Partida Rol por web

Europa se cambia, poniéndose un albornoz. Dará una primera vuelta y, posteriormente, se meterá en la piscina central.

No puedo dejar de admirar el cuerpo de Europa cuando se cambia. En mi planeta natal la desnudez es un tabú cultural, debido a la escasez de agua y a la pérdida de fluidos corporales sin los trajes adecuados... A pesar de ser mucho mayor que yo, observo sus curvas perfectas...

Las piscinas me provocan un enorme desasosiego... Tantos litros de agua desperdiciados para algo tan insignificante como la higiene corporal...

   Khemet se cambió. Dejar la espada en la consigna le hacía sentirse más desnudo que el albornoz, pero tampoco buscaba llamar la atención sobre sí.

   Dado que a él nadie le conoce ni debe haber habido tiempo a relacionarle con la tripulación de la Garuda, se pasea con la naturalidad de quien se ha criado en esos ambientes. Mientras aprovecha para limpiarse, busca a ver si hay algún reservado o equivalente dónde puedan encontrar a su objetivo.

Os sumergís en las piscinas, y el agua caliente os relaja. El vapor de agua, mezclado con esencias y resinas varias, junto con la penumbra del lugar, contribuyen a lograr un ambiente sosegado, en el que el tiempo no parece transcurrir.

Conforme os vais fijando en los movimientos de los bañistas, observáis como hermosos muchachos y muchachas se acercan discretamente. Sus cuerpos están perfectamente cincelados y depilados, sus rasgos parecen cincelados por el más habilidoso escultor y sobre sus pieles se han dibujados intrincados patrones con henna. Algún cliente se acerca y toma a unos de estos cortesanos de la mano, adentrándose más en la casa de baños, presumiblemente hacia otras estancias más íntimas.

Os sentís tentados en hacer lo mismo, pero tenéis una misión. Vuestro objetivo finalmente aparece, Sale de una puerta lateral, completamente vestida con un elegante traje de noche, del que va despojándose mientras camina sinuosamente, para terminar entrando en la piscina. Casi todos los hombres, y muchas mujeres, la miran con deseo.

Renia, o como se llame realmente se zambulle, y nada, mostrando su mercancía a quien pueda estar interesado. 

Europa se acerca a la puerta lateral desde donde ha salido Renia a mirar qué hay allí.

La puerta lateral parece dar un pasillo de servicio, por donde entran los trabajadores del local. Además tiene un pequeño cartel de "Prohibido el paso"

Personalmente, dudo ser capaz de hablar sin que se me noten el mentir, así que cuando veo a la bella y peligrosa Renia, me limito a señalarsela a Salah y a quedarme observar desde una relativa distancia.

Conque esa es la famosa Renia... Me acerco nadando a ella e intento entablar una conversación amistosa.. Algo se me habrá pegado en la corte de mi planeta.

-No he podido evitar fijarme en usted, oh bendita de los iconos. Es usted con mucha diferencia lo más interesante que he visto esta noche...

La mujer ríe emitendo una risa muy musical. No puedes dejar de sorprenderte de la perfección de sus rasgos, dientes, formas.

Es usted muy zalamero, Sayyid. Por su acento diría que es usted de Dabaran o de Algebar. ¿Estoy en lo cierto? Pero bueno, qué maleducada. Soy Calista. ¿Qué le trae tan lejos de su casa? ¿Negocios, placer, algún amor perdido?

-Qué buen ojo tiene usted, sayaddina. Soy de Dabaran, efectivamente. Una pequeña aventura personal me ha traído a esta impresionante estación, y un conocido me recomendó el Mudéjar como "un lugar donde tus mejores sueños" pueden hacerse realidad. - hago una pausa dramática, mientras la miro directamente a los ojos -. Veo que no se equivocaba.

-Y usted, preferida de los iconos, qué le trae por aquí?...

Renia, o Calista o como se llame en realidad, vuelve a reírse con tu pregunta, echando su cabeza atrás y dejando que el agua chorree desde su hermoso cabello rojo sobre su pecho desnudo. Todas sus acciones parecen medidas para atraer tu atención, y que no puedas apartar la mirada de ella.

Pues podríamos decir que negocios y placer - estira su pierna y toca la tuya - Podríamos hablarlo en un sitio más tranquilo - tirándote de la mano para guiarte hacia un puerta en una pared más oscura de la sala de la piscina.

El viaje desde Dabaran ha sido muy largo y solitario, y que una mujer así se ponga a tu disposición de esa forma, sea o no cortesana, sea o no bioesculpida, no pasa todos los días. No eres capaz de resistirte y la misión podrá esperar. Una vez que termines con ella, ya verás como pagar sus servicios. Ahora no es el momento de preocuparse de eso.

Veis como Renia y Salah se acercan, murmuran, intercambian sonrisas, y tras unos minutos de charla, ella lo toma de la mano y lo guía hacia una puerta en una zona más oscura de la sala.

Aunque el vapor y la semi oscuridad hacen difícil ver qué pasa, os parece notar que Salah se deja guiar voluntariamente y una hinchazón en su bajo vientre se empieza a hacer notar. 

Europa deja pasar medio minuto, sale del agua y los sigue...

Vaya, parece que la noche se va a poner más interesante aun de lo que prometía. La sigo como un cordero, aunque intento permanecer en la medida de los posible (y lo que me de el riego sanguíneo que ne quede disponible para el cerebro) de estar al loro en busca de indicios de una posible trampa. No creo que los que me perseguían en Dabaran hayan dado ya conmigo, pero nunca se sabe...

Renia toca un panel junto a la puerta, que se abre al reconocer sus huellas. La habitación es más pequeña y oscura, pero se ve el reflejo del agua y se huelen las resinas aromáticas. Tras pasar Renia y Salah se cierra.

No es ninguna trampa. Rania o Calista te enseña todo lo que aprendió en las escuelas de cortesanas allá en Mira. 

Ay omá...

Pues nada, me entrego al placer...