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El Festival del Unicornio (Finalizada)

4.- Escena pública: La cabaña en el bosque

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08/05/2013, 22:55
Director

El intento del unicornio por girarse tras matar a la osa y desplazar a Karlack fracasó. El guerrero se recuperó de la coz muy rápido y lanzó una profunda estocada desde detrás de su escudo, el equino estaba demasiado herido y se movió demasiado lento, la espada se hincó profundamente en sus castigados cuartos traseros, haciéndole perder pie. 

Con relinchos de dolor luchó por levantar la parte posterior de su cuerpo que apenas le respondía, con un esfuerzo titánico y el cansancio de la tumba asomando a sus ojos, que no perdían su brillo de odio, la bestia consiguió ponerse en pie y respiró hondo tratando de recuperar el aliento y hacer una última embestida.

Notas de juego

Falta +1 al daño por la bardo. El unicornio recibe 8 puntos de daño y está con 70.

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08/05/2013, 23:00
Nívea Selen Telq'ssir

Anticipando el final del combate la druida apuntó con cuidado, decidida a hacer un tiro certero. Y así fue. La flecha voló directa contra el flanco del repugnante ser, pero en su celo por tirar con precisión apenas había tensado el arco y la flecha cayó al suelo produciendo tan solo un pequeño corte. Aún así el unicornio se tambaleó, tan débil estaba, pero no cayó.

- Tiradas (2)

Motivo: Ataque de arco contra unicornio

Tirada: 1d20

Resultado: 19(+4)=23

Motivo: Ataque de arco contra unicornio

Tirada: 1d8

Resultado: 1(+1)=2

Notas de juego

72 de daño.

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08/05/2013, 23:03
Director

Notas de juego

Último (previsiblemente) asalto de combate. Las iniciativas no varían:

Evea 21 Sobre el tejado, de modo que su modificador total al disparo cuerpo a cuerpo es -1 (-2 por cobertura +1 por posición superior)

Osa negra 19 Detrás del unicornio en combate pero herida de consideración

Theonil 16 En segunda fila y abierto a un lado

Gaëlle 13 En cuerpo a cuerpo al lado de Kalack (tiene flanqueo mientras aguante la osa)

Unicornio 13 En cuerpo a cuerpo con Karlack y Gaëlle (y la osa) por lo que los proyectiles le impactan a -4 (salvo que se tenga disparo preciso o -2 desde posición superior)

Auria 12 Detrás de Karlack a un paso de 5' del unicornio conjurando una nueva invocación (si no llega tu turno podrás cancelar el conjuro sin perderlo)

Karlack 5 En cuerpo a cuerpo con el unicornio en la posición central

Nívea 4 En retaguardia

Turno para Evea y Gaëlle, cuando las dos contesten, si hace falta pnjtizaré automáticamente a Theonil si Jormaine no pide recuperarlo antes. 

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09/05/2013, 00:50
Gaëlle Bellerose

El cansancio empezaba a hacer mella en la juglaresa. No acostumbraba a realizar tan largos combates, y menos bajo tal nivel de tensión. Por suerte el estado de la criatura parecía no ser el mejor, pronto desfallecería. Parecía incluso que todos ellos iban a contarlo, algo que poco antes ni se le pasaba por la cabeza. 

Fue la mezcla de confianza y cansancio lo que hizo que su golpe no saliese con la convicción que debería haber salido, alejándose de los puntos vitales de la terrible bestia que tenía ante ella. Aunque aun así... en el último momento tuvo el impulso de girar la muñeca...

- Tiradas (2)

Motivo: Ataque

Tirada: 1d20

Resultado: 7(+7)=14

Motivo: Daño

Tirada: 1d6

Resultado: 6

Notas de juego

Se me olvidó el +2 por Flanqueo. Así que 16. No recuerdo si daba o no. 

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09/05/2013, 07:59
Evea, la gata

A pesar de su reducida aportación al combate el enemigo parecía estar cerca del colapso gracias al buen hacer de sus compañeros. Si bien su potencial se había reducido tras la caída de la gran osa que era sin lugar a dudas la que más había dañado al unicornio azabache.

Cada vez la costaba más concentrarse para acompasar su respiración a la tranquilidad necesaria para efectuar un buen disparo. Cosa comprensible si tenemos en cuenta que había compañeros heridos y toda una barahúnda de movimiento en la zona objetivo. Sin embargo en esta ocasión la flecha salió certera e impactó con fuerza en el cuello de la criatura clavándose profundamente.

-¡Bien!- se felicitó mentalmente. Esperaba fervientemente que la bestia cayera de una maldita vez y pudieran atender a los heridos y continuar con la investigación. Aún no había olvidado los gritos...

- Tiradas (2)

Motivo: Ataque

Tirada: 1d20

Resultado: 12(+6)=18

Motivo: Daño

Tirada: 1d6

Resultado: 6(+2)=8

Notas de juego

Creo que mi modificador es +6 (A.B + destreza) -2 (cobertura) +1 (elevada) +1 (nuestra querida bardo).
De todas maneras con 18 o 17 creo que daba igualmente.

8 puntos más de daño. Evea no da mucho, pero cuando da, pica.

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09/05/2013, 22:49
Director

Gaëlle lanzó una estocada larga, aún así el unicornio retrocedió, con las patas traseras fallándole pero lo suficiente para quedar fuera del alcance de la bardo ahora que nadie le acosaba por la retaguardia.

Sin embargo el movimiento le llevó demasiado lejos de sus enemigos, que le servían de pantalla contra la lluvia de proyectiles que le llegaban desde el entorno de la chabola. Evea tenía un tiro claro y lo aprovechó, el caballo astado de piel azabache estaba demasiado cansado, ni siquiera acertó a moverse antes de que la flecha que disparó la exploradora se hincase profundamente en su cuello. Esta vez no se desvió por la piel ni por su movimiento, no rasgó una sangrante herida, sino que se clavó con un torrente de sangre, hundiéndose hasta medio astil.

La bestia antinatural vio cortado su relincho de dolor con un sonoro gorgoteo y cayó al suelo de costado, un par de intentos de levantarse resultaron inútiles, corcoveó tirado sobre el suelo ceniciento y sin vida mientras un charco de su aceitosa sangre negra crecía por momentos. Sus relinchos de furia y dolor fueron apagándose. Finalmente se quedó muy quieto, no respiraba, ni hacía ningún sonido, la luz de sus ojos se había apagado.

Tras unos segundos de tensión, todos dieron por muerto al animal y pudieron relajarse. Fue en ese momento cuando la criatura volvió a lanzar un relincho, irguiéndose a medio cuerpo. Pero era un relincho de liberación, cayó de nuevo al suelo, mirando hacia Auria con ojos agradecidos, aunque la druida dudaba de si realmente la veía o sólo la intuía. Hizo un último esfuerzo para arrastrarse un poco por el suelo hasta quedarse mirando, con ansia, hacia una zona de la espesura, más allá de la cabaña.

Y con un último y quedo relincho de paz, murió. Esta vez para no volver a alzarse.

Tanto Auria como Nívea notaron de inmediato cómo la naturaleza dejaba de atosigarlas, era como si los árboles a su alrededor suspiraran de alivio tras cesar un dolor inmenso. Aunque aún no sentían apenas la vida allí, sabían que la naturaleza prevalecería, con el tiempo esa región de bosque sanaría.

Notas de juego

AlexSM : No había flanqueo, la osa murió en el último ataque del unicornio y convocar aliado natural (o monstruo) es acción de asalto completo de modo que Auria aún está conjurando.

Abandonamos el modo por turnos. Podéis postear de nuevo libremente.

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12/05/2013, 21:26
Auria

Auria respiró tranquila. Se tiró al suelo para estar aún más cerca de la naturaleza que empezaba a volver a formarse. El placer y la sensación de alivio comenzaba a recorrerle por todo el cuerpo y ese mal estar cada vez era más imperceptible.

Su rostró comenzó a recobrar color, a pesar de que siempre había sido muy pálido y con una sonrisa miró a sus compañeros. Habían logrado acabar con el unicornio negro y parecía que se lo había agradecido. No entendía bien qué es lo que le había sucedido o por qué existía semejante ser allí.

Pero allí, tendida en el suelo se quedó observando a sus nuevos compañeros a la espera de que tomasen una decisión sobre como proceder en aquel momento.

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13/05/2013, 17:12
Director

¿Realmente apenas habían pasado cuatro horas desde que vivieron la que, tal vez, fuera la experiencia más mística de sus vidas, cuando vieron al unicornio elegir a su amazona, llevándose con él una simple camarera de taberna? Parecía que había pasado una vida desde el momento, una hora después, cuando el embriagado ambiente de felicidad y festejo que había dejado el paso del místico guardián había sido truncado por unos truculentos asesinatos.

Las investigaciones, interrogatorios y la posterior exploración de las ruinas del palacio de los Sangrador/Coronal habían llevado al grupo a descubrir, a parte del paradero de Nasha, la hija de Theonil, fugada tras su fiasco con el unicornio, que aquellas macabras muertes podrían estar relacionadas con un nigromante, el último Sangrador fugado de la caída en desgracia de su Casa de infernalistas y necromantes. ¿Habría el mago oscuro convocado un demonio para vengarse? ¿Tendría relación con él el que los unicornios necesitasen tantas amazonas, incluso si éstas no eran guerreras capaces, fruto de la desesperación por combatir un mal terrible?

Habían descubierto la existencia de una cabaña de caza en mitad de la espesura que sería el refugio perfecto para tal individuo y, acosados por el terrible monstruo asesino, que ya les había atacado en la mansión de los Sangrador matando al delincuente Brien Coronal – y casi a la inocente Nasha -, llegaron hasta la chabola destartalada en mitad de la noche.

A ella se dirigieron, con mucha aprensión tras descubrir que las defensas mágicas del terreno, cuya naturaleza había sido profanada, sugerían que el nigromante, efectivamente, residía allí y que tenía un poder inmenso, suficiente para matarles a todos con un solo conjuro.

Pero la cabaña no estaba ocupada en ese momento. La exploración del laboratorio del mago descubrió un par de pergaminos – uno gastado y otro a medio fabricar – conteniendo magia poderosa y única de encantamiento, una redacción de un deseo, un mapa celeste que sugería una conjunción estelar periódica para esa noche y, sobre todo, un libro. El ignominioso, vil y obsceno “Daemonum Ritualica” que apenas habían tenido tiempo de examinar, porque su investigación se vio interrumpida por la llegada de la criatura a la que acaban de combatir. Un unicornio negro que las druidas reconocían como la misma fata sagrada que habían visto horas antes, pero pervertida por un acto de profunda maldad. ¿Qué relación podía tener aquello con el monstruo asesino o el nigromante? ¿Dónde estaba Trellana Resplandeciente, la camarera de la Taberna de la Plaza, si aquel que habían tenido que combatir era su unicornio? Auria notó un escalofrío al pensar en aquella pregunta al recordar que ella misma se había postulado como candidata y había fallado por culpa de Karl. Tal vez el horrendo libro proporcionase más pistas; considerando que del mago no había más rastro que las – presuntamente suyas – huellas que evidenciaban que entraba y salía de la cabaña esquivando sus runas mortales a placer y que del monstruo asesino sólo tenían, en ese momento, la vaga sensación de amenaza que se consolidaba en que incluso después de la muerte del impío guardián del bosque, caído en desgracia, los sonidos animales seguían en silencio en aquella parte del bosque.

Notas de juego

Bueno siguiendo la sugerencia de Kamikazee tenéis un pequeño resumen y recordatorio de la situación para que sea más cómodo seguir con la historia donde la interrumpió la pelea.

Aprovecho también para recordaros la situación de vuestros personajes.

Auria: 13 de daño de 21 de vida.

Evea: 2 de daño de 26 de vida.

Gaëlle: 2 de daño de 13 de vida.

Karlack: 12 de daño de 35 de vida.

Nívea: 0 de daño de 19 de vida. (pnjtizada desde marzo)

Theonil: 6 de daño de 14 de vida. (pnjtizado desde enero y antes desde noviembre)

 

 

 

 

 

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14/05/2013, 20:38
Evea, la gata

Evea no pudo reprimir un grito de alegría por la derrota de la bestia corrupta. Incluso el ambiente pareció aclararse un poco o tal vez era sólo la liberación de la tensión acumulada durante el combate tan ajustado. Se descolgó con cuidado de caer en una zona segura, pues sería mucha mala suerte haber sobrevivido a todo eso para morir por caer sobre una runa, y se acercó a sus compañeros aún algo alerta con el arco en la mano.

-Por fin-aún estaba exultante aunque tenía una sensación de anticlímax. ¿Tal vez esperaba que Tianna apareciese tras la derrota de la bestia? Meneó la cabeza alejando los malos augurios y echó un vistazo alrededor-¿Cómo de graves son vuestras heridas?- Ella no tenía la capacidad mágica ni mundana para tratarlas pero sí la preocupaba el estado de sus compañeros.

Además no tenía intención de quedarse en el claro más de lo necesario. Que terminasen cuanto antes de estudiar los volúmenes arcanos o los llevaran a alguien que supiera sera su prioridad ahora para terminar de desenmarañar todo aquel embrollo. Pero los demás también eran conscientes de ello y Evea era reticente a tomar el papel de dirigente de un grupo cuando su vida era en soledad en terrenos salvajes.

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16/05/2013, 04:39
Auria

Auria se encogió de hombros tras escuchar las palabras de su nueva compañera. La verdad que estaba gravemente herida pues había sufrido un terrible golpe por parte de aquella desagradable criatura. Pero el hecho de notar que la naturaleza, lentamente, comenzaba a recorrer su cuerpo le dejaba en un estado de embriaguez total.

No hacía falta indicar su estado, la herida aún sangrante había tintado los ropajes de carmín, dejando claro que la druida había sufrido un duro golpe que muchos otros quizá no hubieran contado.

Afortunadamente, aún seguía con vida, pues hubo un momento que pensó que no lo contaría. Y gran parte de aquella ayuda se la debía a su amiga Selene.

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16/05/2013, 07:45
Karlack Rowder

Karlack notaba como la herida del cuerno continuaba sangrando por debajo de la armadura. Si bien no era grave, seguía siendo dolorosa y además corría el riesgo de que se infectara.

Se quitó el casco con un gruñido de dolor. Se atusó los sudorosos cabellos mientras intentaba separar un poco la armadura para ver la profundidad de la herida.

Esto hizo que volviera a sangrar, ya que la armadura hacía de contención. 

Maldita sea Theonil, tendré que subirte mis honorarios

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19/05/2013, 01:36
Gaëlle Bellerose

Gaëlle miró a su alrededor, despacio, casi sin creerse que pudiese haber terminado. Descansó la mirada sobre cada uno de sus compañeros, asegurándose de que estaban bien. No tenía en aquel momento capacidad para curarlos pero no parecía necesario que lo hiciese. Mientras observaba el lugar donde estaba y a sus compañeros el tiempo parecía correr a cámara lenta. Podía oír, ahora que el combate había terminado, los latidos de su propio corazón, rápidos e intensos, que poco a poco fueron ralentizándose. 

Guardó la espada, se limpió el sudor de la cara, y suspiró aliviada. 

Miró de reojo el cadáver de la criatura. ¿Como ha sido esto posible? Se preguntó en voz alta. Miró hacia las druidas. Abrió la boca para hablar, pero no dijo nada. Se quedó un instante pensativa, y entonces habló por fin, aunque ya no parecía dirigirse a ellas. El libro... tiene que estar en el libro... 

A grandes zancadas volvió a la casa y avanzó hasta la mesa donde, antes de que el unicornio les interrumpiese, había empezado a estudiar aquel espantoso manuscrito. 

El libro... si, aquí tiene que estar todo... tengo que descubrir que estaba haciendo el nigromante... - susurraba para si mientras buscaba la manera de acomodarse, intentando tocar lo menos posible de la casa - Aquí tiene que estar la clave para resolver todo esto... 

 

 

- Tiradas (1)

Motivo: Conocimiento (libro)

Tirada: 1d20

Resultado: 10

Notas de juego

No tengo muy claro que habilidad sería aplicable en este caso para tratar de leer el libro. 

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20/05/2013, 20:50
Director

El claro estaba otra vez en calma mientras Gaëlle volvía a la cabaña. Theonil se acercó renqueante a Karlack, ambos parecían un tanto vapuleados, igual que Auria, pero al aasimar quizá por la edad se le notaba más. Dio una palmada amistosa en el hombro del joven guerrero y, antes de entrar en la casa y derrumbarse sobre el camastro,  le dijo:

-“No te preocupes, compañero. Seguro que podremos sacar beneficio de todo esto. Aunque nos va a costar algún que otro resquemor, pero detener a un unicornio negro tiene que tener su recompensa incluso si estropeamos los sueños de la ciudad.”

Nívea se había quedado arrodillada junto al cadáver de la criatura, parecía ausente, cavilando y era difícil saber si estaba triste o no; pero algo importante debía rondar por su cabeza pues parecía haberse olvidado del mundo. A la vez mirada en la dirección que el unicornio se había esforzado en apuntar con su último aliento mientras miraba con gratitud a sus verdugos.

Todos esperaron a que la bardo investigase el libro. La muchacha volvió a abrir el obsceno y herético volumen, casi con asco, por la página que marcaba el punto de lectura hecho con cabello; ahora pudo comprobar que estaba forrado con un cuero fino y suave que prefirió no pensar de qué podía estar hecho, aunque su desbordante imaginación no coloboró. Volvió a sentir náuseas al ver el texto escrito en aquella lengua desconocida pero, sobreponiéndose, se concentró en las anotaciones en élfico leyendo lentamente, con dificultad, aquellos caracteres apretados y sinuosos, tratando de descifrar complicadas palabras y conceptos desconocidos.

Le llevó unos buenos veinte minutos leer aquella página y hacerse una idea de lo que decía. Si había entendido bien eran acotaciones, comentarios, consejos e interpretaciones acerca del texto que era incapaz de leer. Al parecer aquello era un ritual de infernalismo, destinado a convocar un demonio de poder intermedio; si el conjuro se hacía adecuadamente el invocador podría pedir un deseo a la entidad, que se marcharía después de otorgarle.

El ritual en sí no estaba totalmente descrito en élfico – parecía ser que era justamente lo que había en el resto del texto, el de la lengua que mareaba y enfermaba al mirarla – pero Gaëlle había podido deducir que, a grandes rasgos, consistía en hacer un sacrificio ritual utilizando una daga de plata encantada y formular una petición al ser convocado durante el mismo. Por lo que se deducía de las anotaciones, había muchas variables a tener en cuenta:

· La fecha era una de ellas, al parecer. Determinados momentos hacían más fácil obtener deseos y más sencilla la convocación, tanto por la facilidad para abrir el velo entre los mundos como por los ciclos de poder de las criaturas de los planos inferiores.
· El sacrificio era otra, debía ser apropiado a la petición que se hiciera y tener un mínimo valor, lo que no podía ser menos de un ser vivo, no necesariamente inteligente, o un artefacto mágico con ego (esto es, alma). De acuerdo a los comentarios del libro, el mago que buscaban consideraba que para su petición (Gaëlle suponía que esa expresión de deseo que había en el otro pergamino para prolongar su vida con salud sería la que hacía) era apropiado el sacrificio de un alma dotada de pureza; la más sencilla de representar consideraba que era la virginidad, pues no había mucho margen de interpretación al respecto.
· Otra variable importante era la redacción del deseo, que debía ser suficientemente precisa para no dejar resquicios de importancia en su redacción, además debía ser apropiado a la calidad del sacrificio realizado, pues de lo contrario el demonio conservaría su ofrenda pero no estaría obligado a prestar ningún servicio.
· También era de vital importancia la daga, que debía ser de plata pura en su totalidad, desde el mango hasta la punta, y encantada de acuerdo a las especificaciones del ritual (había que suponer que estarían en el texto desconocido), dado que si no sería imposible realizarlo, pues sólo ese elemento podía garantizar el ritual, al convertirse primero en sifón para que el sacrificio llegase al demonio y luego en nexo para que el demonio quedase unido al mundo el tiempo suficiente para otorgar sus dones. Básicamente era la representación material del ser en la tierra durante el proceso.
· Una anotación hacia el final indicaba que el mago tenía un sistema seguro para seleccionar una doncella. Esto era muy importante, porque, según el texto, ya era malo pedir más de lo que se sacrificaba, pues el demonio se marcharía con su regalo sin dar nada a cambio. Pero había algo mucho pero: el resultado era muy diferente si se sacrificaba una ofrenda que no era lo referido en la invocación, en su caso una mujer que no fuera doncella por haber invocado al ser con la ofrenda de una virgen. En ese caso, el demonio se consideraba engañado y podía poseer el sacrificio – que para ese momento ya sería un cadáver – quedando libre en forma de una posesión aberrante; el texto no daba detalles sobre ésta criatura, y Gaëlle era la primera vez que oía hablar de ella, pero no hacía falta para saber que era para darse cuenta de que consistía en algo terriblemente malvado y problemático.
· Otra puntualización que parecía importante es que el asesinato durante el ritual, debía hacerse con un protocolo específico, que sí venía descrito en las letras en élfico con una crudeza y detalle que hizo que cuando la bardo se volvió hacia los demás estuviera pálida y un tanto desencajada, de hecho todos la habían visto en cierto momento encogerse cerrando las piernas, involuntariamente; de forma muy parecida a como solía pasar a los varones cuando veían a otro llevarse un buen golpe en la entrepierna. El sacrificio requería abrir el pecho de la ofrenda con la daga ceremonial y arrancar con ella el corazón aún palpitante para arrojarlo al fuego ante los ojos moribundos de la víctima, una nota a pie del texto indicaba que las posibilidades de conseguir el deseo mejoraban si se encontraba una forma de sacrificar la virtud encarnada por la víctima - lo que hacía el alma sacrificada especialmente valiosa en cada caso - al demonio inmediatamente antes de su muerte ritual. Según el autor y reproducido literalmente: “La elección de una virgen como ofrenda tiene la ventaja de ser muy fácil de obtener de éste modo la buena predisposición del ser del averno, aunque requiere mucho cuidado; pues la violación de la joven con la daga ceremonial puede, si no se es suficientemente hábil, matar a la víctima antes de completar el ritual, haciendo imposible concluirle con éxito.” E incluía algunas – aberrantes -  ilustraciones para acometer dicha acción con éxito.

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27/05/2013, 03:00
Gaëlle Bellerose

Cuando acabó de leer aquello Gaëlle se tomó unos segundos para asimilarlo. Le costaba creerse todo lo que había visto en aquel terrible manuscrito. Se dio la vuelta para regresar con el grupo, estaba pálida y  le temblaban las manos y las rodillas. Se acercó a los demás, buscándo rápidamente el apoyo del marco de la puerta para no caerse.

Comenzó a contarle lo que había leido, tratando de ser lo más fiel posible. Durante la narración sintió que se mareaba. Contar aquello, escuchar su voz diciendo aquellas cosas, la asqueaba. Sentía que no le estaba haciendo ningún favor a sus compañeros al traducirles todo aquello, que lo que hacía era un crimen contra ellos. En muchos momentos sitió la necesidad de parar, de olvidarlo e ir a quemar aquel libro para que nadie más tuviese la desgracia de leerlo, pero si querían resolver todo aquello sus compañeros necesitaban saberlo todo.

Mientras lo contaba una terrible idea se le pasó por la mente. Recordó lo que había leido en el pergamino anterior, recordó que aquel era un ritual que se llevaba a cabo cada cinco años. Un ritual para el que la ofrenda predilecta era una doncella, que tenía que estar cuidadosamente escogida. Las notas que rodeaban el perverso conjuro que se utilizaba para el ritual indicaban que el hechicero tenía un metodo seguro para elegir a la doncella... Había otro rigual que en ese lugar se repetía cada cinco años, que involucraba a una doncella como ofrenda y en el que la elección de la misma parecía infalible...

La sola idea de que algo así pudiese ser posible hizo que se le disparasen las pulsaciones. Notó como varias gotas de sudor frío le recorrían la frente. Una expresión de horror en su rostro se hizo patente.

-¿Creeis... creeis que ... que es posible... ? - preguntó a sus compañeros  - ¿Creeis que el festival...?

No pudo acabar la pregunta, las palabras se le atragantaron. Miró a sus compañeros, saltando de uno a otro de manera errática, esperando a que alguno le diese una respuesta. Esperando a que alguno le dijese que era imposible, que tenía una explicación mejor que la suya.

Notas de juego

Siento la tardanza. Estos días he estado de examenes, preparando una mudanza y ayer tocó empezar observaciones en el observatorio de la Palma.

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27/05/2013, 09:55
Evea, la gata

Las conclusiones de Gaëlle dieron un vuelco al ánimo de Evea, ensombreciéndolo sin remisión. Cada vez aquello estaba más claro para ella y el dolor de la pérdida de Lady Tianna comenzaba a ser más que real. La insinuación final sobre que el festival podía haber sido corrompido únicamente acentúo esa desazón, rozando la desesperación.

La batidora quería negarlo, encontrar una explicación que no implicara tanta muerte y corrupción; desmentir lo que la bardo había dicho y, por lo que parecía, ofrecerle un consuelo que también parecía necesitar. Pero no podía. Con la voz cortada añadió su versión.

-La otra bestia...-miró de rojo instintivamente hacia la espesura fuera de la cabaña-el demonio que nos asaltó. Cuadra con la información que...-su mirada se dirigió al libro sacrílego sobre la mesa-venía ahí. Y, en su presencia, sentí un alma torturada aullando por su liberación.- meneó la cabeza obligándose a contener sus emociones y explicar aquello claramente-Una voz que me es...era, conocida: mi mentora, Lady Tianna-fijó la vista en Gaëlle, pues lo siguiente era absolutamente demoledor-Era un paladín, icono de pureza y virtuosa como ninguna.-Theonil también torció el gesto, pues le era conocida.

La conclusión obvia era que su preciada mentora había sido empleada como ofrenda a un demonio para un sacrificio ritual y que, previsiblemente, la maldad del acto había corrompido el entorno incluyendo a una noble bestia como el unicornio al que habían tenido que hacer frente. Evea se apoyó en una pared, necesitada de apoyo para no desplomarse. ¿Qué iban a hacer ahora?

¿Qué sentido tenía todo aquello? Ella había ido allí buscando salvar a Lady Tianna, pero ahora estaba perdida para siempre y...condenación. La profecía.

Con un hilo de voz añadió -Si alguno recuerda la predicción que nos dio el clérigo elfo de la ciudad creo que identificará algunas partes...-desapasionadamente enumeró nuevamente la profecía-Diría que la prisionera ya no está-sentía un vacío de tal magnitud que ni siquiera el llanto acudía a ella. ¿Qué iba a ser de su vida tras este fracaso?

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28/05/2013, 18:11
Director

Las teorías de Evea y Gaëlle podían tener un cierto sentido. La pequeña druida no tenía mucha experiencia ni una educación formal de los círculos druídicos, pero tenía un cierto conocimiento y mucha intuición sobre cómo funcionaba la Gran Madre. Ciertamente lo que ellas insinuaban, que un unicornio participase en un sacrificio a un demonio, haría que éste se tornase en una criatura repugnante como aquel unicornio negro que acaban de combatir. Pero ella creía que sería algo instantáneo, tal vez no justo al decidir hacerlo, ni al seleccionar doncella, mientras hubiera esperanza de redención, no habría cambios… Pero, ¿cinco o seis asesinatos antes de caer en la sombra? No. Eso no era posible. Algo fallaba, tal vez actuase coaccionado, eso sería expiable para un alma que siguiera siendo pura en esencia, aunque eso se tomaría una elevada tasa en la cordura de la criatura… Pero eso tampoco explicaba la presencia del ser impío ahora y no en los años anteriores. En el puzzle de sus compañeras faltaba una pieza muy grande.

Notas de juego

Esto es narrativamente información que Auria conocería en virtud de su naturaleza druídica.

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28/05/2013, 18:13
Director

Desde luego todo aquello sonaba razonable, una doncella de unicornio sería, por definición, virgen, y por tanto apta como víctima del ritual. Una paladina aasimar, sería una víctima excelente también, independientemente de su sexualidad – o la falta de la misma – previa, aunque mucho más difícil de capturar. Era posible, desde luego. ¿Quería decir eso que la criatura que acechaba Zoquejo era una de esas posesiones aberrantes de las que hablaba el texto impío? Bueno, lo poco que sabían de una y otra cuadraba, pero eso ocurría cuando la ofrenda no era adecuada, si Gaëlle había leído bien. ¿Qué había pasado? Tampoco es que eso importara demasiado, lo importante es que ahora, tal vez, sabían a qué se enfrentaban, eso debería ayudar a detenerlo. Había que estudiar cómo, pues era obvio que detener aquel ser era lo que les había embarcado en ésta tarea y que fallar supondría más muertes truculentas a añadir a las que ya se habían producido.

Pero aún quedaba otra pregunta igual de importante: ¿Dónde estaba el mago que había ocasionado todo aquello? Al fin y al cabo, si tenían razón él era responsable de la muerte de seis jóvenes y, sin duda, volvería a intentarlo si le era posible incluso si había, de alguna forma, perdido el unicornio. Theonil estaba derrumbado en la cama y apenas había podido hacer más que asentir a las palabras de Evea sobre su prima, le costaba respirar y parecía agotado. Nívea Selen por su parte, seguía arrodillada al borde del charco de sangre negra, mirando sin ver en dirección a la floresta, siguiendo la última mirada del unicornio y perdida en pensamientos que nadie más conocía ni podía entender.

Notas de juego

Adelante con la conversación, recordad cuando acabéis proponer un curso de acción.

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29/05/2013, 05:12
Auria

Auria se sentía sumamente confusa con todo lo que estaba pasando. Daba la sensación de que le faltase más información de la que tenía, y no tenía muy claro si los demás la poseerían o no... Se quedó contemplando el cielo mientras daba vueltas a su cabeza y a sus pensamientos.

Tenía información que compartir, sabía cosas que seguramente ellos no supiesen o quizá sí. No lo tenía muy claro, pero Auria tan solo era una niña, y a veces esa expontaneidad se alzaba por encima de todos los temores y afloraba a la superficie.

Auria bajó la mirada para contemplar a su nuevo grupo, Nivea parecía haberse ido a un estado aún más allá, y Theonil no parecía estar escuchando, tan solo estaba el otro hombre, y quizá, por uno, no pasaría.

Auria comenzó a hablar, pero su voz se quebró por un segundo y sus mejillas verde pálido se tornaron rojizas como las flores del campo. Se dio la vuelta, hasta que recuperaron su color natural y volvió a intentarlo mientras lentamente iba volviéndose.

Con cada palabra, Auria miraba a sus compañeras y cuando le tocaba mirar a Karlack pasaba sus ojos demasiado rápidos como tratando de esquivarle.

Veréis... comenzó suavemente Auria, no sé si lo que os voy a contar es algo que ya sabíais o no, pero igual que os comparto esto, me gustaría que me mostrarais algo de información de la que tenéis vosotros.

Hizo una pausa para comprobar que las chicas estuviesen escuchándola.

Si hay una cosa clara es que el hecho de que el unicornio que vimos y que eligió a la doncella, formase parte de un ritual a un demonio o a una criatura oscura, éste haría que su magia negra transformase al Unicornio en una criatura horrible y vil. Exactamente igual que la que nos acabamos de enfrentar ahora.

Pero yo pensaba que esto sería algo más rápido, no instantáneo, pero si más rápido de lo que ha sucedido. No tenía lógica que hubiera que asesinar a seis personas antes de caer en el lado oscuro. Y si el unicornio actuaba obligado, esto no debería haber transformado su cuerpo en algo tan soez. No, nada de esto tiene sentido...

Y además, ¿por qué ahora? ¿por qué ha tenido que ser justo en esta fecha? ¿Por qué no había ocurrido antes?

Notas de juego

Las teorías de Evea y Gaëlle podían tener un cierto sentido. La pequeña druida no tenía mucha experiencia ni una educación formal de los círculos druídicos, pero tenía un cierto conocimiento y mucha intuición sobre cómo funcionaba la Gran Madre. Ciertamente lo que ellas insinuaban, que un unicornio participase en un sacrificio a un demonio, haría que éste se tornase en una criatura repugnante como aquel unicornio negro que acaban de combatir.

Pero ella creía que sería algo instantáneo, tal vez no justo al decidir hacerlo, ni al seleccionar doncella, mientras hubiera esperanza de redención, no habría cambios… Pero, ¿cinco o seis asesinatos antes de caer en la sombra? No. Eso no era posible. Algo fallaba, tal vez actuase coaccionado, eso sería expiable para un alma que siguiera siendo pura en esencia, aunque eso se tomaría una elevada tasa en la cordura de la criatura… Pero eso tampoco explicaba la presencia del ser impío ahora y no en los años anteriores. En el puzzle de sus compañeras faltaba una pieza muy grande.

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01/06/2013, 01:13
Gaëlle Bellerose

Mientras escuchaba a su compañera, la batidora, contar la historia sobre su mentora recordó algo en lo que hacía bastantes horas que no reparaba. Algo que hizo que de sus ojos empezaran a brotar lagrimas.

-Notcha... - dijo, sin darse cuenta de que todos la oían.

Notcha, la amada de su hermano... La amazona del unicornio a la que debía encontrar, y para lo que no tanto tiempo antes había pedido ayuda a Theonil... Si estaban en lo cierto acababa de descubrir el destino que había corrido... Ya no iba a poder encontrarla, ya no iba a poder decirle que su hermano aun la amaba, y que la esperaría todo el tiempo que hiciera falta... Si estaban en lo cierto todo lo que le quedaba era acudir a su hermano cuando este volviese para partirle el corazón. Perdida en sus pensamientos como estaba apenas reparó en la profecía de la que Evea les hablaba.

Apoyando la espalda en la pared, se dejó caer al suelo. Había viajado a lo largo y ancho de varios reinos, vivido mil y una situaciones de peligro, pero aquella era la primera vez que se enfrentaba a algo así. Ni siquiera la más terrible historia que nunca había narrado podía compararse al horror se había cometido en aquel lugar.

No reaccionó hasta que la joven druida comenzó a hablarles. La verdad es que les faltaban piezas para terminar de resolver aquel puzzle, pero ella no tenía los conocimientos necesarios para rellenar los huecos. Trató de recordar alguna historia parecida, pero no creia haberse cruzado nunca con algo así.

Mientras trataba de recordar algo, y tras secarse las lagrimas, se dirigió a sus compañeros.

-Deberiamos buscar al mago que hizo esto... ¿Alguien tiene una idea de donde podría haber ido? Sabemos que ha convocado a un demonio. Sabemos que el conjuro ha fallado... Quizá deberiamos buscar de nuevo en la casa... algo que nos de una pista de la identidad del Conjurador.

Mientras se levataba para comenzar a buscar na tonta idea se le pasó por la cabeza.

-¿No se os ocurre alguien en el pueblo que sea “demasiado” viejo, verdad? - preguntó con un tono a medio camino de la resignación y la broma amarga.

- Tiradas (2)

Motivo: Conocimiento Bardo

Tirada: 1d20

Resultado: 15(+7)=22

Motivo: Buscar

Tirada: 1d20

Resultado: 20(+2)=22

Notas de juego

A todo esto, creo que yo no he visto nunca la profecía. Ya que Evea la ha dicho en voz alta, podria copiarla alguien?

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01/06/2013, 15:55
Director

Notas de juego

Recuerdo de la profecía que os recitó Theonil en su día (Nívea y Auria es la primera vez que la oyen):

"Cuando el carcelero cautivo quede libre la cautiva podrá ser liberada.

Jugaréis en la ruleta el destino de los cautivos y el de vuestras vidas.

Los actos de los que conocen la profecía marcan la libertad de la cautiva.

Los actos de los que le acompañan marcan la libertad del carcelero."

Os doy un par de días por si queréis contestar a Gaëlle o ayudarla en su búsqueda de una pista.