Galadrom estaba a punto de entrar en la habitacion de su primo, cuando le escucha gritar que le atacan, tenia previsto llamar, pero al grito de su primo pega una patada a la puerta que queda echa girones, entra y ve a un felino atacando a su primo-Te lo dije primo aqui habia gato encerrado(:P)- Mientras dispone su espada para golpear a su so dicho enemigo
Motivo: tirar puerta abajo
Tirada: 1d20
Dificultad: 18-
Resultado: 1 (Exito)
Motivo: ataquq espada
Tirada: 1d20
Dificultad: 23-
Resultado: 5 (Exito)
Mario obvia que me ponia la armadura pero voy con espada y escudo, ok?
la leche es muy gorda porque le pillo desprevenido al felino ese
cuando el caballero ve como el felino se le hecha encima, encara su espada para defenderse del ataque, intentando con el movimiento dañar a la criatura y mantenerla alejado.
En eso estaba cuando la puerta se derribó (creo que estaba abierta... a no ser que el "minino" la hubiera cerrado ;ppp) y al otro lado de la misma aparecío su primo Garadorm. Éste sin decir esta boca es mía se lanzó en defensa de Delivant con un gran corage.
Motivo: Ataque
Tirada: 1d20
Resultado: 6
La puerta se abre mientras Sir Delivant se aparta de la bestia y le lanza una estocada.
quieto parao lezort ... no llegas en el primer turno ni de coña. Llegas corriendo y tiras o empujas la puerta.
Delivant ganas este turno y tiras daño. Proximo turno podeis atacar los dos. No Sergio, no te guardo la tirada :-P
El bravo guerrero en una finta en el último momento logra zafarse de las garras del animal y alcanzarle con su espada mientras éste pasaba de largo.
La sangre del felino ahora teñía el suelo de la habitación. Con furia, al ver al animal herido, Delivant le gritó.- ¡¡Bestia inmunda, colgaré tu pellejo y tu cabeza en la parede de mi castillo, no lo dudes!!
Dicho esto volvió a cargar contra el animal.
Motivo: daño del felino
Tirada: 6d6
Resultado: 20
Motivo: tirada de ataque
Tirada: 1d20
Resultado: 14
Mierda, esta vez lo tengo más difícil para darle y no hago crítico por poco :(
La bestia sangra abundantemente e intenta alcanzaros con sus zarpas.
Motivo: zarpazo a Garum
Tirada: 1d20
Resultado: 12
Motivo: zarpazo a Lezort
Tirada: 1d20
Resultado: 8
Un zarpazo a cada uno.
Garum = Deheval XD
Deheval tira daño
Galadorm ataca ahora
como k me ataca? Dijiste k no podia pegar k aun no estába,y si es asi es tirada enfrentada
Motivo: ataque
Tirada: 1d20
Dificultad: 23-
Resultado: 8 (Exito)
Nuevamente la espada del caballero fue más rápida que las garras de la bestia a la que se enfrentaba.
Con un corte de revés, consiguió quitarse la zarpa que secernía sobre Delivant y abrirle un tajo en la misma. La experiencia en combate de la que gozaba el caballero era sin duda alguna la tabla de salvación a la que se aferraba y mantenía con vida el caballero.
Motivo: daño
Tirada: 6d6
Resultado: 22
Vale, ahora ya me espero a qeu nos digas que tenemos que atacar o tirar algo... que si no es un lio.
Vuestras espadas se clavan en el lomo de la bestia que se transforma ante vuestros atónitos ojos en el farile que os había recibido en esta abadía.
Herido de muerte y tosiendo sangre, el hermano Talman solo llega a susurrar:
- Suplico vuestro perdón, ese súcubo me sedujo ... pido al Señor Todopoderoso su perdón y le encomiendo mi alma.
En ese momento, la abadia a vuestro alrededor explota envuelta en fuego y llamas.
Instantes, o acaso minutos después, os incorporais del suelo. Vuestros escuderos y caballos estan a vuestro lado. De la abadía sólo quedan alguns restos dispersos, de piedras ennegrecidas como si un gran incendio hubiese tenido lugar aquí hace años.
Todavía conmocionados tomas un breve tentempie antes de continuar camino, aprovechando el amanecer.
Tras varias horas vagabundeando, observais un pueblo en la lejanía y os aproximais hacía él.
Cuando estais cerca, un caballero se cruza en vuestro camino. Su rostro en grave y su cara tiene como reseñable un robusto y largo mostacho. Tendrá vuestra edad o algo más.
Su armadura parece haber estado mucho a la intemperie pero no esta rota u oxidada. Su escudero esta al lado con varias lanzas. Os llama la atención la edad del escdero (rondará los 30).
- Soy el guardian de Olbray y tengo a mi cargo la defensa de la villa. Retroceded o enfrentaros a mi en combate mortal.
(Tirad por Heraldica para reconer su escudo, una cruz sobre un fondo en aspa a dos colores).
Delivant no podía creer lo que estaba viendo. ¡¡Aquel felino era en realidad el hermano Talman!!. Cuando recobró la capacidad de reaccionar debido al shock de éste echo, Delivant trató de acercarse al hermano pero de repento, todo comenzó a arder en llamas.
Al momento Delivant se despertó. Todo a su alrededor estaba en calma. era como si hubiera sido un sueño... un sueño que habían vivido y experiemntado en primera persona pero hace muchos, muchísimos años. Sin más, continuaron el camino.
Al divisar una población se cruzo un caballero que decía proteger la villa y les dijo que si querían pasar debían enfrentarse a él a muerte. Delivant le miró y le dijo.- Soy Delivant, de Salisbury, caballero de la mesa redonde del Rey Arturo- se presentó-. No hemos venido para guerrear ni para hacer ningún mal a vuestro pueblo, simplemente estamos en la búsqueda del tesoro de Bretaña. No queremos enfrentamientos pues no tenemos tiempo- comentó el caballero-. Ahora sí, sí vos conocierais el destino de alguna de esas piezas del tesoro estaría dispuesto a batirme con vos por tal conocimiento... y ale he dicho que no quiero nada contra su pueblo ni contra usted y menos un combate a muerte- ofreció Delivant intentando convencer al caballero.
Como diría Obelix... estos rom... del yerno están locos.
Galadrom, aparta a su primo, y aun cojeando se acerca al caballero- Asi sea caballero, yo luchare con vos, nuestra empresa es mucho mayor que luchar con vos, acabemos esto cuando antes, quiero seguir en busca de los objetos milenarios- primo, sabemos de sobra que estos caballeros no nos dejará pasar si no le derrotamos
Motivo: herldica
Tirada: 1d20
Dificultad: 1-
Resultado: 18 (Fracaso)
El escudero de Galadorm interviene.
- Mi señor tened cuidado, os recuerdo que vuestras heridas son recientes.
Tu mismo ... yo no obligo a nada ...
Delivant detiene a su primo y le dice.- Déjame hablar con él un momento, si no lo conseguimos, lucharemos- sentenció el caballero quien no le gustaba la idea de tener que luchar con nadie, ahroa que no tenían tiempo.
Delivant se acerca al caballero y le dice.- Cuéntame, ¿Por qué defiendes el paso a tu población? ¿de quién la previenes?- indagó Delivant.
Motivo: Heráldica
Tirada: 1d20
Dificultad: 4-
Resultado: 8 (Fracaso)
El caballero os dirige una mirada, cansada pero resuelta.
- Prometí a mi señor, Pellam, que protegería la población de todo mal. Y eso voy a hacer mientras tenga fuerzas.
Veis al escudero con un gesto apesadumbrado, detras de él.
- Por lo que veo en vuestros rostros y vuestra mirada, lleváis protegiendo vueltro pueblo del mal largo tiempo, cosa que me parece loable y dice mucho de vuestro honor y lealtad a vuestro señor- comento Sir Delivant sinceramente, acompañándolo de una reverencia.
- De todas formas, como bien decís, combatís el mal... ¡SOLO el mal! ¿o acaso combatís a todo sea quien sea?- Preguntó el caballero para conseguir información.
A ver por dónde sale este tipo.
El caballero parece dudar durante unos instantes.
- Jure proteger la villa, contra todo mal. Cualquiera que pueda ser una amenza potencial, deberá enfrentarse a mí, tal y como juré ante mi señor.
Delivant asiente nuevamente ante las palabras del caballero.- No os quito razón alguna y debo deciros que os honra esa actitud tanto por vuestro valor como, por vuestra palabra- comentó Delivant al caballero haciedno otra pequeña reverencia.
- De todas formas debo deciros que no somos ninguna amenaza potencial. Simplemente somos unos caballeros vecinos, mandados como vos por nuestro señor para recorrer una tierras en busca del tesoro de Bretaña o de culaquier pista que pueda llevarnos a él- dijo-. Como puedes ver no buscamos combatir ni guerrear, solo buscamos encontrar el tesoro, nada más.
Delivant miró al caballero sin fisuras, pero sin altiveces. Luego cuando tuvo claro que el caballero había entendido su postura, le dijo.- Nosotros somos cristianos y como buenos cristianos, nuestra promesa vale más que cualquier papel que puedan daros. Yo os juro que no vengo a buscar ni crear problemas. No soy un enemigo potencial si alguien no lo es conmigo... con nosotros primero- dijo señalando a su primo y a sus escuderos-, y viendo que venimos a buscar un tesoro no estaremos mucho tiempo- Alegó el caballero-. Déjanos pasar con mi promesa y mi palabra que llevaremos la paz a tu villa. Y si no te fías acompañanos y verás que lo que te digo es cierto.
Delivant esperó a ver lo que el caballero decía, esperando no tener que enfrentarse con ese caballero, pues si bien no le tenía miedo, sabía que no gozaban ni del tiempo ni de la vitalidad para estar luchando a todas horas a cada lugar al que llegaran.
El caballero sopesa gravemente las palabras de Sir Delivant:
- Hablais y bien y lo haceis de forma razonable. Sea lo que sea que buscais, no lo encontrareis en esta aldea. Mi sino es impediros el paso por mucho que me pese. Rodeadlo o enfretaros a mí. Pero sabed que no encontraré placer alguno en derrotar a gentiles hombres como vosotros.
Delivant escucha las palabras del caballero y le contesta.- Ahhh, así que sí que sabes algo a cerca del tesoro de Bretaña- preguntó-. Si es así, pues dices que no hay nada del mismo en el pueblo, podrías decirnos dónde podemos buscarlo. Si no es así y no sabes nada de ese tesoro, entonces déjanos pasar pues a lo mejor alguien del pueblo sabe del mismo. Además, como bien has visto nosotros somos hombres de bien y no una amenaza- continuó-. Además si no me crees puedes seguirnos.
Delivant esperó a que el hombre reflexionara y o bien le dijera el paradero del tesoro o bien les dejara pasar.