quitan las túnicas de un manotazo. 4 de ellos rodean al quinto que saca una flecha con muy mala pinta para colocarla en un arco bastante impresionante...

Mirar con cara de asombro lo que hacen mis compañeros mientras balbuceo hablar... hablar... hablar.

El clerigo prepara su arma para poder combatir, caso de que sea menester, y se apresta a golpear intentar parar al del espadon gigante.

Cada vez se complica mas y as esta trama, a ver si ya damos con ese maldito de Sougar y acabamos con el.

Freddon saltó desde la ventana y, esquivando a varios comensales, intentó cortar la flecha con su estoque.

Viendo que la cosa finalmente se ponía fea, hago un gesto con la cabeza al resto para que entrar. 

Fred reacciona rápidamente, como es costumbre en él, pero Tirk y Lodion se quedan un tanto pensativos Vamos, hay que salvarle.

Lodion, intenta hacer algo, ¡¡por dioooos!!  sin apenas tiempo para mirar y comprobar si habían entendido, entro y me dirijo hacia el que había sacado la flecha