Partida Rol por web

El Ultimate Performer maldice entre dientes mientras ojea el libro. ¿Acaso había algo mejor que hacer? Esperando hallar alguna información útil, comienza a leer el libro.

El pequeño Monokuma vivía en una aldea con su madre, que no paraba de trabajar todo el día, un día, la madre le pidió a su hijo que le llevara una cesta con comida a su abuelita enferma que vivía en una cabaña en el bosque. Monokuma aceptó el encargo y su madre le dio una capucha roja para que no pasara frío y estuviera protegido mientras caminaba por el bosque.

Cuando por fin Monokuma partió con la cestita de comida para su abuela y su madre no estaba mirando, se zampó toda la comida de dentro de la cesta y la tiró al suelo; pero todavía iba a ir a casa de su abuela a por la paga de esta semana, esperaba que esa vieja chocha le diera mucho dinero o le pegaría.

¿Dónde irá Monokuma?

1)- Atajará por el camino empinado

2)- Hará el camino largo a través de los árboles

3)- Va en Jet privado.

No sabes qué pensar sobre el libro; pero te deja elegir una de las tres opciones. ¿Qué eliges? 

Picado por la curiosidad, Yukiashi opta por la opción 3. Al fin y al cabo, no podía dejar pasar una historia sin saber cómo acababa.

¿Crees que si tuviera un Jet Privado no habría vendido a mi madre ya, imbécil?

GAME OVER.

El libro empieza a emitir pitidos y asustado, lo lanzas, al recorrer una corta distancia de ti, el libro estalla en mil pedazos. 

La televisión de la habitación se enciende y aparece Monokuma, después del anuncio, las puertas de la biblioteca se abren con un click.

Maxwell es el primero en llegar a la biblioteca de vuelta. ¿Investiga otra vez el lugar?

Maxwell revisa el lugar por "Monocoins", a fin de cuentas, Monokuma habrá dejado algo de valor en los viejos lugares para que la gente solitaria los explore y no se aglomere en los nuevos lugares cual mosquitos. Ya se sabe, dejar a gente sola, apartada y dividida en lugares llenos de armas... todo por buscar monocoins...

Llega a tiempo Tanaka para unirse a la investigación.

"Perdóneme, Padre, porque he pecado" fue la primera frase que se me vino a la mente cuando me vi a solas con el joven Ultimate Bishop. Nunca había sido muy cristiano y la última vez que había visto de cerca a un cura había sido a los diez años, por lo que encontrarme a solas con Maxwell me hacía sentir incómodo.

-¡Ey! ¿Qué pasa, Su Santidad? -saludé a Enrico, con un gesto de mano-. ¿Qué está usted haciendo?

-Aún no soy "su Santidad". Aunque agradezco el gesto de respeto que ahí dijiste. Respecto a lo que estoy haciendo aquí, buscando monocoins, me parece realmente extraño que entre todas las cosas que hay en la tienda, el libro que hable sobre la academia sea algo aparentemente "inofensivo e inutil", además a un elevado precio y que solo haya una unidad...

-Personalmente creo que es la clave para resolver este misterio. Y dado que soy el que más Monocoins posee hasta ahora, creo que debería ser yo quién lo obtenga, una vez que logre obtener las 8 restantes. A fin de cuentas, el oso prohibió la transferencia de Monocoins... pero no que otros "dejasen de buscar" o una vez que lo hayan encontrado NO LOS RECOJAN.

Maxwell revisa en los cajones del archivo por si hubiera alguna moneda escondida entre los numerosos folios que allá se encontraban en perfecto orden y armonía. Pese a ello, no le dejaba de echar un ojo sorbe Joaquin.

-Por cierto, no sé si es este sitio pero al entrar me dio un bajón de autoestima; suerte que me he entrenado bien en la Fe en Dios, ya sabes, el único y el verdadero; y gracias a eso pude recuperarme sin mucho problema. A fin de cuentas, creer que hay alguien más que te protege y vela por ti, no es algo desagradable y aún menos cuando es cierto.

-¿Te interesaría unirte?. Quizás puedas verte beneficiado de su Amor y Comprensión en estos momentos difíciles.

-Entonces, habrá que conseguir ese libro -dije escuetamente, para luego hacer un asentimiento a las palabras de Enrico-. No tengo problema en que seas tú el que lo consigas. Tal vez en ese objeto esté la clave para salir de este maldito lugar. Te ayudo a buscar más monocoins.

Uniéndome al Ultimate Bishop, decido comenzar a rebuscar entre los numerosos cajones y en las hileras de libros, buscando posibles monocoins escondidos.

-¿Quién crees que será el siguiente asesino y la próxima víctima? -pregunté, intrigado por el punto de vista del religioso-. Apostaría que Makoto o el Palpati tienen todas las papeletas para caer. Tienen habilidades para encontrar pistas de los asesinatos, por lo que si alguien se ha dado cuenta... -Me pasé un dedo por el cuello, simulando una garganta rajada-. Apuesto también a que Ichie y Masuro van a ir juntos. Puede que incluso se cubran las espaldas el uno al otro. Y creo que Daiki y Daichi van a enfrentarse tarde o temprano. Tendremos que ir con pies de plomos si queremos encontrar a los asesinos y salir vivos de esta.

-Sí, hay algunos que tienen mucha suerte con sus dones, ya que ellos mismos son capaces de ver algo que otros no ven; Makoto y el Palpati, si no fuera por ellos, el caso sería extremadamente complicado, pues no sabríamos la presencia del segundo arma del crimen ni de la herida real. Tienen unos poderes la mar de interesantes...

-Yo por el contrario, y dado que mi foco de trabajo siempre se enfocó con la gente, lo único que puedo hacer es tranquilizar y relajar a la gente, que no caigan en la desesperación. Aunque por desgracia solo funciona si el grupo de "adeptos" o de gente que se pare a estar conmigo sea mayor a 3... Así que, de momento no puedo colaborar usando lo que sé.

-Respecto a la investigación, si te digo la verdad, no tenía ni la menor idea de quién era la asesina; solo reunía las piezas que se mostraban e intentaba ensamblar el puzzle lo mejor que podía. Algo que cualquiera podía haber hecho. El problema de ensamblar puzzles es si estos no tienen todas las piezas... por lo que Makoto y el Palpati son esenciales.

-Si un asesino fuera inteligente y usando las normas de Monokuma; cometería un asesinato doble contra Makoto y el Palpati, entonces tomaría el rol del abanderado y sería el primero en proponer una teoría usando las pistas, acusando a alguien, tergiversando la información y los datos... De hecho, ahora que me viene a la mente... ¿Makoto es hombre o es mujer?. Pues algo así, víctima andrógina perfecta para los baños.

-Bueno, y ahora que hemos hablado sobre esto; si Makoto o el Palpati mueren serás mi sospechoso al igual que yo seré de ti... por lo que o bien decidirás matarme en vez de matar a uno de los principales dadores de información... Lo cual implica en que ninguno de nosotros vamos a asesinar a nadie, por lo que ambos somos inocentes. 

Rebuscando entre los libros, encontráis pasajes terribles sobre monstruos éldricos que os hacen perder la cordura. Oh, también encontráis unas moneditas entre ellos. 

Los libros os han dejado exhaustos, ni qué decir que os recuerdan a los acontecimientos de ayer.

¡Obtenéis 3 Monocoins a repartir! Podéis repartirlos como queráis.

-Con tu permiso, me tomo la libertad de tomar las 3 monedas. Si es que no te importa, claro está. Una vez que tenga el libro de la escuela entre mis manos, sabremos la verdad, además que Monokuma prohibió regalar, donar y pasar estas monedas.

Maxwell toma todas las monocoins y se las guarda en el pantalón bajo su sotana. Y girándose hacia el compañero le comenta algo preocupante que se ha dado de cuenta.

-Nosotros hemos encontrado 3 Monocoins, otros también pueden haber encontrado el número suficiente para ir a comprar en la tienda de Monokuma; por lo cual la llave del armario de venenos puede ser abierta, o incluso si tuvieron más suerte que nosotros; los guantes de Boxeo.

-He de suponer que el máximo de monedas escondidas son 3 por habitación.

-Por suerte, si alguien fallece por envenenamiento sabemos quién puede ser el culpable, sabiendo las monedas que ha conseguido cada uno y cuantas tiene ahora. Teniendo en cuenta que la gran mayoría tiene 1 moneda más las que ha podido conseguir ahora... con 2 monedas encontradas es más que suficiente para entrar a los venenos.

-Tranquilo, no voy a matar a Makoto o al Palpati -le aseguré, restándole importancia-. Ni a nadie a decir verdad. No soy un asesino. Sólo mataré si es para defenderme. Palabra de scout. Y de todos modos, en nuestro caso, creo que necesitamos tanto a Makoto como al Palpati. Esas habilidades nos serán útiles para determinar quiénes son los futuros asesinos, por lo que es probable que intenten matar esta noche a uno de los dos. Pensándolo fríamente, es lo que yo haría si quisiera salir de este lugar cuanto antes.

-En la investigación, yo tampoco tenía ni idea de quién podría ser la asesina. Tuve una corazonada con que el plumero lo sacaron del Laboratorio de Biología, pero en realidad lo habían cogido de la Lavandería. Daiki y yo encontramos la ropa quemada y el cuchillo prácticamente de casualidad. Y de no haber sido por el esto de las pruebas, lo más probable es que no hubiéramos terminado dando con la asesina. Daiki estaba convencido de que el asesino era Daichi, aunque en un primer momento me dijo que su principal sospechoso era yo. No descarto que el jardinero intente matar a Daichi o a mí esta noche.

Al ver que Enrico encuentra las monedas y decide tomarlas para él, me encojo de hombros.

-Sin problemas. Necesitamos el libro, así que no me opondré. Con un poco de suerte, podrás conseguirlo el cuarto día. -La mención de los venenos me hace arquear una ceja-. ¿Cuántos crees que empezarán a utilizar los venenos? Personalmente, yo aguardaré a reunir mono-coins suficientes para los Guantes de Boxeo. El veneno... Digamos que siempre lo he considerado un arma de cobardes.

-Toda arma que se usa contra otro es de cobardes y asesinos. No solo el veneno. Shinobu Iki fue una cobarde por intentar asesinar a Suzuki alegando que ella sería la más débil; así como Suzuki fue una cobarde por asesinar a Shinobi y culpar al pobre de Yuichi... Y el mayor cobarde es el que se esconde tras el muñeco parlante.

-Sobre el veneno, si no es en este asesinato será en el siguiente sin lugar a dudas. 

-Respecto a cuando obtendré el delicioso manga, si se comete un asesinato ahora y logro resolver 2 de las cuestiones, ya tendré 7 monedas, por lo que estaría a un buen descubrimiento para obtener el manga... Y si no, tras el tercer juicio seguro... Si es que nadie me coge tirria para entonces...

-Con esto en mente; sobre lo que dices de los guantes de boxeo, creo que te será de gran utilidad si alguien decide atacarte poder contraatacar sin mucho inconveniente. Por otro lado; el antídoto puede ser de utilidad si alguien decide envenenar a alguien, a fin de cuentas, supongo que ya habrá gente con acceso al estante de venenos ahora mismo.

-Ahora la duda está: Si se me presenta la ocasión de usar mis monedas para salvar a alguien de un envenenamiento o usarlas para conseguir el manga... Será una decisión complicada.

-Pero supongo que lo correcto sería dejar que la rama enferma muera y salvar la planta. Tanto para el resto, como para mi propia seguridad, ya que si un asesino con venenos sabe que puedo comprar el antídoto, me matará a mi antes de dejar que alguien sobreviva gracias a mis monedas...

-De todas formas, todos los asesinos así como los que desean protegerse de asesinatos van a ir de cabeza a los guantes de boxeo, ya que esa ventaja que da es impresionante. Algo que sería increíble si vemos las fortalezas físicas de algunos de los presentes, como Yuichi o el Jardinero...

-Por cierto, agradecería que el número de monedas que poseo sea un secreto entre nosotros... no deseo volverme objetivo para que un asesino del veneno intente evitar que salve a alguien; cosa que NO haré. 

Ichida Risu llega a la biblioteca y repentinamente un fuerte dolor en la cabeza le vuelve a atacar. Vuelve a tener una visión de un evento pasado.

"En la visión puedes ver máquinas trabajando sin parar, pequeños 'brazos' automatizados que hacen saltar chispas al contacto con lo que hay dentro de un habitáculo. Estás viendo la escena desde los ojos de una persona que dirige todo el proceso y da órdenes a empleados 'sin rostro' que se mueven de un lado para otro."

La visión ha terminado y rápidamente identificas este habitáculo como las cámaras donde os despertasteis en el laboratorio de biología. ¿Qué puede significar esto?

Despiertas después de unos minutos de estar besando el suelo y te levantas con dificultad, parece que necesitarás un poco de tiempo para recuperarte, intentas abrir la puerta de la biblioteca; pero está cerrada a cal y canto, parece que Monokuma no quiere que salgas hasta que empiece el Juicio.

Ichida estaba frustrada. No había logrado nada que fuera realmente util y ahora Monokuma la estaba encerrando como hiciera con Yuichi.

-Director, no es justo. No se nada de mi pasado ¿Y encima no puedo salir a ayudar a mis compañeros? Que se supone que voy ha hacer aquí entonces. -Se cruzo de brazos frustrada, aun con la cabeza palpitando.

Las puertas de la biblioteca se abren para dejarte salir y sales corriendo al bar, donde comienzas una rápida investigación de cualquier cosa que puedes hallar.

Encuentras un cajón lleno de polvo en el que falta una botella, entonces, recuerdas el logo que estaba en el bote de veneno, ¡es el mismo que el del bar!

Con esto descubres que el veneno fue sacado del bar.

La televisión se enciende dando paso a un anuncio de Monokuma para que vayais al Juicio. Leed más en "Anuncios"