Partida Rol por web

[D&D 3.5] En Busca de Feyrya.

Capítulo 5. El Valle de los Trasgos.

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25/05/2019, 01:05
Belbara

Tras el terrible incidente con el ejército trasgo y los enanos, que no pudieron más que morir, luchando, eso sí, Belbara había pasado días en casi un silencio absoluto. Cuando se le preguntaba respondía con frases cortas, monosílabos si era posible, y si no se le hablaba directamente a ella no parecía interesarse demasiado por participar. 

La mayor parte del tiempo caminaban, recorriendo camino hacia el objetivo. Cuando se detenían solía orar a su dios o consultar el mapa con el ceño fruncido, tan concentrada que casi daba demasiado respeto interrumpirla. 

Ya había pensado que era raro que hubiese tanto trasgo a las afueras del valle de los trasgos, y el no haberse cruzado ni con uno solo de ellos en todos esos días, en los que precisamente cruzaban el valle de los trasgos... bueno, se le hacía como poco curioso.

-Esto es muy raro- Había musitado en más de una ocasión. 

Al fin llegaron a las montañas, la ciudadela que erigió Brook antaño no podía quedar muy lejos. Si las leyendas, los mitos y los textos sagrados no mentían estaban a un golpe de suerte de dar con ella. Esta esperanza pareció producir un cambio en el ánimo de la clériga.

-Estad atentos. Este valle es conocido como el valle de los trasgos, pero hasta ahora no hemos visto ni uno. Algo me hace pensar que si estaban fuera del valle será porque dentro pueda haber algo peor, algo que los haya hecho desplazarse.-  Peores que los trasgos habían muchas cosas, y ninguna de ellas estaba en la lista de las que deseaba cruzarse.

La noche caía y traía un frío helador consigo. Dentro de la montaña la ciudadela podía mantener con facilidad una temperatura estable. Los vientos, la lluvia, el calor o el frío intenso eran una gran molestia. Blebara comprendía por que los enanos preferían vivir entre las rocas, en las entrañas de las montañas.

La niña anzana había demostrado no ser inútil en más de una ocasión. Quizás de todos los anzanos era la que mejor caía a Belbara, al menos por el momento. Por estas cosas tomó muy en serio su gesto y sus palabras, manteniendo el silencio y tratando de agudizar sus sentidos. Si algo se les acercaba era absurdo esconderse ahora, la luz de la hoguera les habría delatado hacía mucho. Lo único a lo que podían aspirar era a no ser cogidos por sorpresa, lo cual ya marcaba una gran diferencia a la hora de sobrevivir o terminar degollado.

 

- Tiradas (1)
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28/05/2019, 11:05
Tarkhan

Tarkhan enarcó una ceja.

—Es posible que la mayor parte de ellos hayan abandonado sus hogares para formar la gigantesca horda que vimos, ¿no crees? —dijo el anzano con deje de amargura irónica en la voz.

Al Gato Sonriente le había gustado lo mismo que a Belbara, Marlas o Thain abandonar a los enanos a su suerte. La sacerdotisa de Brook le había acusado de que había obrado diferente su fueran vidas anzanas las que estuvieran en peligro. Pero Tarkhan llevaba muchos años viviendo en el Kark. Se había convertido en su hogar, y sentía las muertes de los enanos como si fueran compatriotas. 

El mago conjuró cuatro globos de luz dorada haciendo un sencillo gesto con la mano.

—¿Dónde, Yoon? —le preguntó a su aprendiz.

Tarkhan enviaría las esferas de luz en la dirección aproximada que ella le indicara para revelar cualquier acechador escondido.

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28/05/2019, 12:49
Yoon-Shun

La pequeña niña señaló en una dirección. Se trataba de una posición algo más elevado del lugar donde habían montado el campamento y ligeramente hacia el oeste. La niña parecía preocupada y muy convencida de lo que decía.

Por allí... - Dijo muy seria. - Creo que es una persona... - Advirtió.

Enseguida las bolas de fuego se movieron en aquella dirección dirigidas por el anzano. Se trataba de cuatro antorchas que flotaban en el aire emitiendo un tenue resplandor que abarcaba un radio de diez pies. Se movieron rápidas en la dirección en la que Yoon acababa de señalar y mostraron lo evidente. Alguien se estaba alejando del lugar a grandes zancadas, pero de forma sigilosa.

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28/05/2019, 12:56
Narrador

No os habíais percatado hasta ahora, pero en cuatro extrañas luces estaban siguiendo a Alex en su regreso al lugar donde o encontrabais. Se trataba de cuatro antorchas que flotaban en el aire emitiendo un tenue resplandor que abarcaba un radio de diez pies. Sin duda era cosa de magia y aunque parecía que Alex había sido silencioso, se evidenciaba ahora que no lo había sido lo suficiente.

Por suerte, aquellas extrañas antorchas mágicas, no parecían hostiles. Alex miró al grupo con preocupación en el rostro. Fuera como fuera, acababan de hacer contacto con aquella gente. Era momento de tomar una decisión. Escabullir el bulto era otra posibilidad, aunque complicado pasar desapercibidos una vez habían sido descubiertos.

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28/05/2019, 13:12
Valyëvan

-Vaya -exclamé en voz baja, al ver que nos habían descubierto. Obviamente, cuatro personas no debían ser peligrosas, pero nosotros tampoco éramos tantos y habíamos vencido a un grupo de trasgos.

-Quizás no podamos escondernos todos, pero sí algunos. Convendría aprovechar el poco tiempo del que disponemos para que uno o dos se ocultaran, por si los necesitamos, llegado el caso. Eli, deprisa. ¿Por qué no te ocultas detrás de aquellas rocas? ¿Y tú también, Aen? Si nos vemos en problemas, no se esperarán que aparezcáis.

No sabía por qué, pero siempre estaba pensando en que el peligro podía alcanzarnos y en cómo evitarlo. De entrada, para mí cualquiera con quien nos cruzásemos era un enemigo potencial y debíamos tratarlo como tal.

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28/05/2019, 13:17
Eliferum Anjo

Muy bien... - Respondió Elifreum a la proposición de la bárbara. 

Recogió sus armas y se corrió hasta el lugar que Valyëvan le había señalado. Se lanzó al suelo y trató de ocultarse lo mejor que supo tras un montón de rocas. La estrategia no que la vovit quería seguir, le pareció a aquel hombre, algo muy lógico. Si les habían descubierto, por fuerza tendrían que entablar relación con ellos, pero podían guardar alguna carta en la manga. 

- Tiradas (1)
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29/05/2019, 14:59
Belbara

¿Un acechador?

No sabía ninguna forma de detener al intruso sin matarlo o montar estruendo. Pero quizás... Achinó los ojos y susurró algo a Tarkhan -¿No sabréis ningún tuco de magia para dejarle paralizado?

- Después podrían cargar con aquel individuo, atarlo e interrogarle. Dejarle marcha sería un error. Podría avisar a los suyos y causarnos un gran problema

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30/05/2019, 06:24
Aenifer

Las palabras de mi amiga nuevamente fueron sensatas y siguiendo su idea fui a ocultarme de cara opuesta al grupo para que no pudieran flanquearnos.

Con mi arco listo para el ataque espere a ver que eran aquellas luces.

Magia? Hechiceria? Trasgos?

Lo que fuese iba a morir antes que nosotros.

- Tiradas (1)

Notas de juego

Tirada para esconderme.

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30/05/2019, 21:07
Tarkhan

Belbara había achinado los ojos: era el segundo paso para convertirse en una anzana de pleno derecho después de devorar rollitos de primavera con fruicción. No cabía duda de que el camino que había emprendido la enana barbuda no tenía vuelta atrás.

—Sí —respondió a la enana—, pero no lo haré. Eso no era un trasgo. Y en estas tierras perdidas eso significa que es un potencial aliado. No lanzaré un hechizo hostil tan a la ligera.

Se concentró y las esferas de luz se juntaron para tomar la forma de una figura humanoide que caminaba en pos del hombre de zancada veloz.

—Además —abundó Tarkhan—, él nos llevará a sus compañeros. Vamos.

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30/05/2019, 23:09
Belbara

-¿Y como sabes que no es un vovit?- planteó a Tarkhan mientras se agazapaban un poco para seguir a aquel individuo que había dado con el campamento anzano-enano. 

No estaba segura de lo buena idea que podía ser llegar hasta el campamento "enemigo" pero al menos sabrían a qué y a cuántos debían enfrentarse.

-Tienes mucha fe en que sea un aliado- añadió poco después. ¿Era posible que aquel embajador fuese tan inocente? Los enanos habían sido confiados una vez, y aprendieron la lección.

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31/05/2019, 08:08
Narrador

No les dio demasiado tiempo a prepararse. Eliferum y Aenif siguieron las indicaciones dadas por Valyëvan y se escondieron lo mejor que pudieron. No obstante, en el caso del Anjo, lo cierto es que fue de forma bastante deficiente, pues la vovit podía verle hasta por el rabillo del ojo.

No tardó demasiado en aparecer tras la llegada de Álex, un extraño ser de luz. Se trataba de una luminiscencia con forma antropoide que parecía avanzar levitando en la dirección en la que ellos se encontraban.

Jacrow miró a Alex. Alex tragó saliva. No creía haber sido descubierto y en cambio aquello... La mirada del explorador se posó sobre la de la bárbara pelirroja. Si ya de por si le odiaba, ahora que había atraído hasta su posición a un potencial enemigo, no sabía cómo iba a reaccionar.

Y de hecho aquellas miradas entre los tres miembros del grupo que permanecían en la vanguardia, fue lo único ir tuvieron tiempo a hacer antes de que un extraño séquito apareciera tras aquel ser de luz.

A la cabeza avanzaban tres anzanos. Dos hombres y una niña. Aquellos hombres de piel amarilla y ojos entrecerrados, eran enemigos naturales de los vovits, pero era incluso más raro encontrarlos en Harvaka que a los propios vovits. Y tras ellos otros tres hombres de aspecto extraño. Eran muy bajitos, robustos y con abundantes barbas.

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31/05/2019, 08:21
Narrador

El ser luminiscente creado de forma arcana, avanzó simulando caminar al más puro estilo de un elemental de luz. Tras él, los seis supervivientes de la matanza del poblado vovit se prepararon para lo peor.

Belbara no parecía estar demasiado convencida de lo que estaban haciendo. Marlas y Thain iban a sus flancos con las mismas dudas. En cambio el Embajador mostraba su mejor sonrisa felina, al igual que Yoon-shun. Quién también estaba bastante serio era Hithai, que como guardaespaldas de Tarkhan, tampoco veía con muy buenos ojos aquel encuentro.

Tras avanzar tan solo unos pocos pasos se encontraron con tres individuos. Una mujer guerrera de pelo rojo, un hombre con barba de unos cincuenta años, vestido con pieles y con mirada huraña y un joven apuesto con el pelo corto les parecían estar esperando sorprendidos. Los tres eran sin duda vovits.

Además, pudieron apreciar sin demasiada dificultad, como al menos un cuarto individuo se escondía de manera bastante penosa tras unas rocas.

Notas de juego

Ellos solo hablan vovit. Pero Tarkhan puede hablarlo.

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31/05/2019, 09:21
Tarkhan

El Gato Sonriente dedicó a Belbara una sonrisa gatuna.

—Lo de la fe es cosa de los sacerdotes —señaló Tarkhan—, lo mío es puro pragmatismo. Si es un potencial aliado y le lanzo un hechizo hostil, habremos perdido la oportunidad. Si tú tienes razón y no lo es, podríamos provocar una pelea y no estamos en condiciones de combatir. Parafraseando a Sun Wu: la mejor manera de derrotar a un oponente es hacerlo sin pelear. 

Ahora posteo para todos.
 

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31/05/2019, 09:29
Tarkhan

Un hombre sonriente iba detrás del hombre luminoso, a la cabeza de un variopinto grupo formado por dos enanos y una enana (todos ellos con barba), y una niña y un guerrero (todos ellos anzanos). Belbara, o Belbarba para los íntimos, tenía razón en sus sospechas: el campamento era de vovits. Quizá refugiados de la masacre que habían presenciado días atrás. 

El hombre miró de forma desconcertada al hombre que se escondía de forma penosa antes de dirigir su atención a los demás.

—Buena luna —dijo Tarkhan en el idioma de los vovits—. Mi nombre es Tarkhan, y soy embajador del Gran Reino de Anza. Este es mi séquito.

Abarcó al resto de su grupo con un gesto de la mano.

—Es agradable ver rostros no trasgoides en estas tierras desoladas.

Tarkhan dejó de hablar un momento para que los vovits pudieran expresar su desconfianza y su recelo. Con un poco de suerte lo harían con palabras y no desenvainando sus armas.

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31/05/2019, 10:06
Valyëvan

Al ver al grupo, me relajé. Aquella gente no parecía representar una amenaza sino todo lo contrario. Parecían estar huyendo de la guerra o al menos, no la buscaban.

—Buena luna. Mi nombre es Tarkhan, y soy embajador del Gran Reino de Anza. Este es mi séquito.

-Yo te saludo, Tarkhan. Mi nombre Valyëvan de los Eovithe. Estos son Jacrow Geja y Alex Ryder. Estamos de paso y nos disponíamos a descansar y comer algo. ¿Queréis uniros a nosotros?

Me mostré inusualmente diplomática y educada, aprovechando que podía hablar en mi propia lengua. Encontrar por allí a gente pacífica no era habitual, pero lo habíamos conseguido en dos ocasiones y había que aprovecharlo. Un alto en el camino siempre debía ser recibido con los brazos abiertos así que no podíamos dejarlo pasar. No obstante, aún no dije nada sobre Eli o Aen. Según cuál fuese su respuesta, así sería la mía.

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31/05/2019, 10:30
Tarkhan

Tarkhan miró a cada uno de los presentes y les dedicó una sonrisa gatuna según Valyëvan los iba presentando. 

—Es un placer conoceros. Permite que presente al resto de mi comitiva: ellos son  Belbara, Thain, Marlas... —dijo señalando a los tres enanos antes de hacer lo propio con los anzanos—, Hithai y mi aprendiza, Yoon-Shun.

Tras las presentaciones, amplió su sonrisa, notando que no había presentado al tipo de escasas habilidades para el subterfugio. Si aquel hombre estaba escondido, podía haber más vovits en la oscuridad. 

—Nos encantará compartir fuego, comida y nuevas, pero estaríamos más cómodos si nos presentaras antes al resto de tus amigos.  

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31/05/2019, 11:08
Valyëvan

El placer es mío -respondí tras sus presentaciones, y a ver que descubrían a Eli, sonreí, divertida. Las capacidades para ocultarse de mis compañeros no eran muy buenas al final.

-Desde luego. ¡Podéis salid! ¡No creo que haya peligro! -les grité.

Cuando estuvieron fuera, los presenté.

Ellos son Eliferum Anjo y Aenifer. Yo fui quien sugerí que se ocultasen hasta ver de quién se trataba, con no demasiado éxito, por lo visto. Pero es mejor así. De esta forma, podremos sentarnos todos en paz a comer algo y hablar -le dije, sin apartar la vista de él ni dejar de sonreír. No iba a disculparme por ser precavida.

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31/05/2019, 11:29
Eliferum Anjo

Un hombre ya anciano pero que se conservaba en forma se puso en pie esgrimiendo una sonrisa y dejando atrás su escondite. Se rascó la cabeza de forma nerviosa, era evidente que no le había gustado que le descubrieran tan rápido. En ese momento se vio con facilidad gracias a la luz que irradiaba el elemental, que a aquel hombre le faltaba una mano, la izquierda. - Si... Ese soy yo. - Dijo aquel hombre de voz profunda. - Eliferum Anjo. Eli para los amigos. Del linaje Anjo, reyes ancestrales de la ciudad de Dunsaroc y de toda Jasania. - Ofreció su muñón zurdo al sonriente anzano. En ese mismo instante retiro el brazo. - ¡Oh, perdón! - Soltó una risotada. - ¡Mejor la otra! - Y alargó la diestra.

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31/05/2019, 11:40
Valyëvan
Sólo para el director

Notas de juego

¿Te has confundido tú mismo jajajaja?

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31/05/2019, 11:42
Director

Notas de juego

Un toque de humor jajaja. Pronto te darás cuenta del rollo que nos llevamos Tali (Tarkhan) y yo ..