Partida Rol por web

La policia te pisa los talones, no puedes pasar mas de una semana en el mismo lugar, te tienen bastante cercado. Aunque los medios de comunicación al enterarse de lo sucedido están de tu lado, las fuerzas y cuerpos de seguridad del estado defienden que para hacer justicia están ellos y los tribunales y que la gente no debería tomarse la justicia por su mano, que por eso estás tan buscado. 

Con tu carrera para que no te pillen las autoridades apenas puedes hacer mucha justicia, impedir un robo por aqui, una violación por allá, pero poco más.

Frank era un hombre perseguido y como tal, no podía pasar mucho tiempo en el mismo sitio. Por eso necesitaba un lugar lo bastante alejado de la metrópoli donde pudiera pasar desapercibido una temporada. Y la respuesta estaba en las Islas Canarias.

Así que haciendo autostop logra llegar a Cádiz sin demasiados problemas. En el puerto siempre se necesita mano de obra para trabajar en los muelles y así Frank averigua qué barcos parten hacia las islas. Colarse de noche en uno de ellos y sobrevivir una semana en las bodegas no es tan problemático como parece. Y así. Un buen día. Frank llega a Santa Cruz de Tenerife.

Tenerife es una isla tranquila aunque la zona sur es la preferida por la mafia napolitana para esconder a los suyos. También los rusos han metido baza en la zona, invirtiendo en hoteles y apartamentos. Rumanos, Albanos y demás escoria de la Europa del Este trata también de sobrevivir. Así que Frank pone rumbo a Los Cristianos donde, con un poco de suerte, logrará conseguir armas y un refugio. A partir de ahí, ya se vería...

Lo que tu imaginabas como fácil (lo de encontrarte con la mafia) se te antoja difícil por momentos. Son más expertos en pasar desapercibidos que tú. 

Frank sigue intentando pasar desapercibido, así que llega a Los Cristianos en autobús. Este es un núcleo poblacional y cosmopolita, importante turísticamente y área portuaria del sur de Tenerife. La ciudad había experimentado una fuerte expansión urbanística alrededor de su puerto y playa a partir del boom turístico que en la década de 1970 surgió y que se mantenía hasta hoy en día. Contaba con dos playas de arena dorada, numerosos bares y restaurantes, y una gran oferta alojativa que incluía apartamentos y hoteles de todas las categorías.

Sin embargo Frank no buscaba nada demasiado lujoso. No le costó dar con un hostal barato donde pagó una semana en efectivo. Una vez en su habitación dejó sus escasas pertenencias en un armario y se tendió en la cama a descansar un poco. Quería esperar a que llegara la noche, donde podría moverse con más libertad, para explorar un poco la zona y ver cómo estaba el ambiente.

El día atardece placido y tranquilo, el hostal está lo suficientemente apartado del centro para que no haya mucho ruido alrededor de este.

Una vez haya anochecido, Frank saldrá a la calle a explorar un poco el área, visitar locales y hablar con la gente un poco para ver cómo está la situación por la zona.

El calorcito aun está patente en el ambiente aunque la luna ya surca el firmamento, por las fechas que son incluso dirías que hace demasiado calor... pero es lo que tienen las Islas Canarias. De repente una sirena de la policía hace que te sobresaltes.

Frank se refugia en una esquina, ocultándose en la oscuridad hasta que pasa el vehículo. Luego vuelve a la calle mirando las sirenas que se alejan. Aunque su mente le dice que lo mejor que podría hacer es alejarse en dirección opuesta, un cierto sentido de la curiosidad y las ganas de acción hacen que camine en esa dirección. Tal vez esté pasando algo interesante, o tal vez no.

Al parecer es un incendio en una casa a 3 manzanas de donde estás ahora. El olor a quemado es alarmante y se oyen gritos desde la casa. Aún no ves a los bomberos, solo la policía. 

Para variar, la gente se agolpa haciendo fotos y vídeos con teléfonos móviles, pero nadie hace nada.

Malditos estúpidos pensó Frank cuando vio a la gente únicamente preocupada por el vídeo que van a subir a Youtube sobre el incendio. Nadie se movía y nadie quería hacer nada aún escuchando los gritos de la gente. Sin pensárselo mucho, Frank corrió hacia la casa con la idea de entrar y salvar a la gente atrapada.

Hay policias acordonando la zona cuando te acercas a la escena uno de ellos te dice:

- No se acerque los bomberos están de camino.

Y mientras esperamos a los bomberos los que estén ahí dentro se asarán vivos. Frank estudia los alrededores intentando encontrar la manera de entrar a la casa. Tal vez subiendo a un edificio cercano y de ahí saltando a la azotea del otro.

es una buena opción... la mejor incluso... para ti es fácil... cosa que para otros seria imposible. 

Sigues sin oír las sirenas de los bomberos.

Sin más tiempo que perder, Frank busca el edificio más cercano al lugar del incendio. Entra en él si está abierto. Si no, tirará la puerta abajo de una patada. Con las sirenas de la policía puestas es muy probable que nadie le oiga. Una vez arriba, se acerca a la cornisa y, después de coger impulso, salta al edificio en llamas.

llegas sin problemas a la azotea del edificio en llamas, al parecer nadie te ha visto. Las llamas están entre la 5 y la 6 planta... la azotea es lo que seria la 8 planta.

No había tiempo que perder. Frank corrió hacia la puerta de la azotea y empezó a bajar escalones de tres en tres hasta llegar al lugar del incendio.

Alli hay una familia entera atrapada detrás de una de las puertas que pide auxilio a gritos.

El calor es asfixiante y la cantidad de humo es alta... te cuesta respirar mucho.

-¡No se preocupen, los sacaré de aquí! -grita Frank. Se acerca a la puerta y la tira abajo de otra patada- ¡Vamos, vengan conmigo!

La idea es correr hacia las escaleras y tratar de bajar a los pisos inferiores. Si no es posible, habría que subir e intentar buscar una salida desde el tejado.