Partida Rol por web

Al ver el rayo de Vicky caer tan cerca de mi pienso que esa loca me ha disparado y que gracias a mi camuflaje no acertó su tiro, aunque el sonido de la explosión que provoca y los trozos de metralla que me salpican desde el otro lado me quitan esa idea de la cabeza rápidamente.

Parece que esta vez tu no eras el blanco Igor... pero no te confíes.

Al fin y al cabo ¿porqué voy a confiar en nadie de los de aquí? Unos me estan utilizando e intentando matar en estos momentos tan solo para hacer sus experimentos y pruebas, el otro hombre es un completo desconocido y Vicky... prefiero no seguir pensando en ella. Es preferible volcar mi ira contra aquellos robots que parecen dispuestos a freírnos, así que sin pensarlo más disparo contra uno de ellos.

Viendo que uno de los dos autómatas había reventado, me centré en hacer lo propio con el otro. Apunté despacio mi Megam IV y disparé. Vi el rayo de partículas ir directo contra el ser e impactar en el pecho... el efecto de chisporroteo unos segundos antes de que se desplomase fue bastante para imaginarme lo que iba a suceder con él.

Acto seguido, y por instinto seguí buscando posibles amenazas. No tenía intención de que me pillasen desprevenido.

Antes de que le diese tiempo a caer al suelo a uno de los dos androides, decidí abrir fuego contra el otro. Esperaba que el daño hubiese sido suficiente para acabar con el primero. Confié en la computadora para hacer la selección de objetivo y dejé que la descarga de partículas saliese por la boca del cañón todavía caliente. El impacto fue directo al pecho.

Sonreí tras la máscara de la armadura mientras me preparaba para buscar los siguientes objetivos.

Blindado apunta su proyector de partículas contra los dos guardianes artificiales, mientras la computadora táctica adelanta cada movimiento, indicando en el pequeño monitor del casco los puntos vulnerables, tras haber realizado cientos de análisis en décimas de segundo. El primer disparo golpea en el pecho, casi a la altura del cuello. El impacto hace que parte del pecho se hunda, llevado por una fuerza impresionante, y descomponiendo todo a su paso. La cabeza sale por los aires, perdiéndose a lo lejos tras chocar con un par de obstáculos, mientras que el cuerpo cae al suelo hecho añicos. El segundo guardia levanta su mano, pero también es tarde para él. Un segundo disparo del proyector de partículas le atraviesa el abdomen y lo lanza de espaldas, cayendo al suelo también inmóvil.

Vicky levanta la cabeza, y los dos artificiales que anteriormente estaban unidos en lo alto de la torre... ya no están.

Mientras apunto veo como mis objetivos son destrozados por los disparos del otro hombre.

Jooooder! Menudo animal.

Me relajo un poco pero no me muevo, espero a que aparezcan más robots por donde han salido estos, aunque sin el peligro inminente la tensión se ha rebajado bastante. Me permito mirar de reojo hacia el techo, hacia donde vi por última vez a Vicky, no quiero que otro disparo suyo me pille por sorpresa. Tengo ganas de ver que había detrás del muro, puede que un robot por las piezas que saltaron hacia este lado, pero es mejor que ahora no me mueva.
Tampoco es que vaya a pasarme nada si me pongo al descubierto, está claro que estos aparatos son un juego de tiro al blanco para nosotros y que de alguna forma están probando nuestras capacidades. Ahora que todo está calmado decido concentrarme en interceptar alguna comunicación, a la espera de que todo esto termine y poder volver a mi barracón, prefiero estar allí que en compañía de Vicky.

"Maldita sea... ¿dónde se han metido esos dos?" - pensé al darme cuenta de que los enemigos que estaban en la torre habían desaparecido.

Les había visto hacer algo raro hacía sólo un momento, pero no fui capaz de descubrir de qué se trataba. En cualquier caso, acabábamos de eliminar a tres de esos robots y no podían quedar muchos más protegiendo la bandera. Descendí hasta la posición del tipo de la armadura, que acaba de cargarse a dos con disparos francamente certeros, y le conté lo que acababa de ver.

- Había dos en esa torre - se la señalé.- pero han desaparecido... deberíamos estar atentos y comenzar a buscar la bandera.

Asiento al comentario de Vicky.

- Entendido.

Y mientras avanzo hacia nuestro objetivo, voy atento a cualquier señal que puedan interpretar los sensores de mi armadura como una amenaza. Por dentro sonreía al pensar en la imagen que debía de estar dando. Yo sabía que había sido un golpe de suerte, que la armadura no era tan certera, y que dos de dos era mucha suerte. Estaba convencido de que el destino iba a jugarme una mala pasada en el peor momento... y sólo esperaba que eso no fuese a costa de la prueba.

Algo trama Vicky, de eso estoy seguro. ¿Porqué se acerca al otro tipo y le susurra algo? Parece que él se mueve. ¿Más enemigos?

Joder, no veo nada.

Quizás no sea eso, quizás quiere ajustar cuentas, ahora que se ha convertido en una chica voladora y poderosa puede que haya convencido a su amigo para que haga blanco conmigo también. ¿Pero saben donde estoy? Quizás mi camuflaje no sea suficiente, será mejor que me mueva hasta otra posición mejor. Miro a mi alrededor, debajo de la torre, allí puedo seguir tras el muro y la chica voladora no me podrá ver. Decido moverme hacia delante intentado no hacer movimientos bruscos ni ruido para que mi camuflaje sea lo más efectivo posible.

Ambos os percatáis de un factor extraño dentro del campo de batalla. Perdón, de pruebas. Los pequeños drones que portan las cámaras con las que se monitoriza la prueba han dejado de estar desplegadas por todo el área, como estaban anteriormente. Ahora sobrevuelan vuestra posición, centrando el enfoque de sus cámaras en vosotros.

Incluso en Igor, a pesar de su camuflaje.

Algo raro, muy raro...

Me siento más seguro en la nueva posición, aquí le será imposible verme desde el aire, solo nos queda recuperar la maldita bandera para poder salir de aquí.

Y pensar que durante todo este tiempo siempre quise tener algún compañero con el que hablar. Ya se me han quitado las ganas, estoy mejor solo.

Pero no estoy solo, los drones que se repartían por el recinto y que servían para monitorizarnos, de repente se han concentrado en nosotros tres.

¡Mierda! ¡Me están viendo!

No me cabe ninguna duda, varios me apuntan directamente y sobrevuelan mi posición, no lo hacen tan alto como Vicky y tienen una visión perfecta de mi posición, aunque no se exactamente como.

¿Habrá dejado de funcionar el camuflaje?

Compruebo los aparatos y parece que todo está bien, aunque quizás lo hayan desactivado de forma remota o esté estropeado y no me de cuenta. Me pego todo lo que puedo a la pared mientras pienso en que puedo hacer a continuación.

Me percaté de que los drones nos seguían como si no hubiera nada más importante en el campo de entrenamiento, y seguramente así era dado que era una prueba de la tecnología que estábamos empleando. Habían concentrado su atención incluso más que antes, y eso sólo podía significar una cosa...

- Preparáos para recibir un ataque - dije para informar al resto.- No sé de dónde vienen pero os aseguro que es inminente.

Miré a todos lados, seguramente los dos enemigos que había visto antes caerían sobre nosotros usando alguna estrategia que no estábamos teniendo en cuenta. Desde mi posición no podía ver gran cosa, de modo que, lista para disparar mis rayos de energía si fuera necesario, volé hasta una posición más elevada.

Miro a mi alrededor tras la advertencia de Vicky, si es que es una advertencia y no una maniobra de despiste, no la pierdo de vista por si acaso y la veo elevarse de nuevo. Desde mi nueva posición estoy a cubierto de sus ojos, aunque los malditos drones delatan mi posición, a los otros y a cualquiera con dos dedos de frente.

Mejor no digo nada, si hablo delataré exactamente mi posición. Con los drones... Se me ocurre algo. Quizás sean parte de la prueba, nadie dijo que no les disparásemos.

Apunto con cuidado a uno de los drones. Si los que están al otro lado son listos los retirarán de allí, está claro que al menos ellos me están viendo o no estarían a mi alrededor como moscas. Además no hay nada más a lo que disparar, ese ataque que baticina Vicky no parece inminente, será mejor no fiarse de su instinto, no sería la primera vez que le falla.

Con la advertencia de la mujer en la cabeza, avanzo despacio hacia nuestro objetivo, concentrado en mis sensores. Que hay más enemigos, es obvio, pero aunque confío plenamente en las capacidades de la armadura, prefiero no ser tomado por sorpresa.

Estoy convencido de que los que han diseñado este escenario son conscientes de lo que puedo hacer embutido en Blindado, y que habrán decidido poner a prueba los límites de todos. De momento, nos hemos encontrado con la parte fácil, pero seguro que se pone difícil. O eso, o nos hemos encontrado con los límites del resto... y está claro que hay un abismo de diferencia. Sonrío para mí mismo un instante, pero luego recupero la concentración e intento quitarme de la cabeza esa falsa sensación de orgullo, en algo en lo que tengo poco que ver.