Partida Rol por web

Zaius cree que está bien escondido.

Quién me pudiera ver debajo de el saliente? Jejeje.

Así que permanece allí con su arco preparado, cuando escucha el gruñido enorme de la criatura, por lo que se lanza Orientación divina para no errar su primer ataque.

Oh, Elhonna, dame tu inspiración. Pronuncia en voz baja.

 "Qué criatura", pienso.

Inspirando profundamente, me muevo hacia una de las grietas para buscar cobijo. Espero que la llama sirva de cebo y que podamos sorprender al tremendo animal.

Corintur comienza a moverse hacia las grietas, no sabe lo que hay ahí, pero la idea de encontrárselo de frente no le seduce

Con las prisas por la proximidad de la criatura y lo difícil de esconderme en algún sitio, vuelvo a intentar trepar, pero mis piernas de anciano, el peso de mi armadura y, lo que no confesaré a mis compañeros, cierto nerviosismo porque esa criatura debe dar miedo, me hace titubear.

En fin, no estoy para estos trotes, he de ocultarme en otro sitio.

Veo que algunos de mis compañeros se enconden, así que con cuidado me muevo hacia la misma zona para intentar que no se me vea cuando entre la criatura.

Espero que me de tiempo.

Al escuchar los grandes pasos y los gritos de la criatura un gran escalofrio recorre mi cuerpo y empiezo a mirar hacia todos los lados.Me doy cuenta de un gran tesoro junto a mi.
Una vez mirado el tesoro me dirijo hacia las grietas.

Maldita sea mi estampa! Tanto escuchar la chachara insegura de la peña no he pensado con claridad! Ya sè lo que debo hacer... pero para ello, serà menester observar adonde se dirige la criatura al ingresar a la caverna...

Desde mi escondrijo miro a mis compañeros, tratando torpemente de esconderse, de fundirse con las sombras, y, casi sin quererlo, una media sonrisa puebla mi rostro

Espero no tener que salvarles el culo como cuando nos enfrentamos a los lobos, tanto mejor si nos cargamos a la bestia sin demasiado daño...

me separo sigilosamente de Zaius,no quiero que me caiga en la cabeza intentando encaramarse por las paredes y me dirijo hacia las grietas.

Mis compañeros de todas formas,van vigilando con sus miradas todos mis movimientos,no vaya a pifiarla de nuevo.

digo silenciosamente:

-chicos,dejaros de entreteneros y moveros hacia las grietas,la bestia estara pronto aqui y estamos aun al descubierto.-

al pasar por la pequeña laguna elada,lo hizo con tal habilidad que todos los compañeros se sorprendieron y se quedaron pasmados.Parecia que caminar sobre el hielo,lo hubiera hecho toda la vida.Mas que caminar,pareciase que patinaba de manera majestuosa sobre el hielo.

aun recuerdo cuando de pequeño jugabamos en los lagos elados a ver quien duraba mas de pie sobre el hielo,pero me parece a mi que ya no soy un joven enano y estoy teniendo mas suerte que habilidad je je