Partida Rol por web

El Advenimiento

Capitulo IV

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19/09/2012, 12:23

El guarda, tras una profunda respiración, te responde que esperéis allí, tras lo cual entra en el edificio. No transcurre mucho tiempo antes de que vuelva a salir y os dice que podéis pasar. El se queda fuera.

Tras pasar la puerta y un corto pasillo, mas un guardarropa que otra cosa, entráis en una sala bastante oscura cuya única iluminación procede de una chimenea. El ambiente esta bastante cargado por el humo.

Sentado en un mullido y algo deslucido sillón por el paso del tiempo veis a un humano Osth de unos 50 años, fumando de una pipa de tabaco. Apenas si le queda cabello, sus ojos, castaños o negros no lo apreciáis bien por la poca luz que hay, destacan en un rostro sonrojado y algo regordete, por la inteligencia con la que parecen brillar. Sus ropas son bastante toscas, una mezcla de marrones y grises, si bien adorna sus orejas con cortos pendientes en los que brillan varios zafiros, uno por agujero. Pero lo que sin duda mas destaca de su atuendo, es el enorme zafiro que luce sobre su pecho, colgado de una cadena de platino, casi del tamaño del puño de Pazzo, nunca habíais visto una gema tan grande.

El otro individuo en la sala es un Enano Thork. (Los O´shar es la primera vez que veis uno). Se trata de un ser de no mas de 130 cm (vamos que le llega a Keloa a la altura de la cadera) increiblemente robusto, pesara al menos 70 kg, de facciones duras como si hubiese sido esculpido en piedra sin demasiada delicadeza. Su cabello, así como su larga barba, son ya de un color blanco nieve, lo que parece indicar una elevada edad, pero que no se refleja en su cuerpo, el cual parece estar en perfecta forma.
Va ataviado con una pesada armadura de un color metálico oscuro, bastante mas oscuro que el color natural del acero, y a su espalda sobresale el mango de una esplendida maza, decorada con varios grabados y runas y que al contrario que su armadura, el material con la que esta fabricada reluce como si fuese plata pulida.

El humano Osth es que esta sentado, al cual reconoces como Lord Heinnvart, se os queda mirando como esperando que procedáis con los asuntos que os han traído hasta él.

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19/09/2012, 12:56

La chica que esta junto a tu bañera, para ayudarte en lo que necesites, te responde que en cuanto a lo de la ropa sucia, se puede ocupar ella.

- Lo de ropa nueva puede que sea algo mas difícil... quiero decir - se explica con voz tímida y algo insegura - hay varios almacenes donde conseguir ropa, pero no se si habrá algo de su talla, dice admirando tus largas piernas... salvo que no le importe vestir ropa de hombre, de esa hay en abundancia, en especial de la que usan los mineros.

Las dos jóvenes se ocupan de que el agua esta siempre caliente, echando mas agua caliente de calderos que reposan sobre la chimenea. También os ayudan a enjabonaros con la esponja si así lo requerís.

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19/09/2012, 13:49
Udokal

Udokal siguió a Pazzo y esperó mientras ella hablaba con los guardias de la puerta. Tras un intercambio de frases entre ambos el guardia entra en el edificio, probablemente para llamar al jefe de la colonia, aunque un rato después vuelve a aparecer solo. Parece indicarles que entren aunque Udokal no lo hace hasta que la pequeña humana lo hace ya que tampoco sabe que es lo que han hablado.
El humo del interior de la estancia molesta a Udokal ya que se concentra en la parte alta de la habitación y él está mas próximo.

Eso es lo que pasa cuando a alguien se le ocurre encender un fuego dentro de un sitio cerrado.

Al acercarse puede distinguir a un humano sentado en una butaca que parece tener pieles o mullido lo que le parece algo raro pues nunca ha visto algo así. Es un humano bajito, aunque parece más gordo que el resto de los que ha visto hasta ahora y parece que le gustan mucho las piedras de colores pues lleva varias adornando su cuerpo, sobre todo una muy grande colgando de una cadena de metal.
Pero aún le llama más la atención el otro humano.

Es incluso más bajo que la sacerdotisa.

Udokal nunca había visto a un hombre tan pequeño y para más sorpresa lleva el cabello y la barba totalmente blancas por lo que debe ser un hombre de avanzada edad. Además parece muy fuerte porque lleva una armadura metálica sobre él y un mazo que parecen ser pesados pero viste con soltura. Los colores del metal de ambos llaman la atención de Udokal también. Miró a Pazzo esperando que presentara a los O'Shar ante el jefe de la tribu.

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19/09/2012, 14:51
Phey Stern

¡Muchacha! ¡Por favor, ven!-dijo alzando un poco la voz para que le escuchasen.

Phey comenzó el baño relajándose en la bañera, sin limpiarse ni frotarse. Quería aprovechar ahora, que el agua estaba más caliente que nunca, para que la mugre en la piel se carbonizase. Cuando la chica entró, la guarnición de la espada de Phey estaba enganchada en el borde de la bañera, con la punta envainada apoyada sobre el suelo de madera*.

¿Podrías lavar ahora las ropas que he dejado dobladas en el suelo? Gracias. Me gustaría que estuviesen limpias para cuando terminase el baño, así que despreocúpate del resto de tus tareas conmigo. Me enjabonaré por mí mismo, y el agua no me importa que se enfríe un poco hacia el final del baño.

Phey, sin darse cuenta, dedicó una sonrisa a la joven. No intentaba cortejarla, es solo que se estaba tan calentito en el agua, que vivía un momento de despreocupación.

Ah... En el monasterio tendría que lavarme mi propia ropa. Es agradable que cuiden de uno.

Notas de juego

*¿Me lo parece a mí, o me quedó un párrafo plagado de dobles sentidos? XDD

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20/09/2012, 00:50
Pazzo-Bialy Stehlen

Estando entre los O'shar y el guardia, la pequeña Pazzo se pierde por completo. Pero en ese cuerpo cabe una gran personalidad y en cuanto volvió el guardia y dijo que pueden pasar, guía a sus raros acompañantes, por el pasillo, hasta la oscura habitación que hay al fondo.

En cuestión de segundo sus verdes ojos ayuda a su mente a memorizar donde se encuentra cualquier objeto de valor. Pierde un poco mas de tiempo para despegar su mirada de ese enorme zafiro pero se recupera enseguida.

Después de sonreír amablemente, hace una pequeña reverencia a los presentes.

-Como bien le habrá dicho su guardia, he venido aquí con estos dos O'shar por sus propios intereses. Por alguna razón, que desconozco, han llegado hasta aquí y querían expresamente ponerse en contacto con usted. Al acabar de hablar, Pazzo da un paso atrás indicando, con un gesto de la mano, a los pelirrojos que pueden tomar la palabra.

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21/09/2012, 17:51
Keloa

Keloa sigue a la pequeña humana sin observar ya a su alrededor. Ha visto suficientes rarezas en aquel lugar por el momento y no está interesada en ellas en absoluto. Es más, a cada segundo, la idea de buscar una tribu como la suya le parece más apetecible.

Sin embargo, lo que encuentra en la estancia a la que son guiados, consigue sorprenderla de nuevo. Suponía que el jefe de esta tribu humana era el que estaba sentado en aquella especie de trono. Pero aquel atuendo no debía ser muy cómodo para un guerrero... Porque... Si era el jefe de la tribu, tenía que ser un buen guerrero, ¿no? Bien es cierto que en su caso, la experiencia y la sabiduría condicionaban a los cabezas de tribu, pero mirando al pequeño humano que había a su lado, parecía mucho mayor.

Cuando creo que no puede haber nadie más pequeño, siempre acaban sorprendiéndome y aparece otro más bajo aún... -Piensa para sí sin llegar a hacer ningún tipo de comentario.

Tras escuchar las inentendibles palabras de la pequeña Pazzo, Keloa entiende por su gesto que espera que hablen ellos.

- Mi hermano y yo conseguimos sobrevivir a un ataque de pieles verdes que acabó con nuestro clan. Eran demasiado numerosos, algo que no se había visto nunca. Hemos llegado aquí acompañando a un grupo de aventureros, pero nuestra intención es llegar a reunirnos con gente de nuestra raza. Por eso hemos pedido hablar con el cabeza del clan, para presentar nuestros respetos, averiguar el modo de conseguir ropas y armas adecuadas e informarnos sobre la situación en la zona.

Explica con su melodiosa y dulce voz, totalmente opuesta a su aspecto y su tono de voz. Espera que, si aquellos hombres no la entienden, la pequeña humana pudiera explicarles sus intenciones.

Aunque esperaba una recepción menos fría por parte del cabeza del clan, su voz suena firme y su barbilla se mantiene alta.

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21/09/2012, 20:17

- Claro señor, lavarlas no hay problemas, ahora dudo mucho que se sequen a tiempo - Te responde la joven, que recoge rapidamente tus ropas y sale de la sala de baños

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22/09/2012, 00:05
Phey Stern

Ouch, vaya... no había caído en la cuenta.

Cerró los ojos y se sumergió hasta la boca. Ya tendría tiempo de pensar en ello cuando tocase. Seguramente no tendría más remedio que pedir ropa nueva en el almacén, como sugirió la chica que está hablando con Aeryn.

Espera... no se vaya a ir...

¡¿Aeryn?! ¡¿Qué vas a hacer con el tema de la ropa?! ¡Si vas a mandar a tu chica a por ropa, que traiga también para mí!

No le agradaba la idea de vestir una ropa que no era la suya. Había llevado los mismos trapos desde que ingresó en el monasterio. Pero si solo se trata de tapar la desnudez mientras su camisola se seca, puede valer...

Mmmh...

Este baño está haciendo maravillas con las tensiones acumuladas por Phey. Ninguna preocupación le asalta.

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23/09/2012, 10:12
Udokal

Udokal asiente ante las palabras de Keloa mientras sigue observando a los tres humanos que les acompañan, cada uno peculiar a su estilo y todos tan distintos entre si. No tiene nada más que añadir a lo dicho por la lancera y espera que Pazzo haga la traducción al jefe de la colonia con la esperanza de que este pueda ayudarles en su objetivo. Seguramente le interese saber que una gran horda de pieles verdes anda por ahí tan cerca de su asentamiento, aunque no sean buenas noticias tendrán que estar preparados para lo que se les puede venir encima y que no los pillen por sorpresa como les sucedió a los de su clan.

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23/09/2012, 11:05
Pazzo-Bialy Stehlen

Después de oír la explicación de la pelirroja, Pazzo pone su cara lo mas seria posible que puede. Frunce el ceño mientras cuenta todo lo que ella le dijo.

Este no era un momento de hacer bromas, si lo que su extraña acompañante le acaba de contar era cierto, y no parecía que no lo fuera, están todos en un grave peligro. Sabía que si un clan de guerreros fuertes, como los O'shar, que siempre han vivido al limite con los pieles verdes, han sido aniquilados, una colonia de mineros no tendría ninguna posibilidad.

La pequeña traductora, mira con mucha curiosidad al hombre sentado en la silla para poder captar cualquier reacción suya. Ella también se preguntaba si los grandullones obtendrían las ayudas necesarias para seguir con su viaje. Seria sensato buscar a alguien mas en estas tierras? Ella tampoco sabia mas de lo que había mas allá de la mina. En sus viajes solo a usado las rutas de viaje, nada mas.

Ahora ya sabia un poco mas de los O'shar y sus propósitos. Que pasaría a partir de ahora era un asunto que empezó a preocupar a la pequeña Naiss...

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23/09/2012, 19:42
Aeryn

Aeryn frunció el ceño un tanto contrariada al oír lo difícil que sería disponer de ropa nueva de su talla. Mientras se sumergía en el agua caliente y perfumada, pensó en cómo se vería con ropa de hombre. No me queda más remedio que aceptar la propuesta, por lo menos durante lo que queda del día. Al fin y al cabo sólo será el tiempo que pasemos en la taberna cenando, después lo mejor que puedo hacer es retirarme a mi habitación a descansar. Mañana mi ropa ya estará lista seguramente y así podré ir a hablar con quien esté al mando de este asentamiento, necesitaré que Voki siga a mi lado y para ello tendrán que soltarlo. Sumida en sus pensamientos siguió aseándose mientras la joven la ayudaba con su pelo, volcando más cubos de agua caliente sobre ella.

- De acuerdo, me conformaré con ropa de hombre por ahora. Pero mañana a primera hora quisiera poder disponer de mi propia ropa, así que espero que para cuando despierte encontrármela limpia y seca.

Después de tantos días durmiendo sobre el duro suelo, sin poder darse un baño y pasando frío, aquellos minutos dentro del agua suponían un auténtico lujo para Aeryn. Relajó su cuerpo sintiendo las gotas resbalar por su cuerpo desnudo y sonrió ante la agradable sensación de ver cómo toda la mugre acumulada se iba con el jabón. Tan a gusto estaba que a punto estuvo de quedarse dormida, sólo la voz de Phey consiguió que no lo hiciera.

- Ya lo has oído. -Le dijo a la joven que la estaba ayudando.- Tráenos ropa limpia para los dos.

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23/09/2012, 19:56

Tanto Lord Heinnvart como el Enano presente escuchan todo el relato atentamente. Una vez que Pazzo queda en silencio, Lord Heinnvart se pone a juguetear con su pipa mientras adquiere una apariencia distraída. Esta así un buen rato hasta que vuelve en si.

- Sentimos vuestra perdida... siempre hemos considerado a los O´shar unos magníficos vecinos, y que todo un clan haya sido aniquilado es una noticia realmente mala.

- Desgracidamente, aunque vecinos, la verdad es que nuestro contacto con vuestros hermanos es practicamente inexistente, suelen venir de los distintas tribus una vez cada ciertos años, a cambiar pieles por minerales, supongo que si tenéis suficiente paciencia, alguno de vuestra raza aparecerá por aquí.

- Esto ha estado bastante tranquilo los ultimos meses, aunque tras vuestras palabras siento cierta inquietud, y es que hace unas semanas que no tenemos noticia de nuestro grupo de exploradores

- Puedo ordenar que se os suministre algo de ropa y armas, habrá que hacerlo a medida claro esta, aunque me temo que si destacamos en algo es por la forja, no el trabajo de pieles o la fabrica de armas de madera... Aun así la vida, aquí en la mina es dura y bastante cara, si decidís quedaros hasta que aparezca una de los vuestros, necesitareis trabajar, pero con vuestro aspecto estoy seguro que podréis encontrar trabajo rapidamente.

- Otra solución es que os podría pagar para que hicieseis las veces de exploradores o intentaseís encontrar a mi grupo desaparecido...

En ningun momento se pone en pie, si bien es educado y sus palabras suenan sosegadas.

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23/09/2012, 19:58

- Si mi lady - responde la jovencita a tus palabras, sin estar muy segura sobre el tratamiento adecuado con el que se tiene que dirigir, y algo asustadiza por tus palabras autoritarias, aunque a decir verdad, eres poco mayor que ella.

Tras esto, hace otra torpe reverencia y sale tambien de la zona de baños a cumplir con su cometido, dejandoos a los dos solos... desnudos... mientras el agua caliente comienza a limpiar el cansancio y las penurias pasadas durante los días de viaje

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23/09/2012, 22:33
Pazzo-Bialy Stehlen

Después de escuchar las palabras del Lord Heinnvart, Pazzo se da la vuelta y les explica todo a los O'shar, lo mejor que puede, para que ellos puedan entender lo máximo posible. No sabe que seria mejor acentuar mas, pues toda la información era importante.

Espera que las noticias sean de ayuda, por que se ponía en la situación de ellos y, aunque son gente dura, seguro que han sufrido por las perdidas tenidas.

La pequeña se acordó de su desgracia sufrida hace años y por poco los ojos se le llenan de lágrimas.

Al finalizar su traducción, Bialy se quedo pensativa, en silencio.

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24/09/2012, 12:18
Udokal

Udokal escuchó con respeto e interés las palabras del jefe de la colonia, aunque ni por su tono de voz ni por sus gestos pudo averiguar que les podría estar diciendo. Después atendió de la misma forma a la pequeña Pazzo, como si del mismo jefe de la colonia se tratara. Parecía que no habría problema en recibir ropas y armas para Keloa, lo cual era un verdadero alivio. Después les ofrecía dos posibilidades para pagar la deuda que contraerían con ellos, lo cual le parecía justo. Udokal desconocía que trabajos podía realizar en un lugar como aquel donde las costumbres parecían tan distintas a las de su tribu y tampoco le apetecía permanecer allí dentro más tiempo del necesario.
Si aceptaban el trabajo que les ofrecía el jefe de la colonia de salir a buscar a sus hombres desaparecidos podrían quizá encontrar también a algún otro O'Shar o al menos pagar sus deudas mientras esperaban a que otro de su tribu viniera por allí en ese tiempo. De todas formas una vez saldada su deuda con el jefe de la colonia volverían a ser libres de seguir su camino en busca de una nueva tribu O'Shar. Se quedó pensando en todas las posibilidades y después miró a Keloa.

-No me importa buscar a esos hombres perdidos como agradecimiento por las ropas y nuevas armas para ti y que me cosan las roturas de mis pieles. Si cuando los encontremos y regresemos no ha llegado ningún otro O'Shar seremos libres de buscar a la tribu más cercana.

Quizá Keloa prefiriera escoger alguna de las otras opciones que les ofrecían y él no estaba dispuesto a separarse de ella, era lo único que le quedaba de su pasado perdido.

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24/09/2012, 12:12
Phey Stern

Mientras el baño relajante daba sueño a Aeryn, a Phey lo volvía más hablador.

Genial. Con las ropas que nos den ya podremos ir a ver a Lord Heinnvart-dice desde más allá de su biombo-. Así Voki no tendrá que pasar la noche en el calabozo. ¿Qué planes tienes para después?-no se refería a después del baño-Necesitaré la ayuda de Voki para volver al sur, eso si consigo convencerle de no esperar todo el invierno en la colonia. No sé que asuntos te traes aquí, pero si va para largo no me voy a ir solo con Voki. Tampoco voy a "robarte" el guía. ¿Qué habrá sido de los Oshar? Supongo que es normal que nuestros caminos se separen al llegar aquí, pero tendrán muchos problemas con el idioma. Les va a costar adaptarse a la vida aquí. Pero seguro que con lo grandes que son, en la mina serán bien recibidos. Voki no cree que puedan llevar una vida de mineros, pero... ¿porqué no? Es una vida sencilla y sin preocupaciones. No debe de ser muy distinta a la vida salvaje que llevaban hasta ahora... salvo que se pasarán muchas horas al día bajo tierra. Estarán bien. ¿No crees?

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24/09/2012, 21:38
Aeryn

Definitivamente se estaba muy bien allí, hacía tanto tiempo que no se relajaba de aquella manera que el sopor poco a poco la fue venciendo, hasta que la despertó bruscamente de su duermevela con la voz de Phey. Enarcó una ceja molesta ante el parloteo del sacerdote, parece una vieja comadre con sus vecinas. Apenas prestó atención a la cháchara, aunque alguna que otra palabra se le quedó grabada.

- ¿Estás loco? Yo no pienso ir a ver a nadie con ropas de hombre prestadas. Y por Voki no te preocupes, una noche encerrado no le sentará mal, a ver si así consigue endulzar un poco su carácter. -Se mordió el labio indecisa ante la idea de que el sacerdote se volviera al sur junto al explorador.

Hasta ahora había ido hacia el norte y habían conseguido llegar a salvo al asentamiento minero, pero de lo que fuera a ocurrir a partir de ese momento Aeryn todavía no estaba segura, antes tendría que estudiar los movimientos a seguir. Pero la idea de que Voki la abandonara para volverse al sur no le hacía ninguna gracia.

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25/09/2012, 12:43
Phey Stern

¡Oh, vamos! Llevarás la armadura por encima de tus ropas, nadie sabrá que es una vestimenta de hombre. Podemos evitarle un mal trago a Voki. Yo voy a ir esta tarde, pero mi petición pierde fuerza si no estás tú para respaldarla. Después de todo, trabaja para ti... sonaría raro que su jefa no fuera para decir unas palabras buenas de Voki en favor de su liberación.

No era eso lo que molestó a Aeryn, pero Phey no tenía manera de saberlo. Desde su perspectiva, Aeryn simplemente actuaba con desapego hacia los de condición inferior. Por supuesto, no le diría tal cosa. ¿Soltarle que no le gustaba su actitud? Era como si, al entrar en la posada, la Alhyon se volviese una clasista y el Osht se hubiese transformado en su pepito grillo.

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25/09/2012, 16:38

Notas de juego

(ya es de noche... o al menos ha oscurecido. Calcular que han pasado de las 7 de la tarde)

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25/09/2012, 19:07
Keloa

Keloa espera impasible la respuesta del jefe del clan, sin apartar la mirada gris y distante de él, mientras Pazzo traduce lo dicho, esperaba, palabra por palabra. Una vez la respuesta llega, la pelirroja lancera se mantiene en la misma actitud de respeto, pero también orgullo. Finalmente, cuando la pequeña humana vuelve a hacer las paces de traductora, Keloa asiente, bajando la mirada, en un gesto de respeto hacia el jefe del clan. Aceptaba sus palabras y sus respetos hacia las pérdidas de sus hermanos.

Escucha a Udokal sin apartar la mirada del hombre de cara redondeada y, finalmente, gira su rostro hacia su hermano por fin, otorgándole toda su atención.

- Me parece un trato justo. Ellos nos ayudan y nosotros los ayudamos.

Luego mira a Pazzo una vez más, inclinando la cabeza para poder tener contacto visual con sus ojos verdes.

- Diles que aceptamos ir en busca de su gente a cambio de ropas y armas. Cuando los traigamos de vuelta ya decidiremos qué hacer. -Parecía que ya había acabado de hablar cuando añade unas palabras más- Y que gracias por sus palabras de consuelo.

La lancera nunca había sido dada a la diplomacia, y últimamente había tenido que tratar con más forasteros de los que habría deseado en toda su vida O'Shar, así que aunque su voz es dulce y melodiosa, sus palabras y su modo de expresarse parecen todavía torpes.