Partida Rol por web

- ¿Con qué material lo debo atacar?

Akin, desde su escondite, pregunta a gritos a sus compañeros a la espera de que alguien sepa a que se están enfrentando.
El portador de los soles, se lanza en una acelerada corrida hacia el gigantesco gusano, sin embargo, cuando descarga su mandoble iluminando todo a su alrededor de una verdosa fluorescencia, el arma parece deformarse, como doblándose en un angulo imposible. El brillo que rodea a la criatura zumba y vibra con mayor fuerza aun, y la espada recupera su forma y consistencia, pero desviando su golpe hacia un costado y cortando tan solo el aire!.

Ryo observo a la criatura, y estaba segura de que este ser no era de aqui, alguien o algo lo había invocado  -Esta criatura es de otro plano de existencia.

- ¿Con qué debo atacarle Ryo?

 Esta 

No se que puede dañarle, esa criatura supera mis conocimientos

Al ver a la criatura Dominic se dio cuenta de que era la responsable de las huellas que había visto. Dando un paso hacia atrás para tener un poco más de covertura hizo aparecer su arco de enrgía y disparó a la criatura intentandola coger por sorpresa.

Un brillante proyectil, creado a partir de la potente mente de Dominic, surca el vibrante aire hasta alcanzar al correoso cuerpo del gusano. La fuerza psiquica atraviesa las duras escamas, abriendo una brecha de espesa sangre negra en el monstruo. Los cuernos de cristal lanzan brillantes destellos multicolores al quebrar la luz del atardecer, cuando el espantoso gusano ruge guturalmente a causa del dolor

Akin se lanzó en ése momento, buscando el mejor ángulo para atacar a la criatura, y cuando le pareció encontrarlo soltó cuatro flechas, una de ellas era normal, la otra era de adamantina, la tercera de de una aleación de plata alquímica, y la cuarta de hierro frío.

Akin se aleja de las sombras del bosque y se planta entre el gran gusano y sus compañeros. Tras tensar cuatro flechas en su brillante y magico arco, dispara los proyectiles a un tiempo contra el enorme monstruo. Una de las flechas se safa de la cuerda y cae a pocos metros tras dibujar un garabato en el aire. Otras tres, viajan con furia hacia la gargantual mole.

Una flecha, dirigida hacia el rostro del gusano, se desvía misteriosamente antes de impactarlo y vuela raida hacia un costado...Otra flecha, impacta contra los dientes de cristal, estallando sin hacerle daño alguno. Sin embargo, el cuarto proyectil, logra colarse por la gigantesca abertura de la mandíbula y tras perderse en la siniestra oscuridad de su garganta, arranca un rugido de dolor y furia al gran gusano.

El clérigo observa como sus compañeros avanzan contra la bestia y de inmediato siente como la fuerza nuevamente recorre sus venas, luego durante aquellas horas de inacción en las que apenas y sabia de que hablaba todo el mundo, por fin tenia una oportunidad de participar, una oportunidad para ser parte de todo aquello, si dudarlo avanza también rumbo a la bestia tomando al mismo tiempo la maza que cuelga de su cinto y se pone en comunión con su poder interior. Vamos por el Protector, el poder de los dioses se diluye ante el poder de la voluntad, los individuos pueden despertar la pequeña chispa de esencia divina que guardan en ellos para superar los limites que su propia mente les impone, su alma puede extraer los poderes divinos que el mundo nos reserva... Justo al terminar de concentrarse en esta idea una columna de fuego desciende del cielo envolviendo a la criatura...

El enorme Akden, dibuja un arco frente a el con su maza, y tras murmurar una extraña plegaria, alza sus brazos al cielo. Entonces, mientras la criatura golpea el suelo con sus zarpas terminadas en fulgurantes cristales, una lluvia de fuego ruge alrededor del gran gusano golpeando su correosa y oscura piel. Sin embargo, aunque la criatura queda envuelta en llamas y humeando, no parece afectada por las candentes llamas, y tras lanzar un sonoro rugido se lanza en una brutal carga contra todo el que se cruza en su camino de destrucción.

La gran mole, abre su gargantual mandíbula repleta de cristalinos dientes, y de un golpe quiebra el suelo que tiene en frente. La gran boca, queda parcialmente sumergida en la tierra, y con sus poderosas extremidades, se lanza en una carga hacia Akden devorando todo en su camino!
Akin es el primero en ser alzado entre tierras y piedras, y poco puede hacer el arquero por evitar ser devorado. Fendoriel, trata de saltar a un lado, pero la tierra bajo sus pies lo lanza directamente hacia el oscuro gaznate del enorme gusano.
Luego, la bestia finaliza su carga, devorando la tierra, y junto a ésta al agigantado clérigo y a la joven Ryo!

 Oh no! esta bestia nos va dar más de un problema...