Partida Rol por web

Llegais de vuelta a la tienda, Tony Chong esta dentro atendiendo a un cliente pero cuando os ve tuerce la cara de manera poco alagueña, antes de haceros un gesto para que espereis a que termine.

Poco despues el cliente se va y Tony os mira.

¿Que mas necesitan agentes?

- Buenos días de nuevo, Señor Chong... - Andrew prefirió tomar la iniciativa esta vez al recordar que la primera vez que George había hablado con el tipo la cosa no había sido del todo agradable. De este modo mientras Andrew hablaba con él, George tendría tiempo para encontrar esa oportuna huella. Siguiendo el protocolo habitual, aunque ya había estado allí esa misma mañana, apenas unas horas atrás, le enseñó la placa en señal de identificación.

- ... lamento que esta mañana hayamos tenido que salir a toda prisa. Hemos tenido una emergencia. Sin embargo, como ve, su caso sigue siendo importante para nosotros. Por eso hemos regresado a tomar algunas huellas y a hacer un par de comprobaciones. No le molestaremos mucho.

Andrew trató de entretener al propietario de la tienda para que su compañero pudiese ir un poco tranquilo.

- Verá... hemos estado viendo los vídeos de seguridad y, bueno, la verdad es que es un caso curioso.

Hicks carraspeó como para entrar en materia...

- Quería yo preguntarle... er... ¿es habitual que los vecinos de este edificio vengan a su tienda? ¿Ha tenido algún altercado con alguno de ellos en los últimos días?

Mientras Andrew entretiene al señor Chong, tomo prestado el maletín de recogida de huellas que ha preparado mi compañero y me dirijo al lugar donde espero encontrar la evidencia que me ha mostrado el vídeo.

En el pasillo de en medio, busco el bote de pintura que ha de contener la huella. Sin tocar nada. Cuando lo encuentro, dejo el maletín en el suelo y me pongo los guantes de látex, para evitar contaminaciones accidentales.

Acerco mi cara al bote y observo la región donde puedan aparecer las huellas. Esto lo hago a "simple vista", para saber a qué me enfrento, antes de comenzar a desplegar los útiles de recogida de huellas.

- Si, si, claro, Tony agradece interes dice poco convencido. Ya dije su jefe que ese delincuente de arriba siempre viene con quejas. Siempre molesta. Waldo se llama. Vive arriba. Resto vecinos no problema, compran a veces, niños roban otra veces.

Sin duda estas de suerte. Hay una huella del indice y otra del pulgar que encajan con la posicion en la que sin duda puso su mano el sujeto.

- Er... Waldo... sí, supongo que se refiere a Waldo Jones, ¿verdad? Hábleme de él.

Andrew sigue con su verborrea para entretener al señor Chong.

- Cómo dice... ¿los niños de los vecinos también le roban? Supongo que se refiere a cosas de poca magnitud, ¿verdad? Chucherías y cosas así, ¿no? Esta zona ha sido objeto de algunas denuncias por vandalismo, ataque de bandas callejeras y cosas por el estilo. ¿Alguna vez ha tenido un ataque similar?

- No se apellido. Solo Waldo. ¿El? Delincuente. Desgracia el viva encima. Tony no merece esta gentuza, pero no pudo elegir. Siempre problematico, siempre aparece con gente rara. Toca todo, no compra. Delincuente.

- Si, niños roban. Cosas pequeñas, pero Tony graba y prohibe entrada. No bandas, no aqui.

Antes de recoger las huellas que he encontrado, saco la cámara de la maleta y hago fotografías al bote, todo alrededor del mismo, así como la estantería y el suelo.

Cuando veo que tengo toda la zona documentada, me dispongo a recoger las huellas con el método oficial. En cuanto tengo las huellas recolectadas, hago una foto de las mismas con mi teléfono móvil, con la mejor resolución posible, y se la envío a Diane, adjuntando un mensaje:

"Estas huellas muy probablemente pertenecen a quien cometió el hurto en la tienda de Chong. ¿Podrías contrastarlas con las bases de datos de huellas dactilares a ver si tenemos suerte, por favor? Primero, descarta que pertenezcan a Waldo Jones. Según el señor Chong, es un "delincuente" que vive encima de su tienda, así que quizá esté fichado."

- Andrew. - Llamo a mi compañero - Tengo las huellas.

Mientras, voy recogiendo el material nuevamente en la maleta.

Andrew tomaba buena nota mental de todo lo que, a medias palabras, salía de la boca del propietario. Con sumo interés repetía los conceptos para asegurarse que quedaban bien claros y que, por otro lado, su compañero obtenía las huellas con el tiempo necesario para hacerlo sin prisas.

- Ahá... Así que Waldo nunca compra. Entiendo... los niños... ya se sabe. Claro... por supuesto... así que nada de bandas. ¿Está seguro? Correcto... estupendo.

- Andrew. - Llamo a mi compañero - Tengo las huellas.

- Gracias George... Perfecto señor Chong. Pues por el momento eso es todo. Seguiremos trabajando en el asunto y nos pondremos en contacto con usted en cuanto tengamos más información. Le agradezco su colaboración, señor Chong. Que pase usted un buen día.

Los agentes abandonaron la tienda con la misma velocidad con la que habían entrado. Casi fue un visto y no visto.

- ¿Y bien... qué tal ha ido? - preguntó Andrew. - El tipo sigue insistiendo en que el tal Waldo Jones es mala gente. Quizá sería una buena idea hacerle una visita ya que estamos aquí. ¿Te parece? Por cierto... no creas que se me olvida, ya me contarás qué viste en el vídeo para que fueras directo a por la huella.

- Un momento Andrew - Le digo a mi compañero cuando ya nos dirigíamos a la salida. - Olvidé comprobar una cosa. - Vuelvo rápidamente hacia dentro del local y me dirijo al mostrador. Pienso en la secuencia de movimientos que deduje del vídeo y observo con detenimiento la superficie.

- Una persona agachada - Pienso - Bajo una chaqueta, agarrando estos dos objetos... puede que haya dejado alguna que otra evidencia de su presencia que pueda ser útil. Más huellas o incluso una fibra.

Observo detenidamente el lugar, a ver si hallo cualquier cosa. Ahora que sé cómo son sus huellas, quizá pueda identificarlas de entre otras que haya allí y, entonces, tener más claro los movimientos que realizó.

Encuentras una pequeña fibra roja, enganchada en el cristal del mostrador. Se trata de algun tejido.

Le hago una foto allí donde está y la recojo apropiadamente.

Salgo de la tienda despidiéndome del señor Chong y me reúno con Andrew.

- Ya está. He encontrado una fibra.

Sonrío a mi compañero.

Dejáis la tienda y os acercáis al portal. Uno de los timbres tiene escrito el nombre de Waldo Jones, y al llamar aunque nadie responde os abren la puerta.

Cuando subís al primer piso, la puerta en cuestión esta abierta, y al acercaros sale un hombre con pantalones marrones y una camisa de tirantes blanca sale al pasillo.

- Joder tío, como has tard… eh, ¿Quién cojones sois vosotros dos?

Los detectives entraron cautelosamente en la casa del sujeto hasta dar con él. En un gesto automático Andrew echó un rápido vistazo por todo lo que le rodeaba. Sinceramente dudaba que el tal Jones fuera tan estúpido como para tener la consola y la navaja encima de la mesa pero igualmente era importante ver qué había en cada sitio... puertas, habitaciones, etc.

Hicks de nuevo echó mano de la placa en un gesto que ya comenzaba a hacerse de manera automática.

- Buenos días. Soy el detective Andrew Hicks y este es mi compañero, el detective McGregor, UIDMB, Policía de Boston. Estamos buscando a Waldo Jones... ¿eres tú Waldo Jones?

El hombre se pone nervioso en cuanto ve la placa, y se queda en el marco de la puerta mirando.

Eh... si... si... soy Waldo, ¿que pasa?

Cuando estábamos a punto de subir las escaleras, me llama Diane al teléfono. Descuelgo y escucho lo que tiene que decir.

- Gracias, Diane. Sí, en ello estamos. Vamos a su casa a ver qué se cuenta. Cuando sepas algo, por favor, dímelo.

Cuelgo el aparato.

- Habrá que esperar. Se pone ahora con las huellas. Ha acabado el EMAT y dice que al pobre Whitten lo han estado manipulando. - Le digo a Darrell con seriedad.

Llegamos al piso y parece que el tal Jones estaba esperando a alguien. Cuando Andrew se identifica, parece nervioso.

- ¿Nos permite entrar? - Le enseño también mi placa - Siempre será mejor que hablar aquí fuera. - Digo mientras con los ojos miro alrededor, para dar a entender que cualquiera puede estar escuchando. Sin esperar su respuesta, comienzo a pasar para adentro, así no le dejo que piense en una negativa.

El hombre mira a George.

- ¿Tiene una orden? si no es asi podemos hablar aqui.

Se queda totalmente quieto bloqueando la puerta.

- Habrá que esperar. Se pone ahora con las huellas. Ha acabado el EMAT y dice que al pobre Whitten lo han estado manipulando. - Le digo a Darrell con seriedad.

- Maldita sea... pobre muchacho. - contestó Andrew notoriamente afectado.

Andrew trató de continuar la iniciativa de George pero el tal Jones les cerró en el paso con la estupidez de la orden. Estos chorizos de poca monta se sabían todas las triquiñuelas.

- ¿Orden...? No... no tenemos ninguna orden. No se ponga nervioso. Si por su parte no tiene inconveniente en que sus vecinos le vean siendo interrogado por un par de polis por nosotros tampoco hay problema. Además... precísamente se eso va esta historia. Hemos sido notificados de ciertos altercados que ha tenido con el señor Chong, el propietario de la tienda de abajo. Cuéntenos, señor Jones... ¿qué ha sucedido?