Partida Rol por web

Boston Nocturno

Escena privada de Elijah Page

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17/03/2015, 16:34
Frank Carnation (p)

Frank esbozó una sonrisa tranquilizadora ante la incertidumbre de su recién creado chiquillo

-“No mucho, a parte del sueño en si, que a veces es una experiencia extraña. Tu transformación será definitiva, por ejemplo” – señaló su cabello que después de todas las vivencias de aquella noche había pasado de cuidadosa y estilosamente desordenado a, simplemente, despeinado – “volverás a tener el mismo aspecto exacto que en el momento de tu muerte y ya no tendrás el sueño de la muerte hasta que vuelva a amanecer. También consumirás parte de la sangre que has tomado, para poder despertar; si duermes sin sangre, no despertarás en mucho tiempo... tal vez nunca, hasta que te alimenten. El resto de cosas ya han cambiado, en realidad, y mañana las trataremos. Has sentido a la bestia, la sigues sintiendo, de hecho.”

Se rió cuando se hizo el niño pequeño. Sacudiendo las manos bromeó:

-“No, hijo, puedes ser malo y acostarte tarde. Pero si te quedas dormido en mitad del salón porque te alcanza el letargo y te despiertas a mitad de mañana ardiendo como una antorcha, luego no te quejes. Da mucha grima ver a un quemado lloriqueando.” – lo cierto es que, a pesar de las bromas, a Elijah le costaba mucho mantener los ojos abiertos. No era sólo el típico cansancio absoluto de llevar sin dormir un día tras una maratón, era una exigencia sobrenatural de esa parte nueva de su ser que no dejaba de pedir y pedir y nunca parecía saciarse

Mientras pasaba a su lado, camino de la bañera con su manta, el viejo cogió la prenda por una esquina y se la arrojó encima de la cabeza, bromista:

-“Estás muerto, Linus, ya no necesitas mantita. El frío sólo te tiene que preocupar si te amenazan con un soplete de nitrógeno líquido, por debajo de eso seguro que lo aguantas. ¿No te había apetecido nunca ir en bañador en diciembre?” – le dijo con sorna. A Elijah, hijo somnoliento de otra época, le costó un poco pillar la referencia a Peanuts que había pasado su momento álgido antes de que naciera.

Apenas tenía fuerzas ni para acostarse cuando Frank le ayudó a entrar en la bañera con la sonrisa, siempre triste, aún en los labios.

-“¿Un cuento? Seguro que alguno se me ocurre, Linus.” – dijo echándole la manta sobre la cabeza

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17/03/2015, 16:36
Director

Elijah, agotado, parpadeó durante, tal vez, medio segundo y Frank ya no estaba allí. Sorprendido descubrió que ya no estaba cansado en absoluto, se levantó con una sonrisa en la oscuridad que, de algún modo, parecía menos densa ahora que estaba muerto. Suponía que lo del “terrible sueño de la muerte” sería otra broma.

Frank no estaba en la casa, aunque le pareció raro supuso que podía ser alguno de sus poderes de maestro vampiro, o lo que fuese. Hasta que se fijó en el reloj: 17:30. No recordaba bien las horas de ese día, todo había sido tan intenso, tan caótico, tan frenético… pero, pero seguro que había vuelto a casa de noche, como pronto las cinco… No, no podía ser seguro que más tarde… había preparado la cena, cenado, Frank, el vecino… Nervioso encendió las noticias, llamó a información horaria, daba igual cuánto comprobase. Sí eran las 17:30… del día siguiente, había dormido – probablemente – casi doce horas, aunque no había pasado para él ni un segundo, como si hubiera estado muerto ese tiempo.

No sentía ni la más mínima molestia en la espalda, a pesar de haber dormido sobre la dura porcelana de la bañera. De hecho se sentía mejor que nunca, aunque hambriento, como si no hubiera comido en todo el día – lo que era cierto, en el fondo – pero un hambre ansiosa y obsesiva que le costaba un esfuerzo consciente ignorar.

El telefonillo sonó, al contestar un poco después, oyó una carrera antes de que le respondieran, como si el que llamaba se estuviera yendo. Una voz femenina respondió a su pregunta.

-“Buenos días, Elijah. Soy Ninette, asistente del Sr. Carnation. Frank me pidió que viviera a buscarle para llevarle con él cuando esté listo.” – rió tontamente antes de seguir – “¿Quiere que le espere en algún sitio? Hace un poco de frío y llevo media hora dando paseos para llamar cada cinco minutos como me dijeron.”

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17/03/2015, 23:11
Elijah Page

Elijah sonrió a su creador. Le había costado asociar el nombre Linus a uno de los amigos de Carlitos, el dueño de Snoopy, pero la broma pegaba. Mientras le dejaba en su nueva cama, contemplo su rostro. Se preguntó cuántos iconos culturales habría visto nacer, ponerse de moda y caer en el olvido. Había dicho siglos, y afirmado conocer a Shelley en persona. Le sonríe esperando su historia, una historia absurda en la que la princesa bebe sangre de sus campesinos y el dragón ha sido sustituido por Van Helsin.

Pero en lugar de eso, el día simplemente desaparece en un pestañeo. Su extraña paranoia vampírica continúa. De hecho su mente esta reacondicionándose a esa nueva realidad. Ayer era humano, hoy un vampiro. Ayer estaba enfermo y daba asco verle, hoy ha salido de la bañera con un salto.

Aunque todo esto es una construcción mental. Toda la gravedad de los cambio y la nostalgia de lo anterior estaba en la mente: Ayer eres virgen, hoy no. Ayer vivías en tu viejo domicilio hoy estás en tu nueva casa. Pero igualmente te apetece merendar a las cinco y tienes ganas de mear nada más levantarte. En el fondo no es para tanto. Y esto no es distinto: su cuerpo y sus instintos ya vivían en el vampirismo.

Otra cosa era su mente, apabullada por mil pensamientos, temores y dudas.Necesitaba sentarse, planificar su vida ¿Qué ropa guardar ahora? Ya no necesitaba gafas de sol, por ejemplo. ¿Debía seguir viviendo en una casa cuya única habitación sin ventana era el baño? Había un sinfín de preguntas y decisiones, aparentemente transcendentales, en el fondo simplemente colaterales. Meras consecuencias de algo que ya habia ocurrido, que no tenia vuelta atrás y que ya le había reclamado.

En ese mar de dudas se estaba ahogando cuando sonó el portero automático. Fue un alivio saber que seguía teniendo un creador que velaba por él.

-Suba y póngase cómoda, por favor.- Le abre la puerta, pero no la espera. Le deja la única estufa de la casa pegada al sofá mientras él se encierra en el baño para un rápido arreglo. Mientras se ducha va cerrando el agua caliente hasta prescindir de ella. En efecto, seguía sintiendo el frio y el calor, pero ya no eran tan graves para él.

Cuando sale se presenta a la mujer.

-Un placer conocerla, Ninette. Supongo que ya sabe mi nombre- le sonríe -No sé qué tipo de etiqueta es el más adecuado para este caso.– Se refiere a su ropa. Se ha vestido con una camisa abierta sobre una camiseta de un color plano alegre. Algo moderno pero, que de ser una situación formal, podría arreglar abrochándose los botones. Era lo más protocolario que había en su armario. Aunque conociendo a Frank (o más bien su máscara) quizá hubiese preferido algo con más lentejuelas y complementado con una boa al cuello.

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18/03/2015, 20:02
Ninette "Sharp"

Elijah pudo oír el ascensor desde el cuarto de baño, aunque luego volvió a dejar de oír a Ninette hasta que llegó a la puerta. Aquel descontrol sensorial, alternando superpoderes con su realidad cotidiana anterior empezaba a ser un poco fastidiosa, haciéndole esperar tomar el control de esas cosas pronto.

La mujer entró en la casa saludando en alto, pudo oír que paseaba un poco por el salón, con alguna risita queda ocasional, que probablemente no habría oído el día anterior… quería decir, el anterior al actual; era difícil asimilar que había pasado un día entero mientras él parpadeaba. Salió del baño cuando ella ya llevaba unos minutos sentada.

Ninette resultó ser una chica joven, de 20 y pocos, con un aspecto que no tenía mucha relación con su nombre. Tenía pinta de chica dura y mala, pero de una forma demasiado pop, como si hubiera evolucionado bien desde el estilo glam que había ido decayendo la última década pero sin entrar en el heavy ni volver al pop; el resultado era... artificial, como una muñeca jugando a ser mala.

Tenía el pelo verde la mitad muy largo y la otra muy corto, vestía una camiseta de tirantes negra demasiado amplia, llena de símbolos libertarios de todo tipo en un collage muy inspirado, debajo de una cazadora de cuero corta y gruesa con mallas de licra plateadas muy ajustadas y botas de plataforma. Su aspecto barriobajero quedaba anulado cuando uno miraba más despacio las ropas: todas eran de calidad suprema y de marca: diseño Carnation. Físicamente era resultona, probablemente para alguien que apreciase su peculiar estética, incluso atractiva. En cualquier caso lucía una sonrisa sincera y alegre, aunque un poco torcida en un gesto un tanto cínico o, tal vez, irrespetuoso.

Le saludó con amabilidad y ampliando su sonrisa. Le miró de arriba abajo cuando habló de la etiqueta y le indicó con un dedo que diera una vuelta completa… ¿le miró el culo descaradamente?... Creía que si. Hizo una mueca con la boca como de no está mal, y señaló su pecho descubierto.

-“Sabes que estamos en diciembre, ¿no, tigre? No es que vayamos a pasar mucho tiempo en la calle, pero fuera debe hacer como 30º *. Te lo digo yo, que llevo paseando un rato. Respecto a la ropa… Vas bien, aunque no te mataría tener algo con un poco más de diseño, los diseñadores de ropa también tenemos que comer ¿sabes?” – tenía una sonrisa, que acompañó de una carcajada bromista que dejó claro que no lo decía en serio

– “Na’. No te preocupes, vamos al estudio de Frank, como mucho que luego vayáis al área VIP-exclusive del ‘Semifusa und the Rocks’ y allí cada uno va de su padre y de su madre. ¿Sabes que deben tener hasta un club de esos de recreacionismo victoriano? Y a mi siempre me dejan abajo, a veces hay una tía que parece sacada de una peli mala de porno sado.” – se rió con ganas, meneando la cabeza – “los ricos sois la leche.”

Tras comprobar que había terminado de vestirse, mientras hacía oscilar dando vueltas las llaves de un coche en su dedo índice, le dijo:

-"Frank me dijo que te dijera que si tenías que comer lo hicieras en algún restaurante de Allston Sur o Fenway, que son los más apropiados a tus necesidades y que, además, pillan cerca del estudio. Esta junto al río." - la última frase la dijo con el tono sugerente de quien intenta impresionar. Elijah ya sabía dónde estaba el estudio de uno de los diseñadores de moda más conocidos de Boston, desde luego... Aunque nunca hubiera estado allí.

-"Si no es el caso, pues nos vamos cuando quieras..." - no era una orden ni nada parecido, más bien parecía que Ninette creía que él había quedado con Frank y que aquello era lo que él quería.

La llave del coche seguía girando en el dedo de la chica, aparentemente sin esfuerzo.

Notas de juego

* Fahrenheit, que usan en USA como -1 en Celsius. No es que como vampiro te importe lo más mínimo, porque eres inmune a la hipotermia y demás pero…

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18/03/2015, 21:09
Elijah Page

-Cierto. Que bobo- rápidamente cogió su abrigo. –No te pega el nombre, parece más serio.- Comenta por hablar de algo mientras salen de casa.

-Yo no soy rico. Hasta ayer era un fotógrafo muerto de hambre, aunque parece que la situación ha cambiado un poco.- Sonríe.

-Tú estás al tanto de… esas necesidades especiales, ¿verdad?- Elijah trato de pensar donde podría seducir a un desconocido para apartarlo a la ribera del rio y darle un buen bocado. Aunque no tanto como el de ayer a su vecino, no podía dejar a alguien inconsciente. ¿Podría controlarse? ¿Podría hacerlo sin acabar vestido de color rojo? Sería más sensato ir a ver a Frank directamente, pero estaba jodidamente hambriento.

-Necesito tomar un trago antes de reunirme con el señor Carnatión- Comentó.

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19/03/2015, 18:34
Ninette "Sharp"

Ninette rió entre dientes mientras Elija tomaba su abrigo. Sacudió la cabeza asintiendo cuando mencionó su nombre.

-“Si, me lo dicen contínuamente. Mis padres me concibieron en Francia, en el curso del 68, ¿conoces las revueltas que se conocieron como ‘el mayo del 68’?, pues yo estuve ahí, aunque fuera en forma de embrión o lo que sea. Así que… bueno, Ninette es francés. Una no elije su propio nombre. Aunque puedes llamarme Sharp, si lo prefieres.”

Le miró cuando le dijo que no era rico, se notaba que no le creía o, más probablemente, que no creía lo de ‘un poco’. Pero no dijo nada hasta que le preguntó por las necesidades especiales, puso genuina cara de ignorancia y preguntó:

-“No me habían dicho… Eh… ¿Qué necesidades? ¿Tienes intolerancia a la lactosa o algo así? Mi prima tiene alergia al pescado y los cacahuetes, casi se muere una vez que tomó lubina, es por unos gusanitos o algo así. Vaya es algo serio eso, pero hay restaurantes de todo tipo por la zona, te llevo al que quieras y mientras cenas compro un par de cosas para la tienda.” –

Cuando habló de tomar un trago, abrió mucho los ojos y sonrió nerviosa, como comprendiendo.

-“¡Ah! Eso, claro. Si, muchos artistas tienen esa ‘necesidad’. No te preocupes, a mi también me gusta la priva mazo. Pero, ¿no es un poco pronto? Eh, que no me meto en tus movidas, tu mandas.” – sonreía con picardía, aunque seguía sin haberse enterado de nada. Ahora creía que era alcohólico, o algo así.

-“¿Cuál es tu lugar favorito de la zona? También puedo llevarte allí, aunque como te dije, es probable que vayáis luego al Semifusa, si ese trago puede esperar…” – ese era uno de los locales de moda de la ciudad, un club nocturno que solía tener música en directo, normalmente de grupos emergentes como teloneros de solistas y bandas pequeñas consagrados aunque, a veces, organizaba veladas de música clásica con una cantante de ópera o cosas parecidas.

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20/03/2015, 13:55
Elijah Page

Tenía que concederle al monstruo que habitaba en su interior que estaba rugiendo con motivos. Tenia tanta sed que estaba empezando a pasársele por la cabeza seducir a la asistente de su creador.

-Sí, te pega más Sharp. Aunque te llamare como prefieras… Algo he oído del mayo del 68, creo que eres muy afortunada de haber participado en ese acontecimiento.

Salen de la casa. Elija le cede el paso caballerosamente. Hace oreja en el rellano, tratando de escuchar ruido del piso de arriba. Se le pasa por la cabeza subir a preguntar por el estado de salud de su vecino, pero era lo último que el pobre necesitaba para volver a la normalidad.

-Es verdad, ya nos pondremos de alcohol hasta las cejas más tarde, la noche es joven. Si no te importa, aprovecho lo que te cueste hacer esos recados para comer algo rápido en el vegetariano de la calle ___. Me acabo de despertar, y en la nevera no tengo ni el típico limón abierto para hacer el chiste.   

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23/03/2015, 16:43
Director

Sharp se rió con ganas con su broma del mayo del 68, asintiendo y señalándole con el dedo, como diciendo ‘muy bueno’. Parecía que tenía sentido del humor incluso si ella era el blanco; por otro lado no pareció fijarse mucho en el gesto caballeroso de Elijah al salir.

Con su esfuerzo pudo escuchar claramente el agua correr por las cañerías, a los viejo de abajo discutiendo e, incluso, algo correteando por las paredes; pero en el piso de arriba no se oía nada. Estaba casi seguro de que ni el mulato ni la pelirroja estaban en casa.

Ya en el coche, Sharp asintió a su propuesta, arrancó y se incorporó al tráfico. Conducía respetando las normas, pero de forma un tanto brusca, sin dejar de gritar e insultar chabacanamente a todo el que la molestaba por ir demasiado lento, acercarse demasiado a ella o por saltarse las normas en su perjuicio. Elijah temió que alguien se bajase del coche y les partiera la cara, porque Ninette, a pesar de su facha de chica dura, apenas medía cinco con cuatro (1,60) y no pesaba ni ciento veinte libras (54).

Por suerte llegaron a la zona del estadio Fenway sin contratiempos, ella aparcó en la misma calle que le había dicho y le gritó por la ventanilla:

-“Voy al centro comercial de la Prudential Tower y vuelvo en un fliqui. Nos vemos aquí a las ocho.” – casi sin tiempo para más arrancó con prisa y se marchó. Eso le dejaba con menos de hora y media; el tiempo, más que de sobra para tomar algo en un restaurante, era muy justo para sus planes alimentarios.

 

Notas de juego

 

He añadido el otro día las reglas para cómo narrar la caza cuando es de motu propio de jugador, de modo que lo podáis resolver con una par de post narrados (salvo que haya complicaciones). De todos modos cualquier duda, me consultas y si te salen problemas y no te apetece decidirlos o no se te ocurre, pues paras la narración donde sea y sigo yo.

Si no me equivoco tu hoja ya está con las puntuaciones como vampiro así que no vamos a entrar mucho en cómo se llega a ellas y vamos a suponer que en tu caso ya tenías todas las capacidades y no desarrollas nada nuevo ni necesitas entrenar, salvo las disciplinas y los trasfondos nuevos que, de todos modos, los tuyos son automáticos al ser generación y mentor.

Las disciplinas al ser auspex 2 y presencia, sólo requiere entrenar el nivel 2 de auspex los otros son medio innatos. Así que vamos a suponer que ya puedes manejar todo, salvo auspex 2, aunque auspex 1 y presencia todavía funcionan medio en automático y con interferencias.

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25/03/2015, 10:39
Elijah Page

Elijah no acudió a ningún restaurante. En lugar de ello, vagó por los corredores del centro comercial, deteniéndose delante de una tienda de fotografía. Se quedo embobado al contemplar algunas obras expuestas en el escaparate. Con sus nuevos sentidos podía percibir más y mejor y eso le hacía perderse en una antinatural fascinación ante tanta belleza. No sabe cuánto tiempo estuvo mirando aquella foto (un viejo sentado en un banco al atardecer), simplemente se quedo en trance. Trance del que le saco otro transeúnte con ganas de charla: -Es hermoso, ¿verdad?-

Elijah respondió sin apartar la vista, alabando el juego de luces, el encuadre y otros detalles técnicos*así  como su simbología y expresividad –(…) te hace pensar en lo efímero que es la vida y la belleza.-

Aquella charla continuó en la cafetería cercana y termino en los servicios del centro comercial.

Adrian, un tipo de treinta y cinco años. Bastante simpático, dispuesto a fingir que sabe de arte por un polvo. Aunque en realidad lo suyo es la contabilidad. Desprende soledad, la soledad de quien es incapaz de adaptarse para convivir. La soledad de alguien que podría ser el alma de las fiestas pero que es demasiado cobarde para subirse a la mesa con la corbata en la frente, o simplemente hacer un chiste verde. Aunque está deseando que lo haga otro para reírse.  

Elijah sabe lo que el pobre necesita: pincharle un poco para que se anime, reírle las gracias y escucharle con atención cuando hable, para que coja autoconfianza. Pero le da lo que le pide: es Elijah quien hace las gracias y los dobles sentidos, quien lleva la conversación. Haciéndole fácil el juego, aunque no aprenda nada.

Aquella charla termino en los baños del centro comercial, como ambos sabían desde el minuto uno.  

- Tiradas (1)

Motivo: Caza social Apariencia + subterfugio (7+1)

Dificultad: 7

Tirada (7 dados): 8, 3, 1, 8, 9, 10, 2

Éxitos: 3

Notas de juego

*Que el jugador ignora.

Puse la dificultad en 7 en vez de 8, pero el resultado es el mismo: 4 exitos, con lo cual tendra que hacer esperar media hora a la pobre Ninette. (Esa época maravillosa sin móvil)

La idea es sacarle dos puntos de sangre, y una vez más fingir que le ha dado un mareo. No es por esquilmar a la población mundial de sangre, es que esta el deposito casi vacio.

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26/03/2015, 14:49
Director

Parte del encanto de aquellos encuentros prohibidos era la emoción y la adrenalina de poder ser sorprendidos teniendo sexo en un sitio público. Y más sexo que, en aquella sociedad retrógrada, se consideraba tabú; si una autoridad les encontraba podían acabar pasando la noche en el cuartelillo por lo que, implícitamente, se intentaba hacer poco ruido; lo que no dejaba de incrementar la excitación.

Durante unos segundos el vampiro no pudo dejar de pensar en qué pasaría si era detenido. ¿Y si la celda daba a la luz? ¿Y si le buscaban durante el día? Esa distración dio a Adrian la iniciativa, agachado en el estrecho espacio disponible, Elijah tuvo que maniobrar con arte y tino para conseguir una nueva posición sexual en la que pudiera satisfacer sus dos ansias, la vieja y la nueva surgida hace sólo un día.

Tuvo otro instante de pánico cuando en medio del frenesí sexual, contenido y frenético por la adrenalina, el ansia y la incertidumbre, mordió a Adrian y éste empezó a responder a sus chupetones y embestidas con gritos de placer más allá de lo razonable en aquellas circunstancias. Pero Elijah sabía, por experiencia, que el beso del vampiro era, sencillamente, demasiado para poderlo resistir. Temió que alguien llamara a la policía y acabar en la comisaría; pero, por suerte, quienes pudieran entrar resultaron ser timoratos o respetuosos pero el caso es que abandonaban los lavabos con prisas y nadie les interrumpió.

Su ansia crecía por momentos y pronto, cuando su amante dejó de sostenerse sólo y tuvo que apoyarlo contra la pared, supo que debía parar si no quería acabar perdiendo la cabeza. Su control fue tal que, incluso, consiguió lamer la herida y cerrarla antes de que sangrase demasiado, nada que no pudiera arreglar simulando algunos besos más mientras terminaban, porque su compañero estaba agotado, incluso cuando se despidieron con miradas cómplices, él se quedó allí sentado y mareado, agotado hasta casi no poder hablar, pero ileso.

Aquella alimentación le subió el ánimo, después de todo no había sido tan terrible. En ese momento parecía fácil acostumbrarse a aquello. Resultaba fácil no pensar en lo que podría haber pasado si pierde el control, Adrian había disfrutado tanto como él, no parecía haber nada de malo en ello.

Cuando llegó de vuelta a la esquina dónde había quedado, Ninette esperaba en el coche, en doble fila y haciendo un gesto obsceno al último tipo que la había pitado por ello, un viejecillo que la miró como si hubiera visto un demonio al volante del coche. Le saludó con la mano y le hizo gestos para subir al coche; no le dio tiempo ni de abrocharse antes de arrancar. 

El trayecto fue corto, el taller de Frank estaba muy cerca, junto al río. Era una antigua nave de almacén reconvertida en loft. En el interior había media docena de mesas de diseño repartidas de forma desordenada pero estética con gente diversa trabajando en ella. Un lateral tenía varios maniquíes con vestidos extravagantes y llamativos pero, seguramente, muy caros así como complementos a juego. Algo más de ropa, bolsos, zapatos y sombreros parecían ocupar un lateral de estanterías y armarios. El fondo tenía un gran portón que, seguramente, daría a un almacén. Había una escalera de caracol pintada en colores estridentes  haciendo un patrón hipnótico que subía a un voladizo cerrado, probablemente la oficina.

 

- Tiradas (1)

Motivo: Conciencia

Dificultad: 7

Tirada (3 dados): 9, 9, 5

Éxitos: 2

Notas de juego

La tirada de conciencia la puedes hacer también, si quieres completar una caza en un post.

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26/03/2015, 17:58
Frank Carnation

Frank estaba en medio, con su peluca, un traje hortera lleno de brillos que parecía un cruce entre el de un payaso y el de una princesa Disney. Era aterrador para el buen gusto como ropa, pero Elijah pudo ver en los colores una composición profunda, eterna, que transmitía sensaciones muy instintivas y primarias. Como un cuadro abstracto. Gritaba órdenes a todos con ínfulas de diva y tono estridente, acompañado de exagerados gesto, muchos de ellos amanerados.

El diseñador se dirigía a una persona, Elijah no sabía decir si hombre o mujer, de largo pelo negro y lacio, con excesivo maquillaje blanco por toda la cara y rojo alrededor de los ojos, vestida con amplias ropas negras llenas de pinchos y remaches y botas militares.  Permanecía de pie, junto a su mesa de diseño, más tieso - o tiesa - que el palo de una escoba.

-"Ahora voy a pasar la noche atendiendo asuntos con Elijah" - Frank, con su tono estridente y señalandole a él con un gesto lánguido y largo, hablaba de forma intimidante, al menos para aquella figura indefinida - "Creo que se me ha acabado el papel higiénico en casa, si cuando salga decido llevarme uno solo de tus bocetos, mañana puedes madrugar si quieres. ¿Me entiendes?" - Elijah no podía creer que ese fuese la misma persona que había conocido la noche anterior. Su interlocutor, aunque no había dicho nada en toda la conversación, asintió, tragando saliva visiblemente y se sentó.

Tras ello se apoyó en la mesa de otro tipo, de aspecto anodino, con un peinado clásico pero vestido de traje y corbata con zapatos a juego. Y, mirándole directamente procedió a una nueva sesión de poner de los nervios.

-"Tu vas bien, querido, vas bien. El trabajo es bueno. Sigue así, estás a punto de lograr el mínimo: ya sabes. Todo bueno y algo sublime. Estas cerca. Lo puedes lograr." - el pobre hombre asentía con tanta energía que parecía que se le iba a caer toda la gomina.

El divo se giró para acercarse a Ninette y a él, mientras decía a toda su trouppe en general y a nadie en particular:

-"Necesito una base con la que trabajar. No puedo crear arte de la nada, es tan ordinario andar haciendo dibujitos como un pintamonas."

Todos habían agachado la cabeza y se habían puesto a trabajar, todos menos él y Ninette. Frank se dirigió a él con una sonrisa, mientras le tendía una carpeta a Ninette. Aunque le tomó del brazo a él para empezar a dirigirse al despacho de arriba, fue a ella a quien habló, casi sin mirarla:

-"¿Todo bien, Ninette, ningún problema?" - aunque todo fue muy casual y Frank ni siquiera parecía prestar atención a Ninette, y mucho menos escucharla, hubo un cambio claro: estaba un poco tenso hasta que vio a la chica relajada - "Toma éstos son nuestros clientes de tiendecitas de mall. Prepara cartas personalizadas para cada uno pidiéndoles que hagan sus solicitudes de pedido para la temporada de prêt à porter que viene."

La chica cogió la carpeta y se fue a una de las mesas libres, la de la entrada, que no era diseño y tenía un ordenador con su impresora y pistola de códigos de barras. Ellos subieron la psicodélica escalera.

Apenas entraron en el cuarto cerrado, Frank puso música suave que sólo sonaba junto a la puerta de entrada. Sus ojos se pusieron rojos y miró alrededor. Asintió satisfecho mientras se quitaba la peluca y la tiraba sobre la mesa, masajeándose el cuero cabelludo cortado a cepillo. También volvió a su voz del día anterior, educada pero profunda sin asomo de la estridencia de su fachada artificial.

-"Bien Elijah, me alegra que hayas podido venir. Creo que deberíamos empezar a aprender, necesitaremos algunas noches sólo para lo básico. ¿Listo para volver a la escuela? ¿Tienes alguna duda en particular por la que te gustaría comenzar ahroa que tenemos tiempo?"

 

 

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03/04/2015, 11:20
Elijah Page

Elijah sonrió al ver la peineta de Sharp y la reacción del viejo. Amaba las grandes ciudades. En una cutre ciudad como en la que nació, las actitudes libres como la de de ella eran sofocadas y marginadas desde el principio. Los políticamente incorrectos tenían que esconderse en las sombras. Aquí en cambio este incidente era una trivialidad más. Había tanta vida en las ciudades, tanta gente,… tanta sangre.

La bronca de su creador era otro espectáculo, un poco más violento. Aunque, de alguna manera, sabía que todos se morían por los halagos del vampiro y que esas broncas solo hacían más valiosas sus eventuales palabras de ánimo. Le da un poco de pena tanta esa actitud... ¿Era él igual, un bobo dependiente de Frank y su aprobación? Mantiene la mirada en el suelo y el perfil bajo. ¿Qué pensarían todos esos modistos de él? ¿Quién era el nuevo que llegaba aquí y se iba al despacho con el jefe?

 

¿Listo para volver a la escuela? ¿Tienes alguna duda en particular por la que te gustaría comenzar ahroa que tenemos tiempo?"

-Supongo que no tengo elección. Parece que en esta nueva vida te matan si cometes algún error. Claro que tengo dudas. Miles. ¿Qué somos exactamente los vampiros? ¿De verdad vivimos para siempre? ¿Por qué te obligaron a convertirme?  ¿Cómo puedo moverme tan rápido como tú? ¿Cómo se ha logrado evitar que el mundo sepa de nosotros? … El fotógrafo hace una pausa antes de realizar preguntas más personales… ¿Por qué te has fabricado una máscara? ¿Debería yo también inventarme otra forma de ser de cara al publico?

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06/04/2015, 14:20
Frank Carnation (p)

Frank, viendo lo deprimido que parecía con sus primeros comentarios, trató de quitar hierro al asunto.

-“Vaya, parece que te nuestra depresión racial natural te ha alcanzado bien pronto.” – comenzó con sonrisa triste – “Y, aunque ciertamente, necesitas aprender lo antes posible, tampoco es tan terrible como lo pones; una vez te presentemos en sociedad sólo te matarán si haces algo que amenace nuestra existencia. Eso no quiere decir que no vayan a tratar de aprovecharse de ti o a castigarte como puedan, sobre todo si así consiguen algún beneficio. Pero matar a un vampiro, incluso por omisión, está muy castigado; es una de las pocas cosas – a parte de romper la Mascarada, que pueden hacer que te maten, de hecho.”

Luego dejó que comenzase con sus preguntas.

-“¿Qué somos? Pregunta a diez vampiros y tendrás once respuestas distintas” – contestó con su sonrisa triste – “Algunos dicen que estamos malditos por Dios. Cuál depende de a quién preguntes. Otros que estamos enfermos o que somos la próxima evolución de la raza humana. Nadie sabe la verdad, aunque algunos dedican su inmortalidad a averiguarlo.”

Con una sonrisa un poco más tirante contestó sobre su inmortalidad.

-“Sí. Siempre que no te de el Sol, o te corten la cabeza o te maten. Eres inmortal y, aunque te curas deprisa y eres muy poderoso, mientras tengas sangre que usar, no eres invulnerable.” – le siguió una explicación larga sobre cómo la vitae podía sanar sus heridas, potenciar su físico y qué cosas le herían y cuánto; incluso le hizo una desagradable demostración, clavándole un abrecartas en el estómago en una herida que hubiera sido mortal hace unos días pero que se convirtió en poco más que una molestia cuando se concentró en cerrarla. Hablaba despacio, respondiendo sus dudas y asegurándose de que todo le quedaba claro*.

Su sonrisa triste desapareció cuando le preguntó por su conversión. Aunque volvió, apenas, cuando siguió con la batería de cuestiones

-“Bueno, eso y lo de cómo evitamos la fama están relacionados. Es lo que llamamos las Tradiciones. Nuestras leyes." - nuevamente Frank le ilustró acerca de las cinco Tradiciones, en particular lo importante que era la Mascarada, fuente principal de las ejecuciones de vampiros y la Progenie*. Fue tras esta explicación que concluyó la respuesta a lo que realmente le había preguntado - "El caso es que ya soy bastante mayor. De acuerdo al criterio del Sabio de la Sangre era uno de los candidatos óptimos para tener progenie y el nuevo príncipe ha conseguido una ciudad estable y quiere - exige - que esté optimamente habitada. Desea tener de 26 a 28 vampiros en el área metropolitana lo antes posible y extenderla usando independientes en las afueras. Una de nuestras aliadas ha fallado al intentar conseguir atraer la progenie que buscaba, otro vampiro le ha tomado la delantera y yo era el otro de nuestra facción a quien habían ordenado buscar, aunque había cedido la iniciativa, ese fallo me obligaba a actuar. La alternativa era que me forzaran a abrazar a quien ellos quisieran."

Tras rememonar unos segundos para recordar la siguiente pregunta, al traer a la memoria que era sobre su velocidad, rió, menos triste que otras veces, incluso con humor.

-"¡Oh, si! Los grandes poderes vampíricos. Eso te atrae ¿no?" - tenía una sonrisa amable pero pícara - "No sé si podrás. Ciertamente la supervelocidad es uno de nuestros dones como los sentidos mejorados y el carisma sobrenatural, un neonato rara vez desarrolla todos los poderes familiares al principio, sobre todo si consigue un poco más de desarrollo en alguno de ellos. He visto que desde recién nacido" - rió alegre con el chiste - "tenías un don con el oído y la vista, así que me parece que va a ser tu poder principal y, viendo cómo te miraba de embelesada Ninette, me parece que también posees el don de la presencia, aunque aún no lo controles conscientemente" - Elijah en realidad no se había fijado mucho en que la muchacha lo mirase, pero si Frank lo decía tendría que suponer que era verdad - "Mañana cuando ensayaremos, afianzaremos tu control sobre tus sentidos y tu carisma y veremos si puedes moverte más rápido o ver las auras de las personas. O, quien sabe, tal vez aunque haya llegado el último sea el primero: probaremos también si puedes intimidar a la gente con la mirada. Nunca se sabe, tal vez puedas hacer todo eso. O más. Los poderes nunca son una ciencia exacta, algunos neonatos desarrollan más y otros menos." - a ello le siguió otra charla amena sobre los poderes generales que tenían algunos otros vampiros, los que podría desarrollar con esfuerzo y la existencia de otros misteriosos que ni siquiera Frank conocía*^, eso llevó también a que hablase de los diferentes clanes, o familias vampíricas - "Nosotros somos del clan de la rosa, los Toreador. Y eso determina que, ante algo que sientas como excepcionalmente hermoso puedes quedarte extasiado e ido, como me pasó a mi con tu fotografía de la puesta de sol; incluso en mitad del peligro. También forma parte de nuestro grupo, aquí en Boston, una... prima, una hija de la cacofonía, son parecidas a nosotros, pero se centran en la música y el canto. Y tienen dones peculiares relacionados con ellas."

Las preguntas personales volvieron a quitarle la sonrisa, su tono era serio y también su expresión. Señales de lo serio que era el tema que le contó a continuación.

-"Defensa. Política. Confabulación. Intriga. Llámalo como quieras. Mucha gente ante ese estereotipo hace asunciones, se fía, baja la guardia, cualquier ayuda es poca en nuestra sociedad. Te he dicho que no te matarán, y es cierto; incluso, otros vampiros, tratarán de salvarte si corres peligro de muerte. Les hay que es su trabajo, como Amûnet. Pero eso no quiere decir que no intenten engañarte, usarte, aprovecharse de ti o hacerte mal. Te pisarán si creen que eso les aupará un escalón o les dará una migaja más de poder. Usa cualquier recurso que te sirva, a mi me va bien ser menospreciado, me ayuda porque mi estilo es el de la serpiente, discreto y furtivo. Una fachada, un aspecto imponente, el falso amigo de todos... Lo que más te ayude y te sea factible mantener, pero dejar que otros sepan cómo eres de verdad es una debilidad." - siguió con otra charla advirtiéndole de peligros, le habló de hombres lobo asesinos, del Vínculo de Sangre, de la sociedad vampírica que parecía sacada de la edad media feudal, de lo cainita que resultaba en su ansia de poder, de los peligros de la bestia y la degeneración y de la importancia de tener un refugio secreto y seguro*.

Aquello les había llevado horas de conversación, entre otras cosas porque Frank, de vez en cuando, le hacía preguntas con muy mala leche y difíciles de cosas de las que le había hablado, como si realmente estuviera en la escuela. Era tarde - o temprano, según se mirase - para ese entonces y su sire sugirió dejar las siguientes preguntas para la noche próxima, junto al entrenamiento. Mejor darse tiempo para volver a casa seguros. Se despidió de él con una sonrisa y un abrazo, conminándole a volver la noche siguiente lo antes posible mientras volvía a ponerse la peluca y el chaleco de colores estridentes.

Notas de juego

* En cada una de éstas explicaciones consideraremos que Elijah va aprendiendo todo lo que debe saber (y tú ya conoces). No creo que nos compense hacer un diálogo detallado de cómo le cuentan un montón de cosas que ya sabemos y resultaría aburrido. Si hay algo que creas que merece la pena parar por cómo reaccionaría Elijah al saberlo o que tú quieras saber cómo funciona, reséñalo como preguntas específicas y nos paramos a jugarlo.

En el caso de las Tradiciones, si no lo hiciste en su momento, sí conviene que te familiarices con los cambios que tienen para ésta partida. Están en la escena de resumen de cambios en la ambientación.
 

^ En esta ambientación el poder está muy limitado, incluso un antiguo no tiene más que 75 o 100 puntos gratuitos extras, salvo que sea muy, muy viejo. De modo que incluso ellos no tienen muchos más de 8 o 10 rangos en disciplinas normalmente y sólo a veces tienen disciplinas generales de fuera de clan. Las específicas de clan suelen ser secretas y pocos vampiros saben apenas nada de ellas fuera de sus clanes de origen.

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09/04/2015, 00:42
Elijah Page

La noche se paso en un periquete. Su nuevo mundo tenía historia y cultura propio. De repente no era un habitante de Boston, era miembro de una exclusiva y secreta  sociedad de bebedores de sangre. Ese era su nuevo mundo, un mundo en el que Frank le introducía animadamente y con meticulosidad. Se sintió absurdamente orgulloso de responder acertadamente sus preguntas sorpresa, como un niño necesitado de aprobación. Que es precisamente lo que siempre había sido en parte.

Por desgracia no había tiempo para practicar poderes. Ver el aura, supervelocidad, encandilar fácilmente. ¿Cómo no iba a atraerle? Estaba deseando descubrir todos esos talentos mágicos. Aunque esa es solo una cara de la moneda, la otra es que hay vampiros con poderes extraños y desconocidos. Así como hombres lobo y otras criaturas ocultas en la oscuridad. De repente el mundo era más peligroso, más extraño. Ahora ya no podía negar con rotundidad que el coco y el hombre del saco no existían. Ahora estaba abierto a un universo extraño.  

Y tenía que prepararse para defenderse socialmente, su propio sire ocultaba su naturaleza para tener un as en la manga. ¿Qué tendría que hacer él, entonces? Tenía que buscarse un disfraz para su forma de ser y estar en guardia frente a las conspiraciones sociales y el politiqueo.

El entumecimiento parecido al sueño de los vivos empieza a acecharle. Estaba cansado y tenía mucho que asentar. Se despide afectuosamente de Frank. En el vampirismo ha encontrado un padre mejor que en su vida humana.

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09/04/2015, 13:19
Director

La vuelta a casa, de madrugada entre semana por las calles vacías del Boston de diciembre, le hizo darse cuenta de cómo su vida había cambiado ahora, sólo en una calle muerta durante lo que era su horario habitual. Muy pocas veces podría disfrutar de nuevo de formar parte de una multitud y sólo durante unas pocas horas.

Tras acostarse de nuevo en la bañera, dentro del cuarto de baño que era el único lugar a prueba de luz del sol en su apartamento, volvió a vivir la desconcertante experiencia de parpadear y ver en los relojes que había pasado otro día y volvía a ser de noche. En un rincón de su mente se dijo que, incluso si hubiera querido ver la luz del sol, aunque fuera por debajo de la puerta, tampoco habría podido, sumido en aquel sopor igual a la muerte.

Podía notar la sangre fluyendo por sus músculos, animándoles, devolviéndoles la lozanía de la que – incluso – carecían cuando estaba vivo y enfermo; empezaba a asociar esa sensación con el paso del tiempo que no percibía. Y con ella llegó el hambre, para su sorpresa había desnudado los colmillos y su parte más oscura le exigió salir y desangrar a la primera persona que se encontrase, seduciéndole con promesas del sabor de la sangre y la dulzura de la vida al pasar del humano a él. Apenas podía pensar en la propuesta de Frank de la noche anterior.

Notas de juego

Si los datos de tu ficha son correctos y te quedan 2 puntos de sangre, necesitarás una tirada de frenesí para poder interactuar con un humano. Ya sabes cómo funciona si quieres cazar al principio del post, aunque esta vez para una caza social necesitarás resistir el frenesí previamente.

Si no lo habías actualizado y estás por encima de 3 (después de gastar uno para despertar) no será necesario el frenesí.

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09/04/2015, 13:29
Elijah Page
- Tiradas (2)

Motivo: Autocontrol

Dificultad: 6

Tirada (2 dados): 8, 1

Éxitos: 0 Fallo

Motivo: Autocontrol

Dificultad: 6

Tirada (2 dados): 1, 1

Éxitos: -2 Pifia

Notas de juego

Que susto, por un momento no me acorde que los unos no quitan éxitos. (Se supone que tiras entre autocontrol y la reserva de sangre, lo que sea más bajo, ¿no?)

Vale en la siguiente tirada la cago estrepitosamente. ¡Yuhu! Creo que es hora de estrenar el asesinacefa (broma por el quimicefa) Con su rollo de bolsas de basura, su botella de lejía industrial, etc.

 

Lo más gracioso es que había pensado que, imitando a su sire, se inventara una nueva personalidad y optara por un enfoque gótico. Que se fingiera ya derrotado por el pesimismo vampírico y sin ganas de nada más que de leer a Poe y tomar sangre de gente puesta de absenta. Creo que ahora podrá ponerse cínico con más facilidad.

 

Salvo que me indiques lo contrario, comienzo a preparar el post de una violación con homicidio por desangramiento y el dramón al volver en si.

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09/04/2015, 13:55
Director

Notas de juego

Me temo que sí. Completalo con una tirada de degeneración a dificultad 8(podríamos bajarlo a 7 si la interpretación de los remordimientos iniciales es muy buena). Me temo que con humanidad 8  un desangramiento accidental es un pecado muy grave, sobre todo en las circunstancias que tu defecto te obliga (son actos propios de, según se entienda entre 4 y 1).

Ya sabes que si la tirada tiene éxito, sufres remordimientos enormes pero no pierdes humanidad, en caso contrario pierdes un punto de humanidad pero consigues asumir los actos y vivir con ello sin muchos problemas más allá de la pena inicial. Lo peor del caso de perder el punto son los grandes cambios físicos y sobrenaturales que sufriría Elijah a lo largo del día siguiente.

Asegurate también de describir qué haces después del crimen (con el cadáver y demás), es uno de los motivos por los que resolver ésto con tiradas, ahora Elijah tendrá un problema que puede ser entre muy serio y dramático, según quien se entere.

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13/04/2015, 16:32
Elijah Page

 

- Tiradas (4)

Motivo: Distancia recorrida antes de tropezarse con la víctima. (1 en su propio edificio 10 caminar un buen rato hasta dar con alguien)

Tirada: 1d10

Resultado: 9

Motivo: Circunstancias incriminatorias (1: pilló a la víctima en un callejón solitario que da a un contenedor de basura. 10: hubo pelea y manchas de sangre por varios lugares)

Tirada: 1d10

Resultado: 3

Motivo: Morbosidad del asunto (1: alguien mato a alguien. 10: truculentos detalles sobre donde estaba cada trozo de la víctima, la fantasía de un periodista sensacionalista)

Tirada: 1d10

Resultado: 1

Motivo: Calidad del individuo (1: Era el líder de la mafia local y vendía droga a través de la reja del colegio a los niños. 10: coordinador de varias ongs, presidente de la asociación de vecinos, héroe de guerra y persona muy querida)

Tirada: 1d10

Resultado: 3

Notas de juego

Se me ha ocurrido hacer estas tiradas para ver como de bien o mal se lo ponía a mi pj, para no pasarme de duro o de blando. Me pongo a trabajar en el texto.

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13/04/2015, 18:33
Elijah Page

Elijah despertó, o al menos una parte de él. Cuando abrió los ojos estaba muy enfadado, no sabía porque. Y asustado por saberse muerto hasta hacia unos segundos y haber regresado, como lázaro pero de una manera monstruosa.

Por la cabeza se le pasaron mil y una frustraciones: su vida truncada por el desprecio de una sociedad hipócrita, por una familia cruel, por personas abusivas, incluso el amor de su vida había sido una persona toxica y traicionera. La bestia le hacía sentirse sediento, pero se mantenía en un segundo plano, embaucándolo con promesas de seguridad y poder. Iba a ver morirse a todos ellos de viejos, ahora no podían hacerle daño. Eso le reconfortaba. Pero había algo más, había algo enterrado en la mente del fotógrafo que su lado salvaje sacó a la luz: Si no quieres que te maltraten, lo mejor es hacerte un maltratador. Era una verdad conocida por todos los abusicas de instituto del mundo.

Elijah no era así, no pensaba así, pero esa idea estaba enterrada en su subconsciente. Y la bestia la encontró. Durante unos minutos el fotógrafo se mantuvo tenso, en la bañera sin moverse, librando una dura batalla. Había algo dentro de él que pretendía tomar el control. Mr Hide amenazaba con emerger. La boca le sabía a sangre y cada vez era más fuerte la tentación de dar el paso al lado contrario, a ser un sádico y cobrarse venganza contra la lista de agravios que había en su mente. El mundo le debía una compensación Él era buna gente ¿y que tenía a cambio? Un puto diente roto... Pues ahora tenía colmillos.

***

El estado mental es una mezcla ente estar febril y drogado, aunque sumergido en una piscina llena de odio. Tiene flashes del rellano de su edificio. Si el mulato del piso de arriba hubiera estado en casa, habría muerto. Pero quiso la suerte que no hubiera pisadas en su techo. Parecía que de algún modo las almas de todos los ocupantes del bloque hubieran sentido que no debían estar en casa a esa hora o ser lo suficientemente silenciosos como para engañar a sus sentidos vampíricos. Recuerda caminar pegado a la fachada, apartándose de las farolas. Se internó en la oscuridad.

***

Su víctima no estaba en un callejón solitario, pero casi. Paseaba al perro en el parque, de noche. Los ladridos de su mascota le avisaron de que algo no iba bien. El animal ladró, protector, hasta que la figura de Elijah apareció en el círculo de luz de la farola, bufando como un gato. El perro salió como alma que lleva el diablo mientras su dueño se preguntaba si eran colmillos lo que había visto. Podría haber corrido, pero planto cara. –¡Oye tu! ¿Qué te…- No hubo más que decir. El vampiro le cruzó la cara de un golpe. Derribándolo al suelo y llevándolo hacia la oscuridad. La ropa quedó hecha girones. El vampiro sintió como su oponente quería liberarse, como se resistía, pero eso solo le llevo a un estado de hambre y excitación sexual aun más pronunciado. Esta vez no hubo placer para la otra persona. Solo dolor y frustración. El vampiro le penetró como un animal, regodeándose en su dolor hasta que decidió que jugar con el ratón no le divertía más y clavó los colmillos. Succiono sin parar, el corazón apagándose era como una melodía. Y los temblores de placer de su víctima, un poema a la muerte –Ves como te gusta-. Hubo un gemido, el momento en el que aquel pobre tipo supo que iba a morir, pero no se resistió, se entregaba a la muerte con tal de disfrutar un segundo más de beso vampírico.

 

Solo cuando el cuerpo paso de estar caliente a templado, la bestia abandono el control.

Elijah salió del trance con los pantalones bajados junto a una masa que irradiaba su calor residual a la noche.  Era una persona. Con toda su ropa arrancada o desgarrada. Casi hundida en el suelo húmedo. Apenas había restos de sangre alrededor y se sentía jodidamente lleno y desfogado. Podía pensar “No” con toda la fuerza que quisiera, pero no había mucho que preguntarse. Sabía lo que acababa de ocurrir.

No, esto no está pasando” Era un asesino y un violador.

“Si está pasando. Es muy real. Porque no le robas la cartera y terminas el trabajo, total añadir ladrón a tu curriculum es casi trivial ya” escuchó con la voz de su hermano en su cabeza.

Elijah tembló, sabía que debería estar sudando, con la respiración alterada y con el corazón a mil revoluciones. Pero no había latido ni sudor ni jadeo. No había nada. NADA.

-Lo siento- Le dijo al cadáver tras dos minutos en shock. Lo ridículo de su disculpa le termino de poner en marcha la mente. Estaba sobrecogido, alterado. ¿Qué debía hacer? Por supuesto entregarse y revelar a las autoridades la existencia de los vampiros no era una opción ¿O si? No, eso no arreglaría nada, solo empeoraría las cosas a nivel mundial. Le quito la cartera, para que pareciese un robo y recurrió a su fuerza vampírica para llevar el cuerpo al hombro. Asegurándose de permanecer siempre en la oscuridad, lo llevó a un sitio más apartado (Quiza donde el parque se vuelva bosque, o donde haya alguna pequeña construcción tipo una tapa de alcantarilla o la portezuela para entrar al motor de alguna fuente, etc.) Una vez lo dejó alejado del camino, empezó a andar. Tenía muy claro con quien desfogarse. ¿Se puede amar y odiar a la vez a alguien? porque así se sentía él.

***

Entró en el almacén de Frank con cara de odio. No dijo ni mu e ignoró la reunión de modistos, incluido a su sire, y ascendió por las escaleras de caracol ante sus miradas sorprendidas. Cuando Frank entro en la sala, poco después que él, Elijah trato de golpearle mientras le daba la razón en algo que le había dicho: -¡¡Te odio. Maldito bastardo, me has vuelto un monstruo!!

Frank conocía la naturaleza humana como un toreador viejo, así que le dejo golpearle el pecho un tiempo antes de agarrarlo por las muñecas y aventarlo lejos. Al caer al suelo, Elijah comenzó a llenar de lágrimas de sangre la alfombra de su sire. Al sentir su mano en el pelo, comenzó a confesar su crimen.

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15/04/2015, 16:11
Frank Carnation

Elijah sabía, en el fondo, que Frank conocía lo que había pasado desde que entró. Sólo que estaba demasiado furioso, demasiado dolido, demasiado triste para hacerse cargo. Su gesto era serio durante toda la pataleta, cuando él confesó y miró para arriba, los ojos de su sire eran duros.

-“Lo sé. Tienes lo que prometí ¿recuerdas?” – sin dejar de acariciarle el pelo repitió viejas palabras, de hacía una vida. Una vida de casi una semana – Los eones a tus pies para ver la historia en butaca de primera fila, con los muertos cargados a la espalda. Ya tienes el primero, vendrán más y dolerán igual, mientras eso pase estarás bien, eso es bueno. Pero, tarde o temprano, dejará de importante tanto.” – ahora su mirada era muy triste, roja con la voz tomada y menos dura – “ojala pase mucho tiempo. Porque te quiero, espero verte sufrir por esto mucho tiempo, y aún más por lo que esté por venir. Mientras pase, no te habrás perdido del todo.

Le levantó del suelo, con delicadeza pero con firmeza a la vez, secándole las lágrimas con su pañuelo de seda rojo. Le recolocó la chaqueta y le colocó el pelo, lo que en el mejor de los casos duraría hasta la siguiente noche, como ya sabía Elijah.

-“Ha pasado lo peor, queda lo muy malo, si hay suerte. Ahora lo importante es que debes aprender la lección. Ya sabes por qué te ha pasado, te lo expliqué ayer. Es muy arriesgado quedarse famélico, debes controlar la alimentación. Lo arriesgado sin medida es estúpido. Y nosotros no somos estúpidos. No podemos ser estúpidos.” – Frank seguía arreglándole, aunque no se preocupaba de su ropa. Se dirigió a un armario lateral, probablemente de prototipos, diseños inacabados y pruebas, mientras le decía mirando su traje sucio, un poco roto y, probablemente, con algo de sangre aunque él no la viese:

-“Desnúdate.” – le dijo calmado, pero con una voz con autoridad, a pesar de su aspecto de reina de desfile sonaba como un sargento militar. Frank, a la vez, le tendió un traje de diseño espectacular, pero que no iba mucho con él. Era plateado, lo que le daba un toque de traje de fiesta a pesar de ser un traje de chaqueta y pantalón convencional, incluso clásico en su corte. La camisa que llevaba, aunque era blanca pura, tenía abullonados en puños, cuello y botonera como las ropas victorianas. Era una ropa totalmente glam, digna de David Bowie. Al verle dudar frunció el ceño y, con la sombra de una sonrisa en los ojos – que no en la boca – añadió: “No me hagas obligarte” y señaló su ropa y una chimenea al fondo de la estancia que parecía más decorativa que funcional.

Notas de juego

Vamos suponer que la Bestia gasta 1 de sangre para potenciar fuerza y dar más fuerza a tu narración. Así que ahora tienes 11 de sangre.