Partida Rol por web

Las llaves espadas que todos los presentes conformaron, se desvanecieron en el aire, y junto a ellas, la muchacha también hizo lo mismo, en pequeñas estrellitas brillantes. Aquella iba a ser la batalla final, quizás el último movimiento desesperado por parte de aquellos muchachos contra quienes los mantenían cautivos. No se podía escatimar en nada.

Ante la situación, si algo quedaba claro es que por ventaja numérica no iba a ser...la verdad es que el arma que se había convocado ante mí, me despertaba una más que extraña sensación, un diseño que trataba de recordarme a algo como los recuerdos que parecen encerrados en mi memoria y que todavía no he logrado descifrar del todo...en cualquier caso, si quería una prueba de que esto no es la muerte, en el peor de los casos...como si fuera un cielo para batallar, vamos a divertirnos.

La situación al otro lado se controló y se resolvió de la mejor forma posible, al menos, de la forma en la que ya no hubiera más víctimas. Una vez que las llaves espadas hicieron sus respectivos movimientos, estas desaparecieron en el aire en pequeñas luces brillantes que volvieron hasta aquel mundo de suelo acuático. Con estas luces, Strelitzia también se desvanecería y aparecería con ellos.

-Hemos ayudado a vuestra amiga. -Comentó con una dulce sonrisa a los presentes- Espero que ella os ayude de vuelta. A fin de cuentas, tiene a ese Chirithy; seguro que logra idear alguna forma para que vuestros corazones sigan conectados. ¡No debéis perder la esperanza! ¡Luchad por vuestros sueños! Y recordad -La pequeña comenzó a desvanecerse en pequeñas luces- que vuestro corazón sea vuestra llave guía...

Mientras tanto se escucha en sonido de un escusado, a una cierta distancia.

Tras salir de la puerta, del extraño baño publico que se encontraba en el cielo o como se llame en lugar, sin lógica alguna, salgo todo un campeón, como si hubiera hecho una batalla campar en su interior.

Creo que no es buena idea entrar al baño por un buen rato...

Noto que hay caras nuevas, desde que entre aquel baño, así que me acerco a todo ese grupo.

¿De que me perdí?

El "baño público" era unos cuantos pasos hacia la izquierda del resto del grupo. Y no, no había absolutamente nada.