Partida Rol por web

Cháchara y más cháchara, solo para dejar claros unos y otros que no nos gustamos y que nadie quiere mojarse porque saben que el resto van a mandarlo a tomar por culo a la menor insinuación de mando. Me mantengo callada, algo apartada, dejando que mis compañeras y los nuevos se lancen puyas... otro más que visto lance antes de que todos nos fiemos de todos lo justo para darnos la espalda unos segundos mientras matamos a alguien.

Solo la chica nueva, la tal Teela, ha dicho algo sensato. Dejar claro para que servimos cada uno de los presentes. Sin ese conocimiento hacer un plan mínimamente serio es una idiotez... a punto estoy de contestar cuando llega otro más, el que parece el hombre de confianza de Teela a juzgar por sus palabras y gestos... y Rusty. (¿Acaso no se va a morir de una puñetera vez ese capullo? Está más jodido de lo que parece, que no es poco, y pese a todo quiere venir... ¿a qué?¿a hacer de diana?)

Por no mencionar que Isaias ha decidido presentarse como candidato para el liderato (¿Que preparaba la protección de caravanas en el yermo? Perfecto ¿Nos vamos de acampada otra vez a cazar monstruos? )

Si no puedes andar, y correr, no nos sirves Rusty. Dudo que ninguno vaya a hacer de niñera, y aunque me encantaría ver como te vuelan las pelotas eso solo nos pondrá al resto al descubierto- escupo las palabras, tajante.

Tengo claro que no voy a jugarme el culo por un lisiado que prefiere morir empuñando un arma en mitad de un asalto casi suicida que en la cama ahogado en sus propios fluidos

Yo soy buena infiltrándome. Puedo pasar sin ser vista por la mayoría de sitios- me guardo el resto; si son mínimamente observadores verán que tanto los cuchillos como la pistola no están carentes de muescas. Aquí todos sabemos matar, de un modo u otro, o eso se supone.... tal vez nuestra curandera no sea muy diestra en ese campo, pero sabe lo que hace con un botiquín en las manos y no ha demostrado miedo en las alcantarillas. A mi me sirve.

Me coloco junto a Dante, dándole una palmada en el antebrazo asintiendo ante sus palabras. Parece que al menos uno de los presentes se lo va a pasar en grande usando sus juguetes...

Bien, bien, bien... poco a poco iba consiguiendo cosas.

Recapitulando.

Tengo por un lado, el equipo de las lesbis, Teela y su devoción por el tipo que se cree más guay que nadie, y aclaro para que no quede duda, que es el tal Shawn, ya que una cosa es creérselo y otra muy diferente serlo. Pero no me quiero desviar, sigo, la asesina siniestra y "El Organizador", me ha molado la forma de expresarlo, se queda con ese nombre, por lo menos en mi cabeza, y eso unido a la información que nos da el medio fiambre, pues es mucho más de lo que sabíamos hace diez minutos.

Este tanto me lo apunto, claro que sí.

Yo soy bueno tocando las pelotas al personal respondí mirando a Teela, yo, por supuesto, no tengo "La Sonrisa" de el tal Shawn, que va, ni de lejos, tal vez si me afeitara, me bañara y pudiera ponerme algo decente podría pasar por un tío guapo, pero entonces no me querrían por mi personalidad o por lo menos eso dicen mis dos amigos, aunque aclaro que dicen que merece la pena aguantarme un poquito de expresión inocente... y puedo hacer un poco de todo, ya sabéis mi mirada se desvió con toda la intencionalidad a Ligeia y la doctora puedo cubrir cualquier hueco que se necesite coño, se había quedado mi botella, suerte que he vuelto a mirarlas, bueno, era obvio que iba a hacerlo. Por supuesto me acerco a recuperarla, si es que das la mano y te toman el brazo.

La estrategia la dejaba en manos del organizador, no vaya a ser que resulte más listo que yo y quede fatal.

Con permiso.

Me metí un poco entre medias de las dos para recuperar el regalo de Roland, aunque lo hice de manera rápida, que no sabía si me daba más miedo el bate o la jeringuilla. 

Kiabi seguía a lo suyo, en concreto con la pierna izquierda, cuya zona exterior estaba algo más chamuscada que la derecha, sudaba levemente debido al dolor y a la concentración. Estaba escuchando lo justo, por encima, pues las terminaciones nerviosas de su pierna todavía no se habían adormecido dulcemente y con el estruendo no la dejaban concentrarse del todo.

Alcanzó a escuchar que la única mujer que no conocía seguiría incondicionalmente, a donde la llevasen, los gordos cojones de un hombre, se mordió el labio inferior y se resignó como mil millones de veces más anteriores, por supuesto cabreada.... había tantas cosas que no le entraban en la cabeza del jodido mundo en el que vivían, que menos mal que tenía un aguante considerable, producto de la puteante vida de mierda que había llevado. Porque que a esas alturas las mujeres sigamos siendo tan idiotas para según que cosas es para enervarse, y mucho.

Mejor vuelve a lo que te incumbe.

Giró el rostro sorprendida cuando el capullo estúpido ese volvió a escena, coño, mérito tenía, tendría que hablar después con la médico para saber que le habían hecho, que tenía que ser la hostia de buena la técnica empleada y se moría por conocerla.

Ya que miraba hacía fuera comprobó como un tipo se acercaba alegremente hacía ellas, envarándose todas sus células, pero al escuchar el inesperado piropo del guaperas no pudo evitar sonreír como no lo hacía en años. Se ve que no todos los hombres son TAN capullos y que los de grado menor se pueden hasta tolerar.

Siguió, tras vendarse la pierna comenzó con la otra, de manera menos dolorosa porque ahí la anestesia sí estaba ya haciendo de las suyas. Justo iba a volver a beber, falta que le hacía, cuando comprobó que “el batallitas” volvía a por su bebida -vaaaaale, de manera educada- , pero con un rápido movimiento la cogió antes que él y bebió, despacito, recreándose un pelín, y entonces la soltó en las manos del tipo mientras exalaba aire. Le asintió con gesto más relajado del que se merecía, a modo de reconocimiento, era suya, se la había prestado, ea, ya se la podía llevar de nuevo, así que ya por fin la soltó.

Curo -señaló a Ligeia y después a sí misma con ambas manos, encogiéndose de hombros mientras sonreía levemente, a esas alturas quien no lo supiese bien podía quedarse sin ir a la excursión por ser demasiado cortito-, si me dais un fusil puedo cumplir un poco de francotiradora y bueno, también reparto bien en el cuerpo a cuerpo. Soy Leia.

Sorprendente. Había dicho las cosas que había aprendido durante su vida, lo cual evidenciaba sus puntos flacos, a unos desconocidos y aunque le había costado esfuerzo, según las personas de la reunión que le caían bien pues no le había costado tanto como esperaba. Confiar era una palabra que no estaba en su vocabulario desde hacía demasiado. Había sido algo complicado, pero se reconoció que realmente era agradable recuperarla, por lo menos un poquito, de momento.

Te toca.... se puso a arreglar la pierna derecha.

Observé divertido la entrada de todos y su lamentable estado. Lo de Rusty era una pena. Su aspecto dejaba claro lo que nos corroboró la siempre diplomática Andriel. Pero además ahora había un montón de caras nuevas. No pude evitar fijarme en una de las nuevas. Llevaba el culo destrozado… Una pena!!! Tenía pinta de estar bien puesto… Pero el palo que llevaba al lado dejaba claro que no era de las que agradecían los cumplidos. Mejor!!! Eso nos daba más oportunidades de conseguir llevar a cabo la misión sin despistes innecesarios. No obstante, había que reconocer que estaba bastante bien.

Sonreí a Isaías asintiendo antes de ir a ver al pobre doctor. Sus palabras decían una gran verdad. Podía ser un engreído pero de dirigir el cotarro sería uno de los pocos en los que confiaría. Aún así me mantuve callado, solo asintiendo ligeramente a sus palabras. Luego comenzamos a alejarnos, no sin fijarme en como la nueva doctora se movía con soltura dejando la herida cerrada y con bastante buena pinta. Esta se interesó por mi:

- Soy yo… - dije levantando dos dedos que me llevé a la frente a modo de saludo. – Buen trabajo!!! – Añadí escuetamente

La disputa sobre quien debía de ser el líder fue divagando hasta que Shane estalló. Al parecer estaba agobiado con ese tema.

- Primero… El francotirador siempre está ahí. No deja a sus colaboradores. Segundo… Si tanto te preocupa el orden se tu el líder. Aunque si de mi dependiese, elegiría al aquí presente – añadí señalando a Isaías…. – Puede parecer un capullo, pero sabe escoger bien… Por norma general!!!

Las acusaciones se cruzaron y al final fue Ligeia la que puso un poco de orden simplemente reclamando información de nuestro objetivo. Buena chica!!! Desviando la atención a lo que realmente importa!!! Una forma sencilla de despistar y hacer que todos nos centráramos. Afortunadamente Isaias aceptó de forma velada mi afirmación aunque no tenía la aprobación de todos casi seguro…

Un revuelo en un extremo me hizo mirar y vimos aparecer a un jodido Rusty. Sus heridas eran graves y lo que parecía una enfermera intentaba en vano llevarlo de nuevo a la camilla, pero aquel bastardo estaba decidido a hacer lo que le viniese de los huevos. Al parecer el cabrón se las ha ingeniado para sacar información de nuestro objetivo. Los datos no son halagüeños. A lo inexpugnables que eran las granjas, había que añadir los efectivos, por no hablar de los vehículos que hacían las rutas.

Roland, habló entonces sobre el tema de los explosivos. Llamó mi atención el comentario de que habían jodido a Hannibal hacia poco. ¿Acaso aquellos bastardos eran los que nos habían jodido en la ciudad? Intentaría sacar información de ese tema. Dante estaba dispuesto a hacer las minas si se las dejaban manipular. Al parecer, una especie de plan estaba tomando forma.

- Solo un detalle sin importancia… Supongamos que destruimos la patrulla. Perfecto!!! Pero sino llegan a su hora pondrán en aviso a las granjas. Por otro lado, podrían ser la única forma de introducirnos en las granjas. – dejé la idea en el aire mirando con aire crítico los papeles de Rusty y escuchando algunos de los comentarios… - Por cierto!!! Por si no quedó claro!!! – dije poniendo mi fusil con mira telescópica sobre la mesa… - Yo soy francotirador. Puedo errar un disparo… - ”Aunque es muy raro” pensé para mi mismo, - Pero no dos. Y no dejo atrás a nadie que no se lo merezca. – Dije mirando a los presentes por si alguno dudaba de mis palabras…. - Si estamos en esto todos, saldremos todos, a no ser que te hayan matado.

Debía haber pensado dos veces antes de tomar agua al ver a Shawn acercarse, porque en cuanto el pelirrojo le susurró algo al oído, su mirada se desvía a él y antes de que pueda tragar, el sádico hombre le suelta algo más que le hace escupir todo - ¡¿Pero qué coño dices?! - se queja, para luego mirar al resto algo avergonzada por interrumpir - Joder, lo siento. Sigan, sigan - dice comprometiéndose a no volver a dar la nota así. Aunque no ha rechazado el que Shawn la abrace por la cintura, tampoco parece darle mayor importancia más allá de un fuerte codazo que cualquiera podría apostar que de estar frente a él, habría sido una vigorosa patada en los testículos. 

Pues mira, igual tenemos de todo un poco. Así da gusto trabajar. - sonríe satisfecha con las respuestas, adivinando que lo que hiciera la chica de pelo azul involucraría una cantidad titánica de cojones a juzgar por su apariencia y actitud. Eso aparte de su descripción de funciones de antes, claro. Nada, nada, pero nada mal. - A mi me agrada tener a ese puto desquiciado de líder, igual me anoto. ¿Tú que dices? - pregunta a Shawn, ya habiendo superado el momento de odio y dolor por codazo. - Como que va en nuestra línea, ¿no? - sonríe, divertida. 

La ducha que casi me regala Tee me hace reirme con ganas, incluso ese codazo agresivo que se cuela en mis costllas y me hace doblarme levemente es mas un regalo que un castigo, solo por verla de esa forma. La risa parece no acabar nunca y cuando lo hace, se convierte en una sonrisa que dice mucho de mi humor. Me encojo de hombros mientras ella se disculpa. - Luego quiere hablar contigo. - Lo suelto sin mas, justo cuando me pregunta ella a mi sobre que me parece la idea, a sabiendas de que volvera a pillarla a contrapie.

Me giro hacia los demas tras dejar mi mirada clavada en la dulce Tee durante unos segundos, la paseo por ellos hasta dar con eld esquicidado del sombrero. - Por mi no hay problema, he estado bajo mandos peores de eso seguro. - La sonrisa se ensancha, podria parecer un ataque o insulto pero por la cara que tengo tengo mas pinta de broma suicida que otra cosa. Tras eso miro a Dante. - Los principios basicos no se me dan bien, pero si tu puedes sintetizarlos, yo monto lo que quieras siempre y cuando esperes que haga un gran BUMB.

Alargo la mano para pillar algo de carne y le doy un buen mordisco. - Aparte de eso, yo me apunto, coño hacia mucho que no me pintaban una juerga tan buena. Mucha potencia de fuego de eso no cabe duda, pero si como dice. - Señala a Oscar. - Las patrullas entran dentro de las granjas, es una opcion tan valida como otra cualquiera, pero no nos ayudara volar los vehiculos.

Miro al que parece que sera designado lider de esta banda, grupo, banco o manada... vete tu a saber como quieren llamarlo, a la espera de que diga algo.

Una vez terminadas las curas, me vuelvo a acercar a ti. La nueva parece estar centrada en lo suyo, asi que mi cuerpo ya no molesta, pegandose de nuevo contra ti. Notando ese vendaje que dudo que aguante mucho una vez decida poseerte, o tu decidas que es hora de gritar a los cuatro vientos, mientras te embisto con fuerza. No, no aguantara, ambos lo sabemos. Disfruto de tu olor, de tu sudor, de tu adrenalina de hace un rato, casi estoy a punto de sacar la lengua y pasearla por tu cuello sin importarme quien mire. Hablan demasiado, hablan y hablan como cotorras. Entiendo porque, se que es lo mejor pero no por ello me gusta mas.

La adrenalina del combate ha bajado y eso me cabrea. Notar tu cuerpo tan cerca tras el combate solo hace que mi cuerpo quiera algo y sea abrirte en canal. Literalmente. Se que lo notas, lo notas en mi pantalon pegado a ti, en mi respiracion y probablemente simplemente porque me conoces demasiado bien. Mi voz grave, susurrante, atraviesa tu pelo para hacer su camino hasta tu oido. - Me aburro... - Una frase con muy mal significado viniendo de mi. Odio aburrirme.

Isasias se perfilaba como líder. Por mi parte ni bien ni mal, no conocía a aquel tipo ni había visto de que pie cojeaba... todo sería darle una oportunidad aunque eso podía significar que nos mandara a una muerte segura. Torcí el gesto ante aquella idea. Jamás me había dejado guiar, siempre había actuado en solitario y por eso seguía viva. Alguien con mis habilidades que espera seguir al pie de la letra lo dicho acaba en el hoyo tarde o temprano; siempre toca improvisar

Miro al resto. Está claro que no elegirán a ninguno de nuestro grupo como líder, tal vez si Rusty fuera más carismático y no tuviera un pie en la tumba ... pero no. Era evidente que el que manejara el asunto saldría de entre ellos... Oscar no era un líder, le gustaba ser manejado, se sentía cómodo con eso. Teela era uno con el sonrisas, lo que dejaba claro que tampoco era una líder. Shane, ni por asomo me fiaría de él para ser líder, me habría opuesto por completo solo por esa actitud que tenía.

Supongo que solo quedaba Isaias

Habrá que fiarse de Isaias- dije resignada

Entonces se empezaba a perfilar algo parecido a un plan; escuché y observé la actitud de los presentes. Todos parecían tener los huevos pegados a la barbilla

No hace falta ser tan radical... volar un coche sin duda atraerá curiosos. Dejemos que notifiquen que está todo en orden, que inicien el regreso y los matamos... joder, tenemos un francotirador para algo. Solo hace falta darle un puñetero objetivo. Que mate al conductor... yo me puedo ofrecer de cebo ¿una mujer, semidesnuda, tirada en un lado de la carretera? Seguro que paran a ver que ha pasado. Cuando estén cerca que Oscar se cargue el puto conductor, al resto los reventáis a disparos y yo me encargo de tomar un rehén que nos diga como funciona el tema allí dentro... fácil- dije irónicamente perfilando detalles que veía claves

Pese a que no me gustaba guiar a nadie todos soltaban ideas sueltas sin hilar. No se podía actuar a lo loco o nos joderían en cuanto asomáramos el culo por esas granjas

Estas ahi, curando tus propias heridas, con la gasa a medio poner y la piel ya cubierta por esa crema gelatinosa para las quemaduras, cuando algo llama tu atencion. Aun con media oreja puesta en lo que dicen todos estos, sus fuertes voces y el ruido del lugar en general, una voz, un acento que crees recordar de algun sitio atraviesa tu cerebro como un Gong!

Levantas levemente la mirada,extrañada y por algun motivo que no entiendes hasta contenta. No porque tu lo decidas, ha sido mas como una reaccion directa de tu cuerpo a algo que le recuerda mejores momentos. Ni siquiera has podido evitarlo. Te centras, miras a tu alrededor. Los segundos pasan sin que nada vuelva a hacerte sentir de esa forma. Supones que ha sido una mala jugada de tu cabeza cuando de nuevo esa voz atraviesa la algarabia circundante, llegando hasta ti y diciendote que la conoces. Que esa voz te es conocida y por algun motivo no es para algo malo, lo cual ya de por si es raro. Tus ojos se dirigen hacia el lugar de donde proviene la voz y durante apenas un instante, eres capaz de ver un pelo entre rubio y castaño, completamente despeinado que te es extrañamente familiar.

Terminar de curarse fue coser y cantar, por no dolerle nada en absoluto, esa cadera estaba en mejor estado y bueno, se juntaba con que no había bebido mucho durante su vida - de esclava tienes suerte si comes frecuentemente- y el brebaje de shane estaba fuerte de cojones y para rematar estómago vacío, como bien gritaban sus tripas.
Así que, con vendajes colocados y estado de ánimo endulzado por la bebida, se dirigió a la zona de la comida, preparándose un plato con abundante carne y algo de verdura y fruta. Casi rebosaba.
Seguía escuchando cuando volvió a la esquina con su plato, aunque su concentración se centraba en alimentarse de manera nornal y en no engullir copiosamente, como le pedía su estómago, tan falto de todo durante tantísimo tiempo.
No tenía claros sus próximos pasos, y una voz cercana la confundió todavia más. Se levantó mirando a todos lados, confusa y visiblemente inquieta... unas palabras que la llevaron a recordar la risa posterior que siempre las acompañaba, grabada a fuego.
No-puede-ser.
Se acercó a la salida, con el plato en sus manos, cuando vio los pelos claros alborotados casi se puso a temblar.
Nunca había valorado tanto la libertad de poder hacer lo q le saliera del mismísimo coño como en aquel momento.
Voy a lavarme y eso... luego me decís el plan definitivo. .. y ya veo si me uno.
Salió por la puerta en dirección a dos hombres que pasaban por fuera de los paneles. Se esforzó en que no le temblara la voz.
¡Ey, vosotros! - siguió avanzando, pues estaban algo lejos -¿me podéis decir dónde es la zona de lavarse? - intentaba estar tranquila y mirando hacia los dos por igual, con expresión neutra.
Difícil pero no imposible.

Ya hay algo parecido a un plan, ese era el objetivo principal, y encima con la elección de un líder para intentar conseguir una mejor organización.

Casi me había asustado la intervención de Oscar, con su orgullito de francontiradorcito orgullo, pobre, claro que decírselo en voz alta sería contraproducente, así que le miro y asiento con solemnidad. Se me da bien fingir, tuve muchos años de entrenamiento y ahora me sale creíble.

Yo también estoy de acuerdo con que Isaías nos coordine.

Si, hasta el tono de voz estaba perfectamente conseguido, ligeramente más grave, apoyado en un trago de la botella que la morena me ha devuelto, a veces me gustaría poder tener un espejo cuando hago estas cosas, así podría perfeccionarlo, darle un toque más personal, pero bueno, es lo que hay.

Si yo fuera de patrulla, no pararía miré a Andriel, con una sonrisa un poco burlona, pero la realidad es que en los tiempos en los que patrullaba, no solía detenerme prácticamente con nada y si llegara a plantearme parar, antes avisaría de situación y posible encuentro hostil la miré con una sonrisa que en nada se parecía a la de Shawn, cada uno tenía sus cualidades pero me ha gustado como ha sonado eso de semidesnuda, creo que es un buen plan, sólo hay que pulirlo un poco si, ya sé que ese es uno de esos en los que debería dejar de hablar, así que aproveché la oportuna intervención de la matasanos para seguirla.

Yo te indicaré

Escabullirse siempre era una buena opción, no conocía lo suficiente a Andriel, pero tenía pinta de ser jodidamente peligrosa.

Llevo ya unos cuantos días aquí y al principio es un puto laberinto, con el riesgo de entrar en la puerta equivocada... el segundo día entre y vi a dos tipos que estaban... negué con la cabeza no, todavía no me has hecho nada malo para que te amargue el día señalé el pasillo de la derecha. 

Enarqué una ceja ante el comentario machista de Shane, notando como me ponía rígida por la insinuación. Me relajé y, como quien hace algo por pura casualidad, apoyé una mano en el largo mango del cuchillo

Si tanto te gusta la idea... ¿por qué no vienes a intentarlo, machote?

Ya lo tenía claro, no soportaba a aquel tipo. Otro imbécil como Rusty que creía que podía manejar a las mujeres a su antojo; al calvorotas solo le había salvado quedarse sin su hombría que la situación era desesperada y lo necesitábamos para librarnos de los malditos comehombres... pero a este, aquí, lo despacharía gustosa solo por quitar de enmedio a un idiota machista.

Dudaba que alguno de los presentes lo echara en falta, dada su actitud

Tras el arrebato, si no ocurría nada nuevo, me acercaría a comer alguna cosa ligera pero que alimentara. Nunca me había gustado la sensación de saciedad y de tener el estómago a punto de reventar, mucho menos antes de una misión. Aquella no sería la excepción

Estaba conversando con un compañero cuando una voz nos hizo pararnos a los dos. Alli en uno de los pasillos centrales, donde gracias a la hora que era no habia mucha gente ahora mismo, una mujer bastante guapa y con unos vendajes que daban fe de unas heridas, sin duda interesantes, se acerco a nosotros. Por sus pintas sin duda no era de por aqui y con la de rumores que habia sobre los nuevos, no era dificil acertar que era de ese grupo, de la panda de cafres que habian salido de las alcantarillas y que ahora estaba reunidos con Roland. Me di la vuelta para recibirla, era lo minimo cuando una mujer guapa se acerca a preguntar algo.

En cuanto estuvo cerca, el olor de su persona golpeo de frente, no pude evitar que mis ojos se abrieran ligeramente al notarlo, pero poco mas demostre. Yo tambien habia tenido mis viajes alli abajo y uno nunca llegaba a quitarse ese asqueroso olor. Su pregunta era la mas obvia, dadas las circunstancias, aunque dudaba que se fuera sin mas el olor. - Hola. - La sonrisa que mostraba dejaba a las calras que no habias interrumpido nada y que tenias toda mi atencion. Asenti levemente. - Si claro. -  Señalo al fondo, pero de pronto cambio de idea y le hago una señal a mi colega para que siga su camino, antes de hacerte un gesto apra que vayamos juntos. Estoy a punto de ponerme a hablar cuando de pronto me interrumpe alguien que es conocido para mi. - Shane. - El tono no tiene nada, solamente reconocimiento por saber quien eres y poco mas. - ¿Os conoceis? - La verdad no tenia nada en contra de que fuera él mismo quien la llevara a dar una vuelta, yo solo intentaba ser amable y averiguar algunas cosas sobre las alcantarillas. Tenia que volver a Parody y si alguien habia allanado el camino, mejor que mejor.

Clave mi mriada en la mujer, aun con toda la porqueria que tendria que frotar con ganas. habia algo en ella que me llamaba la atencion. Aun asi no iba a lanzarme sin mas a preguntar de que coño venia ese deja vu.

No podía, aunque lo intentaba: Mirarlos por igual, pero estaba tan hiper contenta que no podía evitar sonreír más hacía Pratt, pues en cuanto lo tuvo en frente supo que no se había equivocado y que era su amigo de toda la vida: el pelo lo llevaba un poco más largo ahora -se le habrá pasado la obsesión de ir rapado- y aunque pareciera imposible habrá crecido otro poco. Lo de la barbita para ligar también era diferente pero lo que no había cambiado ni siquiera un ápice eran sus ojos, por lo que Kiabi no dudaba.
No podía creer su suerte al comprobar que se iban a quedar solos porque la pensaba acompañar, su corazón comenzó a latir con fuerza al pensar en confesarle quien era, casi tenía miedo de que todos en el refugio escucharan la fuerza de sus latidos....
Y entonces llegó Shane.
Lo miró por el rabillo del ojo, mientras empezaba a cargarse su coartada, reprimiendo las ganas de estrangularlo. Apretó los dientes y se esforzó en parecer atenta -Ajá... -me cago en mi estampa que oportuno es el colega- pues estaba siendo hasta amable, pero era como si le estuviese pegando una patada en el estómago. Después contestó a Pratt:
Bueno, sí, nos hemos conocido hace un rato.
Madre mía, ¿cuantas collejas mías se habrá llevado?... Las mismas que le daría ahora al otro sin pararme a respirar.
Parpadeó mirándolo, hacia tres años que no sabía nada de él, y casi no contaba, un escueto "está bien" es una mierda, por muy buena noticia que sea.
Yo soy Leia, he llegado hace nada - El reencuentro habría sido bastante más bonito si ahora mismo hubiese dicho Kiabi, pero bueno, lo que me voy a reír luego echándole en cara que no me reconoce, ¿será por el pelo recogido? ¿la altura? ¿por la capita asquerosa que me cubre?..... joder ¿me he hecho demasiado vieja o qué?
¿Tú llevas mucho tiempo por aquí? ¿Podrías ayudarme a situarme un poco? -mordió su labio inferior, con expresión insegura, aunque no por lo que ellos supondrían- Sólo será un rato, cuando puedas, es que tengo algunas preguntas....

La gente pasó de mí como del culo. Eso ya me iba bien, a fin de cuentas me ofrecí como posible candidato para que saltase otro de ellos negando la posibilidad y que eligieran a otro. Por eso y porque prefería que, si tenía que morir, al menos hacerlo a mi manera.

Pero luego el capullo de Óscar me apoyó, Alek y Chris también, claro; y después quien más quien menos lo dio como válido. Pues vaya mierda. A fin de cuentas Andriel ya estaba discutiendo una idea, podría pasarle a ella la papeleta.

Quizá eso no quedaba demasiado bien ahora. Si estás acelerando, no sueltes el pedal. Esa es mi filosofía.

Saludé a Rusty con un cabeceo de cabeza. El tipo estaba en pie, con dos pares de huevos, y dado el buen rollo que habíamos tenido, si le decía algo seguro que me enviaba a la mierda. Una cosa era que estuviese moribundo y la otra con ganas de repartir hostias. Así que asomé la nariz entre el grupillo y escuché sus explicaciones mientras observaba el mapa. Me hice una aproximación clara del asunto; era rematadamente jodido pero no imposible. En particular para una banda de gilipollas dispuestos a palmarla alegremente.

Shane seguía con su particular estilo de soy el mejor de los capullos y te lo voy a demostrar. Allá él. Esperaba que al menos fuese bueno en lo suyo. Él y todos los que no conocía. Lo di por hecho: habían sobrevivido a los hijos de puta que subsistían en las alcantarillas.

Me senté, saqué mis armas para revisarlas y limpiarlas de la jodida arena. Carraspeé. Si era el organizador, líder, o idiota número uno, debería dar mi opinión.

-Son cincuenta tipos al menos, repartidos en dos granjas. Cinco a uno. No podemos enfrentarnos a ellos con solo fuego y pelotas. Lo primero hay que revisar las instalaciones nosotros mismos, eso es fundamental a parte de la información de Rusty. Tenemos que comprobar cuanto les ha jodido la puta tormenta. Tal vez esa cabrona nos ha echado una mano.

Empecé a desmontar el rifle.

-Lo veo así. Hay que colarse de noche, y cargarnos a los amarillos mientras duermen. Los que podamos. Una puta masacre. Si ellos son duros, nosotros seremos tres veces más hijos de puta. Sin embargo no me convence. Pienso en otra opción.

Joder con la arena. El fusil estaba peor que yo. Miré a mi anfitrión.

-Seguro que los amarillos reciben un camión con suministros. Agua, comida, medicinas, reemplazos. Y seguro que Roland tiene aquí las mierdas suficientes para fabricar algún veneno de efecto retardado. La cosa es esta: Pillamos el vehículo de suministros, antes de que conecte con las patrullas, envenenamos el agua. Roland se lo devuelve, al fin y al cabo se quiere llevar bien con los chinos; un acto de buena voluntad. Con suerte la mitad de los amarillos revientan. Saldrán a por Roland y a avisar a sus colegas de Parody. Dos grupos entran, otro, con la ayuda de Roland se ventila a los motorizados. Y los francotiradores que vayan limpiando las atalayas de ratas. además, vamos a contar con explosivos. No será fácil. Bueno, ya lo sabíamos..

Ya tenía medio fusil destripado y la mesa llena de arena.

-Y dejad de discutir y de chorradas de una puta vez. Ha sido divertido, pero ya está bien. Aquí todos nos jugamos el cuello, cada uno por sus putas razones. Todos sabemos lo que hacemos, somos buenos en lo nuestro. La zorra de Moxxy no es idiota. Y vamos a depender los unos de los otros. El que se cague o quiera jodernos se quedará en el yermo. Con un tiro de los chinos o una bala nuestra. .

Era evidente que prefería la compañía del otro tipo, y eso que le había pasado la botella, y es que las buena educación se está perdiendo, siempre lo digo, cada vez que me siento a tomar una copa con Nigel le pongo ejemplos, y no tiene más remedio que darme la razón. Por suerte la época en que me molestaba por esas cosas quedó atrás, estoy por encima de las gilipolleces, sino no podría vivir con calma.

Os dejo, y recuerda en tener cuidado con la puerta que abres.

Esa era una advertencia seria, puede que pareciera que hablara en broma, pero no era el caso.

Le dediqué un saludo al tipo que me conocía, aunque yo no tenía ni puta idea de quien era, seguramente porque era insulso y anodino, no como yo, que todo el mundo me recordaba al conocerme, pero oye, tiene que haber de todo en este mundo, sino no podríamos destacar.

No iba a volver a la reunión, ya había conseguido resolver el principal problema del grupo, así que luego sólo tendría que recibir instrucciones sobre lo que hacer, siempre y cuando fueran órdenes sensatas por supuesto. Un poco de descanso vendría bien, es cierto que llevaba unos días de relativa relajación, pero el descanso acompañado de una buena botella nunca está de más, hay que estar preparado.

Tengo algunos lugares favoritos en este sitio, así que me dirijo a uno de ellos, soy un tío sociable, pero a veces tengo que estar solo y recargar las pilas para aguantar al resto del mundo, aunque, ¿qué haría yo sin el resto del mundo? No deja de tener su gracia.  

Me dice su nombre mientras Shane decide pirarse, le miro al escuchar sus palabras sin tener muy claro a que se refiere. ¿Queria ligarsela? ¿De eso iba todo? Aun asi al ver como se larga decido hacer caso omiso de el, todos sabemos que cuando decide abrir la boca dice mas chorradas que la gente normal, aunque tambien se le da mejor matar que a la gente normal, asi que solo por eso es suficiente para aguantarle.

Alargo mi mano sin importarme que la tuya este llena de sangre y porqueria. - Pratt. - Sus ultimas palabras me arrancan una sonrisa. - Si, no te preocupes los rumores circulan rapido por aqui dentro. Venis de las alcantarillas y les habeis dado algo en lo que pensar a esos cabrones de ahi abajo. Solo eso ya merece un buen trago a vuestra salud. - No hay ironia en sus palabras, realmente parece estar invitandote a un trago mas tarde por el hecho de haber limpiado algo la mierda de ahi abajo. Tampoco notas ningun tipo de interes en otra direccion, al menos no que tu reconozcas.

Me paso la mano por el pelo, despeinandolo aun mas mientras miro a mi alrededor. - Si, llevo algun tiempo. Yendo y viniendo pero se puede decir que llevo casi dos años aqui. Trabajo principalmente fuera pero siempre acabo volviendo. Roland sera muchas cosas pero si cumples, el tambien lo hace. -  No tengo ningun problema en decir las cosas como son, evitando la mayoria de exabruptos que la gente prefiere usar. Tengo buena relacion con el jefe, y decir la verdad nunca le ha costado nada a nadie en este lugar. - Si, claro... - Mira en la direccion que se ha ido su colega pero rapidamente se arrepiente. - Ningun problema, acabo de terminar mi turno. Asi que estoy libre. - Te sonrio amigablemente mientras hago un gesto con la mano para avanzar. - Dispara.