Partida Rol por web

Intentas soltarte. Pese a ello no lo consigues. La calabaza se coge otra de sus raíces y a modo de látigo te azota. Parece ser que quiere sangre. Pese a ello en el último momento has movido la cabeza y la has esquivado.

Coges aliento y gritas. Luego te preparas otra vez para zafarte de las enredaderas. Ves como la otra calabaza se mueve lentamente hacia las escaleras.

Aunque ahogado, oís un grito que proviene de la sala grande de la posada. ¡Es Boff!

-¡Ayuda!

Bajáis rápidamente y os encontráis a dos calabazas con siniestros agujeros a modo de ojos y boca. Una de ellas se encuentra arriba de la barra, cerca de las escaleras (aunque no llegan sus enramaderas) mientras que la otra tiene cogido a Boff.

Ya estaban en camino cuando la llamada de Boff les puso en alerta, salieron corriendo escaleras abajo encontrandose con dos calabazas en actitud ofensiva. No lo dudó un instante pero los nervios le jugaron una horrible mala pasada una vez recogidos los componentes del saco se le calleron al suelo sin poder llegar a completar el conjuro.

Tume se regaño por su ceguera. El mensaje había sido claro. Sus amigos se encontraban en peligro y el elfo estaba perdiendo el tiempo en busca de alguna explicación complicada en lugar de salir corriendo en ayuda del resto. El grito de Boff acabo de darle el empujón que había necesitado y, daga en mano, salió corriendo en busca de su amigo el halfling, dejando al Enano durmiendo.

Cuando al cabo de pocos segundos llego a la habitación donde se encontraba Boff, una sorpresa estaba esperándoles con él. Tume había esperado encontrarse con algún tipo de criminal, pero para nada con unos seres en forma de calabaza amenazando al mediano. A pesar de no saber muy bien como combatir a aquellos seres, el elfo no dudo en saltar sobre ellos y tratar de ayudar a su amigo.

Therk bajó al ver que algo sucedia abajo, lo hizo al final y detrás de sus compañeros para ver a Boff atrapado por las calabazas. Sabía que quizás con sus puños no sería tan eficaz así que corrió o se movió a través de la habitación, cerca de la pared para llegar hasta su arma. 

Recorres la habitación esquivando las enredaderas y consigues ponerte a la espalda de la calabaza que tiene a Boff y con el Ahlspiess preparado. La "cara" de la planta está mirando a Boff y al elfo por lo que ti siguiente ataque se conisderará ataque de oportunidad.

Hardem se encuentra en el umbral de la escalera por lo que ninguna calabaza puede hacerle nada dado que no llegan sus enredaderas. Boff continúa atrapado y Tume se ha metido de lleno en la refriega, por lo que sí puede ser atacado por la calabaza.

Mientras todos intentan ayudarme y evitar que los ataquen las calabazas, yo en mi ultimo intento golpeo a la calabaza en un acto de desesperación ya que cada vez me tenia más apretado. En tanto embrollo aparentemente le doy en uno de sus lugares sensibles que no sabia que tenia y logro safarme.

Boff golpea con todas sus fuerzas al ojo de la calabaza hiriéndola, aunque al estar atrapado el golpe no es muy fuerte. 

Therk tomo el arma y se lanzó al ataque de una de las calabazas que tenía a Boff agarrado. 

Daño

El ahlspiess de Therk, una arma a medio camino entre espada y lanza, se clava en el interior de la calabaza. La planta se retuerce, consiguiendo que suelte a Boff. Con una de las enredaderas intenta dar un latigazo a Therk. Tanta fuerza tiene la raíz que le hace un tajo en el pecho al semiorco. La segunda calabaza, que está encima de la barra, sigue demasiado lejos como para que pueda atacaros.

Hardem estaba nervioso perdido nunca antes se había enfrentado contra ninguna bestía de las que se narraban en los cuentos o cantaban los bardos en la posada. Sin embargo allí estaban dos grandes calabazas que habían cobrado vida y que acaban de golpear a Therk. Debía agotar su magía lo antes posible para que aquellas criaturas cayeran, sino quizás nunca hubiera un después.

Saco los componentes de la bolsa de ingredientes y tal y como había echo con la sombra lanzo un proyectil de pura fuerza contra la calabaza a la que todos estaban golpeando.

El primer ataque lanzado por Tume contra la extraña planta fue esquivado por esta con extrema facilidad. Al menos el semi-orco había demostrado mas habilidad que el elfo y Boff había logrado liberarse del agobiante abrazo de la hortaliza. Tume no se dejo amedrentar por su fallido ataque y la aparente superioridad de su enemigo, y lanzó un contraataque contra la calabaza. Debía de apoyar a sus compañeros e intentar acabar con esa amenaza cuanto antes.

Tume vuelve a intentar a apuñalar la calabaza, la cuál vuelve a apartarlo con un golpe de vid.

Boff ahora en mayor ventaja saca su daga y se lanza a los ojos de la calabaza sabiendo que era uno de los puntos débiles de ésta. 

La afilada hoja de Boff es frenada por las hebras de la calabaza. Ésta, ya débil, aún lucha, especialmente contra Therk, el cuál ya ha sido alcanzado y la sangre le recorre parte de su armadura.