Partida Rol por web

Uno de ellos se acerca al armario y lo abre. El otro se aproxima a la cama y, por la posición que adoptan sus pies, se está agachando para mirar bajo ella

Me debes turno

Me debes turno

Acorralado, me pego furioso en la pared de la habitación en la que me encuentro a la espera de que mis captores den al fin conmigo lo cual, más que inevitable, es ya inminente.

Los secuaces de Roberto han sabido encontrar nuestro "escondite seguro". Por un lado subestimamos el conocimiento acerca de su ciudad y por otro sobreestimamos la protección del príncipe, si es que nos protegió de alguna manera enviándonos aquí.

"Espero que por lo menos no sean decorativas" pienso mirando con ironía mis espadas gemelas.

El disparo me hace pensar que por lo menos han dado con uno de sus objetivos. Son muchos y saben a lo que han venido por lo que imagino que también irán preparados en todos los sentidos.

Resignado de todas formas, espero a que entren en mi habitación. Cuando se adentren en ella les atacaré por sorpresa. Uno o dos no deberían ser un problema si les consigo sorprender. Luego...luego...mirare un segundo el pasillo y si esta libre me saldré disparado como el rallo al cuarto enfrente a este para ocultarme de nuevo.

Alexander no lo piensa dos veces: con una celeridad inusitada se levanta, lanzando la cama hacia uno de los lados mientras lanza un potente puño a la cabeza de su enemigo.

¡Mierda, todavía es de día!

Visto que todavía faltan horas para que anochezca, escapar por la ventana no es una opción, así que no nos queda otra que conseguir acabar con todos los atacantes. Lo único que me consuela es que, si esperaban pillarnos desprevenidos mientras dormíamos no puede haber demasiados de ellos, y, a juzgar por los disparos, no soy el único de mis compañeros que se está resistiendo, así que no me tendré que enfrentar sólo a todos ellos. 

Me agacho una vez más junto a los cuerpos caídos de mis enemigos para comprobar si alguno más lleva una pistola y después vuelvo al lado de la puerta y abro una rendija para observar el pasillo.

Como temías, la puerta se abre y entran dos hombres. Rápidamente cierran la puerta y se quedan unos momentos quietos. Parece que no te han visto, más que nada porque sus ojos deben estar acostumbrándose a la oscuridad de la habitación

Al lanzar la cama por los aires, los dos hombres son golpeados por la misma. Uno queda atrapado bajo ella. Al otro le golpea una de las patas. Justo cuando vas a golpearle en la cabeza cae inconsciente

Tras investigar en los cuerpos de tus enemigos, te acercas a la puerta y la abres un poco.

Allí, ves a dos hombres más que no dejan de caminar en tensión, mirando a todas las puertas, vigilantes. Ambos llevan pistolas como la tuya

Observo a los humanos del pasillo unos instantes, lo suficiente para comprobar que la función de éstos es vigilar el pasillo para que ninguno escapemos. Por suerte, no parecen haberse dado cuenta de mi presencia.

Con cuidado de no hacer ningún ruido, abro la puerta de mi habitación tan solo unos centímetros más, lo justo para dejar paso al cañón de la pistola y, desde la oscuridad, apunto al humano más cercano.

No soy ningún experto en el uso de armas de fuego, pero, gracias a la poca distancia que nos separa y el tiempo que me tomo para apuntar, la primera bala se incrusta limpiamente en el pecho de uno de los humanos, que cae malherido. La segunda, sin embargo, ya no es tán fácil, por lo que sólo causa una herida superficial en el otro.

Uno de ellos estaba inconsciente y el otro debajo de la cama. Era el momento: se dirige directamente hacia el que aún seguía despierto y, tras apartar la cama de un empujón le coloca la pierna en el pecho, haciendo presión, no lo suficiente para matarle, pero si para hacerle daño.

¿Quien eres y que haces aquí?

Levanto la cama a modo de trinchera y me pongo a disparar contra uno de los que acaban de entrar por la puerta.

La primera bala golpea y mata a uno de los hombres que, antes de que se de cuenta de lo que ha ocurrido, ya está muerto en el suelo.

Su compañero intenta reaccionar, mirando hacia todas partes. Y tu segundo disparo le da en la pierna, lo que hace que el hombre gruña de dolor y sorpresa.

Desde el suelo, busca la procedencia del disparo, pero no lo encuentra. Así que dispara en todas direcciones, gastando balas a lo tonto

El hombre intenta librarse de tu pierna, pero no lo consigue. Mira a su alrededor, pero su pistola ha caído lejos.

Venimos a mataros. Roberto nos ha dado la orden de llevarle vuestras cabezas

Tus disparos dan en el brazo a uno de los hombres, que cae al suelo y la pistola se pierde en la oscuridad de la habitación.

El otro dispara hacia la cama, pero no consigue darte

Mira que bien me vas a venir- le dice, sonriendo mientras aprieta un poco mas el pecho del hombre- vas a contestarme a esta pregunta sencilla. En caso contrario te arrancaré un brazo, luego otro y así hasta dejarte sin miembros en tu cuerpo.

Bien, ¿donde puedo encontrar a Roberto?

Aprovecho que todavía no ha descubierto mi posición para disparar de nuevo al guardia. Por desgracia, ahora que está moviéndose de un lado para otro, resulta más dificil acertarle, así que la bala impacta contra la pared cerca de su cabeza sin causar daños

Me preparo para asaltarlos por sorpresa justo cuando en el último momento cierran la puerta y se largan. Sorprendido en tanto que también aliviado de haber escapado de la confrontación imagino si no sería muy osado creer que van a irse y a dejarme en paz una vez hayan comprobado todas las habitaciones.

Claro está, que si conocen el número de residentes que deben encontrar en la casa no descansaran hasta que el sol esté cayendo por el horizonte, y francamente no puedo otorgarles tanto tiempo.

Tratando de obtener algo más de información, cierro los ojos y deslizándome en completo silencio quedo de cuclillas, pegado a la pared y esperando que mis sentidos se agudicen una vez el pulso entre en un ritmo más calmado.

El humano intenta resistirse de nuevo, pero no consigue nada

Está en su castillo. Él sabe que iréis a por él. Está preparado.

Sigue sin verte, pero ha detectado de dónde proceden los disparos. Dispara hacia tu puerta mientras se arrastrarse hacia atrás