Partida Rol por web

Bajo las luces de New York

Le Moulin

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16/01/2013, 15:41
Katherine Aldridge

Incomoda, se agitaba en el abrigo rojo. No era un abrigo muy cómodo, de hecho se pasaba la mayoría del tiempo olvidado en su armario. Ya no recordaba la última vez que lo había usado, ni tampoco sabía porqué lo había comprado, pero era el único abrigo de un color llamativo que tenía y por lo tanto muy indicado para que una persona que no le había visto en la vida, la reconociera. Allí apoyada junto a la puerta roja de Le Moulin, con su abrigo rojo, y bajo el toldo rojo con el molino rojo dibujado, se sentía casi más parte del decorado que clienta.

Lanzaba largas bocanadas de humo al aire que se mezclaban con el vaho de su respiración y ascendían hacía el cielo iluminado de la ciudad, su cigarro iba consumiéndose lentamente en su mano enguantada y en breves intervalos lo llevaba hasta su boca para darle una calada y volver a soltar el humo.

A parte del abrigo rojo, llevaba unos pantalones vaqueros de color clásico y unas botas marrones que le llegaban por encima del tobillo. Kate era una chica alta ya de por si, por lo que no necesitaba llevar mucho tacón. Era espigada y según su madre estaba demasiado delgada, aunque el abrigo le hacía abultar mucho más de lo que era. -Al menos abriga un montón... -Pensó para si misma.

Su pelo rubio caía en bucles ondulados hasta sus hombros, y su flequillo formaba una especie de uve invertida que caía a ambos lados de su cara. La cual era más bien ovalada, con un mentón ligeramente marcado y una nariz respingona. Se podía decir que Kate era una chica guapa, aunque ella no se considerara muy atractiva.

Terminó el cigarro y lo lanzó a sus pies para apagarlo de un pisotón. Luego pasó los dedos por el flequillo para peinarlo bien y miró a ambos lados. No debería tardar mucho ya.

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16/01/2013, 18:30
Thomas Jackson [Muerto]

Con las manos en los bolsillos, maldiciendo entre dientes a los elementos y la condenada borrasca del Labrador que les dejaba ese puñetero frío polar que quemaba la cara fue como Thomas se acercó al lugar establecido. Iba envuelto en su manida gabardina larga, pero ésta había visto mejores días y por tanto algo de frío se colaba entre la ropa del policía que miraba furibundo alrededor a ver si localizaba en la distancia a la señorita Aldridge.

-Puta mierda de día, sólo faltaba una ventisca... y ya no veo de lejos como antes. Que le jodan a las gafas- pensó torvamente reduciendo  las distancias, le parecía ver una figura roja, podía ser ella. O una farola. O una boca de incendios grande... qué más daba ya.

Al acercarse más aún ya distinguió una melena y rasgos de persona, femenina, no estaba nada mal... aunque a ojo podría ser su padre.

-Bien he hecho en dejar a Rick en el bar...-pensó mientras sacaba la mano del bolsillo para saludarla.

-La señorita Aldridge, supongo- ahí, que se notara que era culto y parafraseaba a exploradores de principio de siglo XX. Indicó con un gesto bastante elocuente que pasaran al interior y aguardó su reacción

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17/01/2013, 21:49
Katherine Aldridge

-Supone bien. -Contestó Kate. -Muchas gracias por venir, agente Jackson.

Kate entendió el gesto y asintió con la cabeza. -Sí, mejor será que pasemos dentro, aquí no se puede aguantar mucho rato. Y eso que los fumadores empedernidos estamos acostumbrados... - Mostró una cordial sonrisa y pasó ella primero. Entendía que aquel hombre sería muy del estilo de Derek Avner, chapado a la antigua. No se esperaba de la situación que fuera ella quien le dejara pasar a él, aunque esa era la intención de Kate desde un principio ya que estaba en su zona. Para no herir su masculino orgullo, hizo lo que hacía con Derek cada vez que iba a visitarle a la residencia de ancianos: asumir el rol femenino impuesto de antemano.

 Se sentó en una de las mesas y se desembarazó del pesado abrigo rojo y de los gruesos guantes que cubrían sus manos. Lo dejó todo a un lado junto al bolso y cuando la camarera se acercó a tomar nota pidió un café con leche. Sacó su block de notas y lo dejó sobre la mesa. Miró a Thomas y sonrió de forma picara.

-Oh, creo que olvide comentarle que soy periodista. -Un desliz involuntario, estaba claro. -Espero que no le suponga ningún problema esta pequeña encerrona. Obviamente todo lo que usted me diga, así como su identidad quedarán protegidos por el secreto profesional.  -Clavó sus ojos marrones en los de él para asegurarse de que lo había entendido.

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17/01/2013, 22:41
Thomas Jackson [Muerto]

El policía entró al bar y aprovechó que la señorita entró primero para observar los alrededores y cerciorarse que no le habían seguido y el tipo de bar al que le iban a meter. Medianamente satisfecho, Thomas dejó la gabardina en el respaldo de la silla y tomó asiento sin mucha ceremonia, una mueca un tanto dubitativa bajo su mostacho. No tenía nada claro qué hacía allí.

Pero sí que sabía que un café con leche no le iba a valer de nada. Hizo que la camarera le apuntara un café irlandés. Qué menos que eso para sacarse el frío del cuerpo. Y qué corto se había quedado... de haber sabido lo que venía se habría pedido directamente un whisky.

Porque ese comentario, sonrisa pícara modelo "qué lista soy" no le hizo ni pizca de gracia. Donna estaría removiendo su generoso trasero en la silla en la que le hubiera posado en esos momentos. -¡Qué bajo ha caído esta profesión también!- pensó para si antes de responder, demorando la contestación.-Pero si quieres jugar, juguemos-

-Vaya, vaya señorita Aldridge, la ha faltado tiempo.-se hizo el inocente- yo que pensaba que venía por algún problema que no se atreviera a confesar a la Policía de forma oficial, dispuesto a ayudar como un favor a un viejo y muy buen amigo y me encuentro ésto- meneó la cabeza como decepcionado- Estoy seguro que Derek la habrá puesto al tanto que, por norma general, los agentes somos gente sencilla que prefiere evitar subterfugios. Así que podríamos decir muy claramente que la ha cagado. Hasta el fondo.- se recostó un poco en la silla con una sonrisa feliz

-En serio, si quiere entrevistar a cualquiera del cuerpo dígaselo directamente, si quiere sacar información seguro que algún cadete está más que necesitado de...diversión y una copa. Pero uno ya tiene sus canas y piensa en su jubilación. Ahora bien... dígame que me equivoco y qué va a contarme usted.- hizo especial énfasis en la palabra- para contar con mi colaboración en lo que tuviera pensado en su maquiavélica mente de periodista.-

Al menos el irlandés estaba pasable. A lo mejor se pasaba por su cuenta en otro momento por allí, aunque fuera por recordar los mohínes de la periodista.

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18/01/2013, 00:24
Katherine Aldridge

Katherine agradeció el café caliente entre sus manos heladas y sostuvo estoicamente la taza hasta que el calor fue insoportable y empezó a sentir que se quemaba. Era una forma rápida de que sus manos entraran en calor, aún así tuvo que repetir varias veces el gesto antes de que lograra quitarse el endiablado frío de la calle de los doloridos nudillos. Lograba aguantar el calor perfectamente, pero odiaba el frío a rabiar. Era una de esas extrañas personas que incluso en verano se duchaba con agua caliente, le encantaba sentir como el calor del agua quemaba ligeramente en su piel.

Aguantó también estoicamente el rapapolvo que el agente Jackson le echaba por haberle ocultado el motivo de la reunión. En cierto modo se lo merecía, era el precio por tener entre las manos aquella especie de bomba, aquella historia vetada de entre todas las historias vetadas que uno pudiera encontrarse en lo más sórdido de la ciudad.

Supuso que a los ojos de aquel hombre curtido en la historia de las calles de la ciudad ella no sería más que una niña mona que había subido en el escalafón periodístico a base de acostarse con sus jefes y hacer algún que otro favor a los informantes de los que pudiera disponer, o tal vez cazar con sus garras de femme fatale. Casi había dejado caer esa idea a bocajarro con el comentario de "diversión y una copa" que había realizado. 

Kate no dijo nada. Por supuesto aquello no era así. En la vida siempre que se llegaba a una encrucijada existen dos caminos: el camino fácil y el camino complicado, y Kate siempre había elegido el complicado a pesar de haber tenido la opción de elegir el camino fácil. Podría haberse acostado con sus jefes, o con los mejores informantes de la ciudad... ¡que narices!, podría haberse acostado con el dueño del New York Times y ahora estaría en un periódico mejor cobrando un sueldo infinitamente mejor, o incluso de editora. Opciones no le habían faltado. Sin embargo, la periodista no dijo nada a esa insinuación. Dejó que el policía creyera aquello si era lo que quería creer. Sabía que un prejuicio negativo siempre jugaba más a su favor que lo que en un primer momento pudiera parecer.

-Siento no haberle informado debidamente, agente. -Dijo después de Jackson soltara todo su discurso. -Debí haberle dicho cual era mi profesión antes de ofrecerle esta reunión, en otras circunstancias hubiera sido lo primero que le hubiera dicho; pero no en esta ocasión, puesto que no llamo de parte del periódico si no que lo hago movida por mi propia investigación.

Dio un sorbo a su taza. Necesitaba tomarse algo caliente y agradeció el calor que el café dejaba en su estomago.

-Soy consciente, por experiencia propia créame, que los agentes de policía no son muy amigos de mis colegas periodistas y he querido evitar que cualquiera que le conozca a usted sepa que se ha reunido conmigo, por la naturaleza del asunto que he venido a tratar. Si he acudido a usted, no es para sonsacarle información ni para entrevistarle. Si he acudido a usted, es por recomendación de un amigo muy querido, y siento si le ha parecido otra cosa. -Sacudió la cabeza levemente hacía un lado y extendió las palmas de las manos. -De todos modos es libre de marcharse y no querer hablar conmigo si la impresión que le he dado por querer guardar la confidencialidad de esta conversación ha sido tan nefasta.

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18/01/2013, 10:18
Thomas Jackson [Muerto]

Thomas ahogó una carcajada, al menos la chiquilla tenía uñas. Pegó un buen trago al irlandés con una sonrisa sardónica.

-Verá señorita Aldridge, si ha hecho sus deberes sabrá que no estoy en disposición de negarme; ya sabe, algunos valoramos las viejas amistades y todo ese asunto de "Proteger y servir". Debo reconocer que no esperaba que fuera investigación personal pero dígame-miró fijamente a la periodista, como si estuviera en un interrogatorio-¿Cuándo lo acabe seguirá siendo "personal"? ¿O por el contrario aspira a publicarla?-

El tono que había usado al mencionarlo le había recordado mucho al que había usado él mismo hacía pocos días y eso hizo saltar todas las alarmas. Mantuvo su mejor cara de póker; que no era precisamente mala pues tenía a deber tres primogénitos, cuatro mudanzas y un par de reliquias familiares; y siguió hablando.

-Daba por hecho que ningún nombre aparecerá en ninguna parte. Sea lo que sea lo que tiene en mente preguntarme a continuación no parece la típica situación que vaya a airear a los cuatro vientos y más teniendo en cuenta que ha recurrido a contactos comunes en lugar del cauce habitual para los ciudadanos de esta bella ciudad. Además tenga por seguro que me tomaré sus palabras al pie de la letra, si en algún momento estimo que se ha excedido tomaré la puerta, pero por ahora sigo aquí ¿verdad?- otro leve sorbo al café-Muy bien, empiece a decirme de qué se trata y qué sabe usted.-

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18/01/2013, 15:08
Katherine Aldridge

Kate mostró una sonrisa complacida cuando el agente Jackson decidió quedarse. A fin de cuentas no le habría afectado tanto la pequeña encerrona que le había tendido, tal vez solo fuera una pequeña pataleta o a lo mejor si se había sentido ofendido por ello pero necesitaba aquel caso como agua de mayo.

Sea como fuere, Kate decidió dar un sorbo más a su café con leche y cogió el bolígrafo que había dejado sobre el bloc de notas. 

-Lo que yo haga con la historia una vez descubra que ocurre no es asunto de nadie más, agente Jackson. - Miró hacía el bloc para revisar lo que tenía anotado. -Veamos, según me dijo Derek lleva años en una oficina, alejado de las calles, pero está muy informado de lo que se cuece en ellas. Hasta tal punto, que me aseguró que si alguien estaba enterado de lo que estaba ocurriendo, ese era usted. -Hizo una pausa y clavó su profunda mirada en los ojos del policía como si ella también se dedicara a realizar interrogatorios. -Dígame, ¿Cuántas desapariciones de personas se han denunciado este mes?.- No estaba dispuesta a contarle lo que ella sabía por mucho que él se lo exigiera, al menos no de entrada. Mantuvo su mirada tras formular la pregunta y esperó pacientemente su contestación.

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20/01/2013, 00:53
Thomas Jackson [Muerto]

-Acabáramos...-pensó el policía torciendo el gesto. Así que esa tipa andaba también con el asunto de las desapariciones y pretendía estar al tanto. -Hasta ahí podíamos llegar...a no ser...- la cabeza del policía funcionaba a toda velocidad y decidió plantarse.

-Veamos señorita Aldridge...-su cara había adoptado un gesto muy serio, ya no estaba bromeando- voy a ponerla unas condiciones ineludibles para que pueda plantearme facilitarla esa información; confidencialidad y anonimato aparte.- por si quedaba alguna duda, el tono era bastante descriptivo. Muy profesional que dirían- Primera, usted no revelará ningún detalle hasta que se solucione el asunto. Segunda, si en algún momento usted se encuentra con algún fragmento de información, por irrelevante que usted lo considere me lo hará saber. Y tercera, las reuniones serán avisadas exclusivamente por teléfono, quedando en algún lugar diferente cada vez para ponerse al día de lo que sea necesario.-

Por si acaso fuera necesario para la periodista que se lo dejaran dicho de viva voz Thomas añadió -Éstas condiciones son de ineludible cumplimiento para contar con mi colaboración. Romper alguna no sólo implicará un cese de dicha colaboración señorita Aldridge, habría consecuencias.-y simplemente esperó respuesta.

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20/01/2013, 22:32
Katherine Aldridge

Cuando el agente Jackson empezó a hablar, a Kate le pareció que iba a soltarle nuevamente un sermón. Estuvo a punto de decirle que ella únicamente le estaba preguntando por un número, y no por la identidad de esas personas como parecía ser que había entendido el policía. Iba a decirle que aquel número por el que ella preguntaba era de dominio público, que ella solo estaba buscando saber el número real, aquel que había antes de que el alcalde y los jefazos más elevados del cuerpo de policía se dedicaran a adulterar para salvar las estadísticas del mes.

Pero su interlocutor no le dio ocasión de decir nada y entonces Jackson, como buen hombre chapado a la antigua que era, soltó toda esa retahíla de condiciones y cláusulas para asegurarse que el agua bailará a su son. Y todo cuanto decía no hacía sino que confirmar lo que ella se temía: que fuera cierto lo que su fuente le había comunicado. Ahora tenía ante ella la confirmación de la historia.

-Luego es cierto... - Murmuró ensimismada y embotada por el cariz oscuro que tomaban las cosas. Miraba a su taza, casi aturdida, y de pronto sacudió la cabeza volviendo a Le Moulin y asintió rápidamente.

-No se preocupe, agente Jackson. -Dijo hablando rápido y queriendo acabar con aquella especie de formalismo cuanto antes para entrar en harina. -No publicaré nada hasta que no termine la investigación policial, si descubro algo se lo haré saber cuanto descubra por mi cuenta y nos reuniremos de la forma que a usted mejor le parezca. No tengo problema con eso.

Había clavado de nuevo esa mirada firme y depredadora en los ojos del agente. -Mi método de trabajo es el siguiente: únicamente publicaré aquello que sea cierto y esté corroborado por varias fuentes. Bajo ningún concepto aceptaré versiones alternativas de la historia ni mejoraré las cifras para que suenen más agradables al oído de ningún concejal o jefe de policía. 

-Mis fuentes son como el número secreto de mi cuenta bancaria, solamente yo las conozco. Y, salvo que ellas mismas me lo indiquen por expreso, su nombre nunca es publicado ni revelado a terceros. A partir de este momento le consideró a usted una fuente y tenga por seguro que no revelaré su identidad a menos que usted me lo permita. Del mismo modo tenga también presente que no le comunicaré la identidad de mis otras fuentes. Si ellas me dicen algo que usted deba saber, se lo haré saber, tal y como le he dicho antes, pero no me pregunte quien me lo ha dicho porque no se lo diré.

-Yo no me entrometeré en su investigación, pero el articulo es mío. Publicaré aquello que considere. Si usted quiere decirme algo para la mejor comprensión de la historia por mi parte pero no quiere que ese detalle en cuestión se publique, hágamelo saber y quedará off the record. -Supuso que iba a torcer el gesto con aquello así que suavizó el rostro brevemente. -Me gusta tener contentas a mis fuentes, si me dicen que algo no se puede publicar, no lo publico.

Kate miró a los ojos del policía para asegurarse de que había comprendido todo aquello. No tenía porque decirle todo eso, solamente informarle de lo que suponía ser una fuente y como proceder, pero ya que él había querido marcar todos esos límites, Kate decidió marcar también los que a ella le interesaban.

-Ahora las condiciones. - Añadió. Al final parecía ser que la chiquilla era una mujer de carácter que no se dejaba amilanar pese a lo que su juventud pudiera indicar. -Tendré la exclusividad de la noticia. Como me enteré de que alguien del Times o de la televisión se informa del caso a través de usted, me largaré y tendrá que tratar con esos buitres. Y entonces sí que tendría que ir rezando si quiere que se cumpla alguna de las condiciones que me ha pedido a mí.

-Nada de chiquilla, chica, niña, jovencita, muchacha, ni otras cosas por el estilo. Llámeme Señorita Aldridge o Katherine, como mejor le parezca. Pero no me trate como a una cría. Y bueno, en definitiva, sea legal conmigo y yo seré legal con usted. -Mostró una sonrisa afable, pero firme y llena de determinación.

-Mis condiciones también son ineludibles. Yo cumpliré sus normas, cumpla usted las mías y estaremos contentos. ¿Hay trato?.- Le tendió la mano para que se la estrechará si estaba conforme.

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21/01/2013, 00:20
Director

Notas de juego

Bien, chicos, a la espera de la respuesta de Thomas para cerrar el día y que ponga un nuevo lugar para hablar para que continuéis mañana si queréis...pero en el lunes ;)

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21/01/2013, 08:08
Thomas Jackson [Muerto]

El carácter de la periodista, respondón y un tanto irreverente le hizo sonreír. Si él tuviera tres décadas menos estaría tirando la caña, pero ahora mismo la chica había ascendido hasta la categoría, de dudoso honor, de "la hija que le habría gustado tener". Las cosas claras y firme en sus convicciones. Tenían trato.

-Muy bien señorita Aldridge- lucía una sonrisa de oreja a oreja, algunas de esas condiciones tenían el toque inconfundible de quien ha tratado con Derek una temporada- sus condiciones me parecen justas. Sin embargo ahora mismo no estoy en disposición de responder adecuadamente a su pregunta y deduzco que valorará tener información fidedigna antes que rápida.-Echó un vistazo al reloj- hoy ya se me empieza a hacer tarde, pero pásese mañana por una cafetería que está a dos bloques de la estación, el Molly's a eso de mediodía. No habrá mucha gente y para entonces ya tendré confirmada la información que requiere.-Sin decir nada más se levantó y pagó lo suyo, despidiéndose de Katherine con un aceptable apretón de manos.

Se enfundó en su gabardina nuevamente y salió del Moulin, sopesando las nuevas opciones que ese encuentro le ofrecía. Él la daría información pero también la recibiría. Era un mal necesario.

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21/01/2013, 08:14
Thomas Jackson [Muerto]
Sólo para el director

Notas de juego

Por la mañana antes de ir al Moly's Thomas revisa el número de casos y hace una pequeña copia en la libreta de números, lugares y edades, no de nombres aún.

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21/01/2013, 12:14
Katherine Aldridge

-Muy bien, allí estaré. - El lunes iba a ser un día movidito con lo del museo y todo aquello. Pero Kate se sentía satisfecha, creía haber encontrado más de lo que se esperaba. Al final Derek le había dado una buena recomendación. No sabía de que se sorprendía, siempre lo hacía.

Estrechó la mano de Jackson y le vio marchar. Apuntó el nombre del bar en el bloc y sonrió a la camarera para que le cobrara también lo suyo. Recogió el llamativo abrigo rojo y fue preparando un cigarro para encenderlo nada más salir a la calle. La primera calada que le dio le supo a gloria.

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21/01/2013, 15:19
Director

Notas de juego

Recibido, Sr. Jackson. Lo lleva con usted. ;)

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21/01/2013, 15:26
Thomas Jackson [Muerto]
Sólo para el director

Notas de juego

Ya, ¿y cuántos vienen a ser? Por darla un número no inventado a la chica XD

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21/01/2013, 15:30
Director

Notas de juego

Una vez sentado en el despacho, con el dossier y las escasas evidencias que figuran en la caja, Thomas por fin pudo ponerse a trabajar en serio.

Lo que el viejo policía tenía delante eran, básicamente, casos de desapariciones. De todo tipo, a decir verdad. Mujeres, hombres, de un rango de edad que iba desde los 17 hasta los 53. Diferentes clases sociales y, a juzgar por las fotografías adjuntas en el dossier, sin ningún aspecto común.

Y como suele pasar en las desapariciones, no había demasiadas pruebas. La mayoría eran testimonios y declaraciones de la gente, que venían a decir poco más que "mi hijo/sobrino/amante ha desaparecido". La lista de nombres ascendía a once desde la primera, localizada el 21 de Octubre. La última: apenas hacía dos días.

Me autocito, que me da pereza.

xD

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21/01/2013, 15:31
Thomas Jackson [Muerto]
Sólo para el director

Notas de juego

Eso estaba revisando, que el primer post en el que se me planteó el dossier no tenía número U_U La culpa es de la caja

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21/01/2013, 15:43
Director

Notas de juego

¡Pero podría tener un barco! Tranquilo, que ha llovido desde que lo leíste. Pero mira, me has dado una idea: voy a recomendaros usar el apartado Notas para apuntar este tipo de cosas xDD

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06/02/2013, 16:06
Katherine Aldridge

Las cinco de la tarde era la hora que había fijado en el papel que le había tendido a Norman Grendell. Kate había llegado a la cafetería media hora antes de lo previsto, tal eran las ganas que tenía de de escuchar lo que el director de la exposición del Museo podía contarle.

Se agitaba nerviosa en su asiento y había terminado un café y medio del segundo que había pedido cuando se cumplió la hora que le había indicado al antropólogo. Kate se giró hacía la puerta esperando que apareciera e hizo tamborilear sus dedos sobre la mesa donde estaba sentada.

Junto a su fiel bolso había dejado su cazadora negra y los guantes y la bufanda que llevaba aquel día para protegerse del frío. Su ropa aquel día era menos elegante que el vestido verde esmeralda con el que se había presentado a la exposición, llevaba un jersey rojo de cuello alto, unos pantalones vaqueros y unas comodas deportivas blancas. Además de que llevaba el largo pelo rubio y ondulado suelto y su flequillo cayendo por su cara, como era costumbre en forma de V invertida.

Mientras esperaba se había dedicado a mandarle un mensaje a Scott. Le extrañó que el muchacho no le hubiera entregado lo prometido al finalizar la exposición, pero en vista del incidente con el tal Señor, casi era lo más prudente.

¿Qué tal estás?. Lo de ayer fue una locura, ¿todavía tienes eso?. Lo necesito urgentemente.

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07/02/2013, 20:07
Scott Dawson.

La respuesta de Scott no se hizo esperar: casi inmediata, como si el chico estuviese precisamente pendiente de una señal de vida de Katherine.

Te dejo un pendrive en tu buzón. Pero parece que tras el asunto Charlmers va a destapar algo de luz sobre el asunto.

Esta era una bonita confesión, pero a Kate no dejaba de resultarle desagradable que hubiera tenido que desaparecer (por muy petarda que fuese) la hija de su jefe para que eso ocurriera.