Partida Rol por web

[DM 21/09] Dragonlance - Noticias de Guerra

Capítulo I - Regreso a Belleria

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08/09/2021, 13:35
Lluvia Estelar

Al ver caer a Lowen, echo a correr hacia él temiéndome lo peor. Por fortuna, Kylian está allí antes que yo y obra el milagro de traerle de regreso de entre los muertos. Aunque no rindo pleitesía a sus dioses, sí reconozco y me maravillo de su poder. Un poder que rivaliza con el de algunos espíritus a los que reverencio.

Tras constatar que todos los demás están fuera de peligro e indemnes, me arrodillo junto al cadáver del monstruoso jabalí y hundo mis manos hasta los codos en sus heridas para pintarme el rostro con su sangre.

—Oh, Padre Njiljeeh. Oh, Gran Cazador. Te ofrecemos la sangre de tu enemigo para que bebas y te embriagues con ella y tu espíritu se regocije con la fuerza que le ha sido arrebatada —a continuación, dirigiéndome a mis compañeros, añado—: Acamparemos en este lugar para dar gracias a los espíritus de nuestros antepasados, que tanto nos han ayudado a alcanzar esta victoria, y para honrar adecuadamente a nuestro enemigo, despiezando ritualmente su cuerpo de acuerdo con la tradición de mi gente.

No debo permitir que nada se desaproveche o haber matado a este animal habrá sido un acto de imperdonable crueldad. Con su piel fabricaré para Briand un saco de dormir que curtiré con las propias entrañas del jabalí. Con los tendones de sus patas, dos cuerdas para el infalible arco de Glinthalas. Con su grasa, haré velas y jabón. Y con sus cuernos, seis figuritas talladas a su imagen que repartiré entre cada uno de nosotros para que su bravura y el recuerdo de esta hazaña jamás nos abandone. Con su carne y las verduras que hemos recogido hoy prepararemos un gran estofado y conservaremos la que podamos para llevarla con nosotros en el camino de regreso a Belleria.

- Tiradas (1)
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08/09/2021, 19:57
Glinthalas Wyrmslayer

La pesadilla había acabado. El grupo pensaba que se iba a enfrentar a un simple jabalí y lo que se habían encontrado superaba con creces nuestras peores ideas sobre lo que podía ser enfrentarse a una de aquellas bestias. Aquel no era un jabalí ordinario, era un jabalí terrible...

Por fortuna, o más bien por la tenacidad y cada vez mayor coordinación de cada vez más experimentado grupo, el gran animal había caído. No sin grandes esfuerzos, sangre y dolor. Pero había caída. Un día más estaban todos para contarlo. Un grupo menos curtido habría sucumbido por un simple fallo de juicio, pero este había perseverado y obtenido la victoria.

Ver a Lluvia haciéndose cargo del cadáver sorprendió al elfo urbanita, dejándole estupefacto. Eso no lo esperaba. Claro que estaba acostumbrado a que la carne llegara a la mesa con un aspecto similar al original, pero Glinthalas estaba demasiado acostumbrado a omitir el proceso intermedio entre el animal vivo y la carne servida. Aunque al final la tuviera que robar...

Dio gracias a los dioses por no tener que ser él el que se encargara de procesar todo aquello, o de cocinar. Seguramente los demás también debieran dar gracias a los dioses por ello. La alternativa no era nada atractiva.

─¿Creéis que podría quedarme uno de sus colmillos?

La idea de un día explicar la historia de cómo acabaron con aquella criatura le resultaba excitante... una historia difícil de creer hasta que mostrase la prueba.

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08/09/2021, 21:23
Kylian Brickstone

Kylian aún arrodillado a los pies del bravo guerrero sigue con sus oraciones. Debían estar preparados si los atacaban de nuevo, y para ello su guerrero debía estar en plenas facultados. y por ahora se encontraba muy lejos de ello. Sacó los pergaminos copiados directamente de la gran biblioteca, recitando las crónicas de Astinus de Palanthas sobre la leyenda de Huma y su valor en la batalla.

- Como recogieron los estetas, fue un caballero de Solamnia quien derrotó a Takishis la perversa y devolvió el equilibrio a este mundo. Ten piedad de un postulante que como el aspira a servir a los Dioses del bien en su camino. Como tu humilde siervo te lo pide, cura las heridas de Lowen.

Dejó fluir la fuerza de sus bendiciones para restañar las heridas y recuperar el cuerpo poblado de cicatrices de su compañero de armas, cada una de ellas era un recordatorio de las lecciones aprendidas en el camino. Cuando le pareció que estaba lo bastante recuperado se levantó, despidiéndose de el con un saludo militar y una sonrisa y observó a Lluvia ofrecer el venado a sus dioses. Y pensar que hasta que Goldmoon no ahondó en su propio corazón para despertar los poderes de los místicos, aquellas plegarias formaban parte tan solo del folklore popular. Pero era una oportunidad para registrar sus rituales de primera fila ¿Habrían más místicos Que-Shu en la tribu de lluvia? ¿La forma de conservar la carne y aprovechar la presa, era una tradición convertida en ritual religioso?¿Que origen tendría en realidad?

Tras apuntar cada frase y gesto, y realizar un rápido dibujo de la chaman salvaje decidió ayudar a encender el fuego y atender a su señora. Se acercó a Briand y comprobó como se encontraba.

- Habéis luchado como una guerrera experta ¿Ya habíais cazado jabalís antes? No he visto si llegaron a heriros en la batalla ¿Estáis bien?

- Tiradas (1)

Notas de juego

Sacrifico el escudo de fe que quedaba y dos curar heridas menores. Me quedo solo con un curar heridas menores y un hechizo de luz

 

12 puntos más de vida a Lowen

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09/09/2021, 00:20
Dungeon Master

Aunque todavía os quedan algunas horas de luz antes de que se ponga el sol, ninguno discutís la decisión de Lluvia Estelar de acampar aquí mismo para degustar los frutos de vuestra bien merecida recompensa.

Con la ayuda de un cuchillo y, en ocasiones solo con sus manos desnudas, la mística que-shu descuartiza con admirable pericia al monstruoso jabalí; aprovechando de él cuanto es aprovechable y consagrando a los espíritus en los que solo ella cree todo aquello que en apariencia es inservible.

La escena de la carnicería no resulta agradable de ver para aquellos que estáis poco acostumbrados a ella, pero Lluvia la asume con la mayor seriedad y dignidad, como si estuviera oficiando una gran ceremonia en la mismísima catedral de Palanthas. Excepto por los crujidos de huesos astillándose y de tendones desgarrándose, claro está.

En cuanto los primeros trozos de carne cuidadosamente seleccionados abandonan el cuerpo del animal para acabar en el fuego encendido por Kylian, todos empezáis a olvidar rápidamente el mal rato pasado. El clérigo de Gilean demuestra tener en esta ocasión una mano excepcional con la cocina, valiéndose de una pinta de aceite y de su olla de hierro para freír la carne mientras cuece en la olla de Lluvia las setas y verduras recogidas en el camino.

El olor de los pucheros no tarda en impregnar el aire.

- Tiradas (1)

Notas de juego

Briand (3) → 22/22 [cinturón curativo: 0/3 cargas disponibles]
Glinthalas (20) → 15/15
Lowenherz (8) → 18/26
Kylian (8) → 16/16
Lyam (5) → ileso
Lluvia Estelar (4) → 24/24

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09/09/2021, 09:18
Lluvia Estelar

Manchada de sangre hasta los codos y con el rostro también ensangretado, trabajo con ahínco y devoción en despedazar los restos del jabalí que ha dado su vida para fortalecer las nuestras con su carne. El animal es demasiado grande y, sin ayuda, la tarea de liberar su espíritu de su prisión terrenal seguramente me llevará horas pero no parece que vaya a encontrar auxilio en mis espantados compañeros. Aunque acostumbro a hacer esto con las mujeres de mi tribu, en esta ocasión lo haré yo sola, no me importa trabajar duro y los demás se merecen un descanso después de la valentía demostrada durante tantas jornadas.

Les doy carta blanca para que tomen de mis alforjas cuanto precisen para preparar la cena y también para montar el campamento. Además de mi tipi de cuero, dispongo de una segunda tienda de campaña para dos que pueden usar a voluntad si la necesitan.

En algún momento de mi extenuante tarea, hago una pausa para invocar a los espíritus del agua y pedirles que creen para nosotros un pequeño manantial del que brota agua cristalina con el que refrescarnos y cocinar. Y también aprovecho para examinar las heridas de Lowen y maravillarme con el excelente trabajo que ha hecho Kylian con él. Aun así, al musculoso guerrero todavía le quedan secuelas de su encuentro y suplico al espíritu de la vida, intercediendo para que mitiguen sus dolores.

Vuelvo a mi tarea y aparto para Glinthalas uno de los colmillos astados del jabalí, tan grande como mi brazo. Sin esta pieza solo podré tallar cuatro de las seis figuritas que pretendía hacer pero él tiene tanto derecho como el que más a reclamar este premio.

Para cuando termino de trabajar, el sol hace un buen rato que comenzó su andadura hacia el ocaso y el estofado que prepara Kylian huele maravillosamente, así que me permito descansar yo también.

Extiendo la lona en el suelo para que mis compañeros no tengan que sentarse sobre el barro y la hierba húmeda y les digo, sonriente:

—Venid, sentaos junto al fuego y os contaré la historia de Bisóodi, el legendario jabalí que aterrorizó a mi gente hace más de diez generaciones.

Solo cuando me he cerciorado de tener la atención de la mayoría de ellos, doy comienzo a mi relato mientras todos empezamos a cenar. Me siento como en casa, todos juntos, compartiendo la comida y las historias de antaño después de una jornada de duro trabajo.

—Cuando las montañas llovían del cielo y el gran mar del sur se convirtió en una fragante pradera, el terrible Bisóodi surgió de las aguas burbujeantes y ardientes y se comió cuanto crecía en la tierra hasta que no quedó en ella más que un inmenso e inhóspito desierto. Los mejores cazadores de todas las tribus juraron darle caza pero la sola presencia del monstruo despertaba en los corazones un gran temor y muchos huían despavoridos solo para ser perseguidos y asesinados por aquella bestia. Las madres lloraban por sus hijos perdidos y los niños morían de hambre porque ya no quedaba en las praderas con qué alimentarles.

»Entonces el padre Njiljeeh golpeó con su vara de madera el suelo y el pueblo escuchó su ronca voz, pues su consejo era muy apreciado entre todos los Chieftain de las tribus. El padre Njiljeeh había sido un gran cazador en su juventud, pero era ya muy viejo; tan viejo que la edad había encorvado su espalda como un árbol azotado por la tormenta, le había embotado los oídos y enturbiado su vista. El padre Njiljeeh no le temía a nada, ni a nadie. Había perdido a su esposa a causa de la vejez, a sus dos hijos a manos de Bisóodi y a sus nietos a causa del hambre. Dijo que él se enfrentaría al jabalí y ordenó que le trajeran su lanza de fresno con punta de hueso.

»Cuando la bestia rugió con su furia enloquecedora desde la distancia, los oídos ensordecidos del padre Njiljeeh no lo escucharon y su viejo corazón se mantuvo sereno. Cuando la bestia se acercó y se plantó frente a él con el lomo herizado y sus terribles colmillos, los ojos ciegos del padre Njiljeeh no lo vieron y su viejo corazón se mantuvo sereno. Entonces el jabalí arremetió contra el anciano y él sintió en la tierra la vibración que provocaban las pisadas del monstruo y su viejo corazón se mantuvo sereno.

»Solo cuando el animal estaba ya muy cerca, el padre Njiljeeh se movió con la seguridad de la experiencia y hundió su lanza de fresno en el ojo derecho hasta el cerebro. Nada podía parar la feroz carga del terrible Bisóodi, que pisoteó sin piedad al venerable anciano acabando con su frágil vida. Pero estaba herido de muerte y cayó a los pies del padre Njiljeeh, víctima y verdugo. Por eso mi gente no caza ningún jabalí sin encomendarse a la bendición del gran cazador, a cuyo espíritu ofrecemos en justo sacrificio la sangre de nuestra presa.

Miro, sonriente, a mis compañeros. A mis amigos. Me enorgullezco de llamarlos así, pues todos ellos son grandes cazadores y personas aún más excepcionales.

- Tiradas (1)

Notas de juego

Conjuros gastados durante la jornada:
- Nivel 0: crear agua x2, orientación divina x2
- Nivel 1: bendecir x1, curar heridas leves x1

Con esto, Lowen debería estar ya al 100%.

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09/09/2021, 09:53
Lowenherz

Lowen despertó una vez más del trance de la muerte, protegido de esta por los sortilegios de los sacerdotes que le acompañaban. Se alzó con un gruñido de dolor, retorciéndose y escupiendo sangre. Pero sus heridas, una vez más, quedaron restañadas por voluntad divina.

- No soy merecedor de tanta compasión. - dijo, aún dolorido.

Después de aquello, pudo hacer poco más que recostarse junto a una roca, esperando que la magia curativa terminase de cerrar sus heridas y acabase con su dolor. Se sentía débil, física y mentalmente. Había recibido numerosas estocadas, muchas más de las que podía permitirse un caballero solámnico que quisiera derrotar al mal. Tendría que entrenar mucho más. Quizá no fuese digno de formar en las filas de los caballeros de la corona.

Desde su convalecencia, observó a Lluvia limpiando el jabalí. Había visto ese proceso muchas veces, ya que en su aldea era común que se mataran cerdos, de los que se sacaban abundantes alimentos. Habría echado una mano, pero estaba demasiado dolorido, así que solo pudo agradecerle a la mística su esfuerzo y su preocupación, además del cazo de estofado que le alargó esta poco después.

- Gracias, Lluvia. - hizo amago de esbozar una sonrisa, aunque esta se rompió por el dolor.

Más tarde, se sentó junto al fuego y escuchó las leyendas de los Que-shú con gran interés y fascinación. En su aldea, las historias sobre criaturas místicas eran cuentos de miedo para asustar a los niños, y nadie hablaba de antiguos cazadores que se enfrentasen a enormes bestias solo armados con sus lanzas. El valor se forjaba a puñetazos en la plaza del pueblo, y nadie desafiaba a dioses o bestias. El mundo era demasiado grande para él, pensó con recogimiento.

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09/09/2021, 12:15
Kylian Brickstone

Tras finalizar el estofado, Kylian observó a sus compañeros. Estaban todos bien, habían sobrevivido a una prueba más y consiguieron salir de ella triunfantes y un poco más sabios. Observó inconscientemente a las estrellas, dejando que sus ojos se perdieran en la bóveda celeste, iluminada por los dioses de la magia. Su constante guía reconfortaba su alma, y podía ver en sus titilantes luces  su compañía. Pero aquella chaman salvaje, aquella Que-Shu y su pueblo, debían confiarse a la tradición de antiguos Chieftains para erigir su propia identidad y su guía. Apelando a los espíritus de los muertos para a través de la tradición oral sentir su guía y luchar el día a día.

- El gran padre Njiljeeh ¿Solo se apela a el para que os otorgue fuerzas durante la cacería? O También se apela a su fuerza o su consejo en otras ocasiones ¿Qué otros espíritus de los ancestros de tu pueblo son honrados entre los tuyos?

Comentó con actitud abierta, anotando los conceptos básicos de aquella tradición, entremezclada con la disciplina mística de la ciudadela e incluso con tintes de la religión más intima y salvaje de algunas razas de elfos salvajes. Quienes apelaban directamente a las fuerzas de la naturaleza, conformadas en el principio por los dioses de la creación Habakuk, Chislev y Zeboím, los señores de lo salvaje, guardianes del ciclo.

Pronto tendría que comprar más papel, ya no había un solo espacio donde seguir anotando todo cuanto había descubierto en ese viaje. Sobre los caballeros de Neraka, sobre la teoría de la resurrección de Takishis, sobre los ancestros Que-shu. Historias de vidas y sacrificios que se sucedían en la historia de Kryn.

Tendríamos que organizar las guardias, me gustaría realizar las últimas para poder agradecer a Gilean el conocimiento que portará un nuevo día en el camino. 

Sonrió a Lowen y saludó con la cabeza a Glinthalas. Observando de cerca a Briand.

 

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09/09/2021, 12:44
Briand Le Besco

Soltando una fuerte sucesión de respiros, le llevó un tiempo poder relajar su postura una vez caído el enorme animal de cuernos, dejando reposar la punta de su gran lanza sobre el ensangrentado césped. Lo primero que hizo fue voltear de inmediato, para comenzar a limpiarse la sangre de su rostro, especialmente la que había largado de su boca, y posteriormente de su abdomen y sus ropas. Prendas de la más refinada calidad, prácticamente arruinadas tras tantas noches de combate y en especial tras semejante cornamenta. Necesitaría comprar unas nuevas cuanto antes... Aunque dudaba que en Belleria contasen con la misma calidad de vestimenta, penosamente debería conformarse con el servicio de un sastre hasta entonces... Y un buen herrero que también reparase su agujereada cota de malla.

- No... Y preferiría no tener que volver a repetirlo, sinceramente. - Suspiró de lado ante el acercamiento y comentario de Kylian. Inusualmente, esta vez ya no requería de sus servicios de sanación. Era increíblemente liberador el poder ser autosuficiente, gracias al mágico cinto, cuyo valor quizás había subestimado en un principio. - No se preocupe, mi persona está bien. No me han herido. - Respondió posteriormente y en una manera mucho más formal. Era evidente el daño en sus vestiduras, mas como Noble y figura de Kalaman siempre debía mantener una figura fuerte y firme, así como imprescindible nadie la viese agonizando o dando muestras de debilidad, ya sea física o mental... Tarea que cada vez resultaba más desafiante en sus viajes.

Más tarde, tocaría sentarse nuevamente ante una hoguera en un débil intento de relajarse. De cocina, no entendía nada, ya que aquel siempre había sido el trabajo de sus mozos, así que le dejó al clérigo y a la que-shu hacer lo suyo sin mayor interés... Realmente no quería presenciar como despellejaban y destripaban a un animal, y aunque Lluvia seguramente no poseyera la delicadeza y finura de los cocineros personales de su casa, tenía que aceptarla ya que actualmente se veía como la más capacitada. Sin mencionar que, tras tantos días comiendo comida seca, su tan selectivo estómago seguramente haría la vista gorda con facilidad ante los pequeños detalles de la culinaria.

En una cuestión de respeto, intentó prestar atención a los discursos y ritos espirituales de Estelar mientras preparaba la gran comida. Poco y nada conocía acerca de sus tierras, tradiciones y dioses. Y por mucho que en un principio poseyera gran interés en aprender acerca de su cultura, con fines puramente convenientes... Actualmente, se encontraba totalmente estresada y agobiada mentalmente. No estaba en condiciones de procesar el verdadero significado de aquel relato o fingir un falso nivel de interés y atención que sería incapaz de sostener a la larga, mucho menos mientras gozaba de algo de verdadera carne. Lo cuál era en parte, doloroso, ya que alguien de su talla debería poder ser mucho mejor y poseer mucho más aplomo.

- Sus esfuerzos son muy apreciados, estimada Estelar. - Le dijo de manera solemne y con respeto, en una sincera apreciación de agradecimiento si bien limitada por su tan cortés modo de expresarse. - Así también los suyos, estimado Brickstone. Ha sido una cena más que satisfactoria. - Concluyó con una muy suave y controlada inclinación en su muy formal y correcto cumplido. Uno que no solía arrojar a la ligera y sólo era dado a los grandes cocineros que eran dignos de tal halago por parte de una Noble... Era la manera más honrosa y apropiada que conocía para tratar con aquellos criados encargados de la gastronomía; aunque éste no fuese precisamente el caso ni un alimento de lujo... Dadas las circunstancias, consideró sería lo más apropiado. Había muchísimo esfuerzo detrás de esta comida.

Finalizado aquel breve acto, Kylian no tardó en brindar nuevamente los asuntos de importancia y que no debían olvidar; ya que en todo momento debían estar preparados para lo peor y eso era el aún ser rastreados por los vasallos de Neraka. - Yo asumiré la primera guardia, junto con Estelar. Glinthalas acompañará a Lowenherz en la segunda y Kylian en la tercera, como ha de ser habitual. - Propuso, lo que a estas alturas ya comenzaba a ser un protocolo más. Se limitó a no darle órdenes ni sugerencias al escudero, ya que era el miembro a escoltar. Mejor sería que no arriesgue su valiosa vida más de lo necesario.

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09/09/2021, 17:50
Lluvia Estelar

Aunque al principio las preguntas de Kylian me resultan extrañas e incluso me planteo si me las formula en serio o solo se burla de mi cultura, no tardo en comprender que no existe genuino interés en él por aprender. El mismo que tengo yo por compartir la tradición oral de mi pueblo con quien quiera escucharme.

El clérigo de Gilean demuestra ser un gran conversador y disfruto mucho intercambiando opiniones sobre nuestras dispares creencias. De las suyas él es un auténtico erudito, mientras que yo solo soy una prometedora aprendiz de las mías. Aun así, le explico que para mí todos los espíritus deben ser honrados y merecen el mismo respeto. Amados algunos, vilipendiados otros, las vidas y los actos de todos ellos son los que nos han traído hasta aquí; hasta ser lo que somos. ¿Seríamos los mismos de no habernos cruzado con este enorme jabalí?

Cuando Briand propone que realicemos juntas la primera guardia, acepto la sugerencia con buen ánimo. Lo cierto es que yo no me he expuesto tanto como la mayoría durante la caza y no estoy tan fatigada como ellos. No me importa permanecer despierta un poco más y aprovechar esas horas para empezar a curtir el cuero del jabalí. Tal vez, si le fabrico a la noble un saco de dormir en el que pueda descansar adecuadamente, dejará de verme como a una sirvienta y comenzará a verme como lo que soy: una persona. Una persona bastante amable, dicho sea de paso.

- Tiradas (1)
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09/09/2021, 22:54
Glinthalas Wyrmslayer

─Lluvia, esto está buenísimo. Gracias. Casi ha merecido la pena el... bueno, todo. Casi. Maldición, lo he pasado fatal viendo cómo se nos echaba encima ese monstruo. Todos los jabalís no son así, ¿verdad? No me cuadra. Tenía entendido que sólo eran más o menos de la talla de los gorrinos. En fin...

Al parecer Glinthalas liberaba la tensión acumulada durante el combate a base de hablar, convirtiéndose repentinamente en dicharachero. Lo que contrastaba notablemente con su habitual parquedad en palabras.

─Yo hubiera puesto trampas y hasta hubiera hecho de cebo, pero quedarme a morir... eso no parece muy inteligente, ¿no? O sea, se sacrifica por los demás, lo que es loable, pero si hubieran sido más precavidos y astutos, podrían haber acabado antes con la bestia esa, Bisóodi, y se habrían ahorrado muchos muertos. ¿No son cazadores los de tu gente, Lluvia? No lo acabo de entender, la verdad...

El joven elfo no buscaba contrariar a Lluvia, pero las cuestiones que planteaba no podía reprimirlas, le faltaba un punto lógico a la historia. Aquel en el que una historia se convertía en mitología. Ese tipo de cosas se le escapaban entre las manos al pícaro urbanita, niño de la calle.

Notas de juego

Haré la guardia que me han asignado de buena gana. Panza llena, pícaro feliz.

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09/09/2021, 23:36
Dungeon Master

La noche transcurre tranquila y también las jornadas posteriores a vuestro encuentro con el jabalí. Ahora que tenéis comida en abundancia, no necesitáis deteneros tan a menudo para forrajear. Además, habéis aprendido a evitar los peligros de la región o son ellos quienes os evitan a vosotros, ahuyentados por el olor o el contacto de vuestros aceros. Y contáis también con numerosas fuentes de curación sobrenatural para mitigar los pequeños tropiezos del camino.

De esto modo, lográis alcanzar sanos y salvos la villa de Belleria cuatro jornadas después de vuestra cacería, poco antes del mediodía.

Allí os dan la bienvenida sus trabajadoras gentes, que ya han comenzado a reconstruir la población, y también lo sus líderes civiles, religiosos y militares.

Lord Arnon Certret, organiza en vuestro honor una gran celebración en la que elogia públicamente vuestro honor y valentía por haber liberado a algunos ciudadanos de Belleria, por haber recuperado parte del botín robado y por haber capturado con vida a un suboficial de los caballeros de Neraka que tomó parte en el asalto de la población hace ya casi dos semanas.

Como os prometió, el gobernador local os hace entrega de una recompensa de 250 piezas de acero para cada uno de vosotros que el agradecido Aedian Falmon, el sacerdote semielfo de Shinare, ha ayudado a reunir por haberle rescatado de las garras de los goblins. Ambos dignatarios han redactado además cartas ensanzando vuestro coraje y vuestra abnegada ayuda para que actuéis como embajadores de los intereses de Belleria si alguna vez tenéis ocasión de visitar las grandes ciudades solámnicas. Algo que esperan que hagáis muy pronto puesto que la familia de Briand tiene importantes intereses en la cercana Kalaman.

Quien se muestra más taciturno durante todos los festejos es el castellano Sir Brannthor Abarra a pesar de que habéis logrado traer de vuelta a su escudero. El viejo solámnico os convoca en la fortaleza al final de la jornada, una vez terminadas las celebraciones, para que presentéis vuestro informe sobre lo que habéis descubierto de los atacantes de Belleria.

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10/09/2021, 14:57
Lowenherz

El regreso había sido triunfal, y pronto la ciudad les había cubierto de honores y regalos. Una buena recompensa en oro por sus servicios, además de nombrarles embajadores de la ciudad, con la esperanza de que se adentrasen, más pronto que tarde, en la intrincada política solámnica. Lowenherz no soñaba con ello. Al contrario: confiaba en poder llegar a ser parte de los Caballeros de la Corona, y entregarse en cuerpo y alma a su entrenamiento y disciplina. La última experiencia sufria le había dejado claro que aquel era el camino: no era más que un joven bisoño y mal preparado, cuya fuerza había servido en ocasiones, pero que no habría llegado a ninguna parte si no hubiese estado rodeado de aventureros más avezados que él. Aquellos aciagos pensamientos no pararon de rondarle la cabeza durante las celebraciones, en las que bebió cerveza con aire ausente y dedicó saludos distraídos a quienes se acercaban a felicitarle. No se sentía digno de tantas alabanzas.

Más tarde, cuando el jolgorio terminó, al fin fueron convocados por el caballero de Solamnia, quien tenía una expresión en su rostro acorde a cómo se sentía Lowen. Imaginaba el guerrero que quizá Lyam le habría puesto al corriente de lo que sucedía en aquel funesto campamento, algo que representaba una grave amenaza, y que sin duda no hacía pensar que fuese adecuado celebrar por todo lo alto.

- Sir Brannthor. - saludó con reverencia - Volvemos con vuestro escudero Lyam, aunque las noticias no son todo lo buenas que uno pudiera desear. - se esforzaba en hablar con respeto, tratando de esconder sus paletos modales de pueblerino bien armado - No sé cuánto os habrá contado Lyam.

Después, se dispuso a dar parte de cuanto habían visto sus ojos, incluyendo los prisioneros a los que habían tenido que dejar atrás. Lowen no se olvidaba de ellos, aunque no se sentía ya con tanta fuerza para rescatarlos.

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10/09/2021, 15:39
Lluvia Estelar

Dedico cada descanso en el camino de regreso a trabajar los despojos del jabalí convirtiéndolos en la artesanía tribal que mi pueblo me ha enseñado desde mi más tierna infancia. Ese es un trabajo, sencillo, gratificante y hermoso que me permite honrar adecuadamente al dadivoso jabalí sin que nada de él se malogre.

Sin embargo, no puedo evitar sentirme abrumada con el recibimiento de los habitantes de Belleria. En verdad no siento que mi papel haya sido tan determinante como pregonan, ni mi actuación tan heroica como para merecer tantos festejos y recompensas. Por fortuna, los ojos de casi todo el mundo están puestos en Briand y yo no tengo el menor interés en robarle un ápice de protagonismo.

Tampoco sé que hacer con tanto dinero, ni me satisface abusar de la comida y el vino, así que me retiro con Duna tan pronto como considero que no ofenderé a nuestros anfitriones. No creo que mucha gente nos eche de menos a las dos.

Las horas de luz que quedan las dedico a echar una mano a los lugareños en la reconstrucción de la ciudad y a atender a quienes todavía conserven secuelas del asalto. Desgraciadamente, no puedo dejar de pensar en Ethani y en su prometido, prisionero de los mismos goblins que la mataron a ella.

Cuando el sol hace rato que comenzó su descenso por el horizonte, alguien me indica que el anciano señor de la fortaleza nos ha convocado a todos allí y no tardo en acudir al reencuentro con mis amigos. Sir Brannthor nos interroga acerca de nuestros descubrimientos, pero dejo que sean los demás quienes los cuenten, puesto que yo los he aprendido de ellos.

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11/09/2021, 01:10
Kylian Brickstone

La llegada resulta reconfortante, al parecer se les recibe como a héroes. Era curioso ser el protagonista de las gestas que escribía y anotaba, en lugar de un mero observador. Eso aportaba un refrescante y profundo punto de vista de lo duras que fueron las pruebas. de los sacrificios que se hicieron en el camino, de lo dolorosas que fueron las pérdidas. Pero por otro lado se preguntaba si no perdería la veracidad de los hechos, la neutralidad en la correcta anotación de la historias al tomar partido.

El clérigo de Shinare estaba a salvo, lo cual agradeció. Tomó las 250 monedas y se las entregó de vuelta con una sonrisa.

- Si me permitís el atrevimiento y no supone mucha carga para vos Aedian, en pago por nuestra ayuda, adquirid con este dinero libros y mapas cartografiados de la región. Si me he ganado su confianza, construid una pequeña capilla para honrar a Gilean en el templo de Shinare, un sencillo atril con un libro abierto será más que suficiente. Además, el conocimiento puede ayudar a la gente de Belería para reconstruir el pueblo y recuperar la prosperidad de la región bajo el auspicio de la victoria alada. Os haré llegar libros de cuanto vea en mis viajes, sobre rutas de comercio, productos exóticos e información sobre los acordes de la guerra. Si estáis dispuesto a tomar esa responsabilidad, juntos haremos prosperar el templo y a vuestra comunidad. 

Solo quedaba ver si aceptaba construir una capilla en el gran templo de madera. Ambos patrones celestiales estaban en el mismo Panteón, y Gilean guiaba a los dioses de la neutralidad. pero la decisión final debía ser del propio Aedian. Pues Gilean no aceptaría imposición de ningún tipo. El sacerdote de Shinare debería sopesar y decidir por si mismo si estaba dispuesto a emprender ese proyecto. Y el aceptaría silencioso su decisión. Fuera la que fuera.

Cuando se separaron acompañó a Briand, tras remendar mágicamente sus ropajes destrozados por las luchas y el viaje se veía tan deslumbrante como el día que se conocieron. Aunque tal vez en su mirada había un voluntad y una madurez más severa tras todas las pruebas que habían superado juntos. Dejaría que fueran sus compañeros los que expusieran todo cuanto sabían del campamento enemigo. Si necesitaban su experta opinión la aportaría, pero debían aprovechar, ambos la noble y el caballero, para impresionar a sir Branthon.

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11/09/2021, 11:19
Aedyan Falmon

Aunque en un primero momento el clérigo de Shinare parece confundido e incluso ofendido cuando te acercas a él para devolverle el dinero de la recompensa, no tarda en mostrarse complacido cuando escucha tu sugerencia.

—¡Es una idea maravillosa! —exclama, ilusionado— Colocaremos una vitrina llena de libros en honor a Gilean el Sabio en la capilla de Shinare y así cualquiera que nos visite podrá disfrutar libremente de la pequeña biblioteca que tan generosamente estás ayudando a financiar.

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13/09/2021, 00:27
Glinthalas Wyrmslayer

De villano a héroe, lo que eran las cosas. El pícaro elfo, maldito por muchos por sus "pillerías" ingenuas por la zona, ahora se había convertido en alguien digno de admiración. Y lo cierto es que él mismo no se lo acababa de creer.

Sabía, eso sí, que las celebraciones serían rápidamente olvidadas por los efímeros humanos y su buena acción por las gentes de la ciudad no tardaría en ser olvidada. Así eran los humanos. Su buena acción, no obstante, no la había realizado buscando la aprobación, respeto o admiración de sus conciudadanos, lo había hecho porque sentía que debía hacerlo. Se lo debía. Les había estado robando durante años para sobrevivir, era lo mínimo que podía hacer por ellos...

La recepción de la jugosa recompensa hizo que Glinthalas abriera mucho los ojos y le brillaran con especial intensidad, antes de que se le empezaran a poner vidriosos por la humedad que antecede a los lloros. Se enjuagó como pudo las lágrimas, disimulando como que le había entrado algo en los ojos, intentando salvaguardar su dignidad para no mostrar sus emociones en público. Fuera como fuera, aquella cantidad suponía alejar la sombra del hambre durante muchos meses.

Desde luego, el joven pícaro no tenían ningún deseo de convertirse en el centro de atención de nadie, ya durante las fiestas o durante la entrevista con el castellano, así que no dudó en derivar con su lenguaje corporal la atención hacia los demás, en especial hacia la dama de Kalaman, el blanco más fácil y deseable. Quien sabe, tal vez ella sí disfrutara de la atención.

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13/09/2021, 03:05
Briand Le Besco

Aquel consecuente obsequio manufacturado por parte de Lluvia había sido algo inesperado. Ya había saldado su deuda en cierta manera con su artesanía inicial, un bien materialmente insignificante aunque también lo había sido su gesto a compensar. Ésta ofrenda no precedía a ninguna, y ambas sabían que no existía una relación de servidumbre real. Aceptar un favor y deber uno no era algo que le tomase usualmente a la ligera, con alguien de su apellido tales gestos conllevaban muy serias implicancias. Aún así... Era uno que, por mucho que le disgustase admitir, y por precario que fuese ante los bienes de su casa, era uno que en esos momentos su cuerpo realmente necesitaba y le pedía aceptar. Por muy insultante que pudiese verse aquello para su sangre y su nombre... Lo aceptó. Más lo era dormir sobre el césped o el suelo desnudo. Al fin y al cabo, no habían demasiados testigos y siempre podía excusarse, como un gesto diplomático para con su gente.

Le agradeció formalmente a su compañera de viaje, así como dejando en claro que recordaría retribuir su gesto, en la siguiente ocasión que pudiese o ella se lo pidiese. Su humildad aparente le daba la impresión de que no habrían grandes consecuencias ni la Que-Shu empujaría los límites de su situación exigiendo demasiado. Durante el resto del viaje, gozaría de un descanso al menos un poco menos tortuoso, dejando de lado sus amaneceres llenos de dolores y moretones. El poder ver sus ostentosas ropas remendadas por la mano de Kylian también había sido otro milagro más que digno de agradecer y apreciar explícitamente.

La recepción en Belleria, fue esperada. No merecían menos, y aceptó educadamente las recompensas monetarias así como las menciones honoríficas y sus cartas de gratificación. Era lo que más necesitaba y a lo que había venido, el poder extender el valor de sus relaciones y la influencia de su nombre... Aunque por medio de un sacrificio inesperado, puede que por un valor igual e inesperadamente mayor al de sus expectativas iniciales. Con suerte y la diosa de la prosperidad mediante, serían relaciones beneficiosas y exitosas. Pronto trataría puntualmente los pormenores con el Noble local de la familia Certret y el Clérigo de su culto; ahora, parecía poseían prioridad las preocupaciones del caballero solámnico.

- Domine Brannthor, permitte mihi gratias pro receptione tua. - Le saludó con una leve y muy respetuosa inclinación, dándole las gracias por la recepción y su atención en solámnico. - Hemos podido regresar a salvo, con gran parte del botín y de los capturados del pueblo de Belleria, incluso el mismísimo escudero que su nombre nos encargó. El resto de las noticias, sin embargo, temo que no aparentan ser del todo alentadoras. Nuestros descubrimientos indican que aún permanecen numerosos esclavos en los campamentos de Neraka, cuyos números se presentaban en escalas mucho mayores de las que estimábamos. - Comenzó a informarle, pudiendo detallar en la medida de sus posibilidades y lo que había observado, y podía estimar a partir de su incursión a dicho campamento. - Tal parece que Belleria no representa sino uno más de sus tantos objetivos de invasión y saqueo. Quizás uno de los menores en ese espectro. Su liderazgo, así como sus compañías parecen encontrarse subdivididas, aunque no contamos con la certeza si con diferencias de por medio. Lord Mondreth Arcagum y Silverad. Caballeros de Neraka, Fanáticos de Zeboim, Mercenarios y Goblins parecen formar parte de su ejército en ese mismo orden de importancia. Nuestro prisionero, parece formar parte de los primeros, bajo el rango de Cabo Mayor. - Continuó explicándole, buscando resaltar el valor que podía poseer este último si lo dejaban con vida.

- En cuanto a sus objetivos... - Elaboró una pequeña pausa, debía tratar el asunto con seriedad y escoger bien sus palabras, ya que no era suficientemente ducha en el tema. Quizás el acólito de Gilean pudiese asistirle en aquello. - En su detalle y elaboración nos son aún desconocidos, mas su fin superior parece ser el despertar a la llamada Reina de los Dragones, o aquel bajo el título del Dragón de Cinco Cabezas. - Le marcó, aunque no pudiendo proveer una mayor explicación ni la implicancia de sus consecuencias, ya que desconocía de dicha deidad o referencia mitológica. - Según los informes de su escudero, parecen utilizar la mano de obra capturada para criar huevos de dragón en las minas del campamento, posiblemente de la misma casta del que hemos presenciado durante la invasión inicial a Belleria. - Lo cuál podía ser una consecuencia mucho más inmediata.

No escatimaría en mayores detalles, si así el caballero los solicitaba.

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13/09/2021, 12:20
Sir Brannthor Abarra

—Lyam me ha contado maravillas de vuestro heroísmo y de cómo os infiltrasteis en el campamento enemigo para rescatarle. Sus torturadores habían comenzado a sospechar sobre su verdadera identidad y es muy probable que a estas alturas estuviera muerto de no ser por vosotros.

»Y también he oído el impresionante relato de cómo os enfrentasteis a unas fuerzas que os triplicaban en número para liberar al reverendo Aedyan y a los inocentes que mantenían prisioneros junto a él. No cabe duda de que el mismísimo Kiri-Jolith ha escogido un campeón entre vosotros para que actúe en su nombre —afirma, mirando significativamente a Lowenherz—, y me aseguraré de que muy pronto se sepa en toda Solamnia.

»Lamentablemente, no todo lo que he escuchado han sido noticias de vuestra valentía. También rumores inquietantes sobre una siniestra alianza entre caballeros de Neraka, goblins, draconiano, clérigos de Zeboim y dragones cromáticos. Sobretodo, son estos últimos los que más me preocupan. Ellos y los huevos que están incubando en el campamento del que venís.

»He tenido que enviar a Lyam a Solanthus para dar personalmente estas noticias terribles al Consejo Plenario pero pasarán semanas antes de que sepamos si ha tenido éxito en su misión. Hasta entonces, no se me ocurre nadie mejor que vosotros, que conocéis a nuestros enemigos, para infiltraros  nuevamente, rescatar al resto de prisioneros y destruir esa pérfida nidada.

»No puedo prometeros una gran recomensa, pero sí que podréis quedaros con cualquier cosa que recuperéis de ese lugar. Los dragones son codiciosos y seguramente no regreséis con las manos vacías. Además, si lo deseas —añade dirigiéndose nuevamente a Lowen—, puedo tomarte como mi escudero en ausencia de Lyam y, a tu regreso, proponer oficialmente tu ingreso en las filas de los caballeros de Solamnia. Puede que tus orígenes sean humildes pero si ayudas a recuperar o destruir esos huevos de dragón, nadie se atreverá a discutir la idoneidad de tu candidatura.

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13/09/2021, 13:59
Kylian Brickstone
Sólo para el director

Kylian asintió en silencio con el gesto serio. Era lo adecuado y su responsabilidad como sacerdote de Gilean. No solo debía recuperar el conocimiento perdido de los templos enterrados, recuperar las reliquias sagradas y sacar a la luz los lugares sagrados olvidados. También debían crear nuevos lugares donde la gente pudiera acudir en tiempos de dificultad, en busca de guía y consuelo. Tras las palabras de Aedian le devolvió un apretón de manos y prosiguió a sus compañeros para hablar con el caballero de Solamnia.

 

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13/09/2021, 14:05
Kylian Brickstone

Kylian acompañó al grupo y escuchó atentamente las palabras y discurso de Briand. Esa era la situación a la que se enfrentaban, el resurgir de los caballeros de Neraka con recursos para mercenarios y un ejército de fanáticos de Zeboím. Lo más preocupante sin embargo eran los huevos de los dragones cromáticos. Una nueva nidada de dragones del mal podría de nuevo romper el equilibrio y sumir al mundo en una nueva ocupación de los ejércitos del mal.

- La presencia de los clérigos de Zeboím supone un misterio, los caballeros de Neraka efectivamente creen en el retorno de la reina de los dragones, la señora del mal, Takishis. Si supone un engaño por su parte para manipular a los caballeros, o si realmente buscan la resurrección de la Diosa lo desconocemos. por otro lado, la cría de una nueva nidada de dragones es muy preocupante. Debemos obtener más información sobre la actividad en esas cuevas, pero sus fuerzas son muy considerables, y no se si dispondremos del sigilo necesario para evitar acabar muertos o esclavizados.

Tenían que comprender la gravedad de la situación, solo Lluvia y Glinthalas podían moverse sin ser vistos. Tendrían que planear el acercamiento con sumo cuidado y buscar opciones más allá de lanzarse a la aventura.

- Tal vez si disponéis de mapas de la región, podríamos buscar una ruta que nos acerque a las cuevas sin pasar por el campamento principal y sus atalayas. Por otro lado se podría forzar un ataque de los salvajes al campamento, aunque desconozco como ¿Sabéis algo de los salvajes que viven en los bosques? Fuimos atacados por ellos, y tenemos constancia que ya se han enfrentado también a los caballeros.