Partida Rol por web

La del Peine es una de las "posadas secretas" más discretas de Madrid. Sita en la calle del Vicario Viejo, tiene fama de sucia, pero quien deposita buen dinero en las manos del posadero, no tiene nada que envidiar a los lugares más conocidos de la Villa.

Salís de Maese Pedro y al cabo de unos minutos de caminar por las sucias calles, veis el edificio de la posada. Cuando os identificáis, os hacen pasar pasar a una estancia limpia y bastante bien aposentada, con sillas para que os acomodéis. Al cabo de un rato llega un criado que viste la librea del conde, acompañado de otros dos que portan una arqueta con ropajes. Toman las medidas a Jorge, y escogen tres o cuatro conjuntos de ropa cortesana, indicándole que se los puede probar en la cámara adjunta.

Pedro espera la contestación del pater , pero si algo sabe el confesor por confesión nada vana obtener . Alicio , tendremos que abrir los ojos , si ese joven sale así a la calle va a buscar que lo pinchen , intentaremos dejar uno respirando para poder sacar tajada de él . Dice Pedro con guasa para que sus nervios se calmen un tanto .

Alicio le devuelve la mirada, seria, al despistado soldado.  Asiente, mientras le muestra la senda pistola, debajo de la capa.

Las ropas habían llegado, y ahora Jorge debía probárselas, y ver como debía efectuar su mascarada particular del modo más eficiente, cuando conveniera. Las palabras de Alicio le hicieron parpadear, y respondió con un dedo apoyado en la papada.

-El mentado confesor, algo sabe. Y según el que nos paga, quizá sea secreto de confesión. Se tratar con eclesiásticos, y como tirarles de la lengua. Si hay oro por medio, o alguna merced o servicio, podría hablar. También se le puede engañar, que para eso vuestras mercedes tienen más pericia que un servidor.

Al escuchar la parte del engaño, Alicio despega la mirada del dómine y la gira, lentamente, hacia Pedro, cual ave de rapiña (como pasándole la papa caliente).

Pedro observa como Alicio lo mira , pero el joven soldado se encoge de hombros dando a entender que si hay que engañar a un cura no va a ser él quien lo intente .

Alicio le sostiene la mirada al Faceviudas...para luego romper en risas. 

Mi estimado frai Ataúlfo, aquí to'os somoi demasiao honestos, y decimo las cosa de frente... y no cometemos ese pecado jamá.

Suspira ligeramente: Especialmente a la linda fá de un vivo representante de la Santa Ma're Inglesia.  Creo que lo verdaderos pícaros se han largao a jugá las cartas.

La mano en el mentón, observa a sus compañeros por un momento.  Suspira de nuevo, y rechista.

O sea, y que Dió me perdone, se persigna veloz, que tamo cagaos.

Jorge se prueba la ropa y, con una peluca y los afeites oportunos, podría pasar por Villamediana incluso a distancia corta. Al cabo de un rato, llega el propio Conde, quien da el visto bueno a la simulación, con aire divertido, y ensaya con Jorge algunas poses típicas, y algunas muletillas del hablar para que el joven 'clave' mejor el personaje.

Alicio observa y aplaude con los ojos, satisfecho.

Pedro observa como la treta toma cuerpo , y espera que el joven no perezca en ella , aunque ese es trabajo suyo y de Alicio , defender al falso conde . El cansado soldado asiente con la cabeza cuando el joven Jorge va repitiendo las poses y actitudes del conde y el parecido es mas que evidente , mira a Alicio y al padre observando en ellos la misma aprobación que siente él .

Alicio medita:

 Jorjito y er conde parecíos son, ¿eh? De una apariencia extrema... Como de hermano...

Y ríe.

¿Bueno, y ahora qué?, eso pregunto.

El conde se muestra satisfecho con el grado de maestría alcanzado por Jorge al imitarle. Al cabo pegunta al padre Cantizano: ¿tienen alguna idea VV.MM. de por dónde empezar a buscar? ¿Hay algo de lo que yo pueda informarles que les ayude? Sabe Dios que conozco bastantes cosas de aquesta Villa de Madrid, que es Corte de la Monarquía Hispánica.

Alicio se pasea de aquí para allá, cual león encerrrado en jaula, mirando a todos; como queriendo decir algo.

Pedro vuelve a sentir la sensación de sentirse perdido , en cuanto se nombran cuestiones de la Villa el joven no puede evitar sentirse inutil ya que su tiempo en Flandes le ha hecho perder la rutina de la Villa . Pero espera que sus compañeros sepan por donde tirar , aunque con tantos cornudos que dicen que ha hecho el conde es dificil saber por donde empezar .

Alicio suelta, como si las vomitáse, las palabras:

Que tal si anunciamo que vuesa mercé va por jallí en lugá específico (como la inglesia o el corral) y luego nos paseamos bien perfumaos como gallito 'e pelea, pero con sendos machos ya apostados antes por delante, guardando la vista de cualquier sospechosa acción y listos pa aquella?

¡Una emboscada y listo!  ¿Qué opinan, una táctica digna de soldaos?

Su rostro dibuja beneplácito con su idea, cual simio que descubre algo interesante, mientras mira a todos por aprobación, especialmente a Pedro.

Al joven Pedro se le ve la alegria en lo ojos , como decian en el tercio , lo peor de la guerra es la espera , mejor ir a por ellos . Alicio , V.M. , no deja de sorprenderme , ademas de buen poeta es un estratega competente , si lo desea y vuelvo al tercio me honraria y honraria a España viniendo conmigo . Dice mientras muestra su respeto y aprobación ante tan buena artimaña sugerida por el sorprendente Alicio