Lo supuse respondo con una buena sonrisa a karioki que no ocultaba su emoción
- ¿Acaso los rumores del bosque han atraído tantos viajeros por aca?, Es muy raro ver tanta gente nueva en este pueblo -
Ve a Ishtar con una mirada de ilusión
¿Vienes con estos viajeros? Entonces... ¿También ayudaras? Eso es...muy bueno...
Agacha la mirada con una pequeña sonrisa pintada en su rostro
- Me siento con menos miedo al saber que seremos un grupo más grande, espero que no sea tan grande la fuerza que se oculta en el bosque, quiero a mi hermano a salvo... -
Noto mientras intento espiar en el cuaderno de Reeya que Paulette se me queda viendo con una pequeña sonrisa y una mirada aliviada, al verlo no pude evitar sonreir un poco
“¿Vienes con estos viajeros? Entonces... ¿También ayudaras? Eso es...muy bueno...”
Pues sí, intentaremos ayudarte lo mejor que podamos, y haré mi mayor esfuerzo en encontrar a tu hermano ¿sí?
Respondo, aunque por dentro todavía tenía la duda de poder ayudar en algo pero sin embargo siempre he dado lo mejor de mí para ayudar a los demás y esta ocación no será distinta
Habiéndose formado ahora un grupo que oficialmente se encargaría de resolver el problema, o al menos intentarlo, el ambiente en el lugar cambia dando un giro total, el rumor de su próxima partida se esparció como el fuego sobre pasto seco, pronto todos en el pueblo sabían que ustedes partirían mañana hacia el bosque. ¡Pero primero hay que estar preparados! Y por ello se levantan, encontrándose con la sorpresa de que la noticia había sido tan agradable que el tabernero os obsequió la comida y la bebida.
- ¡Haría lo que sea para que esté dolor de cabeza y las pesadillas se detengan! - Exclamo el hombre sonriente.
Al parecer sin querer, las personas de la aldea han depositado sus esperanzas sobre vuestras espaldas, nada mas al salir os encontrasteis con una buena cantidad de personas que os saludaban alegremente o en ocasiones, madres o padres que pedían temblorosos que encuentren a sus hijos. Cobet al principio se mostraba algo molesto del porque esas personas les cargaban sus responsabilidades a ustedes, pero bien podía notarse que en verdad quería ayudar, pues escuchaba cada petición con atención.
¿Porque no va la gente a buscar a sus hijos, hermanos al bosque? Pues simple, para la gente no entrenada o sin nada de experiencia entrar a un lugar así puede ser sinónimo de muerte, mas en estos lugares remotos en donde aún pueden morar criaturas mas allá de la comprensión humana.
- ¡Venga, está bien! - Exclama el chico con una sonrisa en sus labios - Haré lo que pueda, pero debéis cuidar mejor de vuestros hijos.
El pueblo no era muy grande, y con la ayuda de Paulette llegaron en no mas de diez minutos al mercadillo del pueblo, que mas que nada se activaba en estas épocas, en las que llegaban mercaderes de lugares lejanos para traer sus mercancías. Muchos hombre y mujeres gritaban para vender sus productos, venían de muy lejos y por supuesto que tenían clientela, mas en estás épocas de problemas es cuando mas la gente compra, quizás por el pánico.
Tienen 1000 monedas, compren lo necesario. Está en la otra escena la lista de objetos.
Este es el penúltimo mensaje mio en está escena, así que más que nada narrad que cosas comprar y podéis hablar un poco entre vosotros (no se pasen jajaja) luego yo cerraré la escena y partiremos al bosque a la siguiente.
Recordatorio:
Antes de empezar la partida se les regalo 1 animal de carga pequeño, para que lo tengáis en mente. El animal en si debería ser propiedad de Reeya ya que es la mercader, como consejo, dejad que ella sea la intendente que porte los objetos del grupo (obviamente las armas y esas cosas así las lleva cada uno) pero en fin, ustedes lo deciden.
¡Animo, cualquier consulta por el off topic de la partida!
Después de charlar en la comida nos dirijimos al mercado en donde les dije a mis compañeros que iría a ojear por ahí para ver que me hacía falta.
Ojeando por el mercado y sin ganas de molestar a los demás ni de acaparar el dinero, ojee por lo mínimo y esencial que necesitare y volví con el grupo.
Chicos ya volvi creo que esto es todo lo que necesitare:
Bote para plantas 100 po
Saco de dormir 50 po
Cantimplora 20 po
Ya volví chicos, creo que en total 170 de oro, aunque solo serían 70 si no compramos el bote para plantas digo bajando un poco la mirada señalando que creía que era una mala idea. Si compramos el bote las plantas medicinales que pueda conseguir pueden durar una semana, mientras que sin el... pues... solo un día, Paulette, que tipo de lugar es el bosque? he caminado por algunos diversos con mi mama y pueden ser lugares dificiles, humedos con pantanos, quizás debamos preparar para algo así? aunque también es cierto que no tenemos mucho oro... UPS creo que he estado hablando mucho, ¿ustedes que opinan?
Master, imagino que las armas ya las tenemos no?
Conocía bien el valor de las cosas. Cada moneda que me había quitado de comer para conseguir un pigmento de una calidad un poco mejor, cada regateo por el precio de una obra, cada tela de una calidad un poco decente para estar presentable ante el noble de turno. Sí, la vida de una artista era un constante y precario equilibrio de finanzas... como recorrer la cuerda floja. Así que no era de extrañar que, de forma bastante orgánica, me hubiese convertido en la intendente del grupo, la encargada de controlar nuestro dinero y las cosas que teníamos. Nuestras escasas pertenencias las llevaba una mula gris vieja y tozuda, con un mal genio tremendo, a la que llamábamos Aloe, porque era más fea que picio pero era útil para todo. La historia de como conseguimos a aquel pobre animal bien merecería ser contada, quizás en otra ocasión...
En cualquier caso, nos encontrábamos paseando por el mercado de Outun, yo iba estirando de aquella bestezuela ingrata, haciendo un esfuerzo consciente por no abandonarla en el sitio y salir corriendo a mirar todos los puestos llenos de baratijas y otras cosas curiosas. Habíamos conseguido ahorrar un poco en nuestros viajes respectivos así que no habría mayor problema en conseguir los suministros que necesitáramos para el viaje. Ishtar, tan discreta como siempre, apareció con unas poquitas cosas y aún me preguntaba si había gastado demasiado...
-No, tranquila. -le dije. -Nos lo llevamos también. -confirmé al tendero. -Nos puede ser muy útil, no sabemos cuanto tiempo pasaremos en el bosque, y desde luego allí no encontraremos botes para plantas. Mejor tenerlo que lamentarlo. -Paulette, -me giré hacia nuestra recién adquirida compañera de viaje. -si necesitas un préstamo o lo que sea avisa. -No solía enseñárselo a nadie, porque no me gustaba hablar de dinero, pero en la última página de mi cuaderno había una pequeña tabla con las cantidades que iban entrando y saliendo. Los números positivos que ahora mostraba bien indicaban que podía permitirme ayudar a alguien que lo necesitaba. Al fin y al cabo, la gente de aquel pueblo habían sido tremendamente generosos cubriendo la parte de la comida y la bebida. Así que tan solo hacía falta comprar los útiles de aventurero que hiciese falta reponer. Fui recorriendo las distintas tiendas, comprando todo lo que se me ocurría que pudiésemos necesitar y cargándolo sobre la mula, asegurándolo bien con las cuerdas. Parecía que incluso me iba a sobrar algo de dinero. Perfecto.
Una vez hube terminado con mis compras, permanecí al lado de Aloe, esperando a que el resto terminasen de hacer las suyas. Como no tenía nada mejor que hacer, saqué mi cuaderno y me puse a hacer bocetos, como siempre. Ahí había mucho de lo que aprender: los gestos de los mercaderes al regatear, los cuchicheos cotidianos de las verduleras, los mostradores llenos de deliciosa comida, de productos del día a día y de curiosidades venidas de lejanos confines de aquella tierra.
Lista de la compra
Antorcha x4: 20 + Linterna: 80 + Yesca y pedernal: 20 + Kit de reparaciones: 100 + Cuerda x2: 100 + Saco de dormir: 50 + Tienda: 120 + Cantimplora: 20 = 510
Podría hacer una tirada para ver si me hacen descuento de todo esto, regateando un poco?
Esa es la idea, especialmente de tu clase. Has la tirada por el descuento :)
Al ver a los chicos, Kari corrió hacia ellos, sacudiendo una mano en el aire. Sobre su espalda zangoloteaba un saco, que colgaba de su hombro.
“Hola chicos.” Los saludó cuando llegó hasta donde estaban. “Compré muchas cosas útiles.”
Se descolgó el saco del hombro y metió una mano dentro. Se puso a nombrar los objetos a medida que los extraía, los mostraba y los volvía a meter.
“Alcohol.” Dijo, mientras extraía un barrilillo. “No es para mí, lo juro.” Se apresuró a aclarar. “Bueno, sí un poco, pero es más para las hadas. Mi abuela me dijo que les encanta beber y se emborrachan muy rápido.” Sacó una bolsilla. “Esto es sal. Mi abuela me dijo que, si te persiguen las hadas, sólo tienes que dejar caer sal detrás de ti y ellas no podrán resistir detenerse a recoger los granos y contarlos. Además, se le pone a las comidas y las hace más sabrosas.” Volvió a meter la mano y la saco con un par de limones. “Limas y limones. Mi abuela me dijo que son venenosos para las hadas. También se pueden comer y no son venenosos para nosotros, porque no somos hadas, así que esa es mucha utilidad por poco dinero.” Metió la mano y sacó un tubo de hierro un poco oxidado. “Esto es hierro. A las hadas les hace daño y les asusta y no sólo porque puedes pegarles con él, es porque tiene poderes mágicos contra ellas*. Aunque también se puede usar para pegarles a las hadas y a otros seres. Así que todo lo que compré tiene doble uso. Soy una compradora inteligente, lo sé. No tenéis que decirlo.” Metió la mano una vez más y sacó un conejo blanco de peluche. “Y como sobró dinero, me compré este conejo de peluche.” Pareció dudar por un instante. “No sé si les haga algo a las hadas, pero se me hizo bonito y no puedo dormir sin un muñeco.” Lo metió en el saco y se lo volvió a echar al hombro. “Si me habéis visto hacerlo, es porque he usado alcohol, que también sirve para quedarte dormida.**” Señalo al propio saco con el pulgar. “Y este es un saco, para guardar las cosas, aunque supongo que eso ya lo sabéis.”
Alcohol: 10, Muñeco de Peluche:100, Saco:??, Limas y Limones:??, Sal:??, hierro??.
Queda en manos del Master cuanto salen las limas y los limones, la sal y el pedazo de hierro, porque no están listados. Tampoco encontré el saco.
*Desde ya que todo lo que la abuela de Karioki le ha dicho sobre las hadas, puede ser cierto o no, pero ella lo creerá hasta el final. :D
**No deberíais haberle dado dinero a Karioki para que disponga de él. XD. Con ella no hay posibilidad de regateo. Lo más probable es que le hayan cobrado más de lo que correspondía y no se haya dado cuenta.
Por supuesto, utilicé mi tremenda labia para tratar de conseguir los mejores precios y que no me arruinara preparando aquella expedición al bosque. Los mercaderes de Outun, en realidad, parecían todos bastante dispuestos a hacernos un buen precio y no era de extrañar, pues parecíamos ser los primeros en traer algo de esperanza a aquel lugar. Me sentía bastante emocionada por ello, casi como si fuese la heroína de un cuento. Karioki apareció con una bolsa llena de cosas que en un primer vistazo parecían de lo más mundanas, pero rápidamente se apresuró a explicar sus elecciones, con la sabiduría popular de los cuentos.
-Espero que funcione todo esto. Bueno, en el peor de los casos, como bien has dicho, todo puede tener otra función. -dije, mientras la ayudaba a colgar el saco con el resto de nuestras cosas en la mula.
Motivo: Obtener jugosos descuentos
Tirada: 1d6
Resultado: 5
Motivo: Obtener jugosos descuentos
Tirada: 1d8
Resultado: 7
Casi se me olvida hacer la tirada de marras.
Vale, la tirada de comerciar es (INT+ESP), 5+7=12. Eso es un 40% de descuento. Ni tan mal.
Al llegar al establecimiento, a Paulette le da mucha curiosidad que la personalidad de las personas se refleja mucho a la hora de comprar los suministros para el viaje.
Voltea con Ishtar al momento de que ella le habla.
- Nunca he entrado al bosque, nadie suele hacerlo, los que lo hacen, generalmente no solemos verlos nunca más, pero, de verdad es un lugar siniestro...
Toma el bote para plantas, será necesario, yo igual tomaré uno, veo que también sabes de las artes curativas
Hace una ligera sonrisa con mucho carisma.
En ese momento Reeya le ofrece ayudarle con los gastos.
N-no te preocupes, yo tengo algunos ahorros, y es el momento perfecto para utilizarlos...
Agacha un poco la mirada muy ruborizada.
Al momento que llega Karioki, no puede evitar lanzar una pequeña y ligera risa por lo entusiasta y peculiar que es la chica.
- Veo que vienes bastante preparada para las hadas, de verdad espero que sean hadas las que viven ahí y no un demonio o algo parecido, aunque ya sabes lo que dicen de la maldad de ellas, pero, yo creo que pueden llegar a ser buenas...
Viendo que puede hacer falta para el viaje, voltea a ver su ropa un poco sucia
- Debemos llevar algo para limpiar nuestra ropa, digo, tal vez no sea de mucha utilidad pero, me siento muy incomoda estando sucia...
Se entretiene comprando lo que necesita..
- ¡Listo! Estoy preparada.
- Saco de dormir 50
- Kit de Lavado 15
- Cantimplora 20
- Bote para plantas 100
- Mochila 20
Total : 235
En las compras se fue poco mas de una hora, entre negociar en el caso de Reeya o esperando su turno en el caso de los demás, pues como mercaderes no venían tan seguido todos necesitaban abastecerse, además de que la situación provocaba pánico en la gente. Sin embargo, todo salio bien al final de cuentas, lograron su objetivo de abastecerse para la aventura tan bien como han podido con los recursos a su disposición.
El resto de la tarde paso con bastante tranquilidad, como la calma que precede a la tormenta. Elloi Dourg permaneció en su habitación todo lo que resto del día, el hombre que os metió en esta aventura permaneció leyendo y preparando unos extraños frascos mientras murmuraba cosas para si mismo, era fácil decir que hacia eso, pues permanecía con la puerta abierta y de su habitación se desprendían fuertes olores por los materiales que estaba utilizando en sus preparaciones. ¡Incluso el posadero fue a reclamar! Pero cuando salio con una bolsa que parecía pesada con monedas este salio contento como si no hubiese sucedido absolutamente nada.
Lo interesante sucedió en la noche, cuando por fin se han ido a dormir... nada mas al lograr conciliar el sueño sucedió.
¿Habéis oído alguna vez acerca de las parálisis de sueño? Esto fue una experiencia similar, quizás aún más desagradable. Nada mas al sentir como vuestra conciencia se desvanecía en el mundo etéreo de los sueños, pueden notar como son retenidos en ese estado, conscientes, inmóviles y mudos, por mas que luchen con todas sus fuerzas, era imposible zafarse de aquel estado...
De un momento a otro aparecieron en los lindes del bosque, era un lugar hermoso, pero no podían disfrutar de la experiencia, pues era como si algo con una fuerza descomunal los tuviese agarrados de una pierna, como si una mano oscura compuesta de sombras, una mano monstruosa, los tuviese firmemente afirmados, con una fuerza que podría doblar a un elefante como quien arruga un papel, y lentamente son arrastrados hacia el interior del bosque sin la posibilidad de escapar.
- ¡Noooooo! - Escuchan el grito de una mujer - ¡Noooo deténganse!
Algo sucede cerca de ustedes, se escuchan fuertes gritos de dolor y angustia, estaba sucediendo una especie de lucha cerca, pero no podían siquiera mover la cabeza, solamente podían mirar las copas de los arboles mientras eran arrastrados cada vez mas profundos, se escuchaban las ramas romperse y como si nada, la lucha termino. Por varios minutos simplemente reino un silencio espectral, el bosque se volvía mas oscuro a medida que se internaban en el.... cuando comenzaron a escuchar el sonido del agua, no la de un afluente poderoso, sino un sonido tranquilo como el de un estero.
- ……………………………
Alguien, o algo les estaba hablando, era una voz muy débil, pero tenía un tono bajo, debilitado y triste. No podían comprender las palabras, eran algo que escapaba totalmente vuestra comprensión, pero les hacia pensar en medio del pánico ¿Como diablos los niños se aventuraron a este lugar? ¿Que cosa les hizo entrar? Las palabras de Paulette cobraban sentido, del porque quienes entraban al bosque usualmente no salían... ¿y si no era un hada como se creía y realmente era un demonio? Bien, pues las palabras eran incomprensibles, pero podían comprender los sentimientos tras ellas.
Enojo, tristeza, melancolía, desamparo...
El sonido del agua parecía aumentar, y tienen la sensación de estar pasando por un lugar algo inundado, pues se siente húmedo, no es agua muy profunda, quizás solo les llegaría hasta los tobillos a lo mucho, pero entonces sienten que sus piernas lentamente se empiezan a introducir al agua mas profunda... ¡Pero entonces recuperan el control de su cuerpo! Logran sentarse rápidamente al perder el agarre de aquella horrible mano, solo para ver dos ojos terribles, que los miran desde las sombras un poco mas adelante, su corazón se acelera y entonces... ¡Despiertan!
Abren los ojos, es de mañana y hoy es el día en que partirán hacia ese lugar.
FIN DE LA INTRODUCCIÓN
Ishtar: 170 oro
Reeya: 510 - 204 (40%) = 306 oro
Paulette: 235
Karioki: 110 + 30 (saco) + 5 (Lima y limones) + 30 (sal)* + 20 (Hierro) = 195 oro
906 oro total
Restan 94 de oro. Todo listo para partir.
*La sal es un recurso valioso en está época.
PD: Karioki te amo jajaja vaya cosas que has comprado.