Partida Rol por web

Esta bien que intentes proteger...Tu reino, pero si el plan es este, creo que yo ire a intentar devolver a Hécate al sitio quie le corresponde, hablar con Elara, e intentar acabar con ese jackings. - Había decisión en sus palabras, pero también estaba claro que hablaba con el corazón, ahi se notaba su juventud

- Haz lo que te venga en gana, pero no tienes ninguna posibilidad contra Godmaster y los demás -respondió la liche, seca- Además, devolver a Hécate a su trono rompería el equilibrio. Tendrás que esparcir un poco de mal si quieres que las cosas sigan estables... ¿y estás dispuesto a ello?

¿ A que acciones en concreto te refieres ?- Ahora Ryo la miraba a los ojos

- A las que mayor beneficio te reporten, si eres lista -responde, sin darle mayor importancia.

- Yo no iré por ahí haciendo el mal, aunque quisiese no soy capaz. Quizás sea el momento de dividirnos.

Hades escuchaba atentamente el debate entre los aventureros hasta que por un momento no pudo evitar hablar.

Liberar a Hecate Mmmmmmmm... Zeus la ha aprisionado.
No te diré que hacer ya que no es mi tarea, te diré que haría yo por Hecate. La dejaría donde está ya que no sería bueno contradecir bueno... Mira hacia arriba. A tú sabes quien no?
Han hecho una buena tarea aquí ahora la guerra se manifestará y luchará contra ustedes.
Entiendo su devoción hacia nosotros y se que no es lo correcto que yo lo diga, pero ocupense de los asuntos de los mortales, se que habrá tiempo para que estén en el mundo de los dioses mas adelante, no tengo dudas de eso.

Esta bien. - Dijo con resignación, sabía que Hades tenía razón.

- Planeemos nuestro próximo  movimiento.¿ Realmente creeis que es mejor esperar que ir a su encuentro? Ahora parecía mas tranquila.

- No quiero ser pesado, pero me gustaría saber si el cancervero obedece órdenes.

El cancerbero obedece MIS ordenes...para eso lo he creado...responde orgulloso el dios de los muertos.
Es una bestia de la cual estoy orgulloso...agrega sonriendo con malicia. Sus labios se despegan como a punto de agregar algo...y al final lo hacen.
Créanme...ese cachorro es capaz de acabar con cualquier mortal...alimento no le falta. Señala mirando a su alrededor.

El dios, se cruza de brazos entonces, apoyando las manos sobre el puño de su espada...
El inframundo está a salvo... finaliza sin ninguna duda el inmortal dios.

De todos modos, agrega dirigiéndose al implacable arquero, no deben temer por el gran can. Infinitas puertas en éste lugar van a todos los lugares, todos los planos...Son entradas para unas pocas almas que llegan, por caminos tortuosos, distintos a los de las almas normales. HAHAHa...casi podría decir que estas tierras rivalizan en eso con La Union...y aunque se que no es asi, estas puertas sí están a mi disposición,....el dios se vuelve hacia Nekrhatag estrechando a la lich contra su cuerpo en un poderoso abrazo...y a la vuestra amor mio. le susurra

- No, no temo por él, pero si hemos de presentar batalla aquí, podría ser un valioso aliado, sería cuestión de ayudarle en la puerta cuando lleguen. La segunda pregunta sería, ¿Por qué sabemos que ese grupo atacará el inframundo?

Akin tiene razón antes de dar por bueno que atacarán aqui, hemos de asegurarnos de que esa información es cierta. Podría ser una trampa y su objetivo ser otro

A Nekrhatag parece costarle separarse de los fuertes y descomunales brazos de su amado, alargando el beso mientras sus compañeros continúan hablando. Una vez el parloteo comienza a resultarle molesto, se vuelve hacia ellos para responder.

- Los muy estúpidos me ofrecieron unirme a ellos argumentando que tomarían el Inframundo, y parecían hablar con convicción así que no creo que mintieran -una gutural risa se escapa antes de tiempo por un colgajo de piel de la liche- Ilusos. Preferiría plantarles cara yo misma, pero espero que el Cancerbero haga un buen trabajo y no anden por aquí de puerta en puerta. Te enviaré unas cuantas almas para que le nutras, cariño.

Para la muerta viviente, hablar sobre matanzas, esparcir el mal o cualquier otro acto amoral parece resultarle tan normal como hablar del tiempo o lo cara que se ha puesto la cebada lo sería para cualquier otro mortal.

- Supongo que tendremos que partir, entonces -por un momento, entre el caótico amasijo de huesos, pellejos y metales mágicos parece vislumbrarse el rostro apenado de una pequeña pelirroja. La visión resultó tan fugaz como horrorosa- ¿A dónde?

Se me ocurre una idea para llegar hasta ellos. creo que no seria mala idea que les dijeras que te lo has pensado y que aceptas su propuesta, pero no se te olvide de pedir un alto precio. Es casi seguro que con  esta estrategia nos lleven hasta sus jefes, así podríamos enfrentarnos a algunos de ellos. Ryo estaba nerviosa, cambiaba su peso de un pie al otro, mientras no podía evitar jugutear con sus dedos . El mundo había girado y o para bien, pensó en sus hermanos muertos. 

Esos cabrones quieren llevar la destrucción al mundo, pero se han metido con las personas equivocadas, voy a pararles los pies. - Ahora Ryo apretó el puño con fuerza.  Ahora se creen intocables por que nadie se  ha atrevido a hacerles frente, y aquellos que lo han hecho han caido muertos. Es el momento de demostrarles de que se les puede tocar, hacer que sientan parte del dolor que están causando.- Unas lágrimas asomaron en sus bonitos ojos rasgados

Fendoriel no había dicho mucho, estaba un tanto maravillado por todo aquello nuevo que acontecía.

A mi que me importa ese Godmaster, Unglar y sus orcos van a destruir a todo el continente y a Qualinost junto con él.
Todos, humanos y elfos verán la sacudida del orco en este lugar.
No lo ven? Si han atacado escudo protector fue para testear a las fuerzas del bien y quien sabe si no para distraernos en su avance al otro continente!

El elfo levantaba la vos constantemente mientras hablaba, algo raro para un elfo.

Hay una gran guerra en mi mundo, debemos combatir!

Hades se alejó del gran telar, en direccion a la puerta por la cual ustedes habian llegado minutos antes. El gran dios de los muertos abrió la puerta con un ademan antes siquiera de llegar. Tras ésta, sorprendida con el oido apoyado sobre la madera, se encontraba la roja Perséfone.
La mujer sonrió sin temor, casi más bien con picardia. Hades, ignorando la aparente falta de tacto clavó sus ardientes ojos en la bella mujer y ordenó.
Perséfone, guía a éste elfo a una de las puertas que provienen de Qualinost, y permite que la crucé en direccion a la tierra de los elfos! La mujer, obediente, se alejó correteando por el pasillo.
Hades entonces se dirigió al resto de los héroes y preguntó autoritario...
¿Donde irán ustedes!?

- Todos tenemos un lugar donde querríamos combatir, la pregunta no es donde seríamos útiles, sino donde seríamos decisivos. No estoy seguro de la importancia de un grupo pequeño en medio de una batalla contra decenas de miles de orcos. Lo normal es que se dedique a tareas puntuales y decisivas. La pregunta es ¿Dónde seríamos más útiles? Y no es buena idea que cada uno diga que en su hogar... aunque para mi es fácil porqeu soy un apátrida.

Recuerdo de momentos pasados:

Cita:

Estoy de acuerdo, por eso creo que deberíamos centrarnos en la destrucción de sus cabecillas

- Hay algo más, Elara predijo el futuro cuando la vi ayer, me vio luchando en Ginea con sus soldados de élite, contra los orcos. Ignoro si realmente predecía el futuro o nos manipulaba, pero en sus visiones estábamos perdiendo contra el ejército orco y yo estaba allí luchando. Si de mí depende, creo que deberíamos ayudar en el frente de batalla, eso obligaría también a sus cabecillas a estar allí para contrarrestarnos.