Partida Rol por web

Si seguimos así dentro de poco todo State Island será basurero, de momento y con vistas al mar, se encuentra el lugar donde todo lo q de alguna manera es arrojado a los contenedores va a parar.

Entre toneladas de desperdicios se encuentra una pequeña cabaña de madera con un gran mugriento sotano.

           Genial, como si no tuvieras bastante con limpiar la basura de ocho millones de neoyorkinos, por qué le encantará a la gente molestar a otros, especialmente a tí? Ha sido bajar del camión y zás en todo la boca, algunos dirían acto reflejo, otros asesinato en primer grado, menos mal q resulto ser un estúpido maniquí, un estúpido maniquí vestido de mendigo con esos horribles colmillos de juguete, y esa mirada de fracasado. 

           Odio estas casualidades, me enerva q rompan mi tranquilidad. Porque espero sea casualidad, aunq falta mucho para el día de todos los santos. No se puede recoger la basura en Manhattan y mantenerse cuerdo.

 Mucho jaleo estos días cerca del basurero, a altas horas de la noche, y pocos corazones son los q laten. Algo no te huele bien. 

Otis recuerda las palabras de su sire: mi niño, no creas que tus días de esconderte tendrán fin, ni que te he dado un gran poder, solo te he devuelto la dignidad que mereces. Si, he prolongado tu tortura, solo para que tengas más tiempo para entender la razón de tu existencia, aunque otros llevan siglos buscándola. Los nuestros son sólo una parte de todos los Hermanos, los nuestros te ayudarán, pero también te controlarán. debes respetarlos y debes ignorarlos para buscar tu propio camino. Sé que mis palabras solo encierran contradicciones, pero aprenderás pronto.

Otis aprendió a moverse entre los suyos, manteniéndose a distancia, hablando poco y escuchando todo. Confia en la Camariila como solucion menos mala para la supervivencia, pero no comulga con todos sus mandatos, que sigue escrupulosamente. Teme a la anarquia, y siente la necesidad de proteger al debil, al menos poderoso, tal vez por ser él uno de los maltratados.

 Tocan a la puerta, te acercas a mirar y es una mujer hispana, una don nadie. Insiste. 

no suelo recibir visitas, quién puede osar a dejarse ver por aquí? alguien desesperado o alguien con malas intenciones. No me quedaré sin averiguarlo, pero de momento me puede el instinto de protección. Sin abrir la puerta susurro lo suficientemente fuerte tras la puerta:

- a quién buscas, extraña?

 Impaciente desde detrás de la puerta. 

Marya, principe de la ciudad. Necesito me abras la puerta, hay algo q quiero q hagas.

la princesa de la ciudad de nuevayork en persona? un extraño honor, no puede traer nada bueno.

- si eres quien dices pasa.

abro la puerta y hago un gesto con la mano para invitar a que pase a mi humilde y oscura morada

 Se mueve como alguien sin mucha gracia.

Estas noches se están volviendo cada vez más peligrosas, nuevos vastagos llegan de la costa oeste revolucionando la ciudad. El sabbat está asustado y no podemos saber como reaccionará. Lo q sea q los nuevos esten buscando nos es importante. Lo q sea q esté pasando en la ciudad nos afecta. Incluso a tí en este basurero perdido de la mano de Dios. 

Me gustaría no tener q involucrarte, bien lo sabe el cielo, pero dadas las circunstancias no me queda más remedio q tirar hasta de tí. Algo se está cociendo, algo q no me huele nada bien y necesito q alguien como tú se ponga en este asunto. 

Y si me lo permites, volveré a mis quehaceres, la noche es joven, y mucho trabajo ha de hacerse.

Se da la vuelta y se va, nada de glamour, nada especial, es la vulgaridad en persona.

 Algo no encaja en la escena, al cerrarse la puerta se hace la luz, su corazón, su corazón latía, respiraba, incluso podías escuchar su sangre fluir. Algo no encaja en la escena.

ofuscación y la sigo. Nadie conoce esta zona como yo y puedo deslizarme por huecos que la extraña mujer ni se ha percatado de que estén.

 La sigues hasta llegar a Manhattan y entonces repentinamente despierta. 

curioso método de mensajería, en fin. No quiero ser un grosero con el principado de NY, pero... no puedo ententeder qué pùeden querer de un humilde vampiro arrinconado como yo

 Cuando llegas a casa, sentado donde reposaba antes de la inesperada visita, encuentras la marioneta sentada en tu mismo lugar y posición. Solo otra cosa a cambiado en la habitación, un tablero de ajedrez hermosamente labrado se levanta entre tú y tu homónimo de tela. Un tablero perfecto salvo por el hecho de q todas las piezas comparten el mismo color. Negro.

voy a tener que pensar en una mudanza. Este sitio no me parece ya seguro.

inspecciono ocular y olfativamente estos objetos intrusos en mi cuidada decoración hogareña  ¿tirada?

 Es un maniquí hecho de paja, tipo espantapájaros pero más elaborado. Va vestido como tú, mide como tú, incluso huele como tú. De hecho puedes ahora q te fijas puedes darte cuenta q su posición e incluso la expresión de su cara de paja es treméndamente tuya.

 El ajedrez por su parte es de madera noble, finamente tallado, una alhaja. Es un mueble de pie, es decir q es como una pequeña mesita, no es solo el tablero. Está perfectamente pulido y barnizado, sin ninguna muesca o imperfección, se diría q es bastante nuevo. Y de nuevo lo único q cabe destacar es q las piezas d ambos bandos son del mismo color. Negras.

miro la jugada del tablero, si están preparadas las fichas, muevo el peón, en saque cruzado a reina.

si la partida avanza será divertido jugar contra sí mismo... jugar contra uno mismo...

 Al principio no pasa nada, te quedas mirando el tablero pero nada. De repente, el muñeco parece mirarte, te fijas en el dejas de prestarle atención a la partida durante un momento, y cuando vuelves a mirar. El bando del peon q has movido ha cambiado. 

 Ahora mueves unas elaboradas piezas de Marfil, pero no solo eso, el bando negro ha hecho 3 movimientos, sale el peón de la reina avanzando dos, el alfil de la reina hasta mitad de tablero y el caballo, tb de la reina, sale hacía centro de tablero.

continuemos la partida, pues. Cojo una banqueta y me siento frente al tablero, miro fijamente al muñeco.

No sé si estoy jugando contra una ilusión pero quien sea que ha organizado esto se ha tomado muchas molestias para ofenderle por simple miedo, aunque reconozco que me acojona un poco el tema.