Partida Rol por web

Al oir el grito de Arturia, Calgar abandonó inmediatamente su posición y corrió junto a la científica. Nada más aproximarse pudo ver en el suelo aquello. Mientras lo apuntaba con su arma, por si acaso, se dirigió al resto del grupo:

- Parece que Jane puede tener razón. Deberíamos dar caza a esa cosa mientras podamos, no nos debe quedar mucho tiempo. Sugiero que avancemos siguiendo el rastro.

  Ver la aparición repentina de la araña me hace sobresaltar y casi termino disparándole al cadáver. La toco para confirmar que está muerta y su falta de movimiento me revuelve el estómago al hacerme recordar esas horribles criaturas abrazadas a la cara de los colonos...-Es tarde- alcanzo a decir casi en un susurro -Es probable que pronto nos encontremos con el Xeno desarrollado por completo y en tamaño al que estamos acostumbrados a ver- No pienso demasiado en lo que estaba viendo pero al instante se me viene otro pensamiento peor a la cabeza y no dudo en comentarlo con el resto del grupo -Estas arañas salen de huevos y nunca es uno sólo; debe de haber muy cerca un nido donde podrían haber más de estas bichas esperándonos- empiezo a sentir un poco de ansiedad ya que de verdad no quería terminar con una araña abrazada a la cara, por lo que alumbro lo mejor que puedo los alrededores mientras busco con la mirada signos de más arañas -creo que debemos tener más cuidado porque las arañas son tan silenciosas como lo son los Xenos. Sugiero mirar todas las esquinas desde una distancia segura. 

Además de la araña xeno, en la sala podéis ver lo que parece el escritorio de un encargado de mantenimiento,muchos papeles, fotos (confirmáis que ahí trabajaba el muerto de la carretilla) y un panel de control que estáis casi seguros que es de la puerta. Parece que funciona y veis un pequeño panel digital que pone GENERADOR DE EMERGENCIA ACTIVADO

En el momento que escucho el grito de una mujer, corro rápidamente hacia donde creo que se originó. Observo a Calgar, el cual tuvo la misma idea mía, pero tal parecía que estaba algo más cerca. Demonios pienso en el momento que escucho disparos desde la sala de mando. Calgar entra primero a la habitación, y yo me cubro en la entrada de la puerta, con el arma hacia el interior, mirando en todas direcciones. La escena me tranquiliza un poco con todos a salvo, pero.... al percatarme minuciosamente al suelo, puedo ver un bicho asqueroso en el suelo, y unos disparos en su cuerpo y alrededor de él.

-¿Todo está bien aquí?- pregunto para cerciorarme completamente de la situación. 

al obtener una respuesta satisfactoria, me dirijo prontamente a mi puesto de vigía, el cual había dejado apresuradamente

El sonido de la compuerta abriéndose viene acompañado por algo que sale de ella. Debido a la poca luz no pudo diferenciarlo bien, pero le pareció apreciar ocho patas, por lo que un sobresalto escapó de Arturia, alarmando a sus compañeros innecesariamente.  Su corazón palpitaba, asustada ante la idea de poder haber acabado nada más empezar con una de esas cosas en la cara. Pero estaba muerto. Se acuclilló para examinarlo más de cerca tras calmar a su equipo mientras la Cabo Jane informaba de lo que era. Arturia se sorprendió,  para ser soldados conocían bastante más detalles de seres alienígenas de lo que esperaba.

Desenfundó el cuchillo y lo partió por la mitad, dejando que sus jugos vitales se esparcieran por el suelo, empezando a quemarlo todo con ese ácido tan concentrado. 

-Tienen su misma sangre chicos, así que tenedlo en cuenta si nos cruzamos con otro. Sigamos, aquí no hay nada interesante.-

Tras confirmar lo inútil que ha sido abrir esa compuerta animo al resto a continuar con nuestro avance. Ya habíamos perdido mucho tiempo solo con asegurar la entrada. No había nada más, a excepción del escritorio de modo que en cuanto me den su aprobación accionaré el dispositivo para continuar adentrándonos en las instalaciones.

Cuando me agaché a seccionar al parásito, oculté mis auténticas intenciones. Utilicé el arma a modo de bisturí, para comprobar la rigidez y frescura de los tejidos, haciéndome una idea aproximada de su muerte para calcular qué tamaño podría tener el embrión. Estuve dudando si llevarme una muestra, pero solo disponía de un vial y de momento lo reservaría para un posible espécimen vivo. Si eso era plausible.

Calgar pasó por encima de la científica para acercarse al panel y comenzar a examinarlo. Esperaba poder acceder al sistema y encontrar alguna clave sobre el problema que había provocado que el generador de emergencia estuviese activo. No podían perder mucho tiempo si aquella cosa andaba suelta, pero cualquier pista sobre lo que estaba sucediendo allí sería de gran utilidad.

- ¿Alguien sabe acceder al sistema desde este panel?

El panel que está dentro de la pequeña sala sólo sirve para abrir y cerrar la puerta. No conseguirás mucho más de él

Parece un insecto terrestre, pero la cola es algo terriblemente... siniestro. Te percatas de un tejido tipo tubular que surge del centro de la criatura. Recuerdas las marcas de la boca del muerto, te fijas en la manera en la que se flexionaban las patas del bicho y sólo se te ocurre pensar que se le pegó a la cara para inocularle uno de los embriones que mencionó Jane.

Tras observar detenidamente el panel, Calgar pudo darse cuenta de que su única utilidad era abrir y cerrar la puerta. Abandonó la sala y una vez en el corredor se dirigió a sus compañeros:

- No perdamos más tiempo aquí, cada minuto que pasa esa cosa está por ahí suelta haciéndose más peligrosa.

Inmediatamente avanzó por el pasillo siguiendo el rastro y preparado para lo que pudiese aparecer. 

Camino junto a Calgar hasta llegar al fondo del pasillo, el cual termina en unas largas escaleras metálicas hacia la oscuridad.

- ¿Qué opinas soldado?- 

Luego de que se cerrase la puerta, comienzo a dirigirme hacia donde se encuentran los otros compañeros. veo salir a calgar de la habitación de controles, luego a snake ir hacia un corredor que conectaba con este hangar. A pesar de que el sensor no detecta ningún movimiento, no me permito bajar la guardia ni por un instante, mientras continúo vigilando al resto del equipo, los cuales parece que están haciendo un poco de reconocimiento en la zona.

La científica se puso en movimiento siguiendo en segunda línea a Snake y Calgar hasta esas inquietantes escaleras descentes. Le dio mala espina como le daría a cualquier soldado perderse en la oscuridad con la compañía de un monstruo alíenígnea. Los demás debieron compartir ese sentimiento, pues se detuvieron evaluando la situación. Ella hizo un recorrido con la linterna, cuya luz se perdía en el vacío y comprobó el sensor de movimiento, que se mostró en calma, antes de volver a guardarlo y sujetar la escopeta con ambas manos.

-Alguien va a tener que aventurarse a tomar la delantera y lanzar un par de bengalas. ¿Algún voluntario?

Sin mediar palabra, saco una bengala de mi cinturón, quité el tapón para que saliera la llama y la lancé escaleras abajo. Rebotó un poco, hasta llegar abajo.

Justo al caer abajo, podéis ver "algo" que os parece una figura humanoide. Es de color negro, calculáis casi dos metros, con colmillos... Pero solo lo veis durante unas milésimas de segundo, justo cuando el Detector empieza a pitar como loco, atenuándose el sonido a medida que la señal se aleja. La vengala empieza a apagarse...

Nada más verlo Calgar reaccionó apuntando con su arma.

- ¡¿Qué coño ha sido eso?! ¡¿Lo habéis visto?! Ha aparecido de repente en el detector de movimiento. Y ahora se larga... Esta claro que no queda otra, hay que bajar. ¡Vamos!

Sin esperar la respuesta de sus compañeros, Marneus encendió una de sus bengalas y se adelantó iniciando el descenso de la escalera, con su arma preparada en la otra mano.

Freno un poco a Calgar. Lanzarse así a lo loco no solucionaría nada.
- Calma, soldado. Vayamos despacio. Ese ser al final acabará siendo presa de nuestras armas, pero si nos separamos, acabará con nosotros. Nuestra mayor ventaja es el número- enciendo la linterna del hombro y compruebo que el comunicador funciona.
- Probando...-

-Por todos los Dioses ¿que rayos ha sido eso?- digo mientras apunto mi arma hacia el agujero que se abre delante de nosotros, amenazando con devorarnos en cualquier momento, acechándonos con sus garras y oscuras tretas. Observo la descontrolada reacción de Calgar para abalanzarse hacia esa cosa que acabábamos de divisar, e intento detenerlo; pero Snake fue algo más rápido que yo y logró atraparlo a tiempo. Le agradezco con un gesto de cabeza a snake por detener a nuestro imprudente compañero, y apunto mi arma con detenimiento hacia el final de las escalas

-Señor, creo que lo mejor es terminar de reunir al equipo, el cual se halla disperso, y comunicarle de lo sucedido. Por mi parte iré nuevamente en la retaguardia, asegurando las rutas de escape y los flanqueos inesperados-

   La horrorosa imagen que la bengala acababa de alumbrar me parecía más que familiar. No me cabía la menor duda que el embrión ya era todo un adulto asqueroso, pero de momento está solo ya que no se han visto más puntos en el sensor de movimiento; sin embargo, no hay que subestimar a estas criaturas pues ahora que ha mudado a tamaño completo, va a tener hambre y seguramente vendrá por nosotros. No podía mantenerme enteramente calma ante semejante aparición y antes de poder ir corriendo detrás de ella Calgar toma una iniciativa más directa, aunque el resto del grupo trata de calmarlo por lo que lentamente voy dándome cuenta que por más ganas de exterminar que tenga es necesario mantener la formación -Compañeros, eso que acabamos de ver es lo que hemos venido a buscar- aseguro con seriedad dado que quería que el resto prestara suma atención a lo que puedo informar sobre lo poco que sé de ellos -Ha madurado y no dudará en atacarnos ahora que tiene hambre. De todas formas, hay que andar con cuidado, que estas criaturas han demostrado ser inteligentes y si la perseguimos así como así es probable que nos tienda una emboscada, y mayores posibilidades de esto puede suceder si son varios Xenos- Me estaba molestando la idea que esa criatura podría tendernos una trampa y esos tipos desconocidos que se camuflan también podrían andar por la zona, asi que mantenerme alerta hacia la nada no era lo mejor pero es lo mejor para el equipo.

Los terrores se confirman. Un bicho había acudido a darles la bienvenida y por fortuna le habían visto antes de darles la sorpresa. El escuadrón de "serpientes" había tenido por el momento más suerte que muchos otros y Arturia era consciente de ello. Sabía perfectamente que muchos marines perdían la vida a manos de los Xenomorfos sin llegar a verlos siquiera. Era su modus operandi.

-Xenos. Estaba esperándonos. Ahora que hemos confirmado su presencia empezad a pensar que toda la colonia puede estar muerta ya. No es la primera vez que sucede algo así.- Sobre su cabeza había un visor que brillaba con una pequeña luz verde similar a unas gafas de visión nocturna, que en ese momento ajustó sobre sus ojos. La oscuridad se convertiría en su peor enemigo. -Que nadie se separe más de tres metros del resto. Mantened una formación circular y prestad especial atención a respiraderos, conductos de ventilación, falsos techos y cualquier recoveco imaginable, los aprovechan para acortar la distancia. Pueden pasarse horas sin moverse acechando, por lo que engañarían a los sensores de movimiento. Y no olvidemos de esos otros visitantes "invisibles". De modo que no confiéis en vuestros ojos y oídos.-

En un momento, la soldado mostró unos amplios conocimientos sobre los aliens que seguramente infestaran el lugar, mucho más profundos que simplemente saber que son animales asesinos.

-Y una cosa más, evitar las distancias cortas. Seguro que habéis oído lo que hacen sus fluidos internos, de modo que las salpicaduras pueden convertirse en un auténtico problema.-