Partida Rol por web

Escucho con atención a los demás, para acabar llegando a la conclusión que, contra ese gusano, no me será tan útil la pistola como mi estilete. Devuelvo la pistola al bolso y descubro mi arma; realmente cosa más penetrante que un estilete como éste no la conozco.

Por todo lo que se ha dicho, la prueba de Ab debería atraer al lindwurm y hacerlo salir de una vez.

Escucho las palabras de Erick y tras pensarlo y observar como Bernardette guarda su pistola para coger un estilete debido hacer lo propio y guardo mi Desert Eagle para sacar mi Venablo, dejando a la vista el Atlat.

Me quedo pegada a la pared junto a mi guía con la katana en posición defensiva esperando que el monstruo haga su aparición y esperando que entre todos podamos con él sin sufrir demasiadas heridas.

Marielle activa su PDA y teclea unas cuantas cosas. Al cabo de unos segundos, un disco dorado se manifiesta delante de ella. El artefacto se queda flotando en el aire, sin hacer nada más.

El suelo empieza a temblar, y las lámparas y cristales vibran. El carrito que Abdallah ha empujado se estrella contra una pared, produciendo un gran escándalo. Inmediatamente, una explosión de tierra sacude el suelo, justo donde el carrito se ha estrellado. Del suelo emerge una criatura larga y sinuosa de color blanco; parece un gigantesco gusano. Su piel parece cubierta en una especie de mucosidad que desprende un desagradable olor caustico, y su cabeza solo tiene una enorme boca repleta de dientes. 

El lindwurm engulle el carrito; parece que aún no se ha dado cuenta de que estáis ahí

Erick observa como sale el gusano del suelo, el truco de Abdallah funcionó y está algo alejado de la puerta. Aferró con ambas manos su bastón y despues de murmurar una palabra esté se transformó en una lanza.
Sin miedo alguno se lanzó contra el monstruoso ser.

Viendo salir al Gusano cojo el Atlat y hecho mano a uno de los Venablos que se formaron en el cinturón.

- Vamos allá. - digo mientras preparo el Venablo en el Atlat.

Haciendo gala de una tremenda puntería lanzo el Venablo que esquivando a Erik rebota por las paredes impactando al Gusano por la parte de atrás.

"Ok...¿Y ahora que hacemos?" Mis compañeros no tardaron mucho en responder a la pregunta, cargar contra el gusano. Yeah, una idea cojonuda, luchemos mano a mano contra la gargantuesca trituradora. "Sigh, a quien quiero engañar, la envidia que tengo, es el hecho de que se me han adelantado los muy cabrones."

Corriendo tras Erick, corro hacia el bicho y hago la cosa mas estupida desde insultar a los dioses, agarrar al gusano y mantenerlo apresado donde esta. Nunca he aplicado movimientos de lucha libre sobre un viscoso invertebrado, asi que no estoy seguro de como pararle a otra cosa que no sea fuerza pura, ojala tuviera un brazo o una extremidad.

-!Ahora, atacad antes de que vuelva al suelo¡

Erick es el primero en lanzarse contra el gusano. Su lanza consigue abrir una herida en la dura piel de la criatura, y un líquido espeso y negro empieza a brotar. La criatura se gira para encararse con su oponente, pero enseguida se encuentra el venablo de Jose Luis, y con Abadallah lanzándose hacia ella. El venablo, sin embargo, rebota inofensivamente contra la piel del lindwurm. Abdallah se lanza contra la criatura, y rodea su cuerpo con los brazos, manchándose del fluido mucoso que cubre su piel. El Vástago de Sobek aprieta con fuerza a la criatura y su piel se rompe, manando sangre negra a raudales. La criatura emite un escalofriante chillido y empieza a agitarse.