Partida Rol por web

- Permitidme que haga una corrección, Doña Adela, pero yo sí anuncié públicamente mi voto -

Hago una pausa.

- Poco más hay que podamos deducir hoy aparte de conjeturas, ya que carecemos de suficiente información para aclarar muchas de las sospechas levantadas, pero hemos de votar como una sola voz, hemos de mantenernos unidos ante el emvite del maligno, y por tanto, yo votaré a Ramón esta noche. -

Ciertamente he estado poco acertada. Dice Adela sonrojándose. Para corregir mi error propongo que hagamos públicos los votos que faltan en este momento y tratemos de atar cabos. Si no me equivoco, excepto Beatriz Bocanegra y Rodrigo de Pies Oscuros, que manifestaron públicamente que no dirían su voto, el resto, o no lo dijeron o se me ha pasado a mí como me ha sucedido con don Rodrigo y doña María. ¿Alguna corrección más? Quizás si completamos con los votos de todos tengamos más luz para seguir adelante.

Por el momento, y añadiendo a Rodrigo Belmonte y María de Vellí, las votaciones de ayer quedan así:

Ramón Gutiérrez (4), Miguel de León (3), Rodrigo Belmonte (3), Adela Lastra (2), Catalina Rodríguez (1).

Aunque tal vez me siga cavando mi propia tumba, como bien ha dicho nuestro enterrador, creo que doña Mireille iba a votar contra un servidor, por más que no lo haya explicitado.

Por otro lado, y seguramente tendrá a bien dar su explicación, nuestro querido Fray Olegario dijo que no iba a votar a nadie, pero el capitán no permitiría tal cosa, como bien quedó expuesto el caso de don Bartolomé. En haras de la transparencia, padre, explicad vuestra actitud.

Debo decir, aunque genere desconfianza, que después de su extensa exposición, creo que doña Adela, a quien voté en un arrebato de revancha, dudo ahora que sea una bestia.

Otra cosa es que, aclarando que sigo confiando en ella, nuestra alcaldesa, cuyo voto vale doble, no ha sido pronunciado, y sería útil conocerlo.

Sé que toda la desconfianza que despierten mis palabras ahora, serán analizadas bajo otro punto de vista si resulto linchado, y es por eso que las expongo sin tapujos.

La alcaldesa dijo hacer las votaciones públicas y le dio de comer al perro. Eso unido a que de momento nadie la había señalado indicaba que empezaba a tener méritos para ganarse confianza.

Luego escuchó las reflexiones de Adela y creyó que quizá si emepezaban a actuar así encontraran a alguien.

-Supongo que igualmente los lobos pueden mentir sobre quien votaron pero las buenas gentes no tenemos nada que ocultar ni ninguna razón para mentir. Quizá así logremos identificar si los lobos votan en masa o por contra no se reúnen durante el día. Por cierto, no sé si he entendido bien una cosa. Aunque no sepamos de quien se trata ni por cuantos votos, ayer Ramón empató con alguien. Alguien que según he entendido es inocente. Si averiguamos quien fue podemos encontrar a otro inocente. 

Lo malo es que podía que los lobos o quien sabe si alguien más, podrían decir mentiras respecto a quien votamos.

-Igualmente sea lo que deduzcamos de lo que saquemos en común al decir quien votó a quien, lo más probable es que el otro empatado fuera Miguel o Rodrigo, ya que fueron los nombres que salieron más a coalición.

Con eso quería decir que no se precipitaran como el día anterior, pues es posible que uno de los dos fue el que salió malherido*.

-Explico y asumo mi falta de implicación don Miguel, a vos que me preguntais no votar permitido estaba por el señor capitán, mas lo que no se permitía era no participar en el debate que aqui se lleva a cabo. En pos de la transparencia que me pedis, creyendo hacer lo justo no inculpando a nadie precipitadamente claramente he perjudicado a esta aldea. Seguro estaba de que el alma de un niño no podía contener el mal que se le atribuía, y por desgracia, el tiempo, que breve ha sido, me ha dado la razón. Caiga sobre aquellos que injustamente acusaron al buen Ramón la justicia divina. Y sobre aquellos que no solo votaron en secreto, si no que mintieron a la hora de votar.-

Luego miró hacia el hoyo que contenía los restos mortales de Doña Beatriz y el buen Pablo.

-Pero no puedo evitar pensar que mi dejadez o cobardia, ha podído dejar con vida a uno de esos demonios, pues quizá mi voto, hubiera decantado la balanza en otra dirección-.

-El voto público evitará que semejante cosa se repita, y, que Dios me perdone, mi voto se contará entre el de mis vecinos-.

Intentando escuchar todo, mientras repasaba las actas, el mercenario estudio como pudo - scusi, hay algún detalle que debo haberme perdido, il chico di la flauta, ¿no dijo que no votó a su sospechoso principal si no a otro? Eso le quitaría un voto d'inocencia a don Rodrigo si es cierto lo que dice il señor Benavente,... pero no deseo culpar a nadie, un servidor fue contratado por ustedes, y si aquí sigo es para intentar ayudar una púa a ustedes y decantaré il mio voto al di la mayoría.

Amigos, el tiempo corre y esto está muy paralizado... Mi intención al llamar la atención sobre las votaciones era tratar de esclarecer algo sobre qué había pasado ayer, pues el hecho de que hubiera un empate cuando públicamente se había señalado a Ramón por encima del resto me pareció algo extraño.

Pero no nos olvidemos de que, paralelamente a eso, deberíamos ir proponiendo candidatos para el linchamiento de hoy. Yo mantengo mis sospechas sobre Rodrigo Belmonte entre algún otro que no termino de descartar, pero la verdad es que a cada vez que repaso lo sucedido desde ayer me gusta menos el comportamiento de María de Vellí y de Fray Olegario. Me resulta extraño que la primera no se haya defendido con más ímpetu (solo me ha corregido el dato de su votación, cuando yo la había señalado también por otras razones) y, en mi opinión, la defensa de Fray Olegario no hay por dónde cogerla.

Creo que estaría bien que se pronunciase al respecto, doña Inés. Por un lado me gustaría saber, si lo considera de recibo, a quién otorgó su doble voto. Por otro, creo que como grupo nos vendría bien la figura de un líder que azuce al grupo en momentos como este.

Mucha gente se despertó, bien al despuntar el día o en plena noche, Rodrigo por su parte, prefirió dormir a pata suelta, tanto como el rayo de sol que entraba por la rota ventana le dejara. Que no entendía porque madrugar, si de verdad van a morir uno a uno hasta quedar los pies de los mas peludos, mejor remolonear que ir a trabajar de buena mañana. Más el gentio de la calle principal le obligo a levantarse, ahogarse en un vaso la cara y salir descalzo hacia la empalizada, donde robo un par de zapatos y volvio con el pueblo a deliberar y decidir, como todo buen aldeano.

AL llegar todos estaban congregados, todos menos el ajusticiado de ayer y los asesinados de la misma noche.
-Redies, no mentían los rumores, Pablo era un niño casquivano, mira que liarse en cama con semejante pasa. Y ademas pillado en su pecado, muerto y descuartizado...-Esto ultimo le revolvió las tripas, por suerte aun no había probado comida alguna.

Y así, mareado por la imagen que vio al saltar por la ventana con los demás, estuvo callado, sentado y rezando a su estomago por permanecer en su sitio hasta mañana.

-Preocuparos de quien ha hecho eso con dos enamorados que mi voto es de orden publico. Yo vote a mi tocayo Rodrigo, porque no pensaba que Ramón, mi amigo, fuera un lupino. Y así que tenia razón. Y creo yo que vuelvo a tenerla condenando a Rodrigo de asesino. Aunque por lo dicho por el hombre de mi altura, que hasta ayer enterraba a los muertos, Don Miguel también parece sospechoso.-Para que pensar un acusado si otros ya lo hacían tan bien, ese fue el pensamiento de aquel pillastre que aun mareado, disfrutaba de su nuevo calzado.

En ese momento girose para mirar a un hombre afirmando a ver sido contratado.
-¿Y este del bigote quien es? Otro como el titiritero o el Capitán, ¿Que se quejan amargamente pero están libres del juicio popular? O se le puede criticar igual.-Y así, sin mas,, volvió a sacar su lengua a pasear.

Observó en silencio los cadáveres.

Hoy tienes trabajo, enterrador. Si manejas tan bien la pala como las palabras no tardarás mucho. Buen resumen

La verdad es que la identidad del condenado le había pillado desprevenido. 

Sinceramente y pensándolo bien, no me parece que el caballero Rodrigo tenga una bestia demoniaca en su interior. Más bien me parece que, en su afán de ayudar, vio orejas peludas donde no las había. Me parece una actitud inicial demasiado desafiante, sabiendo que si se equivocaba sería condenado. Una actitud casi suicida. Por supuesto es posible que sea esa precisamente su estrategia, pero me parece demasiado temprano como para ser lobo. 

Se giró para mirar al abad

El pueblo necesita del arrojo de sus vecinos, no piedad ante lo inevitable. Si, su voto podría haber evitado que 2 vidas inocentes se perdieran esta noche, si con el que empató era lobo. 

Por otro lado, señorita Adela, le ruego que revise bien las elecciones a alcalde, pues fui yo el primero en votar de forma oficial.

En cuanto a usted, Miguel, como a otros, me rechina que diga que sólo confiaba en usted mismo y acabara votando a otra persona, pero entiendo las razones que le llevaron a buscar lo mejor para el pueblo. Sólo le digo que tenga en cuenta que si está seguro de su propia inocencia y de la de nadie más, lo mejor para el pueblo desde su punto de vista sería que usted fuera el alcalde. ¿Me equivoco?

Tras exponer sus ideas en público, se sentó pensativo: ¿Cómo demonios podré ayudar a estas pobres gentes, si ni siquiera soy capaz de ordenar mis propios pensamientos?

Las sensaciones de Lucrecia se arremolinaban sobre varios frentes;

-Ramiro, no he entendido el razonamiento de que alguno de los dos fuese malherido y no otra persona. Es mucho más probable que no hayan sido ninguno de los dos (aún así, tampoco nos vale de nada saberlo salvo para saber quién es un aliado)

Mireille se levantó de la esquina donde se sentaba en solitario. 

A ver, por partes. Inés, gracias por cuidar del perro y elegir votaciones públicas, de momento es lo más cauto y lo que nos da más información. Como dije ayer espero y deseo que lo de ayer fuera un desliz.  

En segundo lugar, Don Miguel, digamos que le creo, aunque no sea así. Usted es tupido o cupido. ¿Me puede explicar su esperpéntico comportamiento de ayer? Su lacrimógena defensa tampoco le ayuda... pero me ha hecho darle un voto de confianza en el sentido de... sólo alguien con esa falta de criterio y de argumento puede haber sido tan torpe para hacer lo que hizo siendo inocente. No le culpo en realidad, creo que tampoco podemos esperar mucho de usted. 

En tercero, Adela, lo primero que le diré es que la gente no votó, dice que votó. Si después de mi argumentario de ayer tiene la más mínima duda de mi voto no me quiero ni imaginar su capacidad para leer entre líneas.  

Fray Olegario, acostúmbrese a votar y por tanto matar y no rece tanto, anda. A fin de cuentas en un rato nos cargamos a otro y mañana faltará otro de los nuestros. 

Somos 17, hay 4 lobos. Pronto daremos caza al primero.  

Y para acabar, me sumo a lo comentado anteriormente, Doña Inés, alcaldesa, debería ser de las primeras en votar. 

Mireille. He aclarado antes que estoy recogiendo lo que la gente dice que votó, de ahí que me haya equivocado tanto (no es fácil distinguir la palabrería del supuesto voto) y por supuesto que sé leer entre líneas, pero como tengo que poner la línea divisoria en algún lugar, no he tenido en cuenta las acusaciones, que son muchas, sino aquellas ocasiones en las que se dijo claramente "voto a tal". En cualquier caso, no creo que usted tenga que defenderse de nada, pues hasta ahora nadie ha dudado de su criterio.

Don Francisco, le pido disculpas y actualizo mis apuntes inmediatamente para que nada de esto lleve a equívoco.

Rodrigo de Pies Oscuros. Dísculpeme si estoy siendo algo tozuda, pero juraría que las actas no recogen en ningún momento su voto. Usted llega a acusar a Ramón, a Rodrigo, a Miguel e incluso a mí, cierto es, pero nada aclara en el momento en que emite su voto. Es por esto que no le incluyo en el grupo de los que abiertamente quisieron votar, sino en el de aquellos que eludieron decirlo en alto, al igual que hizo doña Beatriz Bocanegra que en paz descanse. Según las actas estas fueron sus últimas palabras al respecto:

Ya que el pueblo no se ha consolidado, lo mejor es que vote a quien yo crea mas atacado. Muchos nombres se han dicho hoy, Miguel, Ramon, Adela incluso el mio propio, pero con cara de otro. Así que creo que al menos entre esos cuatro, elegiré a quien me plazca, porque yo no soy un cobarde... 

- Estoy bastante seguro de que voté a la señorita de Remu para la alcaldía, señora Lastra...

- Tenga mi voto también moza, que la veo bien dispuesta. No me lo tenga a mal Don Pedro, que yo le se bien curtido y mañoso, pero aquí la señora pareciera que se fuera a arreglarselas con soltura en este entuerto, como se las arregla mi Lucía para encajar todos los huevos en la despensa cuando yo no encuentro hueco para meter la mitad sin que se rompan. - Rodrigo deposita su mendrugo en el cesto de Mireille.

- Mas déjeme que le señale que aquesta idea suya de anotar lo que se vota me parece de gran ayuda... Y cómo no, también la acusé ayer. Visto está que el criterio de este carpinterucho no es fiable... tenga mis disculpas señora. -dice Rodrigo aganchando la cara avergonzado. 

Qué desastre. Actualizo.

Parpadeo un par de veces y algunas mas.
-Por supuesto que no lo dije, lo que digo es que no me da miedo decir ahora por quien vote y este fue a Rodrigo. Si se me ha entendido de otra forma entonces es que los adultos una vez mas, tan ocupados, han pasado por alto este simple hecho. Ayer tenia cuatro nombres y a uno vote en secreto y hoy se me ha preguntado por ello y yo sin miedo, ya he respondido. Y lo repito para oídos ociosos, Rodrigo Belmonte fue mi elegido.-El chiquillo, hablo sin reparo sobre quien fue su acusado y volvería ha hacerlo de ser necesario.

-Y por cierto, en esa lista suya, creo que ya se lo han dicho, pero Ramon dijo y perjuro el no votar a Rodrigo sino a otro de sus sospechas, aunque ahora con él muerto nunca sabremos quien seria.-El muchacho pensaba que los lobos fácilmente mentirían a su votado, así que la lista poco fiable seria, pero quien le escucharía, después de todo no era mas que un niño.

Don Francisco, contestaré sus dudas que son las mismas que he contestado una y otra vez, y ya puede usted y los demás vecinos creerlas o no, pero las respuestas que he dado son las únicas que poseo, y no tengo motivos para modificarlas, ya que, errores o no, así he actuado. Nuevamente respondo entonces, aunque con otras palabras, a ver si lo entendeis: Si mi voto hubiera sido determinante, es decir, si había empate que me incluyera, hubiese votado por mi mismo. No siendo así, y esperando hasta último momento para ver el recuento de los votos, decanté la balanza hacia quien me había dado mas confianza. Me pareció una pérdida de tiempo alargar la elección.

Raro me resulta hasta límites insospechados que se dude tanto de tal decisión y no del olvido de doña Inés, que pudo ser tal o no, pero nadie, pero nadie, lo ha puesto en duda. Y no la estoy acusando, todo sea dicho, pero es llamativo que se vuelva tanto sobre el hecho de mi voto determinante y no de ese hecho. 

Tampoco se duda de ciertas prematuras acusaciones, como si el hecho de acusar fuera inocente, y se tuviera que defender sólo el acusado y no se cuestione el motivo de las acusaciones. Dicho de otra manera, el primero en acusar, sea por la razón o excusa que sea, dirige la atención popular sobre el acusado, sin cuestionar los posibles motivos de las acusaciones. Recordemos, sin ir mas lejos, que uno de los poderosos argumentos en mi contra fue que mi postulación fue "tímida". En fin.

Y lamento que mis palabras resulten estúpidas o lacrimógenas, pero creo que había antes, y seguramente hay mas ahora que se han llevado al pobre Ramón, personas y no tanto seguras de mi culpabilidad. Sé que si no resulto linchado hoy, lo que sería un verdadero milagro, lo seré mañana o a mas tardar pasado, pero el manto de sospecha ya lo tengo encima.

Insisto y lo repetiré mientras haya aliento en mi voz: Vecinos, cuando finalmente resulte muerto, que mi inocencia pos mortem dirija las sospechas adonde pertenecen.

En realidad él mismo tampoco estaba muy seguro de su teoría, pero intentó explicarla a María Lucrecia.

-Lo que creo haber deducido ayer es que la persona que empató con Ramón a votos- no sabían quien, la pega de los votos secretos- fue malherido, demostrando su inocencia* y desviando el linchamiento a Ramón. Si he deducido que quizá, aunque puedo equivocarme, uno de esos empatados sea Rodrigo o Miguel es precisamente porque fueron esos nombres los que más se pronunciaron en las sospechas de los aldeanos y por lo tanto es más probable que sí fuera uno de ellos el que empatara con Ramón, el cual también fue señalado por otros, entre los que me incluyo.

No tenía excusa para su fallo, aún sabiendo lo difícil que era acertar sin pruebas y sin estar tan convencido como Rodrigo de la culpabilidad del músico.

-Por supuesto, es solo una teoría, y puede que el empatado fuera otro, quien sabe... solo he hablado de probabilidad, nunca de hechos. Si el afectado no se pronuncia solo nos queda especular con lo que hay.

- Aquí esta,... estas palabras del ajusticiado mi hacen creer que no votó a il señor Belmonte.

Cita:

- Pues mirando las actas no dijo a quien votaba, tal vez no le creía tan culpable como decía, o temía por que murieran dos inocentes, y en cuanto al piccolo Rodrigo di pies negros, por il pueblo fui contratado, i miei compagni di mercenarios abandonaron il lugar cuando pudieron, yo deciso di quedarme a ayudar, pero il mio poder de hacerlo desapareció con la llegada del capitano, uno más como tu ahora me temo que soy, así que eres libre di acusarme por il mio descuido di dormirme por haber mucho bebi,... digo, mucho agotado por il mio pensamiento,...

Don Ramiro, según he entendido a lo explicado por el capitán, no es seguro que la persona que empató con Ramón quien fue herido, sino que es totalmente posible que fuera una tercera persona. Así que ya sea Rodrigo, yo mismo o algún otro el que empató en la votación, ese hecho no es prueba de inocencia.