Partida Rol por web

[D&D 3.5] El Festival.

Acto II. La Propuesta.

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12/03/2021, 20:20
Narrador

Finalmente Akta abandonó la guarida de Mitil y se encaminó hacia el templo de Seyran. No estaba muy lejos del lugar que acababa de abandonar y no tardaría demasiado en llegar hasta el mismo, escasos metros le separaban de éste. La plaza estaba en completa ebullición a esas horas. Mucha gente se agolpaba en la misma, vendedores ambulantes, compradores, niños correteando y como no, personas realizando actos lascivos, pues el festival por suerte o por desgracia, todavía no había acabado...

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12/03/2021, 20:23
Narrador

Fue en ese preciso momento, cuando Crodos se tapó con una capa y los tres aventureros se disponían a entrar en aquella posada de mala muerte, cuando Lerissa y Lasar divisaron la reluciente armadura de Akta caminando por el centro de aquella plaza camino del templo del Dios Solar Seyran, con paso decidido.

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12/03/2021, 22:49
Akta

Las calles estaban abarrotadas de gente. Los niños jugaban entre hombres y mujeres fornicando en sus calles, celebrando aquel festival mientras que mi corazón iba quedando cada vez más atrás, en el refugio de Mitil. Ver aquel sexo en las calles, solo hacía que mi mente y mi cuerpo deseasen retroceder y volver a su guarida, llevarle a una cama y poseerle. Sin duda el dominio de la diosa del placer y el dolor comenzaba a hacer meya en mí.

Debía alcanzar el Templo de Seyran cuanto antes.

Miré al suelo, alejando mi mirada de todos los demás. Había pasado por allí y sabía donde estaba el Templo. Necesitaba entrar, mostrarle mis respestos a mi Dios en aquella ciudad corrupta y demostrarle que yo no era así. Que todo lo que iba a hacer aquella noche, arrastraba consigo una causa justa y el amor que nunca sentí antes por alguien era lo que me impulsaba a ello. Pero que ese amor no dejaría de lado ser su sacerdotisa, su sierva y su mano impartidora de justicia.

Debía saber que limpiaría esa ciudad y de nuevo se alzaría el nombre de Seyran sobre las calles, como el único Dios de aquel lugar. Los festivales corruptos y aberrantes quedarían prohibidos bajo pena de muerte y los aquelarres serían castigados en público. Seyran debía saber que a pesar de mi decisión, no le había abandonado y esperaba que él no me abandonase a mí tampoco en aquel momento de necesidad.

Y mientras más me alejaba de Mitil, más venía su imagen a mi cabeza y más le añoraba y deseaba verle de nuevo. Y lo peor era que solo me había alejado de él unos cuantos metros, unos pocos minutos. Necesitaba la fuerza y la bendición de Seyran para poder con todo aquello yo sola. Puesto que en aquel momento era como esta: completamente sola.

Al llegar a la entrada del Templo, como era habitual y en señal de respeto hacia Seyran, me retiré el casco y bajé mi cabeza con humildad, caminando hacia su interior. No sabía lo que me depararía allí, pero esperaba tener un altar donde poder rezar y que el resto de seguidores, fanáticos o corruptos, no interfirieran en mis oraciones.

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12/03/2021, 22:57
Crodos Mornward

Crodos miró a Lerissa compasivo:

— Claro, claro... Disculpadme Lerissa — e hizo una ligera inclinación de cabeza, sintiéndolo de veras. Ah, contra la vileza de su sangre no podía hacer nada. Pero aún así la acompañaría aunque fuera en silencio. Estaba claro que sus ojos atormentados reflejaban la necesidad de una luz como la que irradiaba Seyran a través de él. O quizás no estuvieran tan atormentados y le despistaba ese extraño y poco humano color que tenían. Como fuere, Crodos lo tomó como simplemente la respuesta de un alma descarriada que no sabía lo que decía.

— Ciertamente no me agrada cubrirme como un vulgar bandido... — dijo tratando de tapar la sobrevesta bordada en hilo dorado con su capa igualmente blanca impoluta. — Pero tenéis razón. Es conveniente pasar desapercibido... — miró a sus dos acompañantes, sin darse cuenta de que por allí pasaba Akta — Bien, os sigo. Creo que vosotros os moveréis mejor en este... lugar.

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13/03/2021, 01:08
Narrador

Una vez frente al templo, Akta se dio cuenta de la belleza que tenía su arquitectura. Se trataba de un edificio alto, no menos de veinte metros. En su fachada lúcida un inmenso rosetón con forma solar, a través del cual se filtraban los rayos del dios solar iluminando sin duda el interior del templo. La fachada estaba adornada con diversos relieves solares y runas de protección, y en la cúspide se erigía un enorme orbe iluminando desde si interior por una llama que permanecía siempre encendida incluso si llovía, pues se trataba de fuego mágico. 

Al plantarse frente a la entrada del templo se percató de que las enormes puertas doradas del mismo, se encontraban abiertas, por lo que simplemente accedió al interior embargándole casi al instante un intenso olor a flores procedente de varios incensiarios repartidos por la estancia principal. 

 

Un sacerdote se encontraba en esos momentos en la sala armado únicamente con una regadera para regar las macetas que se encontraban tras el altar.

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13/03/2021, 01:12
Thoriac

Buenos y soldados días. - Dijo aquel hombre vestido de blanco. - Soy el hermano Thoriac. - Miró entonces con detenimiento a Akta. - ¿Otra sierva de Seyran en una jornada tan oscura? - Preguntó sorprendida. - ¿Puedo ayudarle en algo, o simplemente ha venido a expresar sus respetos al dios solar?

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13/03/2021, 01:14
Narrador

Momentos después de encontrar a Akta, mientras Crodos hablaba y se cubría con aquella capa, Akta se introdujo en el interior del templo que aquellos tres extraños compañeros de viaje, acababan de abandonar.

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14/03/2021, 16:30
Akta

- Soy la sacerdotisa Akta. - Me presenté a mi hermano. Sus palabras me hicieron ver que Crodos estuvo por allí mientras que yo intimaba con Mitil en su escondite. Porque en el fondo eso era lo que estaba ocurriendo en aquel lugar. - He venido a expresar mis respetos a Seyran, pues llegué anoche a la ciudad y hasta ahora no pude hacerlo. Además, necesito tener unos minutos de intimidad para que mis rezos sean escuchados por el dios solar. - Miré al hombre con determinación.

- Se que el Templo está pasando por un mal momento en esta ciudad y me gustaría poder ayudar a restaurar la fe y la armonía de Seyran en este lugar. Lo que vi anoche, lo que he visto mientras venía hacia el Templo en sus calles, me parece una aberración y algo que no debería permitirse... ningún Dios que se precie debería permitir eso en las calles de una ciudad y menos aún quebrando la inocencia de los niños de esa manera. - Expresé observando los gestos del hermano Thoriac.

- Más mi viaje ha sido largo hasta llegar hasta aquí y aún debo descansar un poco antes de poder comenzar con alguna tarea que pueda ayudar. Además me gustaría conocer la ciudad antes de emprender cualquier actividad en ella. Saber que lugares son seguros para los seguidores de Seyran, si es que hay algún lugar seguro para nosotros a parte del Templo y si contamos con algún tipo de ayuda externa... aliados que puedan ayudarnos contra esa diosa del dolor y el placer que tiene sometida a la ciudad. - Miré al hombre con pesar, esperando que las respuestas fuesen como mínimo satisfactorias. - Me gustaría saber si en el Templo hay algún sacerdote que conozca las artes divinas del tercer círculo pues anoche encontré a alguien quien necesita ayuda... alguien que ahora ha caído en malas manos y necesitaré todas las fuerzas que Seyran pueda darme para poder entrar en el Templo de esa diosa, donde tienen atrapado al desgraciado que necesita ayuda...

No sabía porque le contaba todo aquello. Quizás porque era un hermano y necesitaba desahogarme de una parte de lo que cargaba o puede que esa fuese la mejor manera de sacar información. - También me gustaría saber quien era aquel que decís que vino anteriormente al Templo, supongo que vendría a presentar sus respetos... pero me interesa más saber si le dijo donde iría después. Quizás si le encuentro podamos ayudarnos mutuamente. - Era más fácil decir que conocía al paladín y que me había enojado con él porque me había ofendio ante alguien a quien, no se porqué, me hizo sentir todo aquello nada más verle y tenerle presente.

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14/03/2021, 17:06
Thoriac

He venido a expresar mis respetos a Seyran, pues llegué anoche a la ciudad y hasta ahora no pude hacerlo. Además, necesito tener unos minutos de intimidad para que mis rezos sean escuchados por el dios solar. 

- Todos los devotos de Seyran son bienvenidos aquí, hermana Akta. - Les respondió sonriente. - Tomad el tiempo que necesitéis para vuestros rezos.

- Se que el Templo está pasando por un mal momento en esta ciudad y me gustaría poder ayudar a restaurar la fe y la armonía de Seyran en este lugar. Lo que vi anoche, lo que he visto mientras venía hacia el Templo en sus calles, me parece una aberración y algo que no debería permitirse... ningún Dios que se precie debería permitir eso en las calles de una ciudad y menos aún quebrando la inocencia de los niños de esa manera.

- Estoy totalmente de acuerdo con usted. - Dijo apretando los puños y la boca en un gesto de impotencia, más que de rabia. - Están corrompiendo a los niños desde la cuna. Es... es horrible... - Dijo apesadumbrado.

- Más mi viaje ha sido largo hasta llegar hasta aquí y aún debo descansar un poco antes de poder comenzar con alguna tarea que pueda ayudar. Además me gustaría conocer la ciudad antes de emprender cualquier actividad en ella. Saber que lugares son seguros para los seguidores de Seyran, si es que hay algún lugar seguro para nosotros a parte del Templo y si contamos con algún tipo de ayuda externa... aliados que puedan ayudarnos contra esa diosa del dolor y el placer que tiene sometida a la ciudad. 

- Hoy en día no hay demasiados lugares seguros en la ciudad, aunque tampoco especialmente peligrosos. - Dijo con cierto pesar. - Todo se esta desmoronando, ¿sabe? No es como antes. Incluso durante las misas, en las que meses atrás no cabían en las bancadas, ahora, no se llena ni media capilla... - Hizo una pausa. - Aún tenemos algunos sacerdotes, paladines y no divinos fieles a Seyran. Puedo presentárselos si se queda por aquí. Toda ayuda es poca. Sin duda lo sabe.

 - Me gustaría saber si en el Templo hay algún sacerdote que conozca las artes divinas del tercer círculo pues anoche encontré a alguien quien necesita ayuda... alguien que ahora ha caído en malas manos y necesitaré todas las fuerzas que Seyran pueda darme para poder entrar en el Templo de esa diosa, donde tienen atrapado al desgraciado que necesita ayuda...

- Teníamos un sacerdote. El abad. - Bajó la mirada. - Se fue hace unas semanas a la capital. Tenía que hablar con el patriarca de lo que estaba sucediendo en Encrucijada. Aún no ha regresado.

- También me gustaría saber quien era aquel que decís que vino anteriormente al Templo, supongo que vendría a presentar sus respetos... pero me interesa más saber si le dijo donde iría después. Quizás si le encuentro podamos ayudarnos mutuamente.

- Se trataba de un paladín. - Comentó. - Crodos decía llamarse. Acaba de salir justo antes que usted entrara. Seguro que se ha cruzado con él.

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14/03/2021, 19:40
Akta

- Gracias hermano. Debo... centrarme y solo puedo hacerlo en este sagrado lugar. - Le respondí al sacerdote antes de que me hablase de la corrupción de los niños. - No voy a contaros mi vida, pues es algo que realmente no viene al caso, pero estoy muy arraigada con el tema de la inocencia de un niño a causa de mis vivencias y no me gusta el hecho de que se les pervierta de esta manera ni se les corrompa desde tan pequeños.

- Sin duda, si aún son fieles a nuestro amado Seyran, desearé conocerles. Necesitaré su ayuda para poder restaurar este sagrado lugar y devolverle el esplendor que ha perdido. - Le respondí al hombre, sintiendo que empezaba a encontrar mi camino más allá de lo que ocurriese aquella noche junto a Mitil en la posada.

Suspiré cuando escuché lo del abad. Por la mirada del hombre entendí que algo debía haberle pasado, puesto que sus ojos me decían que ya debía estar de regreso. - Volverá. Tened Fe, hermano. - Le dije al hombre tratando de consolarle.

- ¿Me he cruzado con él? - Pregunté con gesto de sorpresa. ¿Tan inmersa iba en mis pensamientos que no le vi? Y si nos habíamos cruzado, ¿por qué no me dijo nada? Estaba confusa. - Discúlpeme hermano, voy a ver si le encuentro antes de que se aleje demasiado. Al menos así sabré quien es y donde encontrarle tras mis oraciones.

Dicho esto, corrí todo lo deprisa que pude hacia el exterior del templo, escuchando como mi armadura golpeaba contra sí misma. Una vez fuera miré a ver si era capaz de ver a Crodos, al pesado del bardo o a la maldita tiefling. No debía ser difícil, serían los más normales dentro de los muros de la Encrucijada... al menos irían caminando y no fornicando por cada calle...

- Tiradas (1)

Notas de juego

Dejo una mierda de tirada de buscar por si es necesaria.

Joder, puse lo de "mierda de" antes de tirar... y es que llevo una tarde de tiradas de mierda que...

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15/03/2021, 15:14
Thoriac

Aquí estará el templo cuando lo necesitéis, Akta. - Le dijo Thoriac a modo de despedida. 

Acto seguido al sacerdotisa de Seyran salió a la carrera de aquel lugar sagrado y echó un rápido vistazo alrededor de la plaza. Fue en el último instante cuando localizó a sus compañeros de viaje. Estaban a punto de acceder a la posada donde iba a tener lugar esa misma tarde aquella emboscada de impredecible resultado.

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15/03/2021, 15:17
Narrador

A punto estaban de penetrar en el interior de aquella posada de mala muerta y peor nombre, "la Rata Ahogada", cuando una brillante mujer enfundada en una aún más brillante armadura, les interceptó. Se trataba de Akta, que volvía a ellos tras haberse separado de forma abrupta.

Notas de juego

Volvéis a estar juntos.

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15/03/2021, 15:41
Akta

Crucé la calle en silencio cuando les vi entrar en aquel lugar donde horas más tarde se decidiría el destino de varias personas, incluidos los nuestros. Con el mismo silencio que usé para cruzar la calle, me acerqué a ellos. No sabía como se iban a tomar mi retorno.

Llevaba puesta la armadura, mi fiel espadón y un equipo básico para moverme por la ciudad. Mi manta, mi tienda de campaña y todo lo demás que en aquel momento no fuese más que una molestia, había quedado atrás en algún sitio. Estaba claro que mi intención era pasar allí el día, combatir y luego... quien sabe lo que ocurriría esa noche.

Contemplé mi entorno. Tal y como deduje y me confirmó Mitil, habían dos salidas, la principal y una lateral, que debía ser la puerta que llevaba a un pasillo al fondo, pues lo demás estaba todo a la vista. - Acabo de estar en el Templo de Seyran. Aún debo acudir a él para realizar mis rezos y oraciones, así como para presentar mis respetos a Seyran. Pero el hermano Thoriac me dijo que acababais de salir, Crodos y preferí encontrarme con vos y los demás antes de mis oraciones. Así sabré donde encontraros de nuevo cuando me separe de vosotros.

Y es que no sabía ni como abordar aquello. Lo más fácil era que me diesen una patada y me dijesen que nos veríamos al caer la noche, pues así era la tiefling, manipuladora y Crodos se dejó manipular facilmente por ella aquella mañana. Con el tiempo que llevaban juntos, quizás el paladín ya no tenía salvación alguna frente a las palabras de la víbora cornuda. Y el bardo... siempre cantando y hablando y cuando tuvo que decir algo solo mantuvo el silencio como respuesta.

Quizás no debí hacer caso a Mitil y quedarme con él y los suyos. Pero la decisión estaba tomada y las palabras en el aire. Ahora les correspondía a ellos decidir que hacer, pues al menos parte de mi camino lo tenía claro y me daba igual rezar a Seyran media hora como cuatro...

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15/03/2021, 20:13
Lasar Etreri III

Íbamos a entrar en la posada, cuando una voz áspera y gutural resonó detrás nuestra. Me llevé un pequeño susto. Al girarme vi a la bella Akta, que al parecer no había decidido entrar en el templo o había entrado y salido en lo que canta un gallo, porque ahora mismo estaba junto a nosotros como si nada. Mi mente pensó en extraños sucesos espacio temporales.

-"Hola querida, llegas a tiempo para entrar con nosotros a comer algo y de paso intentar conseguir algo de información. Lo único es que deberías de echarte una capa por encima como ha hecho nuestro buen Crodos, para no levantar suspicacias. Y ahora, ¿entramos de una vez?"

Dije sacando mi laúd y sacando alguna nota al puntear las cuerdas bien afinadas.

-"Laaa, lalalala, laaaaaa." Afinaba mi canto...

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15/03/2021, 20:22
Lerissa

No lo pensé demasiado.

Podía ignorar las tonterías eclesiásticas de Crodos y Akta porque eran al fin y al cabo suyas y de nadie más, pero de ninguna manera pensaba soportar los cantos de Lasar, sobre todo cuando le había dicho explícitamente que debíamos ser discretos y que nada de música.

Así que le arrebaté el laúd y lo lancé lo más lejos que pude, volviéndome a mirarlo con dureza, agarrándolo de las solapas y trayéndolo al marco de la puerta.

-Si quieres cantar, ve fuera. He dicho que adentro, nada. ¿O es que no entiendes eso de ser discretos y ocultarnos? -le dije, harta ya de tanta buena intención que al final iba a causarnos más problemas que otra cosa.

Después, lo solté y entré.

Notas de juego

Ofú que pesao jajajajajajjajajaja

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15/03/2021, 20:29
Lasar Etreri III

Al empotrarme contra la pared y pegarse a mi, la cornuda mujer pudo notar lo armado que estaba. Y no, no eran las flautas que llevaba guardadas. El roce hace el cariño o eso decía mi padre, así que estaba consiguiendo que Lerissa se sintiera irremediablemente atraída por mi hasta tal punto que me deseaba fogosamente. Nuestras miradas se encontraron a pocos centímetros y mis labios estuvieron a punto de alargarse hasta tocar los suyos, pero la dejé con la miel en los labios. Así, dejaría que su deseo ardiera aún más, hasta límites insospechados.

Una vez que entró en la posada, alargué una mano al aire y el laúd volvió a ella como un fiel cachorrito. Miré a mis compañeros y sonriendo les dije:

-"Está claro que esta mujer me adora."

Y con una sonrisa deslumbradora en mi cara, entré detrás de la tiefling, con la lanza enhiesta, saludando a la gente.

Notas de juego

Jajajajaja

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15/03/2021, 23:10
Crodos Mornward

Crodos estaba esperando a sus compañeros, embozado en su capa blanca inmaculada ocultando el emblema del dios solar de su pecho, cuando escuchó la voz de Akta y se giró.

— ¡Ah, Akta! — exclamó con una sonrisa sincera — Me alegra que de nuevo estéis con nosotros. Por favor, no os vayáis... — tenía que intentar retenerla antes de que se marchara de nuevo. La agarró amablemente del brazo acorazado con su guantelete — Comed con nosotros y luego Seyran dará.

Un golpe sordo, como el de un bardo siendo empujado contra el marco de una puerta, le hizo girarse de nuevo para ver cómo Lerissa amenazaba a Lasar agarrándole por la pechera, y por un momento temió que la tiefling le rajara las entrañas allí mismo. Cuando lo soltó y se metió en el interior del tugurio, Crodos negó con la cabeza.

— Lasar, reconozco no saber mucho acerca del cortejo, pero yo diría que remáis en la dirección opuesta con Lerissa... Si es que hay una dirección acertada con ella. — añadió mientras entraban, tratando de no llamar la atención como un vulgar bandido de tres al cuarto. Qué vergonzoso, ruin y cobarde... pero los tiempos oscuros exigían medidas igualmente oscuras...

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16/03/2021, 07:55
Akta

Miré al paladín. Era el único que realmente parecía alegrarse de mi presencia, pero no pasé por alto el aviso que Lasar y miré el atuendo de Crodos y me miré a mi misma. - Comeré con vosotros, más no puedo entrar así en este lugar. Dadme unos minutos... Ya se donde encontraros y, ciertamente,tengo hambre. Debí hacer caso a mi instinto y no usar la armadura.

No quería volver al refugio de Mitil, pero mi ropa estaba allí y mi armadura estaría a salvo en aquel lugar. Además, había algo que tenía en mente que debía hablar con Mitil sobre aquella noche.

- Os prometo que no tardaré. No voy a separarme más del grupo, salvo para evitar llamar demasiado la atención y realizar mis rezos en el Templo. Además, debo hablaros de lo que me contó nuestro patrón.

Dicho esto, Akta se dio la vuelta. El refugio de Mitil no estaba lejos y estaba segura de que tardaría poco en quitarse la armadura, contarle al hombre su idea final y reunirse con los demás. Sólo necesitaba de ellos una capa oscura con capucha, para que su rostro no llamase la atención en las calles de la ciudad y menos aún sus ojos.

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16/03/2021, 21:06
Narrador

Y así fue como Akta volvió a salir corriendo hacia un callejón cercano y se perdió de vista de todos. Otra vez.

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16/03/2021, 21:07
Tilla

Akta intentó abrir, pero la puerta estaba cerrada. Lógico. Tocó con sus nudillos sobre la misma imitando el martilleo que le vio hacer a sus anfitriones hacía un rato y tras unos segundos de tensión, la oiwrruse abrió. 

¿Akta? - Preguntó Tilla sorprendida. - ¿Pasa algo?

Notas de juego

Tú misma! Como en tu casa jajaja.