Partida Rol por web

Tras golpear la puerta con un par de sonoros golpes el kamel trato de hacerse oír por encima del ruido de las voces agónicas.

-Por favor, mi nombre es Ishamael, kamael al servicio del consejo de ancianos, necesito hablar con el guardián de la tierra… o quienquiera que este al mando ahora. Si necesitáis ayuda tratare de prestárosla asimismo.

Tras su proclama aguardó con limitada paciencia a que alguien que estuviese de guardia abriera el portón, aunque seguramente estarían recelosos tras lo que había sucedido.

-¿Qué ha sucedido buenos hombres? ¿Ha terminado ya la batalla?

Veo como levanta el arma para atacarme y ago un muro defensor con mi magia shin que me da 10 de defensa.Pero no consigo detener el golpe y me da de pleno.

Despertando de mi sueño por el ruido que el criado hacia mienttras entraba, repentinamente abri los ojos y con velosidad anormal ya estaba parado alfrente de mi criado. En esos momentos con una mirada fulminante le dije, con voz espectral y grave.

-muy bien, hazlos pasar al comedor que los estare esperando... Otra cosa buscame sangre que tengo que comer- Mientras le desia lo ultimo fui caminando a la puerta directo al comedor para esperar a la visita en el mismo, complasiendome con la sangre de alguien...

Decidio que no era prudente entrar por alli, asi que decidio entrar por una de las esquinas que dieran a la terma, si estaba oscuro mucho mejor. Se recosto sobre el suelo boca abajo tratando de mirar a traves de el muro de bambu. En caso de que no pudiera ver haria un pequeño corte con su cuchillo.

Las puertas se abre pesadamente, entonces justo frente al Kamael aparecen 4 paladines vestidos con armaduras cn tonos marrones y un emblema en su pecho que el kamael no reconoce, portan espadas e sus cintos y apuntan con lanzas a Ishamael, desde atras una voz de hombre se escucha:

- Bien, eres?

En tono totalmente neutro

El criado algo asustado se marcho para volver unos segundos despues como un caliz lleno de sangre y al entregarlo al vampiro dice:

- Mi señor aqui tiene.

En el comedor habia una mujer, de aspecto bastante atractivo, sus raudas ropas de influencia arisiana realzaban aun mas su cuerpo, permanecia quieta observando el lugar y su decoracion.

- Supongo que eres el señor de esta casa vampirica verdad? Mi nombre es Ruri y tal vez tengamos cosas de las que hablar

El ataque golpea contra el elfo, el cual siente como el arma del no muerto le da en el costado izquierdo, aunque le duele y le molesta al disparar no es demasiado grave y apenas sangra.

Aunque el ataque hace que el elfo no sea capaz de reaccionar lo suficientemente rapido y el esqueleto vuelve al ataque

El ninja observa desde el pequeño hueco que ha hecho y pude ver como hay dos guardias patrullando, de nuevo samurais con el mismo simbolo que aunque le resulta familiar no termina de reconocerlo.

El ninja puede tener una oportunidad de pasar si es rapido, lo que sin duda es extraño es la gran seguridad que hay en el lugar nada comun y mas teniendo en cuanta que su señor le habia dicho que no habria seguridad apenas

-Como ya he dicho soy Ishamael del cerezo Blanco, kensai al servicio del consejo Kamael.-diciendo esto enseño el medallón de mi cargo, por si alguno supiera reconocerlo.

En ese momento Helena, saliendo de mi túnica, comienza a brillar con una suave luz.

-Y esta es mi compañera Helena, de las hadas del Agaden, lugar del que era protector. Si no es impertinencia me gustaría conocer los hechos que aquí han sucedido, tengo una misión de la máxima urgencia que requiere que hable con el Guardián celestial de la Tierra, o con algún otro de los altos cargos. Aunque no hay misión más importante que ayudar los necesitados.-Mi mirada se torna sombría al recorrer la plaza rodeada de cadáveres.- y asimismo castigar a los culpables.

-¿Han sido ustedes los defensores del templo? Siento decir que no reconozco sus emblemas, llevo tal vez demasiado tiempo alejado de los asuntos más mundanos de Gaia.

La verdad era que tras tanto tiempo de ascetismo casi no lograba recordar las más comunes fórmulas de cortesia.

-Si mi presencia es inoportuna con gusto tratare de solventar el asunto que me ha traído aquí y partiré sin demora, aunque si hay alguna cosa que pueda hacer para ayudar a paliar este desastre.-aún resonaban los gritos de los moribundos en mis oídos.-Aunque siento comunicar que no poseo ninguna clase de magia curativa.

El esqueleto se lanza hacia mi de nuevo.Y de nuevo hago el muro defensor,pero me vuelve a dar.Entonces intento contraatacar con mi ataque punzante.

Mientras Henry terminaba las ultimas pruebas con el golem, el principe buscaria un grupo de sirvientes para preparar el banquete de bienvenida de la sacerdotisa que seria el mismo banquete en que se celebraria el lanzamiento al fin del proyecto que habian estado preparando todo aquel tiempo. Pero la sacerdotisa, por supuesto, no sabria nada de este segundo proposito de la cena.

Darcia queria que aquella comida fuera muy distinta a la primera cena que compartio con la mujer.

Queria que la sala de banquetes estubiera completamente rodeada de velas, una pequeña orquestra y tambien queria a la mujer mas bella de su rebaño aquella noche. Porsupuesto en el banquete tambien querria contar con la presencia del creador del golem para presentarle su obra.

Seguramente entonces Henry ya habria acabado con los ultimos detalles.

-Mis felicitaciones, es un trabajo excelente. Una autentica obra de arte; no me has defraudado Avery. Mereces estar hasta donde has llegado.

El principe hablaba mientras inspeccionaba cada rincon de la maquina que su subdito habia diseñado.

- El plan se pondra en marcha la mañana siguiente tras la llegada de la verdadera sacerdotisa.

-Me gustaria que asistieras a la cena y le presentaras tu trabajo a la sacerdotisa antes de mandarlo al templo la mañana siguiente, te parece correcto?

Escuchando a la Pequeña joven mire a los alrededores, haciendo unos jestos que daban a entender que todo lo que habia en la casa no le importara y dije.

-esto que ves son cosas vanales, creeme que hay cosas mucho mas importantes por las cuales preocuparse... la mire con expresion dudosa y profunda, tratando de analizar que esta mujer querria. -Dime dulzura que deseas de mi, a que has venido???-

Dicho esto me siento del otro lado de la mesa, separandonos unos 10 metros de distancia, le hice un jesto delicado y majestuoso con la mano, insinuando que se sentara y para que asi me explicara que deseaba y el objeto de su visita.

-Escusa, antes de empezar a ddesirme lo que quisieras desirme no quisieras un poco de comer primero???

El enano se habia puesto en camino hacia la ciudad de los elfos grises, le habia encargado comprar unos materiales alli que unicamente esos elfo eran capaces de encontrar, la luna ya comenzaba a despuntar en lo alto cuando escucho un grito de mujer, no esaba demasiado lejos, apenas detras de unos matorrales no muy lejanos de donde se encontraba, eso si, tendria que salir un poco del camino.

- Somos los paladines de la orden de la tierra protectores del templo de la guardiana celestial de la tierra y mi nombre es Sir Alexis su lider.

El hombre realiza una pausa tras observar el emblema que Ishamael le enseña:

- Fuimos atacados por una horda de no muertos enviada por la orden, ven aocmpañame, te llevare ante la Guardiana Celestial, deberas perdonar nuestra poco hospitalidad pero en estos momentos no es algo que podamos permitirnos y decidme a que habeis venido exactamente?

El tono del hombre se habia suavizado un poco aunque no dejaba de denotar cierta autoridad, autoridad de un hombre acostumbrado al mando y habituado a que se haga caso de sus ordenes.