Partida Rol por web

Miro mis manos y toco mi rostro, nerviosa. Corro hacia la pared de la sala dónde están los rostros de todos los que estamos allí y miro el mío. No puedo evitar que dos lágrimas se deslicen por mi rostro y se me escapa una sonrisa al ver que vuelve a estar a medio pintar. Entonces corro hacia Dylan, le abrazo y le beso, nerviosa. - Amor, no te preocupes. No pienso dejarte solo nunca.

Miro a Antonella y al periodista, con una sonrisa que muestra tristeza por ellos y por mi prometido. - Ha ocurrido... He vuelto al bar.

Me giro al resto, agarrando la mano de mi prometido. - Supongo que queréis una explicación, y me encantaría poder dar otra que sea más lógica que el hecho de que llegué a este lugar tras lo que le ocurrió al señor Flynn. Estoy en ambos lugares a la vez... Pido, por favor, que si alguno vuelve como Dean o yo, no contéis mi secreto o volvería a morir a manos de esa banda... Yo lo único que quiero es poder ayudar a los que estáis aquí... Por favor, no hagáis que me maten... Además, ahora es un buen momento, puedo dar mensajes de vuestra parte sin delatarme, así que... ¿Alguien quiere que diga algo en su nombre?

-Chloe!-No me puedo creer lo que ven mis ojos. Ha vuelto, está viva pero... al mismo tiempo está con nosotros. No sé como es posible pero da igual. Pase lo que pase estaré con ella. Es sencillamente perfecto.-Gracias al cielo, has revivido!-Corro hacia ella para darle un largo beso en los labios.-Soy tan feliz... Has vuelto pero aún así sigues aquí, conmigo. Esto es increíble. No...  No sé como es posible, pero es genial.

La miro a los ojos y me pongo algo serio.-Por favor, dile a mi madre y a mi hermana que me has visto aquí y que te he dicho que les digas que sigan adelante. Que yo estoy bien, que padre está aquí, conmigo. Y... Si puedes intenta averiguar quien acabó conmigo y con Jane y Gordon. Ya sé que esto no debería pedírtelo, pero... Si puedes sacarme de aquí hazlo. Me da escalofríos.

Al ver como Dylan me acusa cierro los puños con fuerza.

-Bastante tuve con aguantar vuestras acusaciones en vida, no tengo por que hacerlo ahora muerto.- Digo airadamente.- ¿Por que motivo iba yo a querer tu muerte muchacho? ¿O la de cualquiera de los presentes? Estoy cansado de vuestras miradas de prepotencia y altanería con las que me mirais. Soy humano y e cometido fallos a lo largo de mi vida, pero no soy un asesino. Me acusas de matarte, Gordon me acusa de lo mismo y yo os repito que no lo soy. Podría haber tolerado una acusación, delante de todos. Podría haberlo entendido... ¡¿Pero veneno?! Por mi podéis iros al infierno.

Me aparto del resto con un gesto de cansancio buscando un lugar donde estar solo. 

¿Quién enviará el mensaje?

La caja de música aparece de repente en tu cabeza mientras piensas en lo que has perdido.

Te uniste a la banda para hacer justicia pero tu propia hermana te ha traicionado. Comienzas a recordar en paralelo la niñez en la India, donde tu hermana parecía siempre brillar con luz propia. Luego recuerdas a tus compañeros de la Banda y piensas en aquellos que permanecían aún arriba.

De repente, en uno de los muebles de aquel sucio y polvoriento ático, puedes ver a Dean, Kana y Nicholas hablando. Sabes en tu corazón que de hablarle a uno de ellos, te escucharía por un corto momento. Puedes lograr hacerle llegar un mensaje a uno de ellos. ¿A quién elegirás para enviarle un mensaje?

Agarro las manos de mi prometido, con los ojos llenos de lágrimas. - Te prometo que haré lo posible para sacarte de aquí... De momento, sólo he podido acercarme a tu hermana... Está muy triste. Le he trasmitido tu mensaje... Espero que le de fuerzas. 

Miro a Niraj, con el rostro apenado. - Tiene que haber sido muy duro para ambos lo que ha pasado... Tu hermana ha contado lo que hizo y por qué lo hizo... Si no se ha equivocado, ha tenido un coraje admirable. Yo no hubiera podido señalar a uno de mis hermanos ni aunque tuviera toda la certeza del mundo...

Por último, suelto un bufido cuando el ministro se va enfadado a un rincón. - Veneno o no, no cambia nada... Usted ha mentido, incluso cuando ha llegado a aquí... Y no me sorprendería, por lo que se está dando a entender en el bar, que haya más mentiras. No sé cómo puede acostarse al lado de su esposa cada noche con lo que hizo y con lo que parece que seguía haciendo. - Cuando digo esto último, se nota que estoy muy molesta, como si fuera algo personal.

Tras acercarme a aquel sucio y polvoriento mueble me decido por enviarle un mensaje a Nicholas.

" - Nicholas, pese lo que me hizo Kana traicionandome no debeis matarla. Os pido que no vayais por ella, al menos por el momento. Ten cuidado tambien con Chloe, esta conectada en ambos mundos...."

Demasiadas personas, demasiadas caras pero sobre todo una de ellas era a quien quería ver, pero antes de contestar a la pregunta del Cox se dirigio a la mujer.

-Lo sabia, sabia que podrías volver Chloe. Habla en mi nombre, Di todo lo que os dije a ti y a Antonella cuando llegue aquí, mis sospechosos y mi relación con el Ministro y su secretaria. Que todos sepan mi verdad por favor, una ultima noticia de este periodista.-Dicho esto y con el alma mas tranquila. EL periodista paso la mirada por la mujer de de Cox antes de reparar en él.

-Señor Cox... Vera. esa foto es de mi MADRE.-Lo dijo sin medias tintas, estaban muertos ya no tenia sentido aderezarlo.-Y la fecha al dorso es la de mi nacimiento, el mismo año que ella se alejo. Y si aun no lo has entendido, PADRE. Yo soy tu hijo, ese mismo año hace 9 meses me concebisteis y desde entonces he estado solo con mi madre, sin conocer a mi padre. Por eso vine esta noche aquí, por eso me arriesgue a entrar al bar a pesar de la amenaza de la banda. Y espero sinceramente que no seas uno de ellos. Porque saber que un padre es un asesino no tiene nombre.-Paso su mano por su cabello, estaba nervioso y a pesar de estar muerto sentía sudores fríos.

Jodo. Pues si Niraj no ha creado ningún esbirro. Creo que esto es el final :S

Pongo una mano sobre el hombro del periodista. - Ya lo he hecho, me parecía lo justo, pero... ¿Adivinas quién está tratando de tergiversar la historia diciendo que no existe ninguna carta con los sentimientos del señor Cox? Tenías razón al decir que algo te olía mal sobre él... Todos allí defendemos que el Ministro es culpable, menos él, que lo hace añadiendo más mentiras a toda esta historia... Además, está acusándote de ser quien envenenó esas copas, lo cual no tendría sentido. Muchos bebieron después de que llegaras a este ático... Lamento mucho ser yo quien te diga cómo está la situación, pero te aseguro que estoy haciendo lo posible por que se sepa la verdad, aunque eso pueda significar que mi cuadro vuelva a ser pintado y no vuelva al bar nunca más...

-Ese tipo siempre a sido un estúpido. ¿Como voy a envenenar nada si estoy muerto?-Es lo único que dijo al escuchar las palabras de Chloe, pues aun esperaba una respuesta de su padre.-Pero gracias por hacerlo.

El sonido de la caja de música invade tu mente pero no sabes de dónde viene.

Aunque la única persona querida que tenías está contigo en este terrible lugar, sientes una conexión especial con el bar. Tal vez por un momento podrías hacer llegar un mensaje, hacer que te escucharan... La pregunta es ¿Qué decir?

El shock de haber muerto y verse obligado a dejar a su hija le había pesado más de lo que se podría pensar, de ahí tanto silencio de su parte. Tras pasado el rato, solo se limito a decir.

- Chloe, por favor... dile a mi hija que la amo, y que sea fuerte, que cuide bien sus espaldas... Y no tengo duda alguna de que Cox es uno de los asesinos... de seguro alguno de sus compañeros me habrá envenenando. Les pido disculpas, Dylan y Jane, es obvio que yo era un riesgo para ellos y que me querían muerto.-

Sonrei alegre cuando Chloe nos confirmo que habia revivido, aunque cierta parte de ella le tenia envidia y se sentia triste porque su resureccion no pasaria. Al menos eso pensaba ahora.

Me alegro que volvieras, ojala por un largo tiempo. Mandale mis buenos deseos a Colette...dice con una sonrisa forzada. No hay mas que pueda decirte, ya que no se que pasa en el bar. dice dejando un pasar algo de su frustracion.

No dije nada durante un buen rato. Seguía dolido por como había perdido la vida. Era duro el recuerdo de ser traicionado por la persona en la que más confiabas. Alguien que conocía desde mi infancia.

- Me alegro que vuelvas al mundo de los vivos srta Monroe. Dije finalmente cuando deseche mis pensamientos y me digné a dejar atras mis momentos de absorta soledad.

Podrias... podrias decirle a mi hermana, que pese a lo que ha ocurrido, la sigo queriendo.. la susurré en un momento en el que tuvimos un poco de intimidad.

Me giro mirando a Richards seriamente.

-Tu madre... De ser eso cierto... No. Esa mujer desapareció de mi vida. Optó por irse y cuando traté de buscarla no quiso responderme. No a querido volver a verme a pesar de haber tratado de encontrarla.- Dije cerrando los ojos con dolor. Negue con la cabeza tristemente. Luego vi a Chloe.- Digales que se centren en buscar al resto de asesinos. No deberían revivir a nadie de los presentes, se estan arriesgando a echar por la borda el mas mínimo progreso que hayan dado. Ademas... Si yo fuera uno de los asesinos -digo girándome a Gordon- ¿Me puede explicar como es que estoy muerto? No han podido esperar a la votación y uno de ustedes a preferido matarme. La carta... Bah, están todos condenados y se niegan a escucharme. Solo van a empeorar la situación.

Levanto una ceja cuando me dirijo al ministro ante su petición. - No pienso hacer eso. Está más que demostrada la inocencia de mi prometido y todos en el bar están de acuerdo, por lo que confío en que vuelva en cuanto sea posible. No voy a impedir que eso pase, se lo garantizo. Entonces... ¿Había una carta? Alguien de allí se empeña en decir que no es así.

-Puede que ahora la encuentres y ella misma te responda, después de todo solo con su muerte supe de ti, papa.-Contesto secamente al ministro, no podía creer que no le creyera.

La voz de Stephen resuena en la cabeza de todos y el silencio llena el lugar, pero había algo más sucediendo. Gordon se mira a sí mismo con confusión en su rostro. Dylan y Jane se le acercan pero ya no pueden tocarlo. Algunos saben qué significa, otros no lo tienen claro pero antes de poder entender bien lo que ha sucedido, Gordon ya ha desaparecido, al igual que su retrato.

Mientras escuchas las palabras de Richards atentamente, notas que algo te sucede y te miras las manos perplejo. Tu silueta comienza a desaparecer y sin estar muy seguro de lo que sucede, volteas a mirar el retrato en la pared, el cual parece estar desvaneciéndose poco a poco, al igual que tú.

Esta música te lleva a algún lugar, aunque no tienes certeza de cuál será...