Partida Rol por web

Me rio y miro a las otras con cara de "No se vosotras, pero yo voy" me acabe lo que me quedaba del cubata de dos tragos, apoye la bebida y me fui detras de Lili a la pista. Me costo bastante llegar a ella, habia bastante gente en la pista de baile pero me pude hacer hueco entre la multitud. Al llegar a ella sonrei y me puse a bailar a su lado, me deje llevar por el ritmo de la musica, por el contraste que hacia el Dj al cambiar de cancion donde bajaba y subia la regularidad de la musica, incluso hubo momentos en los que cerraba los ojos y me dejaba llevar durante un rato dejando que mi cuerpo se moviera al compas, pero volvia abrirlos y a volver a la realidad.

Cuando el jefe me ofrece a Tim como acompañante casi suelto una carcajada. Ese joven entusiasta me saca de mis casillas y casi es mejor que no trabajemos juntos, por mi bien y por el suyo.

Asiento levemente con la cabeza mientras me explica lo de las casas y, aunque no dejo que mi cara exprese nada, estoy flipando. ¡Ni siquiera han investigado el modus operandi! Sigo rígida, más que una policía parezco un militar, pero no me importa. Hay que guardar respeto a los superiores.

-Bien, señor, ¿alguna cosa más o parto ya?-le digo teniendo muy claro que mi primer paso será la primera casa.

Cogió la tarjeta y la pulsera con un movimiento mecánico, su atención estaba puesta en el hombre, en el modo de moverse, de hablar. 

-Claro, no hay problema. 

Hubiera podido pedirle un pase para su hija, para ella habría sido un motivo de distracción, pero ni siquiera se le ocurrió. ¿Qué le pasaba? Era una mujer de mundo, y no precisamente una niña inexperta. No era fácil fascinarla, había visto muchos hombres encantadores, pero esa voz... esa... ¿Aura...?

-Disculpe mi pregunta, pero no he podido evitar fijarme en la musicalidad y la tesitura de su voz. ¿Es usted cantante? ¿Ópera...? Barítono, sin duda... 

- Bueno - digo, agarrando mi Cosmopolitan. - ¡Es hora de que alguien le dé la bienvenida! - Le dejé dos billetes de 100 en el mostrador, le agradecí cortésmente y me acerqué a la chica, con mi bebida en la mano.

- Creo que debería agradecerte por esto, este trago es excelente. ¡Y yo que pensaba que el daikiri de durazno era insuperable! - Le dije, señalando el Cosmo y bebiendo un trago. - Darren, un gusto. Discúlpame si fui muy atrevido, aunque creo que no sería el primero. - Y miré en la dirección donde los chicos seguían intentando ligar con sus amigas. Lancé una risotada y me puse a bailar.

Una vez localizada la caja fuerte, Jeremy se dirigió a ella con paso firme por el corto periodo de tiempo que tenían para dar el golpe, pero con todo el cuidado posible de no romper ni tirar nada. Cuanto más tardase el dueño en darse cuenta del robo menos posiblidades tendrían de ser descubiertos.

Trevor encontró un posible golpe, y la verdad es que a Jeremy le parecía interesante. - De normal no solemos comerciar con ese tipo de piezas, pero se lo diremos al jefe para que vaya buscando posibles compradores. - Si realizaban el golpe tendrian que tener unos posibles compradores antes del robo, porque luego llamarían la atención - Mientras tanto podremos ir investigando para saber en que horario está fuera de casa. Pero tendra que ser cuanto antes. -

Revisó con cuidado al rededor de la caja fuerte por si había alguna alarma conectada a la caja fuerte, pero al no ver nada sospechoso se puso manos a la obra.

- Compañeros, ahora necesito un poco de silencio - a la vez que pegaba la oreja a la puerta. Empezó a mover la rueda. _{- Primera vuelta correcta -} siguió moviendo la rueda pendiente del proximo clíck _{- vale, otra hecha, ahora una vuelta más y...} ¡Voila! -

Puso la mano en la maneta, y la accionó haciendo que la puerta se abriese, pero con cuidado de que no hubiese ningún dispositivo dentro que accionase alguna trampa.

Neylan sigue preguntándose por qué la renuencia en revelar la naturaleza del proyecto, pues era bien sabido que grandes empresas o marcas hasta hacían campañas para mostrar lo que quieren construir o sus avances arquitectónicos como una demostración de poderío económico y social; pero, por otro lado, sí sabía de la existencia de proyectos secretos cuando involucraban datos financieros o nombres que no querían que saliesen a la luz pública. Consideraba que era la segunda opción, pero había más posibilidades que no había contemplado y lo reconocía.

Asintió y sonrió de lado con la sugerencia de ver la letra pequeña. Vaya que su jefe le estimaba y lo agradecía. Eso sí, mientras todo eso sucedía la rubia escribía para poder dar una respuesta coherente a toda la información proporcionada. Con una mano libre tomó la tarjeta con los datos para darle un vistazo rápido a la vez que rememorar la historia de TCorp. Sí, era una corporación poderosa y antigua, como otras de renombre y prestigio. Sí, le impresionaba, pero no la tomaba de sorpresa como a una niña que conocería algo de un museo.

Cuando terminó de escribir mostró la hoja a su jefe: -"Gracias por todo. Cuando termine el proyecto volveré para acá, ¿verdad? ¿Sabe si debo mandar un correo de una vez o después de presentarme? ... y voy a dormir poco -_-".

Se encogió de hombros cuando él terminara de leer y mientras tanto fue a su escritorio para llevarse algunas cosas y tenerlas en su resguardo cuando ya fuese miembro oficial del misterioso proyecto. 

Doctor… pensaba que iba a ser más complicado… no se, es raro, que cuerpo más… sano y fuerte… bueno, haré que le lleven al box para que pueda descansar, si quiere después puede pasarse.

- Si, la verdad es que ha tenido mucha suerte... pero mucha. - Contestó dubitativo el joven médico, sin estar muy convencido de sus propias palabras. - En un momento me paso a verle.

Mientras se lavaba las manos en la sala contigua, seguía pensando en aquella operación. Había sido demasiado fácil. Hugo había leído casos como este, no eran muy comunes, pero siempre pensó que eran habladurías, cuentos de sirena. Simplemente es un tipo con suerte, no hay más... Era la única conclusión lógica a la que le llevaban todos los caminos.

Se quitó el gorro de cirujano con una mano y lo tiró a la papelera. Ese día no había traído el suyo propio personalizado, así que utilizó uno de usar y tirar de los del hospital. 

Finalmente salió de la sección quirúrgica para ir a ver al paciente, con la intención de comunicar a la policía que el paciente estaba allí y estaba estable, esperando que le dieran instrucciones sobre qué hacer.

Ciudad de Nueva York, 15 de octubre de 2017 22.00 horas

En el laboratorio se había extendido un poco la jornada para Nora, ella era de los más nuevos, por lo que normalmente solían dejarle a ella el trabajo más pesado y hoy le había tocado quedarse la última, a fin de cuentas era viernes y estaba claro que todos querían volver rápidamente a casa. El lugar ya estaba vacío y prácticamente no había nadie salvo los guardias de seguridad que aportan un poco de luz a aquel sombrío y solitario lugar. Tom, un chico más o menos de su edad era uno de esos guardias de seguridad, con una agradable sonrisa cuando se encuentra a Nora le saluda:

Vaya… parece que otra vez te ha tocado quedarte hasta tarde… ten cuidado cuando vuelvas a casa, la ciudad está cada vez peor… y por cierto abrigate que hace un frío que pela

Decía el chico amablemente, era un chico simpático y amable, que intentaba dar un poco de conversación amigable a todos los que trabajaban en la universidad. Allí ante ella estaba la noche neoyorkina de un viernes por la noche.

El joven médico entra en el box en donde el paciente estaba acostado, aún sedado, mientras se acerca puede notar como parece que va recuperándose, allí junto a el se encuentra Sam observando, al verle llegar dice:

Doctor, parece que va recuperandose bien…

En ese momento escuchan un ruido fuerte fuera, como de algo golpeando el suelo, Sam se extraña y abre un poco las cortinas, ambos pueden ver como los dos miembros de seguridad están inconscientes en el suelo y un hombre de más de dos metros camina en silencio hacia donde ellos están, el hombre musculoso y con el pelo largo camina serio, no hace ningún gesto amenazante, sin embargo, su sola presencia parece generar cierta inquietud en los presentes, de hecho el doctor siente un escalofrío, está seguro que si se lo encontrase por la calle cruzaría de acera, ese hombre por algun motivo tenia una presencia aterradora, pero ahora estaba ahí frente a él y caminaba con paso seguro hacia donde él y Sam se encontraban

El hombre se queda unos momentos observando y niega con la cabeza mientras dice:

Realmente no dijeron mucho, que querían contactar contigo, supongo que seria buena idea que mandes un mail o algo asi para concertar una cita… y más si es con alguien del equipo de dirección que seguramente estarán bastante ocupados.

El hombre se queda unos momentos pensando y añade entonces:

Después acuérdate de contarnos como ha sido estar con los peces gordos de la ciudad eh

Decía en un tono de broma, el hombre toma asiento entonces y comienza a apagar su ordenador, parecía que su jornada había terminado con esa pequeña conversación con ella.

La chica se queda mirando a Darren unos momentos y dice:

No es una bebida especialmente extraña… bueno, entonces tú también vas a intentar ligar conmigo ¿no?

La chica se pone un dedo en el labio unos segundos mientras se queda un poco pensando y añade:

Entonces qué táctica vas a usar, la de quedarte bailando al lado mio, la de hacerte el caballero andante…

Decia mientras seguia bailando, se notaba que estaba acostumbrada a toda clase de entradas de hombres

El hombre sonríe ante la pregunta de la mujer y asiente:

Si... Ha acertado, así fue como conocí al Señor Du Pui hace muchos años, él acudió a una de mis presentaciones en la ópera de Roma y parece que le gusto ya que me pidió que actuara para él en persona... Y así hasta nuestros días en los que hemos mantenido una relación profesional muy intensa

Decía con un tono agradable, parecía que estaba recordando algo que pasó hace muchos años, sin embargo, no podría haber pasado más de diez años ya que era una persona joven, más o menos de la edad de Sarah. Tras una sonrisa añade:

Ahora si me disculpa, he de ocuparme de otros asuntos... Por supuesto no dude en contactar si le surge cualquier problema o duda.

El hombre mira a la agente y dice:

No... Así que espero resultados.

En la carpeta Liberty tenía información de las tres casas, aparentemente todas en buenos barrios y en donde la policía solía patrullar a menudo, lo que hacía que fuera más complicado atracarlos. Cuando se dirige hacia la primera casa ya notaba el frío nocturno, aparentemente iba a ser un otoño bastante frío, aunque no tanto como sin duda lo sería el invierno.

No tarda mucho en llegar a la casa, está en la zona de Central Park, además ha podido ver que la tercera casa esta cerca, la segunda está en las afueras. La casa es como casi todas las casas de la zona un piso situado en un edificio algo antiguo pero que han reformado en varias ocasiones, pudiéndose ver claramente que es un edificio de lujo. En la puerta se encuentra con un hombre de color que hace las funciones de portero:

Buenas noches... No me resulta familiar... Dígame, ¿viene a visitar a alguien? Si es asi, por favor apuntense aqui...

El hombre le extiende una hoja en la que podía verse que tenía que poner sus datos personales, a quien iba a visitar y el motivo.

Las chicas bailaban animadamente en la pista de baile, a su alrededor algunas personas más hacian lo mismo, parecía que todo el mundo se lo estaba pasando bastante bien, tras cierto tiempo que Rose no sabria decir se coloca junto a ellas aquella chica oriental que había visto antes, Lili le observa unos instantes. Era extraño, viéndola más de cerca parecía atrayente, quizás desprende esa especie de aura de misticismo o de atracción que algunos decian tenian las personas orientales, fuera lo que fuera, era como si un aura de misterio rodeaba a la chica, esta empieza a hablar:

Perdonad pero... Me gustaría proponer algo a una de vosotras, llevo un rato esperando a mi acompañante ya que he de verme con una persona en la sala VIP pero no ha llegado, simplemente necesito a alguien que me acompañe para no entrar sola... Dentro quien quiera venir puede disfrutar de la sala VIP... Solo eso., no pretendo nada sexual ni similar con vosotras, solo necesito a alguien para entrar con acompañante

Dice la chica, mientras mostraba la pulsera que la identificaba como VIP que tenía en su muñeca.

Cuando la bailarina llama a Sally apenas pasan tres tonos cuando escucha la voz de la chica, una voz enérgica y animada, como siempre estaba ella que le dice:

¿Si.... Dime? ¿ya has terminado de hablar con el señor Thomson?

Decía con cierto tono de curiosidad, al mismo tiempo podía ver como la pareja se había levantado y se disponía a marcharse hacia el exterior, mientras le miraban con cierto desagrado y cuchicheaban algo entre ellos, aparentemente molestos por cómo ella les había tratado.

Mientras Jeremy estaba con la caja fuerte sus demás compañeros estaban mirando por la sala algo más interesante que robar, Trevor dice:

No te preocupes, yo me encargo de buscar información, seguro que al jefe le gusta esa casa

Tras algún rato consigue abrir la caja, le había costado un poco más de lo esperado, estaba claro que era una caja con bastante seguridad, pero después de algo más de 5 minutos la había abierto. Dentro podía encontrar dinero en metálico, por el tamaño de los billetes debían ser al menos 3 000 dolares, ademas de algunos documentos en un par de carpetas.

-En 10 minutos nos vamos - No quería tentar a la suerte y apurar el tiempo que tenían.

Jeremy cogió las carpetas y se fue a la primera habitación sin ventanas. Después de ajustar la puerta encendió la luz y revisó los papeles en busca de cosas importantes que le fuesen de utilidad.

Hace frío, pero no me preocupa. Mi cuerpo hace años que se ha acostumbrado al frío. Llego bastante pronto a la primera casa que atracaron y, compruebo satisfecha que la tercera está cerca. Pero ¿por qué atracar las dos primeras tan separadas y volver al barrio del primer atraco para realizar el tercero?

Llego al sitio en cuestión y el portero me habla. 

"Agh" pienso.

-Buenas noches-digo tratando de sonar amable aunque queda un tono raro ya que no lo uso habitualmente-, soy policía, vengo en una misión-le digo  sin hacer el mas mínimo gesto de firmar aquel absurdo papel.

Parpadeó varias veces, no le encajaba algo, pero no sabía qué. ¿Muchos años...? No podían ser tantos. Y tampoco recordaba haberle visto actuar en ninguna parte, y estaba segura de que lo recordaría, absolutamente segura. Era un hombre... especial. Pero él se despedía, se iba.

-Claro, muchas gracias por traerme una noticia y una invitación tan interesantes. Yo...

Vaciló unos segundos, no sabía hasta que punto era una impertinencia lo que quería comentarle, pero se lanzó a la piscina cuando se dio cuenta de que en su fascinación se había olvidado por completo de Nora.

-...me preguntaba si era posible obtener un pase para esa actuación. Es para mi hija, Nora. Estoy segura de que le encantaría verme actuar allí, es algo que no se espera. ¿Quizá... quizá es muy atrevido por mi parte, Sr.Thomson...?

- Es buena tu habilidad para poner en jaque a tus pretendientes (risa). Sin embargo, conmigo te has equivocado de pleno. Nunca he estado con ninguna mujer, ni hombre, ni tampoco me interesan por el momento. A fines prácticos, podrías considerarme asexuado. -

No era mentira lo que le decía, no totalmente al menos. No buscaba ligar con ella, y tampoco buscaba aventuras. Me parecía más fácil ir a un burdel para eso, donde no tenía que esforzarme en conquistar a nadie.

- Me interesó mucho la estrategia del caballero andante. Disculpa (risa) , pero es la primera vez que escucho algo así.. ¿Cómo funciona? -